*En una cueva apenas visible gracias a la obscuridad que la abraza, vemos una sombra perteneciente a una abominación y escuchamos tres voces hablando al unisono*

Príncipe- Mi nombre, no lo recuerdo, pero quienes me conocen, quienes me siguen y quienes me temen me llaman, El Príncipe del último amanecer, hoy gracias a que no se si lograré mi cometido o moriré intentándolo he decidido contar mi historia al vacío de la obscuridad, y que mis palabras sean llevadas por el viento a los oídos de los dioses y les infunda el terror que debieran cargar en sus corazones tiempo atrás, así que comienzo-

*admiramos un río, rodeado por la selva verde bajo un cielo despejado y soleado*

Príncipe- aún recuerdo aquel día en que todo comenzó, yo era un pony terrestre común y corriente, tenia un nombre común pero no lo recuerdo y cada vez que en mis recuerdos alguien lo menciona no puedo escucharlo, era terrateniente, un pequeño paraíso en medio de la selva del este, el cual colindaba con el río, este terreno albergaba tres minas de oro con las cuales yo hacía negocios con un pequeño pueblo río abajo "dirección oeste", cada dos semanas embarcábamos hacia este pueblo, curiosamente ese día fatídico partimos hacia "Shikal" se llamaba, ahora lo recuerdo-

*en medio del río un barco de tamaño mediano navegaba rió abajo dirección "oeste", una tripulación de 15 ponys entre unicornios y terrestres se encontraban esparcidos por la cubierta atendiendo las necesidades de la nave, en el timón se encuentra el príncipe y junto a él un unicornio azul escuálido y vestido con una toga blanca tomaba apuntes de lo que sucedía en la nave*

Príncipe- En aquél viaje me acompañaba una pequeña tripulación de marineros, la cual contrataba cada tres semanas para llevar mi cargamento de oro a Shikal, a mi lado mi fiel escriba no recuerdo bien su nombre, realmente nunca me importó, gran error, el se encargaba de las cosas técnicas de las ventas y yo de las cosas sociales, todo marchaba perfectamente normal-

*dos días de viaje después en los puertos de Shikal*

Príncipe-Shikal era como había dicho antes un pequeño pueblo que por alguna razón comenzó a formar una empalizada alrededor del mismo, la guardia se había duplicado desde mi última visita y un pequeño ejercito de mercenarios acampaba en las afueras, nosotros tocamos puerto y fuimos recibidos como de costumbre, ordené desembarcar y comenzar con la venta, mi tripulación obedeció, yo me dirigí a el ayuntamiento donde se encontraba el regente-

*la plaza central rodeada por 7 edificios uno de ellos, el ayuntamiento*

Príncipe- Antes de entrar en el edificio un pequeño unicornio gordo de color blanco me sorprendió por detrás-

Regente- Señor **** como está usted, se que...-

Príncipe- Vamos directo al grano mi amigo cuanto vas a querer ? -

Regente- Bien haha bien si, hablando de su cargamento, si, humm quiero el 70%-

Príncipe- Bien, se puede saber porque compra mas esta vez ? -

Regente- Pues bien amigo mio, no sé si te fijaste, pero tengo un pequeño ejercito de mercenarios a mi disposición y pues debo contar con que mantenerlos felices y productivos-

Príncipe- y a que se debe todo este alboroto?-

Regente- Bah son solo supersticiones del otro lado de la jungla río arriba, mas allá de sus tierras, no me diga que no sabe nada-

Príncipe- casi ningún forastero se presenta en mis tierras así que no tengo las últimas noticias-

Regente- son rumores de aldeas aniquiladas por un ejercito desconocido el cual no porta ningún estandarte, y mas vale duplicar la guardia por aquí que lamentarnos después-

Príncipe- No estaba enterado de esto, cree usted que estoy en riesgo?-

Regente- Mi viejo amigo sus tierras están muy poco pobladas, no aparece en el mapa, a usted ni lo notarán en su marcha-

Príncipe- Bien gracias por la noticia regresaré a mi barco y apartaré su parte del oro-

*El día avanzaba y la noche se acercaba, la tripulación de el Príncipe asegura la carga del barco y montan guardia*

Príncipe- Decidí dar la noche libre a mi escriba y me dirigí a una taberna, la taberna de siempre, su nombre era "Heaven" entré y vi una fiesta que se llevaba acabo, ponys bailando y cantando por todas partes, al fondo había un pequeño escenario donde se encontraban algunos músicos entonando a los cantos de los demás, me senté y admiré la escena, no tardé en detectar a un pony en especial, era uno terrestre de color blanco encapuchado con una vestimenta gris, me estaba observando hacía un rato-

*La noche avanzaba y los ponys se retiraban a sus respectivas casas o habitaciones alquiladas, el ambiente se relajaba, en cuanto se metió el sol el tabernero prendió una chimenea, los cuadros en las paredes iluminados por la tenue luz del fuego de la chimenea y el olor de la madera quemada hacían aún mas ameno el ambiente, en una esquina el pony blanco seguía mirando a el Príncipe*

Príncipe- después de un rato tomé valor y me acerqué a este pony que me observaba, Cual es tu nombre, "Dante" contestó "Dante el lobo blanco"

Dante- Dime cual es tu nombre?-

Príncipe- ****-

Dante- Bien y dime que está haciendo un pony con tanto dinero y sin protección en una taberna donde me encuentro yo ?-

Príncipe- Es eso una amenaza ?-

Dante- Es una advertencia-

*Dante rápidamente desenfundó una espada plateada que ocultaba debajo de su túnica gris, el Príncipe dio dos pasos atrás poniéndose en guardia*

Príncipe- Estas seguro de como usar eso?-

Dante- Idiota-

*Dante pateó la mesa que estaba frente a el haciéndola volar directamente hacia el Príncipe, y se lanzó detrás de ella empuñando la espada con la punta directamente hacia él, al ver venir la mesa se agachó e inmediatamente al pasar sobre él vio la punta de la espada dirigiéndose hacia su hombro derecho, golpeó la espada con su pata Izquierda en dirección a la derecha desviando el ataque e inmediatamente clavando un gancho derecho en las costillas de dante, fácilmente el Príncipe pudo sentir como sus costillas se rompían, ambos regresaron a una posición de combate, uno con su espada y el otro desarmado, Dante no se inmutó por las costillas rotas parecía no importarle y su rostro seguía concentrado en el combate,

los dos se observaron por unos segundos, cuando estaban listos para lanzarse una voz tenue interrumpió-

Marina- Alto Dante necesitamos mantener un perfil bajo-

Dante- Bien bien- dijo enfundando su espada

Príncipe- Eso fue una mala decisión-

*El príncipe se dio media vuelta y fue a una habitación que le pertenecía pues la había comprado en una de sus muchas visitas*

Príncipe- Todavía recuerdo aquella noche cuando conocí a Dante "El Lobo Blanco" en la habitación traté de relajarme y procesar todo lo que había ocurrido minutos antes, me relajé y por fin pude conciliar el sueño. A la mañana siguiente desperté con frío, dí un vistazo por la ventana, todo estaba cubierto por la niebla y había una multitud en los muelles, me dispuse a salir-

*Shikal estaba cubierto por niebla el río no era visible desde tierra, en el puerto se encontraba una multitud y al frente estaba el regente, todos admiraban un barco sin tripulación visible el regente demandaba que el capitán se presentara pero no había respuesta*

Príncipe- Recuerdo que llegué al puerto y me abrí paso entre los ponys amontonados asta llegar al regente-.

Regente- Tenga precaución señor **** algo extraño está pasando aquí le recomendaría retirarse-

Príncipe- no me haga reír compañero-

* súbitamente la madera del barco tronó y rechinó, la niebla se espesó la multitud guardó silencio... Comenzaron a escucharse chapoteos en el agua, los murmullos entre los ponys confundidos comenzaban a esparcirse, la guardia se encontraba dispersa por todo el pueblo solo una pequeña parte estaba presente y los mercenarios se encontraban en las afueras*

Príncipe- En aquél momento antes de que todo empezara los murmullos callaron una vez mas, los chapoteos se hacían mas fuertes y de entre la niebla comenzaron a salir siluetas tambaleantes eran cadáveres andantes, en el momento en que fueron visibles la multitud se dispersó gritando y corriendo, las campanas de alarma sonaron, la guardia comenzó a reunirse y pelear con estos monstruos, yo esquivé la acción y me dirigí hacia el ayuntamiento, en el camino me topé con algunas escenas que me parecieron terribles, ponys siendo devorados zombies siendo desmembrados, a diferencia de relatos de algunos libros los ponys que morían a causa de los zombies no se levantaban convertidos solo se quedaban tirados ahí, inanimados. Al fin logré llegar a la plaza central, el ayuntamiento se encontraba del otro lado solo a unos metros de mí, escuché un aleteo muy fuerte la niebla se despejó de golpe y un enorme dragón de hueso y carne cayó frente a mí, el olor era insoportable, el dragón respiraba y por cada bocanada que tomaba sentía un vacío en mi alma y por cada vez que exhalaba escuchaba almas gritando, entonces yo estaba ahí parado en medio de todo ese caos, que hice ?, tomé una espada de un guardia muerto que estaba junto a mí y le grité al dragón " ENFRENTA ME " supongo que fue lo mas tonto que he hecho en mi vida, el dragón me vio, me encaró y me rugió, su aliento era tan frío estoy seguro de que me quemó con ese frío,lo siguiente que recuerdo fueron tinieblas y silencio, entre esas tinieblas y silencio una voz que dijo exactamente así "Hijo mio necesito un campeón con tu valor y cualidades"-

*El Príncipe fue golpeado por la cola del dragón y azotado contra una pared*