SHINSEGUMI VS MIMAWARIGUMI
LAS VISITAS DESPUÉS DE LAS 2 DE LA TARDE TRAEN PROBLEMAS O DINERO
Mientras los golpes incesantes de la vieja Otose buscando que le paguen la renta, dejaban de hacer eco en la puerta de la Yorozuya, el trió liderado por Sakata Gintoki se disponía a salir de debajo de la mesa.
-maldición, esa vieja cuando se va a cansar de hacer lo mismo todos los días, ¿que acaso esta siempre de vaga? ¿Los únicos que tiene para molestar somos nosotros?- decía Gintoki mientras se levantaba, rascándose la cabeza.
-sí, es una vergüenza que siempre haga lo mismo con sus inquilinos, pero que mujer tan malhumorada, con razón no tiene ningún hombre- asentía Kagura, dándole la razón a Gintoki cruzándose de brazos poniendo una cara de severa.
-¿pero que mierda dicen? ¿No somos nosotros los malos por no pagar la renta? Además venir a cobrarla es su trabajo - decía Shimpachi muy histérico-además ustedes son los que andan de vagos sin hacer nada-
-¿he? Pero que dices Shimpachi? Si es notable que los buenos somos nosotros- seguía muy necio Gintoki negando su responsabilidad con respecto a la renta-además no es nuestra culpa que a los malditos clientes se les haya dado por no venir a buscar nuestra ayuda- seguía excusándose.
-sí, gin-chan tiene razón, que acaso no ves nuestras aureolas Shimpachi?- Kagura seguía fiel a su papi adoptivo.
-¿pero que acaso nunca va a aceptar sus responsabilidades?- se preguntaba Shimpachi con una gotita de sudor en el rostro mientras los veía reír descaradamente.
Toc-toc se escuchó desde la puerta. Rápidamente los tres se ocultaron debajo de la puerta, a la espera de oír a la bruja de Otose reclamar su dinero. Pero nadie hablaba solo se volvió a escuchar otro Toc-toc.
-gin-san podría ser un cliente-
-no, no, estas equivocado Shimpachi seguro es la bruja reclamando nuestro dinero injustamente-
-¿no me digas que…?-preguntaba Kagura dramáticamente.
-sí, así me lo temo Kagura-chan si salimos de aquí esa bruja nos quitara nuestro poco dinero y adiós a la Jump- comenzó a llorar como un niño que le arrebataban sus juguetes.
-adiós a mi sukonbu- la siguió Kagura con un llanto igual de escandaloso.
-podrían por favor parar, cualquiera se daría cuenta de que estamos aquí- aconsejaba Shimpachi
Por otro lado, en la puerta del lado exterior de la Yorozuya se encontraban Sougo e Hijikata, ambos integrantes del Shinsegumi que estaban discutiendo por lo bajo ajenos a lo que pasaba en el interior de la casa que compartían Shimpachi, Gintoki y Kagura.
Toc-toc, se escuchó de nuevo.
-hey! ¿Hijikata-san podrías repetirme nuevamente por qué no podemos anunciar que somos nosotros?- preguntaba Sougo totalmente calmado repitiendo el Toc-toc cada 20 segundos.
-por qué no quiero que el vecindario sepa que el gran Shinsegumi viene a pedir un favor a estos sujetos que hacen cualquier trabajo, me sentiría muy humillado- repetía lo ya antes dicho Hijikata con enfado mientras prendía un cigarrillo.
-¿humillado? ¿Qué? ¿Acaso tienes algo de tu honor intacto?- pregunto curioso Sougo burlándose de él.
-mira maldito crió, cierra la boca y sigue golpeando, a la próxima vez que llames se lo podría tomar como la última, no atendieron no es nuestra culpa- decía bastante aliviado.
-pareces satisfecho con esa idea- se vuelve a mirar a la puerta- entonces supongo que para destruir esa felicidad que tienes tendré que gritar- le dedico una sonrisa sádica de las que normalmente le brinda a su querido superior cada día-¡JEFE! ¡SE ENCUENTRA AHÍ!- grito fuerte esperando una respuesta.
Dentro de la Yorozuya.
-gin-san acaso ese no fue Okita-san?- sonó mas como una afirmación
-es verdad gin-chan, ese era el sádico- repitió Kagura dirigiéndose hacia gin.
-pero que tontos son!, acaso no se dan cuenta?-pregunto gin ante la ignorancia de sus subordinados-esa era la bruja, esperando a que caigamos en su trampa, debe estar imitando la vos de ese crió para que salgamos pero está muy equivocada si piensa que saldremos con ese truco, el viejo gin-san no se deja engañar tan fácilmente- dijo orgulloso de el mismo por darse cuenta de las trampas de Otose tan fácilmente que comenzó a reír fuertemente, mientras Kagura y Shimpachi aceptaron que era eso, le taparon la boca con fuerza.
Del otro lado, Hijikata ya cantaba victoria ni los intentos de su compañero fueron lo suficiente como para que su día se arruinara o peor si ese estúpido de la permanente hubiera aparecido tendría 14 días arruinados por su culpa.
-¿realmente no están?- se preguntó Sougo en vos alta, desilusionado por no poder brindar una tortura a Hiji-baka por los siguientes 14 días.
-pues es una pena- canto victorioso el vice-comandante del shinsegumi dando media vuelta para volver por sobre sus pies, seguido de Sougo que se detuvo en seco detrás suyo fastidiado por la sonrisa de victoria de Hijikata se dio media vuelta sacando su bazooka de su espalda que siempre la lleva consigo por si las dudas, apunto y disparo en dirección a la puerta de la Yorozuya. Hijikata se detuvo volviéndose a su joven compañero para ver como había volado la puerta de esos molestos.
-¿pero qué carajos estás haciendo?- comenzó a gritar Hijikata exasperado.
-de que hablas Hijikata-san? Mira, si estaban y nos acaban de abrir la puerta muy amablemente- decía Sougo como si nada.
-abrir la puerta amablemente, pero si tú la volaste con esa cosa- dijo señalando su bazooka.
-detalles, son detalles Hijikata-san-
-maldito, tu…- Hijikata estaba por hablar cuando escucho un quejido.
-¿qué paso?- se levantaba con dolor Shimpachi, mientras se ponía sus gafas. Cerca de él estaba Kagura quejándose del polvo… se veían a los dos menores de la Yorozuya pero el adicto a la azúcar no estaba por ningún lado, aún tenía esperanzas… aunque dudaran poco.
-¿qué paso? ¿Acaso fue un terremoto?- de entre algunos escombros salía el samurái de la permanente. Luego de acomodarse un poco y de darse cuenta de quienes fueron sus delicados visitantes, pregunto-¿he? ¿Ustedes? ¿Qué quieren acá?-
-lo mismo me pregunto-dijo Hijikata limpiándose el polvo que se le había adherido a la ropa-creo que no era nada, ¡buenas tardes!- dijo despidiéndose, mientras trataba de escapar Sougo lo sujeto del uniforme del shinsegumi.
-¿qué estás haciendo Sougo?-
-¿Hijikata-san no creo que este desacatando ordenes de su superior no? Porque eso podría traer mal repertorio en su carrera ¿no lo cree?- sonrió sádicamente y lo soltó-aunque viéndolo de ese modo es mejor que se vaya yo me encargare de lo que usted no puede ocuparse- su sonrisa sádica iba en aumento.
Aun dudando acepto, después de todo no quería fallarle a kondo-san o perder su puesto de vice-comandante y aun si no lo decía sentía un gran escalofrió cuando veía la sonrisa súper sádica de Sougo, la mostraba más cuando estaba por conseguir su puesto.
-bien, bien supongo que no tengo otra elección- se arrimó en uno de los sillones que habían ido acomodando mientras el amante de la mayonesa se debatía entre si decir lo que vino a decir o no. Todos se sentaron a la espera de las palabras del vice-comandante del shinsegumi, todos menos Shimpachi que estaba con su delantal y un pañuelo en la cabeza limpiando el desastre que había provocado el capitán de la primera división del shinsegumi con su adorada bazooka.
-bien comenzare por el principio- se acercó a ellos y se sentó en uno de los sillones con menos polvo, a su lado Sougo y en frente Kagura y Gintoki, Shimpachi escuchaba mientras arreglaba el desorden- ustedes deben recordar al Mimawarigumi...-
-¿eh? ¿Te refieres a los policías de verdad?- pregunto despreocupadamente gin mientras se metía un dedo en la nariz y se ponía en su típica posición de flojeo.
-jefe, por favor no nos menosprecie, somos un gran cuartel solo que hay superiores que se preocupan más en un pote de mayonesa que en la seguridad pública- decía Sougo culpando de todo a Hijikata.
-¿qué estás diciendo?- grito enojado Hijikata
-no puedo creerlo, nuestros impuestos van a parar a un pote de mayonesa, que vergüenza!- razonaba Kagura cruzándose de brazos con los ojos cerrados como si lo comprendiera.
-como si ustedes pagaran los impuestos- se volvía a quejar Hijikata
-¿he? no deberías de menospreciar a la población, somos ciudadanos con derechos- decía Gintoki en la misma posición que antes
-hey, podrían dejar de jugar y volver a lo de antes- pedía Shimpachi acercándose- ¿Hijikata-san acaso tienen un trabajo para nosotros?-
Realmente tenían un trabajo, pero Hijikata no quería decirlo, se negaba completamente. Sougo se daba cuenta lo mucho que sufría por pedir un simple favor, eso alimentaba más su diversión, ese día seria inolvidable igual que las dos próximas semanas.
-bien, como decía. Dentro de dos semanas se celebrara un importante evento privado, es un evento policial. Tanto el Mimawarigumi y el shinsegumi se juntaran para un combate cuerpo a cuerpo-
-¿un combate?-
-sí, durante todo un año gracias al trabajo y el esfuerzo la policía recauda mucho dinero, pero solo basta para equiparar y mantener un solo cuartel, el otro debe arreglárselas con lo que pueda. En ese combate, el Mimawarigumi y el shinsegumi se disputan por el premio, un arreglo total de la base y 1 millón de yenes-
-1 millón de yenes- gritaron Kagura Shimpachi y gin con el signo de yen en sus ojos.
-1 millón de yenes, es algo increíble ¿pero para que nos quieren? no entiendo- pregunto Shimpachi ya un poco más calmado.
-los necesitamos, porque queremos que se unan al shinsegumi-
-queeeeeee!?- preguntaron gritando
-el combate en sí, es un combate de parejas- comenzó a relatar Sougo -solo las parejas casadas o comprometidas pueden participar, y como ya van tres años que vamos perdiendo venimos pedirles que se nos unan-
-¿que acaso son tan débiles que no pueden hacerlos por su cuenta?- comenzó a burlarse gin
-como dijimos- a Hijikata ya se le aparecía una venita en la cabeza. Comenzaba a arrepentirse de haberle pedido ayuda, pero ordenes eran ordenes -es una pelea en parejas, ni Sougo, ni kondo, ni yo podeos participar, pero como ya pasaron tres años sin conseguir un arreglo para la base decidimos participar este año, por eso necesitamos ayuda- nunca diría que necesitaba ´´su ayuda´´.
-en si lo que necesitamos es a dos miembros más para ingresar al shinsegumi, dos de nuestros hombres se accidentaron en una misión que ordeno kondo-san y queremos suplantarlos- continuo Sougo.
-¿misión? ¿Me pregunto qué será?-
-eso no importa- respondió Hijikata.
-la misión se llamaba, secuestrar prendas de Tea-san- dejo como si nada Sougo
-hey ¿acaso eres un enemigo?- se molestó mayora.
-así que esa era la misión de gorila- dijo Shimpachi esperándoselo.
-bien, supongamos que aceptamos el trabajo, ¿cuál es nuestra recompensa?- pregunto gin-chan muy interesado, trabajo pesado, recompensa buena.
-kondo-san está dispuesto a entregarles el millón de yenes si conseguimos ganar- aseguro Sougo.
-queeeeeee!?- volvieron a gritar.
-desde luego, después de todo solo necesitamos cubrir los gastos de reparación de nuestra base y con eso concluimos, no necesitamos más- decía Hijikata, pero no era escuchado.
-¿cuantos sukonbus podre comprarme?- se ilusionaba Kagura con una baba en la boca.
-tendré todo el merchandaising de Tsu-chan en mi habitación- Shimpachi estaba con un hilo de sangre en la nariz al imaginarse tanto la cara de Tsu.
-me iré al caribe, lejos de estos mocosos con un gran sundae- babeaba gin tirado en el piso. Al instante recordó que no había aceptado aun, se paró de golpe y se puso firme asegurando que haría el trabajo-aceptamos con todo placer-
-si- dijeron Shimpachi y Kagura.
-ha! pero no tenemos una pareja- se percató Shimpachi de su ausencia de novia, que depresivo!.
-eso era lo que les íbamos a decir- Hijikata ya prendía su tercer cigarrillo desde que estaba en esa casa-aparte de ustedes deben buscar a cinco mujeres más-
-¿cinco? ¿No somos dos?-
-que estúpido- se volvió a quejar Hijikata-ustedes solos no son los que no tienen pareja. Sougo, Kondo Yamazaki y yo tampoco- comento ya bastante sacado.
-¿pero ahí no son seis? ¿Porque solo cinco?- pregunto confundido Shimpachi.
-nosotros ya tenemos a una chica que se postuló como ayuda al shinsegumi- escupió humo de su boca-para mañana deben ir a la base con cinco mujeres, entre ella supongo que debe estar la niña- señalo a Kagura- y como exigencia de kondo debe estar Tae-san-
-¿qué porque mi hermana? - se quejó Shimpachi, no dejaría que ese gorila tocara a su hermana.
-cállate pachi, todo sea por el dinero- le susurro al oído a Shimpachi tapándole la boca con su mano- claro que lo haremos, buscaremos las parejas. Pero no comprendo porque debemos ir mañana al shinsegumi, no es en dos semanas que es el encuentro?- pregunto curioso e inocente Gintoki.
-eso es porque deben prepararse durante una semana para el combate-
-¿de qué hablas mayora? nosotros somos bastante fuertes- Kagura mostraba sus músculos como si fuera el campeón del mundo.
-que hueca- decía Sougo por lo bajo-eso se debe a que como es el shinsegumi todos deben saber usar la espada sean los hombres o las mujeres, además deben saber etiqueta, modales y demás, es un entrenamiento de rutina obligatorio, que desde luego chinita no sabes nada- se burló Sougo complacido de dejarla como campesina.
-¿qué has dicho maldito sádico? ¿Acaso quieres que te mate?- se tiraban rayitos el uno al otro, era una de sus peleas típicas que decidieron ignorar completamente los tres.
-bien ya aclarado las dudas, nos vamos. Les recuerdo que tienen hasta mañana para buscar a las otras tres mujeres que, desde luego, deben ser fuertes para poder ganar y llevar si o si a tae-san -les advirtió Hijikata antes de retirarse con Sougo.
-mmm...- se quedó pensando gin
-¿gin-chan que ocurre? sale humo de tu cabeza-pregunto la pequeña yato.
-para que sepas pequeña Kagura, a eso se le llama pensar- repuso su tutor
-¿pero por qué el humo? ¿Acaso se te quema el cerebro?- pregunto un ya cansado Shimpachi
-oh!- dijo con énfasis, golpeándose la palma con su puño derecho en señal de tener una idea -ya tengo en mente quienes son las posibles candidatas para ser de anfitrionas-
No muy lejos de ahí... en un templo
-hola tojo-san, esta Kyuubei-chan?- preguntaba Shimpachi que venía con toda la banda.
-la jefa esta con ese estúpido mono en la parte trasera del dojo- pensamientos: como me gustaría ser ese mono 3 3 3
De repente un golpe propicio fue a dar en la cara del nombrado mandándolo a volar. Una traspirada Kyuubei apareció muy molesta, desde luego tapada con su cara de naturalidad.
-hola Gintoki, que hacen aquí- pregunto mientras le daba algo de alimento a su pequeño monito.
-bien, queríamos saber si podríamos hablar sobre un trabajo- sin importarle mucho sobre el cuerpo que salió con vida, que vaya a saber alguien si seguía respirando.
-claro por favor pasen- les hiso una gesto de que ingresen al dojo, gesto que la Yorozuya rechazo.
-no, no te preocupes. Venimos solo de paso todavía tenemos que ir a tres lugares más-
-¿bien entonces de que se trata?- lo interrogo.
-el shinsegumi tiene un trabajo para nosotros- a medida que la charla se iba prolongando con todos los detalles, Kyuubei se veía cada vez menos interesada, hasta que, desde luego gin comento sobre la inminente participación de tae, lo que la hiso reaccionar en un indiscutible...
-¡SI! ¡Iré!-sus ojos neutros ocultaban su gran entusiasmo-mañana estaré temprano en el shinsegumi, dijo con un saludo de mano para terminar ingresando a su hogar.
-¿gin-chan ahora a dónde vamos?- pregunto Kagura.
-la de recién fue bastante fácil, pero no sé si las otras quieran ir- dijo preocupado Shimpachi.
-pero que estás diciendo megane, todos tienen un precio, además el gran gin-san es un experto en el tema-
-¿he? hacer de cortesana y encima para el shinsegumi?- le pregunto una asqueada Tsukuyo -
-es un trabajo que debemos llevar a cabo- dijo gin-san
-está bien y que hay para mí- le pregunto Tsukuyo, ella no era tan simple como Kyuubei.
-bueno, pues tu adorado gin-san ira y... - no pudo terminar la frase que le tiro una navaja ninja en la frente (no sé cómo se llama, si alguien podría ayudarme con la data).
-AH! - gin comenzaba a gritar, mientras chorros y chorros de sangre saltaban de su frente.
-le has clavado en la frente, se la has clavado. Gin-san quedara sin neuronas- Tsukuyo harta de los gritos de Shimpachi le tira una igual en su frente. Los dos ya desangrándose, Gintoki medio muerto tirado en un costado con la piel más blanca que la de Kagura seguía derramando sangre.
Tsuki-chan se va marchando para cuando Kagura la detiene...
-espera Tsuki-chan nos darán una recompensa-
-¿he?- tanto Gintoki como pachi tapan la boca de Kagura para que deje de hablar, la hemorragia no era problema con la revelación que Kagura estaba haciendo.
-¿así que hay una recompensa?- su risa tétrica se convirtió en una llena de alegría.
-MIERDA- pensaron gin y pachi.
-de acuerdo, de acuerdo iré... - sin alma se dejaron caer -a por cierto... ¿cuánto es?- la pregunta fue dirigida a Kagura, quien no dudo en responder.
-1 millón de yenes-
-bien, bien- a pesar de estar en estado de shock y de ignorar los intentos de matar a Kagura por mandarlos al frente con la cifra de la paga -lo hare!, pero quiero el 35%- dicho esto se marchó completamente orgullosa, de su espectacular charla de negocios.
Casi sin alma se dirigieron a la siguiente casa, pero esta vez tomando precauciones, le taparon la boca a Kagura con cinta, por las dudas. Y si eso no funcionaba, el sukonbu daría efecto.
En medio camino apareció la siguiente integrante de las anfitrionas...
-gin-san!- grito una ninja abalanzándose al cuello del aludido -no sabes cuánto te extrañe, no sabes cuánto he soñado con tu indiferencia y tus azotes y tus...- sin poder concluir el demonio blanco dio una patada en la cabeza de esta.
-desde cuando te he azotado yo- grito enfurecido
-oh! gin-san sé que estas enfrente de esa gente pero no deberías ser tan malo con migo- dijo en tono sufrido -no debería darte vergüenza de que todos sepan acerca de nosotros ya que tú y yo...- el grupo se estaba marchando en una dirección opuesta en la que estaba la psicópata masoquista.
-bien, creo que me equivoque de dirección- decía gin cambiando el rumbo.
Kagura trato de articular palabra alguna pero no pudo por la cinta que le habían puesto en la boca.
-he gin-san no era ella una de las cortesanas que debíamos llevar al cuartel del shinsegumi- pregunto un confundido Shimpachi.
-pero que dices pachi, nosotros vamos en busca de la mujer gorila-
-podrías no decirle así a mi hermana-
-yo no dije que fuese tu hermana- Shimpachi se quedó mudo.
-siempre le dicen así, además la dirección en la que vamos es mi casa-
-¿he? Que tu hermana no te había echado ya-
-claro que no-
-gin-san- volvió a aparecer Sa-chan abrasándolo tan teatralmente-por favor no me ignores, me duele tu rechazo... si he hecho algo malo por favor...- sus ojos eran llorosos -ASOTAME-
-acaso estás loca- le grito de muy mal humor.
-a decir verdad, Sa-chan vinimos a buscarte para que te unas en una misión del shinsegumi- dijo finalmente Shimpachi.
-¿una misión?-
-si- luego de contar todo por segunda vez, esperando no olvidándose de los detalles, Sarutobi respondió con un...
-¿habrá una recompensa?- desde cuando se preocupaba por la recompensa.
Los tres se reunieron en un costado para buscar una posible recompensa para Sarutobi.
-no se- dijo ya harto de pensar -elijan ustedes dos, después de todo, puede ser cualquier cosa menos entregar el dinero- estaba motivado, daría lo que sea menos dinero, Shimpachi y Kagura estaban de acuerdo.
-¿y? ¿Hay recompensa?- pregunto la ninja.
-bien podemos darte un... he... ¿que podría ser?- estaba confundido.
De repente Kagura estaba escribiendo en una pizarra que vaya a saber uno de donde la saco... cuando la mostro decía: ´´GIN-CHAN DIJO QUE HARIA CUALQUIER COSA MENOS DARTE DINERO´´
Esto desequilibro a la aludida que comenzó a perder sangre por las fosas nasales, manchando su propio traje ninja.
Gintoki comenzó a gritarle a Kagura, sabía muy bien a que se refería con hacer cualquier cosa, pero Sarutobi lo usaría para otra cosa, algo más perverso.
-pero que mierda escribes, acaso quieres que valla al infierno y vuelva maldita mocosa - le gritaba mientras le sostenía de la blusa.
-bien, no sabía que mi adorado gin-san fuera así- ya incorporado en el suelo con una pose súper M, mostro su avergonzado rostro -sí, gin-san lo desea yo estaría perfectamente bien con una noche de tortura-
...
Gintoki y Shimpachi quedaron congelados con una cara de shock, mientras Kagura miraba a una Sarutobi proclamando su deseo como si fuera de lo más normal
Ya en la puerta de la última integrante del grupo femenino, Shimpachi sostenía a un Gintoki en estado de shock mientras escupía burbujas por la boca, de seguro se fue a la otra vida. Por su parte, Kagura estaba como si nada con la cinta puesta en su boca impidiéndole hablar.
-hola ¡Shin-chan! Kagura-chan pasen -dijo sonriente sin darle importancia a Gintoki que se encontraba desmayado en el hombro de Shin- compre una galletas, quieren pasar, preparare té-
-si- escribió una feliz Kagura en su pizarra.
-está bien dijo- dijo.
Ya sentados alrededor de la mesa, Shimpachi comenzó con la explicación de cierto combate que se llevara entre el shinsegumi y el Mimawarigumi. Ya acabando, tae... solo dijo...
-que le paso a gin-san- con una radiante sonrisa
-¡HERMANA NO ME ESTAS ESCUCHANDO!-se quejó Shimpachi.
´´HISO UN MAL TRATO CON LA NINJA MASOQUISTA´´ escribió Kagura sin escuchar a Shimpachi.
-¡hey tu también! ¡Recuerda que todo esto es tú culpa! Si no hubieras dicho nada de la recompensa...- Shimpachi se calló, había metido la pata y de la peor manera, tae estaba detrás de Shimpachi con un aura oscura y codiciosa.
-así que recompensa... y cual es Shin-chan?- dijo sonriente.
-¡he! Yo no sé-
-Shin-chan- su sonrisa era cada vez peor.
-¡no lo sé! De enserio no lo sé-
-así que no lo sabes- se dio vuelta con una sonrisa radiante y totalmente falsa en dirección de Kagura -hey! Kagura-chan me puedes decir cuál es la recompensa- Kagura miro a su apodada hermana mayor y luego al cuatro ojos que hacia señas de no decir nada... -y bien Kagura-chan-
Kagura comenzó a escribir
´´GIN-CHAN Y SHIMPACHI ME OBLIGARON A NO DECIR NADA´´ su rostro lloroso reflejaba que había sufrido maltrato.
-acaso ello te encintaron la boca- Kagura movió su cabeza dando un bastante claro -Shin-chan- dijo mirando a su querido hermano menor-cuantas veces te he dicho que no se debe maltratar a las mujeres- su aura era espeluznante, Shimpachi intento huir pero tae lo atrapo y con una mano llena de su especialidad lo amenazo -sabes, si no tienes buenos modales es porque no estás bien alimentado-
-HERMANA, ESO NO TIENE NADA QUE VER-
-ves, sigues comportándote mal, CUANTAS VECES TE HE DICHO QUE NO LE RESPONDAS A TU HERMANA MAYOR- gritando esto le metió el tamagoyaki mas quemado que le había salido en la boca, Shimpachi por más que evitara, lo termino tragando
... Shimpachi OFF
Ya descontando uno menos, se dirigió a gin-san que se encontraba aun en estado de shock. Agarro un poco de sake y otras bebidas fuertes las mesclo y le hiso tragar, en menos de 2 segundos salió disparado al estanque para tirarse y beber agua. Ya habiendo tomado casi todo el agua del estanque se calmó lo suficiente, liberado del ataque de shock se dejó caer en el césped... ¿pero que era peor la recompensa que le había pedido Sa-chan o el infierno que se aproximaba? porque muy cerca se veía una falsa sonrisa plasmada en el rostro de Tae mientras esta tronaba sus dedos...
... a lo lejos se escuchó un fuerte HAAAAAAAAAA!
-¿he? ¿1 millón de yenes?- pregunto sorprendida tae al lado de Gintoki, que se encontraba amarrado y colgado de pies en un árbol.
-sí, sí. Nos darán la recompensa si ganamos el torneo-
-¡qué bien! este dojo necesitaba unas refacciones-
-¿refacciones?- pregunto Gintoki asustado
-sí, quiero el 40%- pudo verse como gin-san se desmoronaba en mil pedazos.
En el interior del dojo Shimura se veía a un Shimpachi llorando con los ojos abiertos tirado en el piso, mientras Kagura comía plácidamente, ya sin la cinta en su boca. Su querida hermana mayor se la había sacado.
-no se pudo con la bestia- decía por lo bajo Shimpachi sin dejar de llorar.
-¡hasta mañana anego!- saludaba feliz Kagura, mientras que Shimpachi y Gintoki seguían sin sus almas...
-mañana será un día muy largo, verdad gin-chan?-preguntaba Kagura feliz comiendo de su sukonbu.
-hey, gin-san, ella te pidió el 40% y Tsukuyo-san el 35%-
-si-
-eso quiere decir que nos queda un 25%-
-si-
Kagura se adelantaba mientras los otros dos se ponían a llorar... realmente mañana sería un día muy malo.
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-¿acaso estas son las que conseguiste?- pregunto Hijikata con una gotita de sudor en la frente mirando a las 5 jóvenes que serían las parejas de los únicos solteros del shinsegumi.
-si señor- dijo firme gin-san
-oh! bi...bien- ya exhausto suspiro para seguir con la preparación del combate -Yamazaki llama a kondo-san- el joven shinsegumi fue en busca de su comandante. De repente una caravana apareció de la nada y entre la multitud apareció gorila con una yukata de colores claros seguido de un comportamiento sublime, o intento sublime. Camino unos pasos delante de las damas y al ver a su tae-san se emocionó tanto que se abalanzó sobre ella... había perdido la poca genialidad que había intentado obtener.
-bien, bien siguiendo con esto...- Hijikata quiso proseguir pero fue nuevamente interrumpido por gori-san
Aun con sus fosas nasales echa trisas y desperdigando sangre por doquier siguió como si nada hubiese pasado.
-¿TODOS ESTAN LISTOS PARA COMENZAR?- amplifico su vos con el megáfono que le había alcanzado Yamazaki.
-¡SI!- gritaron todos.
-¡BIEN! ACA COMIENZA EL ENTRENAMIENTO...- los tambores comenzaron a sonar rápidamente mientras una tela se desenrollaba en lo alto de la pared, a centímetros del techo -TRANSFORMACION DE M-O-N-O-S A D-O-N-C-E-L-L-A-S - grito por ultimo dejando a todos callados y con los tambores detenidos completamente. Luego de una reverencia para mostrar el ansiado cartel y sin recibir los aplausos esperados se irguió -hey! Toshi, acaso crees que les gusto mi presentación - le susurro en el oído al nombrado.
-he... bueno kondo-san- como explicarle a su comandante -lo que pasa es que...- nuevamente fue interrumpido, pero esta vez no por Kondo, sino por la pequeña avalancha que se tiro sobre el para asesinarlo.
-hey! ¿Hijikata-san deberíamos detenerlos?-
Hijikata saco un cigarrillo y comenzó a meditarlo... luego de unos segundos dio la orden de detener todo, pero fue en vano, el que se metía no podía salir de la riña.
-maldición- dijo Hijikata.
-¡hay! Hijikata como puede ser que seas tan poco eficiente... esta es una de las causas por las que yo debería tener tu puesto- dicho esto lanzo un disparo certero con su adorada bazooka.
Luego de ya calmados todos, se disponen a comenzar con la operación ´´transformación de monos a doncellas´´ lo que se espera que dure mucho tiempo..
...
SOY NUEVA EN EL OKIKAGU... EN SI, EN LOS FANFICS... CUALQUIER CRITICA DE ESCRITURA ES ACEPTABLE!
