Amores de Navidad
Un regalo de Navidad para Nochedeinvierno(Trici), fan numero uno del Jon/Sansa, ¡Muchas felicidades!.
Había pasado mucho tiempo antes de que estos dos amantes se reencontraran. Tuvieron que romper barreras, cruzar desiertos de desesperanzas y llorar una y mil noches hasta encontrarse de nuevo. Pero con empeño lo lograron y ahora, por fin, estaban juntos.
Era noche buena en Invernalia, o al menos en lo que alguna vez fue Invernalia. La inmensa fortaleza no era más que ruinas, un vano intento de reconstruirla solo la desmejoro más de lo que estaba.
Aun así, en esas ruinas, en el soplo lúgubre del lugar, los jóvenes enamorados explayaban su infinito amor, sus corazones rotos parecían reconstruirse poco a poco en la calidez de los besos.
…
Un manto blanco y helado adornaba los vestigios, dándole un toque asombroso y casi esplendoroso. Las llamas danzaban lentamente en la chimenea, calentando la inmensa sala tan grande, que resguardaba a ellos dos.
Solos, estaban solos. Nada más les importaba, lo habían perdido todo, se sentían los únicos habitantes del mundo. Sus manos entrelazadas, en un claro gesto de esperanza, futuro… un futuro juntos.
Sansa hablo, con la voz trémula, cargada de emoción.
—Esto es lo más parecido a la tranquilidad, por primera vez, durante mucho tiempo.
Jon se tomo su tiempo antes de responder, con una sonrisa cubriendo la expresión de su rostro.
—Y sobre todo estando tú aquí, conmigo, no sabes cuantas noches te he esperado. Que puedo decir… soy feliz, contigo.
Los besos y caricias no se hicieron esperar, ellos dos, juntos, en aquel sombrío lugar, llenaban todo de luz, magia, amor. Dos amantes infinitos…
Dieron las campanadas de la medianoche, se pusieron en pie, alzaron sus copas metálicas y brindaron, por aquellos que ya no volverán, por el ayer, el mañana y el presente.
Los jóvenes amantes salieron a la intemperie, entregándose a la magia de la nieve helada, que los marcaba del aroma cristalino y hogareño de la navidad, regalándole la sensación del bienestar, de ese que solo se obtiene estando en familia, en paz, dulce rutina de normalidad.
Pd: Se que no es la gran cosa, pero es mi humilde regalo, ojala te haya gustado. ¡Muchas felicidades!
