Aclaraciones y/o advertencias: Universo no canónico, posible OoC, posible contenido violento o no apto para cierta audiencia. Historia inspirada en las canciones "Dreaming" y "Soldier Side" de System Of A Down. Los personajes no me pertenecen.
Extensión: Long-fic (indefinido)


DREAMING WITH THE SOLDIER SIDE


Prefacio

El golpeteo de la cerámica contra el vidrio le hace recordar que está vivo; el humeante olor a cafeína lo mantiene en sus cinco sentidos, y el ver el sol asomarse desde su ventana cegándolo al primer vistazo lo hace mantenerse cuerdo.

Todo era perfecto. Demasiado para su gusto.

Sin moverse de su asiento, enciende el televisor que tiene frente suyo, centrándose desde el primer instante en la hora que marca el noticiero matutino; escucha la voz de la reportera, pero no entiende lo que está diciendo. Su café se está empezando a enfriar.

— ¿Estás bien, Kacchan?

Aquella voz le golpea a su realidad; otra vez estaba ido.

—Eh sí. Es sólo que no he podido dormir bien esta semana. —talla sus ojos, a manera de despertador. No le gustaba estar así. No le gustaba preocuparlo. — ¿Ya tienes listo el informe, o necesitas que te ayude en algo? —inquiere bebiéndose de tirón el café helado sobrante.

—Ya no tienes que preocuparte de nada. Dormí hasta las dos de la mañana, pero creo que valió la pena. —suelta una risilla al momento de tomar asiendo a un lado de Katsuki, sonriente en todo momento. —Dime, ¿era esto lo que querías?

Algo lo saca de su órbita, no entiende qué es pero se siente extraño.

— ¿A qué te refieres con eso?

— ¡Mira la hora que es! Si no salimos en cinco minutos nuestro jefe peludo nos volverá a regañar. Alístate pronto, te esperaré en la entrada. —Izuku toma de vuelta su saco, estaba un poco despeinado, pero no era nada que no podría arreglar en el camino.

Antes de volver a dejar a Katsuki solo, Izuku junta suavemente sus labios con los de su pareja, como queriendo despertar por completo al soñoliento Katsuki. Le revuelve los cabellos antes de irse sin decir una sola palabra. Y Bakugou empieza a oír un zumbido que le turba sus sentidos.

Cree que lo mejor es apagar el televisor. La compañía de Izuku lograba que se estabilizara bastante; aunque únicamente fuera en el trayecto a su trabajo, ya que cuando andaban ocupados con tantos deberes que les encargaban, les resultaba complicado siquiera hablarse en el transcurso de un día laboral cualquiera. Pero estaba bien así.

Estaba bien con sólo sentir la calidez de Izuku cuando estrechaba su mano con la contraria en los fríos días de invierno. Estaba bien con poder compartir su hora del almuerzo junto a su amado. Estaba bien con pasar noches en vela sólo para cumplir con las exigencias de su jefe-roedor; así se vieran las repercusiones al día siguiente con enormes bolsas adornando sus pálidos rostros.

Estaba conforme con la sencillez de su vida; siempre y cuando estuviera Midoriya Izuku ahí, para él.


Notas finales: ¡Muchas gracias por leer! El próximo capitulo no tardará demasiado; y mientras tanto, si adivinan lo que vendrá después se ganan un dulce ;)

-Guezeluss