Hola! Aquí presentando mi primer trabajo estilo shonen-ai/yaoi / así que si no te gusta el género, abstente de leer :D

Debo decir que este no es como la mayoría, aquí la relación se irá dando con lentitud, pues a mi gusto esta es la mejor manera de enamorar a dos personajes. El shonen-ai comenzará dentro de algunos capítulos, no tengo seguro en cuántos porque aún no escribo todo xD. En cada capítulo hay dos partes relacionadas entre si, pero en tiempos diferentes. Si pongo:Konoha "x" años antes de Naruto, quiere decir antes de que la serie comenzara, no de que naciera Naruto…

Pues bueno, sólo queda advertir que este fic contiene spoilers del manga, así que si no lo has leído y no sabes nada sobre la verdadera identidad de Yondaime, entra bajo tu propio riesgo, sin más, la historia.


"¡¡Cuánto has cambiado!!... aún recuerdo aquel niño que eras, con las mejillas rosadas y la sonrisa desbordante... cuánto has cambiado..."

Memorias vienen, memorias van... vivencias se guardan, y recuerdos se recuperan, en un diario personal, que se llama vida. Dos amigos, que antes fueron enemigos, se reencuentran tras varios años... tras cruzar distintos caminos...


CAPÍTULO UNO

Sumario: La guerra nos consume...la fe se nos acaba... y el polvo termina por cegar a mi cansada vista... pero... pero... mis ojos aún consiguen ver esa luna, que reina por sobre el cielo oscuro, y devuelve la tranquilidad a mi alma... esa sagrada luna, que me dio el tesoro más valioso que jamás pude pedir y que luego... sin dar explicación, me lo quitó...

oo00OO00oo..oo00OO00oo…

Frontera de Konoha; 7 años antes de Naruto :

-... es horrible...- pronunció el cansado chuunin mientras reposaba entre el pasto-... el ruido ha cesado pero... este silencio es horrible

Voltea su mirada, hacia su costado derecho. La hierba es alta, y lo único que puede distinguir a través de ella, es la silueta de un shinobi que, tras caer en batalla, yacía muerto boca abajo a unos metros de él. Tuvo que forzar la vista para distinguir su rostro... y para ver, sobre su frente, el símbolo de su aldea.

-Vaya...-murmuró sin mucha sorpresa-... tú también has muerto... compañero mío...

Regresó su vista hacia el cielo oscurecido, en donde distinguía el panorama. La gran luna de agosto le otorgaba una bienvenida a su manto, que brillante aguardaba.

-Esta luna... es tan parecida a aquella otra... a aquella que solíamos ver en Konoha cada noche... ¿lo recuerdas?

Pero nadie pareció responder. Sin embargo, el viento nocturno sopló sobre su rostro, transportando hacia sus oídos los pensamientos de una persona que en ese momento se encontraba lejos... observando otra luna...

-No... lo más seguro es que ya hayas olvidado todo, todo de mi... yo sé, que para ti fui solamente un obstáculo pero... aquello no evita que terminase sintiéndome de esta forma... –ve la luna con detenimiento- ... me pregunto si, mientras ves esta hermosa luna piensas en mi... aunque sea con desprecio... pero piensa en mi...

Umino Iruka cerró sus ojos, esperando recordar un rostro que había buscado entre las grietas de la luna, más la oleada de dolor que provenía desde su pierna herida evitó en lo posible tal pensamiento.

-Aaghhh!!- exclamó, mientras doblaba su cuerpo para alcanzar a tocar su muslo que, cálido y húmedo, nadaba en sangre- ... ah... ah... supongo que ese dolor agudo fue el músculo de mi pierna derecha... creo que me he hecho un desgarre... ¡¡demonios!!... si tan solo hubiesen esperado un poco más... si tan sólo me hubiesen escuchado...

Pero ahora esas réplicas no tenían validez. No importaba lo que dijese, simplemente los hechos no regresarían en el tiempo. Eso lo sabía este chuunin, pero aún así no podía evitar sentir el coraje de verse utilizado una vez más... la desesperación de los altos mandos les habían convertido en carnadas, para hacer caer al enemigo en la trampa.

La misión de investigación había sido la coartada para cubrir una misión de exterminio; les habían usado como primera barrera, para recibir el ataque, y luego atacar ellos una vez estuviesen exhaustos... todo había sido planeado desde el principio.

-Supongo que no tengo derecho a quejarme... soy un arma al que han usado efectivamente... pero... jamás pensé que terminaría así...

Guardó silencio unos momentos, mientras percibía el aroma de un campo de flores no muy lejos de su posición. Se sorprendió, de encontrar tan delicada fragancia en un lugar tan lleno de oscuridad y pesadez de corazón.

-Quisiera estar ahí...- comentó, mientras daba vuelta a su cuerpo, dispuesto a cumplir su cometido.

Con dificultad se arrastró por el pasto alto, intentando no revelar su ubicación al enemigo, que no andaba demasiado lejos. Tras varios segundos de dolorosos intentos, logró llegar hasta el campo de flores. Recostó su cabeza sobre el césped, alargó un brazo y alcanzó a cortar una hermosa azucena por el tallo. Se la acercó al rostro, y percibió el sublime color entre la oscura noche. Inevitablemente este acto atrajo a él memorias pasadas:

/FLASH BACK/

oo00OO00oo..oo00OO00oo…

Konoha; 15 años antes de Naruto :

-¿Son para mi?- preguntó la joven sonrojada, mientras sostenía entre sus manos, un pequeño ramo de azucenas- ... yo... no sé que decir...

-No digas nada...- respondió el muchacho, sonrojado al igual- sólo acéptalas...Anko...

-Pero... Iruka-kun... esto es...tan repentino...

-...

Era finales de agosto, alrededor de las 6 de la tarde. El sol, en sus últimas instancias, iluminaba el parque que se encontraba al lado de la academia ninja, de costado, dando a las construcciones un bello matiz naranja, cálido y acogedor.

Dos jóvenes genin, recién egresados de ninja, se encontraban en tal lugar, en donde uno confesaba a la otra, los sentimientos acumulados durante tanto tiempo.

Se miraron unos segundos, y los nervios comenzaron a inundar el cuerpo del adolescente. Sintió su corazón palpitar más rápido, al momento de ver a la joven acercarse a él, con un paso que a su percepción era lento, casi en cámara lenta.

Se vieron frente a frente, y el rubor inundó a Iruka, más aún cuando se percató de que la chica acercaba su rostro a él, también sonrojada por la situación.

"¿Q...que?- se preguntó- ¿M..me besará...? ¿Ya? ¿Ahora? ¿Qué hago, que hago?"

Sus rostros se aproximaron, con una sensual lentitud, y los ojos de ella fueron suavemente bajando, hasta cerrarse por completo, ya cuando sus labios se encontraban a sólo partículas de distancia de su piel. Iruka cerró al igual los ojos, entregándose en su totalidad a la situación, mientras su pecho era golpeado violentamente por los fuertes latidos de su corazón. Su primer beso, estaba a punto de recibirlo de la chica de la cual gustaba... nada podía ser mejor.

Chu!

¡El beso fue dado! pero Iruka sintió los labios gélidos, y distantes. Al contrario, sintió la calidez sobre una de sus mejillas. Abrió los ojos contrariado: "Se... se habrá equivocado".

No.

La chica alejaba su rostro de nueva cuenta, y abría los ojos, para mirarle y ofrecerle una agradable, pero fría sonrisa.

-Tú...- intentó Iruka- ¿Qué haces?

-Te he dado un beso- aclaró Anko- ... en la mejilla

-¿Huh?

-Es mi forma de agradecerte, tan lindo detalle... pero...

-Pero...-repitió el chico con voz cortante. Ahí venía la estocada, la cuchillada, y el golpe al corazón.

-Lo lamento- continuó la adolescente- ... eres un buen muchacho, muy divertido... pero, es que...- su rostro volvió a sonrojarse- ... a... a mi me gusta otra persona...

-...

Ya lo suponía. No era como si fuese la primera vez que sucedía. Dos veces se había confesado ese semestre, y dos veces había sido ya rechazado... y aquella era la tercera...

"Demonios...- pensó- ... otra vez..."

-Esto...- intentó- Anko...

-... ¿?

- ¿Puedo preguntar... quien es esa persona... que a ti te gusta?

- ...

-Está bien si no quieres decirme, es sólo... que tengo curiosidad

- No...-sonrió la chica- está bien... te lo diré...

-...

-Mm... pues...- baja un poco la mirada, avergonzada, mientras entrelaza los dedos de sus manos, nerviosa- ... él... es un chico muy genial... y lindo, y guapo... y aunque es muy callado y serio... –se emociona- ¡¡kyaah!! Creo que es la persona más cool del planeta!!

-¿Huh? dime... ¿Acaso es algún estudiante?

-Ah... pues no, de hecho se graduó el año pasado, ya es todo un ninja de categoría!! y es muy popular en la villa!!

-Ya veo...

No había más duda. Iruka sabía perfectamente lo que a continuación ella diría:

"Es talentoso"

-Él es muy talentoso, se ha hecho ya chuunin... y dicen que pronto podrían ascenderlo a jounin!!...

"Es misterioso"

-Y me encanta el misterio que le envuelve... no se saben muchas cosas sobre su vida, es muy reservado!!

"Es bien parecido"

-Es muy guapo, tiene unos ojos hermosos, y un cabello sedoso!

"...y...es perfecto..."

-En resumen!! Él es perfecto!!

Listo, sólo faltaba una cosa: develar el manto que envolvía a aquella deidad divina, por la cual la joven Anko suspiraba...

-Y... su nombre... Hatake Kakashi-kun... debes haber escuchado de él ¿no?

Y el manto había sido develado

-¿Huh? ah... si...

"Demonios...- pensó- ... otra vez..."

Ya lo suponía... de nuevo... No era como si fuese la primera vez que sucedía. Dos veces se había confesado ese semestre, dos veces había sido ya rechazado, las dos veces habían sido a causa de la misma persona...

...y aquella era la tercera...

-Perdón Iruka-kun...- murmuró Anko, mientras se alejaba por la vereda del parque- ... lo siento mucho...seamos amigos de nuevo!

-Si...- respondió el muchacho, mientras la veía marchar. Permaneció ahí varios minutos más, hasta que dejó de sentir el calor del sol, que se había ocultado tras el monte de los fundadores.

Comenzó a enfriar el ambiente, el aire fresco del anochecer circulaba alrededor de su cuerpo, pero eso a él no le importaba ya. Después de todo su interior se encontraba igual de frío que aquella tarde.

-Iruka-kun!- llamó Anko desde la entrada del parque, atrapando de inmediato la atención del muchacho- nos vemos mañana para la misión... ¡no llegues tarde o sensei se molestará!

-¿huh?

...

Y ahora, las noticias de las 2:

(Aparece gixy-girl en la pantalla del televisor/ordenador sosteniendo el micrófono)

Gracias, mi reporte...

...El frente frío número 30, que circulaba en estos momentos por el centro de Japón, misteriosamente desvió su camino para terminar en la villa oculta entre las hojas, más exactamente sobre la cabeza de un atónito muchacho de nombre Umino Iruka, del cual su cuerpo terminó por convertirse en una paletita de hielo con sabor a amargura...

Esperemos que este chico supere el trauma...

Más información, a las 10...

(gixi-girl se va, una lágrima de pena resbala por su mejilla)

-¡¡Demonios!! –exclamó una vez se percató de que la muchacha se había marchado y no podía ya escucharle lamentarse- ¡¡pero en qué demonios estabas pensando, Irukaaaaa!! Confesártele a tu compañera de equipo... ¿¡co...cómo la veré a la cara el día de mañana en la misión!! ¿Por qué demonios no pensé en que esto podía suceder?... ¿por qué, por qué?

¿Por qué?
¿Por qué siempre tiene que terminar así?
¿Por qué siempre soy el rechazado?
¿Por qué... siempre él?
¡¡Maldito Hatake Kakashi-kun!!
¡¡Te maldigo con todo mi corazón!! ¡¡Te maldigooooo!!

oo00OO00oo..oo00OO00oo…

- ¡¡Calla ya idiota!!- exclamó el señor Umino, mientras golpeaba la cabeza de su hijo con el cucharón con el que servía la sopa- ¡te he dicho que está prohibido maldecir durante la cena!

-Lo...lo siento papá- respondió Iruka mientras se sobaba el golpe

-Cariño...- agregó una mujer entrando al comedor- ... no uses así el cucharón de la sopa...

-Ah! lo... lo siento, querida

Se encontraba ahora en el comedor de la residencia Umino, cenando, más aún el recuerdo de ese suceso lo tenía tan fresco. Su madre se sentó frente a él, al lado de su esposo.

Iruka les observó, el señor y la señora Umino, sus padres... uno de los pocos matrimonios ninja en los cuales ambas partes aún cumplían misiones como equipos... curiosamente ellos se habían enamorado mientras compartían misiones en el mismo equipo, bajo la tutela incluso del mismo sensei, después de haber estudiado juntos la academia ninja...

Una utopía un tanto romántica y cursi, pero que a los ojos de Iruka representaba una fuerza tan grande, que era capaz de unir a dos personas, dos vidas distintas, y hacerlas converger en la misma dirección... tanto poder tenía ese sentimiento al que llamaban amor...

-¡¡Nooo!!- exclamó el joven ninja- ¡¡ ¿Cuándo será que podré amar, y ser amado?!

-¡¡Pffftttttt!!- exclamó el señor Umino mientras escupía la sopa- ¡¡so idiota!! ¡¡Ya te he dicho que no se puede lamentar de la patética existencia durante la cena!!

-Lo... lo siento, papá

-Cariño... –agregó la señora Umino- déjale ser... recuerda cuando te me confesabas y te rechacé...creo que fueron unas tres veces

-Lo...lo siento querida... –murmura- ¿tenías que decir eso frente a Iruka?

-¿Ehhhh? papá... ¿es eso cierto?

-Ah... bueno...- tartamudeó el padre- ... pues algo...

-Jo jo...- rió la madre maliciosa- ... tu padre era muy insistente, un día simplemente me cansé y le dije que si... 0

-Querida... -.-u

-Eso...- intentó Iruka- ... ¿eso quiere decir que aún tengo una oportunidad?

"Anko... si sigo insistiendo... ¿me dirás que si?"

-Bueno...- agregó la madre- no es exactamente eso... ¡¡pero nunca pierdas la esperanza!!

-¡Bien!- exclamó el muchacho entusiasta- entonces haré mi mejor esfuerzo... el día de mañana, cuando vea a Anko... Yo simplemente...

-No Iruka- interrumpió la madre- no creo que puedas hacer eso

-¿Eh?

-Temo que mañana no podrás concentrarte en Anko-chan

-¿De... de qué hablas, mamá?

-Lo que tu madre intenta decir...- intervino el padre-... es que mañana tienes otro asunto muy importante que resolver

-No... No entiendo

-Iruka- continuó la mujer- hace algunos días que te has graduado de gennin, y ya es hora de que cumplas algunas misiones más importantes

Iruka les observó sin comprender del todo. ¿Qué estaba pasando?

-Pero yo ya tengo asignada una misión, mañana Anko, Asuma y sensei iremos a...

-No... No irán, de hecho el tercer Hokage ha cancelado esa misión... y los han asignado como grupo de soporte en otra misión...

-¿Qué? ¿Pero cuando? ¿Por qué?

-Jo jo...!-Rió la madre entusiasta- mi pequeño hará misiones de nivel B!! ¡Me siento muy orgullosa!

-Iruka- agregó el padre- tu madre y yo hemos movido influencias, y hemos logrado que te asignen a ti y a tu equipo esta nueva misión, por favor aprovéchala, aprende mucho, y da lo mejor de ti!

-Pa... papá...

-Es por eso que te decimos que dejes a Anko-chan de lado, y te concentres en cumplir con los objetivos de la misión lo mejor posible

-Yo...-intentó Iruka, emocionado- ¡¡yo prometo que daré todo de mi parte!!

-BIEN- exclamaron ambos padres, ofreciendo a su hijo una placentera sonrisa

oo00OO00oo..oo00OO00oo…

-Seré el amo!!- exclamó el joven mientras cruzaba la puerta del despacho del Hokage- ¡seré el amo y las chicas no volverán a rechazarme!

-No me digas...- respondió una voz burlona, desde el interior del mismo- pues yo creo que aún siendo el mejor ninja todas las chicas te rechazarían...

-¿Qué?- exclamó Iruka al reconocerle- tú, idiota... ¿Qué haces aquí?

Asuma Sarutobi, compañero de equipo de Iruka Umino, se encontraba sentado en el sillón del Hokage, detrás de aquel importantísimo escritorio.

-Serás tú el idiota... este es el despacho de mi padre, puedo estar aquí cuando me plazca

-Oh si...

"Si, es el hijo del Hokage ¡gran cosa! tiene un carácter de mierda, se cree el mejor ninja de todos, y piensa que por ser un chico bien parecido tiene a todas las chicas de la academia vueltas locas por él... pero.. ¡¡Yo le enseñaré!!"

-¡¡Deja de verme así, tarado!! –exclamó Asuma revisando algunos documentos, jugando a ser Hokage- Que ya parece que te has enamorado de mí

-So baka! –Iruka se sonroja- ¿Qué haces? ¿También vas a la misión de apoyo?

-¿Pues qué creías? ¿Qué irías tú sólo debido a tus grandes habilidades? ¡No lo creo! iremos en equipo...

-Buenas!- exclamó una voz femenina, entrando por la puerta del despacho

-A...Anko- tartamudeó Iruka, mientras le veía acercarse- buenas...

La muchacha entró, y caminó hasta el escritorio, en donde se encontraba Asuma, más simplemente rodeó el centro de la habitación, en donde el joven Iruka esperaba entablar contacto visual con ella. Al contrario, Anko evitó en lo posible el hacerlo, llegando a ignorar la respuesta a los "buenos días" que Iruka le había dado.

"¿Qué sucede?- se dijo- es como si se avergonzara de que le hubiese confesado mis sentimientos"

La chica y el niño Sarutobi charlaron unos momentos. Cierto era que se conocían incluso antes de ingresar a la academia, incluso antes de que Iruka les conociese a ambos. Ahora formaban parte del mismo equipo, y hacían una mancuerna perfecta... mancuerna en la que a veces el joven Umino parecía no saber funcionar.

Era como intentar encajar una pieza cuadrada en un espacio de forma redonda... no habría forma de hacerla integrarse a menos que se le cortase un pedazo, de que se le suprimiera una parte de su forma original...

Así es como se sentía Iruka Umino a su lado, como una pieza cuadrada al que le han cortado una parte de su ser... para encajar en los lados curvos de sus compañeros.

En esto pensaba cuando la puerta volvió a abrirse, esta vez con un sonido más estruendoso. Los tres gennin volvieron su vista hacia el evento que sucedía, y se percataron de que la presencia de un jounin se integraba a la vista en aquella habitación.

Todos igual de sorprendidos, todos igual de atemorizados. Frente a su vista se erguía ni más ni menos que Minato Namikaze, el rayo amarillo de Konoha.

No pudieron evitar que el rubor invadiese sus rostros, al pensarse ante la presencia de tal leyenda, a la que 8 de cada 10 niños estudiando en la academia admiraban, y tomaban como modelo a seguir. Iruka era uno de ellos.

-¡Hey!- dijo aquel hombre, al ver a los niños- veo que ya han llegado, perdonen la tardanza...

-¿Cu...-intentó Iruka con la voz trabada en la garganta- cuál tardanza?

-Ja ja- rió Minato con una gran sonrisa- me alegra que no se hayan molestado... hemos tenido que parar por ciertas dificultades "técnicas" ¿no es así muchachos?

-¿Ehh?- Iruka observó hacia la puerta, que se abría de nueva cuenta-...

"Es que hay alguien más afuera... ¿será el grupo al que daremos apoyo?"

Y poco a poco entraron tres figuras más, que los genin identificaron de inmediato.

Una chica de pelo claro, color castaño y piel morena...Un chico de pelo negro, piel blanca y ojos oscuros... y una última presencia que dejó boquiabiertos a todos.

-Rin...- llamó Minato- ¿tenemos todo listo?

-Si, sensei...- respondió la aludida- pero hemos tenido problemas en decidir la ruta a tomar... Obito y Kakashi no cedían en el recorrido a hacer

-¡Claro que no!- exclamó el chico moreno, entrando y situándose al lado de su sensei- he dicho que la mejor opción es entrar por el territorio del enemigo

-Estás equivocado...- mencionó la última presencia, que entró detrás de su compañero, y cerró la puerta detrás de si- ... no tienes idea de lo que hablas...

Iruka le observó, no creyendo lo que veían sus ojos. De cabello plateado, piel blanca y ojos grises, entraba en aquella habitación el ninja prodigio más joven de la aldea oculta de la hoja hasta esos momentos. Era inevitable no reconocerlo, a pesar de que cubría la mitad de su rostro... era imposible no saber quien era en tales circunstancias.

-Kakashi...-dijo Minato- no digas esas palabras a Obito... pareciera que no son un equipo...

-Preferiría no serlo- mencionó el aludido- mi vida sería mucho más fácil

-¿Queeeeee?- exclamó Obito- tú no sabes lo que dices, yo soy alguien indispensable en este equipo

-¿Estás seguro?- respondió Kakashi tranquila pero fríamente- si no fuera por mi habrías muerto ya muchas veces durante las misiones

-Eh?- pues... no recuerdo ninguno de esos momentos

-Oh! que curioso... debió ser porque estabas demasiado asustado como para darte cuenta de lo que pasaba...

-¡¡Argggggggg!! Tú!! Me!! Desquiciaaaaaaaaaaaas!!

-Obito! Kakashi!- exclamó Rin, deteniendo al primero de un brazo- ya basta, que hemos venido a encontrarnos con el grupo de apoyo

-Mmm...- Kakashi les observó, dejando de lado a su compañero Obito. Recorrió su vista por ellos, examinándolos, uno por uno. Vio primero a Sarutobi Asuma, y le reconoció de inmediato... se conocían de tiempo atrás, al ser sus padres, el tercer Hokage y el Colmillo Blanco, viejos amigos. De piel morena clara, cabello castaño y buen semblante, arrogante y testarudo.

Pasó a Mitarashi Anko, la chica que charlaba con Asuma. Una chica morena, de cabello corto, bastante desarrollada para su edad, más no encontró más aspecto extraordinario que ese, y el hecho de que fuese íntima amiga y vecina de Yuuhi Kurenai, una chica con la cual él había compartido las clases en la academia ninja...

Pasó al último de todos, al que se encontraba en el centro de la habitación, observándole con cierta sorpresa, e incredulidad. Parecía, por menos, el más débil de los tres...Umino Iruka le miraba, aunque con descrédito, guardando la sorpresa, y la admiración hacia él... más Hatake Kakashi no se dio cuenta de eso, en ese momento...

-¿Genin?- dijo de pronto. ¿Es que acaso nos han visto la cara de niñeras?

-Ehhhhh? – exclamó Asuma, levantándose del sillón del Hokage- ¿a quien le dices crío?... cabeza de escoba...

-Mmm- Kakashi le observó- no he dicho nada, pero ya que te has nombrado así, quizás deba llamarte de esa manera... ¿no lo crees, niño?

-Argg...- gruñó Asuma, mientras le mandaba una mirada asesina.

-mmmglup...- tragó saliva Iruka, mientras les veía pasmado-...

"M... mi vida... mi vida en esta misión... ¡¡será un completo infiernoooooooooo!!"


Continuará...


By Gixds20