Declaimer: Esta historia no me pertenece, solo juego con ellos en mi juego de ajedrez particular.

Salí corriendo de mi casa ¿llegaba tarde? No, en realidad. Solo estaba deseando llegar al instituto ¿Por qué? ¿Qué clase de adolescente eres? Te preguntarás, empezaré por la última pregunta: Una adolescente estúpida, y llegaba antes para no verle a ÉL más de tiempo del necesario hasta que comenzaran las clases.

Abrí la puerta de mi camioneta, lancé la mochila al asiento de mi copiloto y arranqué. Cuando iba a tomar el camino de la derecha me acordé que tenía que recoger a Rosalie y a Jasper, así que murmurando malas palabras y de mal humor tomé el camino de la izquierda. Cuando llegué, ya me esperaban en la puerta. A ambos les conocía desde que tenía pañales, no esperen, de antes, nuestras madres estando embarazada de Rose y de mí ya eran amigas. Jasper a sus 18 años iba al último curso y era un año mayor que nosotras, Rose era de mi edad, tan solo una semana mayor que yo. Para mi eran los dos hermanos que siempre hubiera querido tener.

-Hola preciosa- Dijo Jasper al entrar en el asiento del copiloto.

-Hey Jazz-le sonreí.-Sigue quejándose Rose del uniforme.-afirmé al ver a Rose andando con mala cara hacia la camioneta.

-Ni lo dudes, no comprendo por qué, llevamos toda la vida con él.

El uniforme no era tan malo, era cómodo para todos los días, aunque no era demasiado bonito. La falda era de tela escocesa azul, con rayas en su mayoría rojas, pero también amarillas, blancas y grises; la camisa era blanca con el escudo en el pecho, la americana era roja y la corbata azul. Todo esto acompañado de unos zapatos azules y unos calcetines del mismo color.

-Jazz nunca me dejas ir delante, Bella ¿por qué tienes puesta la coleta? Te dije que te queda mejor el pelo suelto.-Farfulló Rose de mal humor mientras subía al coche.

-Buenos días para ti también, Rose.- Murmuré y arranqué.-Y llevo la coleta porque es cómodo.

Cuando estábamos a medio camino mi móvil comenzó a sonar, y Jazz lo cogió por mí.

-Móvil de Bella.-Saludó Jazz- ¡Ah! Hola- Jazz comenzó a asentir mientras la otra persona hablaba.-Claro se lo diré.- Asintió una vez más.-Ok, vale, adiós.-Colgó el móvil y lo guardó en mi mochila.- Era tu madre, te ha metido en la mochila algo de dinero de sobra para que se lo des a tu hermano, que se le ha olvidado el almuerzo.

-Genial-Gruñí, ahora tendría que verle.

No era que me cayera mal mi hermano, el problema era que cuando estaba con sus amigos era un completo imbécil, Emmet iba al curso de Jasper. Jazz y Emmet no eran amigos,pero tampoco se llevaban mal, se limitaban a ignorarse el uno al otro. Emm era jugador de fútbol americano y según todas las chicas del instituto, un bombón, Jazz por el contrario estaba en el grupo de música, y pese también ser guapo, no tenía tanto éxito como mi hermano y, eso era algo que no comprendía; Jazz era encantador, culto, inteligente, amable y era mono, en cambio Emmet cuando estaba en el instituto era egocéntrico, a veces cruel, elitista y ególatra, qué más da lo guapo que fuese si luego era así, o al menos eso pensaba yo.

Cuando llegamos al instituto vimos al grupo de mi hermano, estaba con sus amigotes, algunas guarras y ÉL. Edward Cullen el era la Luna en una noche oscura, el sol en el cielo, el amor platónico de muchas, a mi me parecía atractivo pero... Patéticamente suspiré. Jazz, que tenía que darse prisa le dio un beso en la mejilla a su hermana, y otro a mí, el mío acompañado de un abrazo y un "suerte".

Me acerqué con fingida seguridad a donde se encontraba mi hermano que estaba abrazado a la barbie de Lauren Mlallory, y lo de barbie no lo digo solo por que fuera rubia, si no porque era de plástico.

-Hola Emmet.- Dije con rostro indiferente.

-Hola enana ¿Qué quieres?-Preguntó con una sonrisa.- Si es porque tus amiguitos se han ido y te han dejado sola, a mí no me busques.

-No es eso.-Le miré con mala cara.-Como ves Rose me espera ahí detrás.-Señale por detrás de mí.- Solo quería darte este dinero, mamá me lo dio porque te lo dejaste para el almuerzo.

-Es cierto, gracias.

-¿Por qué los Withlock vienen en el coche de tu hermana, Em?- Preguntó una voz que me ponía la piel de gallina. Edward Cullen.

-Ni idea.-Contestó mi hermano, Em me miró.- Di enana ¿Por qué?

-Se le rompió el coche a Jazz y Rose está castigada sin coche.-Me encogí de hombros.

-Comprendo que lleves a tu amiga pero ¿Al otro?-Pregunto Edward con desprecio.

-Pues resulta que Jazz es tan amigo mío como puede ser Rosalie, además no tengo que dar explicaciones ni a ti ni a mi hermano.

Me di la vuelta y me fui hacia Rose, en mi descripción de antes se me olvidó decir que Cullen era un capullo. Los amigos de mi hermano pese a ser populares, no se metían con la gente, bueno tal vez sí con Eric Yorkie, y las chicas se metían de vez en cuando con alguna. Pero Cullen y Jazz no se llevaban bien. Jazz le quitó el puesto a Edward de jefe del grupo de música. Cullen tocaba el piano pero desde que se hizo popular apenas iba cuando el grupo se reunía, entonces nombraron a Jazz, que tocaba el piano, la guitarra, tanto eléctrica como española, y la batería. No comprendía por qué se enfadaba tanto, él se lo había buscado.

-¿Qué ha pasado?-Pregunto Rose.

-Nada, que Cullen no comprende por qué llevo a Jazz en mi coche, pero la verdad es que me sorprendería si ese minúsculo cerebro comprendiera algo.

Rose rió y hecho su melena rubia hacia atrás. Rose era preciosa, con su pelo dorado y liso, los ojos tan azules que parecían violetas, casi metro setenta, tal vez un poco menos, con buenas curvas y con estilo para la moda. No sé por qué nunca fue popular, bueno si lo sé, no aguantaba a esas zorras de las populares, además es difícil combinarlo con estar en el grupo de matemáticas. Al contrario de Rose yo era de metro sesenta, con el pelo marrón con destellos rojizos, menos curvas y los ojos marrones simples. Era normal. Punto. Sin más.

-Hoy no comeré con vosotros, tengo reunión del grupo de matemáticas.-Suspiró.- Estoy deseando llegar a la universidad y meterme a medicina.

La clases pasaron sin cambios, a la hora de la comida me acerqué al mostrador junto con Angela, una chica de mi grupo, era novia de Ben. Cogí la comida y me encaminé hacia mi mesa, en ella se encontraban mis amigos. Angela, Tanya, Ben, Jazz y Garret, normalmente también estaría Rose.

Me senté junto a Jazz, al lado de mi otra mejor amiga Tanya Denali. Tanya había entrado en este grupo de forma extraña. Había llegado nueva el año pasado, compartía conmigo algunas clases y comenzamos a ser amigas, pero las zorras se le acercaron. Estuvo un tiempo con ellas, aunque manteníamos la relación, hasta que se enteró de cómo se la gastaban de zorras y se unió a nosotros.

-Hola.-Sonrió.- No me lo puedo creer, hoy te tengo para mí sola.-amplió la sonrisa.-Esta tarde no te olvides que hemos quedado TU y YO, a las siete y media, para ir a ver una película a Port Angeles y dormir en mi casa.

Tanya y Rose eran amigas, siempre estábamos las tres juntas, pero solía pasar más tiempo asolas con Rose que con Tanya, y esta siempre decía que no la quería.

Iba a decir algo pero Jazz se me adelantó.

-Ya lo sabe, además esta tarde ha quedado conmigo en mi casa.-Jazz hizo una pausa para beber zumo.- Por cierto ¿sabes que Rose no vendrá?, me ha dicho la profesora de matemáticas que tiene que quedar a no e que cosa friki.- Dijo mientras pasaba el brazo por mis hombros.

Sonó el timbre, ahora tenía Literatura, era mi clase favorita, para mí los libros eran una válvula de escape, un lugar maravilloso donde podía ser quién quisiera y vivir miles de aventuras. Al salir del comedor, acompañada de Tanya, con la cual compartía las dos últimas horas. Vi a Cullen, acompañado de la puta de turno. En este momento era Jessica Stanley, una rubia oxigenada.

-Mira a Jessica Stanley.-Dijo Tanya.- ¿Sabes por qué se hace más tonta con el tiempo?-Negué con la cabeza, intrigada.- De los golpes que se da en el cabecero de las camas cuando folla. Si sigue a este ritmo antes de fin de curso le dan el titulo de minusválida.

-Tanya, estamos casi en Mayo, queda menos de dos meses para fin de curso.

-Tienes razón.-Sonrió con malicia.- Se lo darán antes.-Y rió, después de unos segundos me uní a ella.

Mientras reíamos, cuando apenas estábamos a 2 metros de la puerta oí una voz llamando me.

-¡Swan!-Cullen llamó, a la vez que Jessica se reía.- Ya sé porque no estás con tu hermano en este grupo. Se te pegó ser una perdedora de tu amigo Jasper Bohemio Withlock.-Rio de su propio chiste.

-Pues yo sé porque te quitaron de la banda, porque tu cerebro se derritió y no podías tocar el piano la mitad de bien que un mono manco.-Toqué su punto débil.

-¿Cómo dices?

-Lo que has oído te das muchos aires, pero solo eres un estúpido egocéntrico, y lo que te molesta es que Jasper te quitara el puesto, pero tú te lo buscaste. Además le tienes envidia.

-¿Yo? ¿Envidia? ¿A él? ¿Por qué coño crees eso?

-Pues no sé, ¿tal vez porque su cerebro no está fundido? ¿O porque no está más usado que un baño público? ¿O por qué no está intentando convertir su vida en la historia de las mil y una golfas?

Me di la vuelta, y al salir me topé con mi hermano. Este ni me miró. El muy estúpido, no me extraña que se junte con Cullen. Son tal para cual. A mi lado Tanya se descomponía de la risa, cuando paramos en nuestras taquillas para coger los libros, ya casi estaba rebozándose por el suelo.

-¿Quieres parar?-La gruñí.- No ha sido para tanto.

-¿Que no? Le has dicho que está más usado que un baño público. Le has dejado con la boca abierta.

-Da lo mismo. ¿Qué vamos a hacer esta noche?-Cambié de tema

-Peli de miedo en el cine de Port Angeles, sin cenar vamos a mi casa, pediremos unas pizzas, mis padres ya se habrán ido. Y luego noche de belleza: mascarillas para pelo, cara y cuerpo; cera, manicura y pedicura. Luego hablaremos sobre chorradas hasta la noche. Y mañana sábado hemos quedado Rose tu y yo para ir de compras.

Compras, mi familia era de buen nivel económico. No éramos multimillonarios, pero papá era abogado y mama diseñadora, nos podíamos permitir cosas de marca, coches, ropa, un colegio privado y una casa grande. Pero a pesar de tener ese dinero yo no gastaba a penas, había heredado la camioneta antigua de mi padre, porque era el coche que me gustaba, tenía ropa cara pero no solía ir de compras a menudo y cuando iba también compraba en tiendas que no eran de firma. Rose y Tanya al contrario les encantaba ir de compras, Rose tenía un descapotable rojo y Tanya tenía un coche mini azul.

Cuando entramos en clase la profesora entraba por la puerta, nos sentamos donde siempre y comencé a tomar apuntes. Unos asientos más adelante podía ver a Lauren Mallory, la novia de mi hermano, estaba sentada junto a Jessica. Y al otro lado de la fila estaban Mike Newton y Tyler Crowley, ambos eran amigos de mi hermano y la pesadilla de Tanya y mía. Creían que por ser populares íbamos a salir con ellos.

Y así pasaron las horas que me quedaban. Al fin de las clases esperaba a Jazz en mi coche. Rose me envió un mensaje disculpándose por no poder estar esta tarde conmigo. En ese momento se me acercó mi hermano, acompañado de algunos de su grupo.

-¿Podrías llevar a cuatro amigos a casa?-Pregunto, pero casi me lo estaba exigiendo.

-No, he quedado con Jazz para ir a su casa, aunque si quieres les llevo a casa, aunque solo a tres, Jazz se viene en mi coche.

-Aaaaaw ¿Qué pasa Swan, tienes una cita con tu perfectísimo Jasper?-Preguntó con burla Cullen, que acababa de aparecer detrás de mi hermano.

-Eso no te importa Cullen.-Le fulminé con la mirada.- Ah y Em esta noche estaré en casa de Tanya, eso mamá ya lo sabe, pero dile que a lo mejor me voy de compras mañana con ella y con Rosalie.

-Ok.-dijo Emmet.- No hace falta que lleves a nadie en tu coche. Chicos ¿me podrían dejar a solas con mi hermana?- Se fueron todos, Cullen se quedó a unos pasos mirando su móvil.

-Dime Emmet.

-¿Qué vas a hacer esta tarde con Jasper, Bella? No me gusta que te vayas a las casa de un chico solo con él.-Dijo Emmet bajando la voz.

-¿Qué te importa? Además es Jazz, le conocemos desde que nacimos, es como mi otro hermano mayor. No te preocupes Em, no te necesito, no tienes porque preocuparte por mí, solo lo haces cuando estás solo. Te avergüenzas de mi en el instituto, no necesito tu ayuda, cuando permites que Cullen nos trate así a mi grupo ¡Por Dios! ¿Hace cuanto que conoces a Jazz o a Rose? De toda la vida y a Cullen desde el instituto. No necesito tu protección con Jazz

En ese momento llegó Jasper, traía consigo la guitarra, miró extrañado la escena, Yo fulminando con la mirada a Emmet, el mirándome enfadado y a los pocos metros Cullen mirando la escena.

-Hola Emmet.-Dijo Jazz con amabilidad.- Hey Bells ¿Preparada para irnos?-Me sonrió con tranquilidad.

-Sí, claro.-Asentí.- Emmet nos vemos mañana.-El asintió e hizo un gesto de despedida antes de darse la vuelta e irse.

-Bueno pareja, espero que disfrutéis de la cita, espero que todo salga bien y en un futuro tengáis pequeños perdedores corriendo por el pueblo.-Sonrió Cullen muy pagado de si mismo.

-Y yo espero que te atragantes con tu propia lengua, aunque me conformo con que te quedes esteril y le hagas un enorme favor a la humanidad.

Jazz y yo subimos al coche, camino de su casa. Estúpido Cullen.