Tipo:
Desafío. #EsDeFanfics
Formato:
Drabble.
Palabras:
454 según fanfiction (no tengo word ayuda)
Destino.
Te admitiste completamente curioso, ahí sentado en la parada del pecero* tus ojos escrutaban a la persona de largo cabello azul que tenías a tu lado sobre la incómoda banquita de madera, y claro que este lo había notado, sólo se hacía el desentendido. Según tú.
Nunca en tu entera vida de pueblerino habías visto una persona de largo cabello azul comiéndose una fruta con tanto ahínco en pleno invierno. Es la verdad, y era extraño, a pesar de ser aquella la fruta por defecto en el pueblo.
Estabas en esa parada aún, por dos razones: el chico de la fruta, perdiste tu reloj.
Lo primero era un distractor para olvidar tu descuido en lo segundo, método que por cierto, funcionaba de maravilla, vaya a saber quién porqué sentías tanta curiosidad de ver todos y cada uno de sus movimientos, desde descansar la mano en su mentón, hasta seguir con ojos curiosos su tenis rojo que golpeteaba la piedra bajo él produciendo ruidos secos.
No notaste que tu pie comenzó a imitar sus movimientos, pero sí notaste la curvatura que se formó en sus labios perfectos, no recién te percataste del color vivaz de su cabello, pero lo guardaste en tu memoria para no olvidarlo.
Preguntaste algo para llamar su atención, no ideaste nada realmente, una pregunta al azar que surgió así como así. Él te miró con unos ojos que te atraparon.
Casi le compones una poesía de mil versos cuando dejó de contemplar el suelo para contemplarte a ti y después comentar quién sabe qué cosa acerca del frío del lugar, no prestaste atención a las palabras, porque te perdiste en la gravedad de su voz, y en el movimiento de su boca tiritante al esbozar una enorme sonrisa.
Si así se sentía enamorarse que te declaren culpable.
El sonido de un automóvil alarmó completamente tus sentidos, ¿cuándo fue que...?
Tú estabas tan confundido como perdido, y repentinamente recordaste el tema del reloj, estabas seguro de haberlo traído contigo, aquel te dirigió un último vistazo antes de tomar su mochila con intenciones de levantarse, por lo que formulaste otra pregunta sin pensar.
"¿Bromeas?". La diversión en su voz te hizo dudar de la veracidad de tu propio cuestionamiento.
"Allá." señaló el otro detrás de ti, cual robot giraste lentamente hasta dar con el enorme reloj de la plaza central. La última vez que lo verías. Tan verde a pesar del clima inclemente, adornado con esferas, flores y luces navideñas, en sus enormes manecillas se anunciaban las ocho treinta.
Cuando miraste de nuevo hacia la banca el hombre había partido ya en el autobús. No sin antes dejar algo sobre tu regazo. El sonido de un tic tac llegó a tus oídos.
Lo sé, lo sé xD
Bien, este es un drabble para un desafío de una página. Me gustó la idea y como no he escrito de mi OTP, y menos un fic navideño, me uno a la contienda. ❄❄❄
Mis finales no son los mejores, pero trato de dar ese ultimátum que me gusta ver en otras historias.
Al principio iba a terminar muy paranormal la cosa, pero sería bastante innecesario, así que opté por un final normal. *fantasmita deambulante*
pecero*: acá en México, sobre todo en los pueblos, se les dice así a algunos medios de transporte. No sé, sólo quise usar el modismo.
Por cierto, el lugar donde se ambienta esta historia es un pueblo Mexicano (usé a Kardia, y la idea del reloj me lo recordó), Zacatlán Puebla. Busquen "reloj Zacatlán" y verán de lo que hablo. ¡Ey! Casi lo olvido, ahí se da mucho la manzana además, en serio, hay mucha variedad de productos hechos a base de manzana, es perfecto. XD
Espero la lectura haya sido de su agrado, no soy muy buena inventando cosas, pero me encantan los encuentros casuales, y por eso me uní a este desafío. ¡Gracias por leer! Felices fiestas.
