Capitulo 1: La fecha, el color y el secreto del amor.
Narra Craig.
-¿Iras al funeral?- Una voz firme me despertó de mis pensamientos y recuerdos amargos. Solo pude contestar un si medio seco, no pude decir más, y fue suficiente para que mi madre se diera la vuelta y me dijera –Te esperamos haya… le llevaremos flores…- dijo seria despidiéndose, pero antes de que cerrara la puerta…. – Lilas…- dije con un leve suspiro… -¿Qué?- dijo ella, algo sorprendida, tal vez por escuchar mi segunda palabra del día después de la terrible tragedia. Me gire –Flores Lila, eran sus favoritas…- mi madre sonrió con una lagrima que casi le brotaba, y asintió, salió de la habitación limpiando su mejilla.
Después de mirar por la ventana largos minutos, opte por vestirme y asistir al funeral de mi primer amor; si, así es, mi primer amor, nunca pensé que ella lo fuera, fue inesperado…Tampoco pensé aprenderme cada uno de sus gustos, Lilas; era predecible. Ella siempre uso esa chamarra color lila que combinaba con su siempre usada boina rosa, recuerdo ese día, el mejor día de mi vida… cuando me enamore de ti…
Recuerdo 1. (Craig)
Narro Yo.
Las calles de South Park parecían tranquilas, era un día bello, el día de la primavera, una fecha donde, además del san Valentín, las parejas disfrutaban una de la otra; a pesar de la siempre anormal ciudad. Pero, no a todos les parecía un día hermoso, había otros como, Craig, que lo despreciaban, no por ser soltero, a decir verdad él podía tener novia cuando quisiera, después de todo no era feo; a él le producía repulsión por lo empalagoso que podía llegar a ser, no esperaba un límite, pero sabía cuando y como percibir el aroma de lo desagradable.
El chico de chuya azul y chamarra del mismo color, veía niños, adultos, adolecentes y hasta animales, comportarse de una manera asquerosa a los ojos del azebache, pero no podía hacer nada más que resistir, se metió las manos a los bolsillos de su chamarra y trato de no ver las escenas románticas de las parejas, pateo una pequeña piedra para distraerse, pero la pateo tan fuerte que llego mas lejos y la persiguió aun con su mirada indiferente. La piedra topo con unas botas de un color morado obscuro; la dueña de las botas, solo recogió la piedra y la miro extrañada ¿de dónde vino esta roca?, de pronto apareció el pelinegro con una mirada baja sin darse cuenta de quien tenía su "juguetito", parecía buscarla y Wendy se acerco para darle la piedra, al solo subió la mirada y vio a la hermosa pelinegra ofreciéndole su roquita.
Wendy: ¿esto es tuyo?- sonrió con un aire de amabilidad.
Craig: ahhh… si, gracias.- tomo el duro objeto y no pudo dejar de mirar la hermosa sonrisa de la chica.
¿Por qué de repente, el no podía dejar de mirarla? Después de todo era la misma chica que asistía a la misma escuela, en el mismo grupo, la mismísima presidenta de la clase… que tenia de especial ese día, a su parecer se veía como siempre se había visto; ¿acaso era por la fecha que se percibía ese día?... no, no podía ser por la fecha, a él le causaba repulsión, era imposible.
Wendy: ¿Craig?
Craig: ¿Eh?... perdón, ¿qué decías?- dijo el chico aun confundido, despertando de sus pensamientos.
Wendy: Te preguntaba qué ¿Por qué estas tan solo?... en este hermoso día.
Craig: Hmp, la verdad no me parece tan bello.
Wendy: Mmm, no entiendo porque, es un día maravilloso, las flores se mantienen más bellas, el verde del césped se puede percibir aun si tiene ese manto blanco de nieve, no hace frio ni calor, es tibio. –dijo la chica muy animada, colocando los dos puños en su busto y subiendo la mirada acompañada de una gran sonrisa.
Craig: Sigo pensando que es una mierda…
Wendy se quedo pensativa, para unos segundos después de sobresaltar y quedar con una sonrisa, como si hubiera encontrado la solución para ayudar al pesimista chico.
La pelinegra halo al muchacho y se lo llevo corriendo aun con la sonrisa plasmada en su rostro; el azebache se sorprendió sin poder decir palabra solo hasta que tuvo el aliento.
Craig: ¿Qu-que haces?... ¿A dónde me llevas?- dijo mirando le largo cabello negro que casi cubría la cara del chico.
Wendy: Ya sé como cambiarte el humor y como cambiar ese pensamiento absurdo sobre la primavera.
La chica lo llevo corriendo hasta el bosque de South Park.
Craig: ¿Qué hacemos aquí?... –soltó el chico con el poco aliento que tenia, después de todo la pelinegra lo llevo muy lejos y se fueron corriendo.
Wendy: Shhh…. –La chica lo cayo y miro para todos lados, se giro y entre los arbustos se sumergió, salió para indicarle al azulado que la siguiera; el obedeció y ambos se metieron, cuando lograron salir en cuclillas, Craig fue cegado por lo cálidos rayos de sol, se cubrió la cara para después mirar el hermoso paisaje que ocultaba el bosque de South Park, la chica miro al muchacho boquiabierto, dio una leve risita.
El paisaje podía causar sorpresa a cualquier habitante del extraño pueblo, era un lugar hermoso, tenía una pequeña cascada, un prado enorme de flores de diferentes colores y especies, animales como aridillas, conejos, uno que otro vendo y hasta osos, era un lugar donde cualquier cazador desearía estar, por esa razón Wendy lo mantenía en secreto, nadie más sabia la existencia de ese lugar salvo ella y ahora Craig.
La pelinegra se paro, y ayudo a levantarse al de la chuya azul, cuando el dio un paso la muchacha lo paro y le hizo prometer que guardaría el secreto.
Wendy: Esto queda entre tú y yo… Nadie más debe saber de esto.
Craig pensó, que con un lugar como este, cualquiera lo podría convertir en un parque o algo por el estilo, el descubrimiento de un lugar como ese lo harían famoso, pero a el no le interesaba eso, cerro el trato y siguió a la chica para que le mostrara el lugar.
Wendy se quito las botas y con ellas las calcetas y sumergió sus pies en el pequeño lago donde comenzaba por la cascada; los peces acariciaban los dedos del pie y hacia que ella diera leves risas, Craig la miraba, sus ritmos cardiacos aumentaban poco a poco, como cualquier chico que nunca antes lo había sentido, no supo que fue lo que le sucedía.
Wendy: Ven… esto es divertido. –Giro su cuello para mirar al chico, quien sobresalto cuando ella lo miro, paso desapercibido y se sentó a lado de ella.
Wendy: Solo sumerge tus pies, los peces harán todo el trabajo. -Dijo sonriendo y ayudando al chico a quitarse los zapatos.
Al principio Craig dudo, pero logro meter ambos pies y sentir las cálidas aguas.
Wendy: ¿Y…. bien, que te parece ahora la primavera?
Craig: Bueno, no es "tan" mierda.
Wendy rio y lo llevo, aun descalzos a la pradera donde se encontraban las flores, se sumergieron entre ellas como si fuera un mar lleno de bellos colores, después caminaron hacia un árbol lleno de flores lila; Wendy tomo una florecita y la olio y sonrió, como si fuera droga, solo que esta no causaba ningún mal a su salud.
Wendy: Las lilas… son mis flores favoritas; siente su aroma… -Acerco las flores a la nariz del azulado, el dio un leve suspiro, le entrego las flores y busco otras.
Craig: ¿Y cómo encontraste este lugar?... – Dijo mirando a la chica que se encontraba a espaldas recogiendo mas ramos de flores lila.
Wendy: Bueno, yo estaba caminando por el bosque, perdí un colguije que me regalo un tío, no lo encontré y busque entre los arbustos y me metí hasta el fondo, cuando no vi nada más que un rayo de sol, lo seguí y cuando logre salir, vi este lindo paisaje, desde entonces, vengo aquí cuando después o a veces antes de la escuela.
Craig: Hmp, eso explica mucho… - Dijo mirando el pastizal.
Wendy: ¿A qué te refieres?... –Dijo la chica mirando al pelinegro, aun con el ramo de lilas en las manos.
Craig: Ah… bueno, eso explica porque casi nunca te veo, por las mañanas…. Y las tardes.
Wendy: Vaya, nunca pensé que notarias mi presencia.
El tono de piel del azebache cambio a un color rojo, que se podía percibir.
Craig: ¿Qué?... no, bueno, no es que no la note… es solo que tu, bueno yo…
Wendy se rio, y lo miro por un instante, se acerco lentamente; cualquiera que no conociera a Wendy Testaburguer creería que lo besaría, pero no, el chico tenía en el gorro una hermosa mariposa color azul destellante, ella la toma con su dedo y la admiro.
Craig:*¿Qué me pasa… nunca actué así frente a ella… u a otra chica?* -Pensó, claro, típica pregunta que muchos se hacen cuando se enamoran por primera vez.
Wendy: Es hermosa…
Craig: Si, eres hermosa…
Wendy: ¿Qué?- Dijo mirando al chico a los ojos, confundida.
Craig: Ahhh… qu-que si, si es muy hermosa… *demonios ¿Por qué carajo dije eso?* - Dijo sonrojado, estético.
El atardecer se acercaba, ambos chicos estaban sentados en un tronco mirando la puesta de sol.
Wendy: Que hermoso atardecer…
Craig solo suspiro y miro de reojo a la chica, veía como lograba admirar el ocaso, anaranjado-rojizo.
Wendy: Es algo tarde, tengo que ir a casa, me divertí mucho hoy.
Craig: También yo, amm nos vemos mañana. –Dijo con una mano por la nuca.
Wendy: Claro…. Oh y recuerda, esto solo entre tú y yo. –Dijo colocándose sus botas y sus calcetas y yéndose por el arbusto con una amigable despedida.
Craig nunca pensó sentir algo así, y menos por Wendy Testaburguer, por fin pudo descifrar sus sentimientos por la chica; pero no quería decirlo y menos aceptarlo, pero como no hacerlo, todo el tiempo pensó en ella, desde salir de ese paisaje hasta el transcurso a su casa, y sin olvidar, su habitación donde se recostó en la almohada de su cama y miro hacia el techo pensando todo el tiempo que pasaron… juntos.
Craig: Hmp… hoy fue el día más... Grandioso de mi jodida vida, en un día me enamore de Wendy Testaburguer…. La novia de Stan Marsh.
Fin del Recuerdo 1 (Craig).
Craig: Hmp… desde ese día, cada vez que veía una flor lila, recordaba cada segundo de la primavera…. Y hasta hora es mi fecha favorita. En fin, mejor me voy, llegare tarde al entierro. –Se dijo para sí el muchacho, tomando las llaves de su casa y yéndose.
En el entierro, se encontraban todos sus amigos, compañeros y los padres de Craig. Pero a quien logro identificar mas fue a Stan, quien se encontraba con una mirada muy triste, como si todavía no pudiera creerlo; la mirada del chico del pompón rojo subió para dirigirse a los ojos de Craig, pareció haberle indicado que lo siguiera, tal vez para hablar, no sabía para qué, pero lo siguió y ambos chicos se fueron lejos de la multitud que se encontraba en agonía.
Stan: No pudo decirnos a quien de los dos escogería…
Craig: ¿Eso es lo que de verdad te importa?
Stan: No, pero seamos sinceros, ambos queríamos saber la respuesta ¿no?
Craig solo bajo la mirada… no dijo nada mas, Stan coloco su mano en el hombro del chico, y sonrió. Ambos se volvieron a dirigir al entierro.
Mientras tanto, una chica de cabellos negros, miraba la escena, y fue acompañada por un chico rubio de ojos azules con su chaqueta anaranjada.
Kenny: ¿Por qué estás viendo eso?
Wendy: No lo sé.
Kenny: Hmp… ¿No deberías estar tú ahí?
Wendy: Hoy amaneciste curioso, ¿no es así?
Kenny: "Amanecí", como puedo amanecer si estoy muerto… de nuevo. No sabes lo que sentir una cuchilla atravesar tus órganos una y otra vez, no sabes lo que es ser decapitado, no sabes lo que es recibir miles de balazos….
Wendy: Ahora lo sé…
Kenny: Pero, yo vuelvo a nacer y cuando despierto, tengo la misma ropa vieja, en el mismo cuarto, en la misma cama y sin que nadie recuerde mi muerte, aun cuando me vieron decapitado a sus mismos ojos… solo recibo un "Oh…Hola Kenny" al siguiente día.
Wendy: Lamento que siempre te pase eso…
Kenny: Ya no importa…Es hora de irme, oh más bien irnos… a casa.
Wendy: Casa, no sé si eso se le pueda llamar "casa".
Kenny: Es un prototipo de un hogar…. Para los… los…
Wendy: Muertos…
Kenny: Mmm sí.
La chica se levanto y siguió al chico, ambos entraron a una especie de luz inmensa de color blanco, y de ahí desaparecieron.
Fin del capítulo…
"Nadie sabe que sigue después de la muerte, solo hasta que la vives una y otra vez…. Prácticamente imposible"
Para Kenny…