Hola amigos pues esta es mi primer historia la verdad no sabía si publicarla por que estaba muy nerviosa de si la leerán o no pero aun así me arriesgue haca como dice mi hermano es mejor arriesgarse que arrepentirte después de no haberlo hecho y aquí estoy realmente espero les guste.
Bueno primero que nada ninguno de estos personajes me pertenecen son de Dreamworks y Cressida Cowell yo solo soy muy feliz escribiendo historias sobre ellos y por que así podré esperar por la segunda parte.
Esto es Berk, neva nueve meses al año y graniza los otros tres, todo es más tranquilo con la llegada de los dragones.
La vida en la isla es más sencilla y mucho más divertida, cada uno de os habitantes ya tenían su pasatiempo después de realizar sus deberes, algunos cocinan con sus dragones, otros juegan y otros vuelan con ellos.
-No te canses amigo solo un poco más- Dijo aquel joven de ojos verdes y cabellos castaños mientras montaba a un furia nocturna -¡Ahora!.
Desengancho su pierna del arnés donde se sujetaba y salto hacia el precipicio, él dragón le siguió después, ambos caían atravesando nubes, sintiendo el viento por todo su cuerpo mientras veían el hermoso paisaje aunque fuera de cabeza.
Cuando ya era tiempo aquel joven se giro y volvió a montar a su dragón, engancho su pierna en el arnés de la montura del dragón y juntos tomaron vuelo , sobrevolaron entre los árboles con dirección hacia la isla, observaron el color naranja del amanecer sobresaliendo del horizonte, veían algunos pájaros volando a lado de ellos y claro junto con otros dragones, sentir el viento en el rostro y muchas otras emociones que nunca cambiaría por nada en el mundo.
Al llegar a Berk caminaron por la plaza viendo a toda la gente trabajar y a su lado un dragón ayudándoles, cuando de repente escuchó una voz llamándolo.
-Hipo- Se escuchó aunque muy bajo, él volteó por todos lados sin saber de donde provenía quela voz- Hipo.
-Hipo aquí abajo- el chico volteó a ver por debajo de una carreta llena de manzanas.
-¿Brutacio? ¿Eres tú?- preguntó el chico oji-verde sorprendido de lo que estaba viendo- ¿Pero que haces?
-Pues escondiéndonos- respondió el gemelo.
- ¿Escondiéndose? -Regresó a preguntarle Oji-verdes brazos cruzan sus.
-Hola Hipo- Dijo Patán asomándose por debajo de la carreta.
-Patán ¿Por qué no me lo esperé?- Dijo Hipo con un tono sarcástico.
-Hola Hipo- Se escucha otra voz por la debajo de carreta- ¿Cómo estas?
-Patapez tu también.
Shhhhhh-Callate en el descubrirán le DIJO Brutacio colocando un dedo en la boca do de dar la señal de que Hiccup Quizás el Mas Bajo al-habla menos.
-Lo siento- Se disculpó el oji-verde- Pero a todo esto ¿De quien se esconde?
En Astrid y Brutilda-DIJO Patapez buscando por todas partes.
Astrid, tan solo escuchar ese nombre Hipo se perdió en sus pensamientos y solo se concentraba en aquella chica de cabellos rubios y ojos azules que desde pequeño lo cautivo, esa sonrisa que solo ella puede dar, a pesar de ser solo su amigo, lo cual lo entristecía.
Pero no tardó mucho en salir de aquellos pensamientos.
-Hipo vuelve a casa- le dijo Patán chasqueando los dedos.
-Lo siento chicas me perdí- se disculpó el oji-verde.
-Si lo notamos- dijo Brutacio soltando un breve suspiro- ¿Por cierto no vienen?
Hipo y chimuelo voltearon para todas partes pero nadie venía y eso era algo extraño.
-¿Dónde están todos?- preguntó extrañado el joven vikingo a sus amigos.
-Pues trabajando como siempre ¡DAHHH!- dijo el gemelo debajo de la carreta y tomando una manzana.
-No chicos miren- Hipo señaló a toda la plaza, los chicos salieron por debajo de la carreta comprobando lo que Hipo decía- ¿Qué esta pasando?
-Hipo- se escucha a lo lejos una voz, era Brutilda, los chicos al verla venir se escondieron de nuevo por debajo de la carreta.
-¿Qué pasa Brutilda?.
-Tu padre te busca dice que es urgente.
-Esta bien- dijo tras montar a chimuelo- luego nos vemos.
Hipo salió volando con chimuelo del lugar dejando atrás a Brutilda con los chicos, ella tan solo miró a Hipo irse y sonrió.
-Ya puedes salir- gritó Brutilda y mirando hacia la carreta llena de manzanas- Hipo se ha ido.
Por detrás de una casa salió Astrid, aquella chica rubia por la que Hipo babeaba y se perdía en su imaginación.
-Pensé que nunca se iría- exclamó la joven vikinga acercándose cada vez más al otro lado de la carreta.
-Yo también ahora ¡salgan de ahí cobardes!- gritó Brutilda, algunos pensarían que gritaba sola o para Astrid pero no era así.
-O salen de esa carreta o haré que su quinta vertebra se convierta en la sexta.
Brutilda colocó sus manos en la cintura y Astrid cruzó sus brazos, y tras esperar un poco Brutilda pateó la carreta dejando caer algunas manzanas, pero Patán, Brutacio y Patapez salieron corriedno tratando de huir de aquellas vikingas pero fue inútil por que Tormentula la encerró en un jaula de púas.
-¿A dónde creen que iban?- dijo Brutilda mirándolos en el suelo.
-¿Qué creían que podían estar por ahí escuchando conversaciones ajenas- dijo Astrid acercándose cada vez más a Patán- Esto les enseñará a tener respeto.
Astrid y Brutilda comenzaron a alzar su puños pero cuando estaban a punto de golpearlos algo las detuvo.
- ¿Qué sucede aquí - Grit con Hiccup Volando chimuelo.
-Mira Hipo….- comenzó a hablar Patán pero nunca logró terminar esa frase.
-Ya me lo explicarán después ahora los necesito en la Academia- dijo Hipo- A todos.
-Esto no ha terminado- sentenció Astrid para después tomar vuelo con Torméntula, Brutacio y Brutilda junto con Patapez la siguieron y aunque Patán temblaba de miedo, montó a Diente Púa y se dirigió a la Academia.
-Ooooooooooooooooooooo-oooooooooooooooooo-
-Mañana te quiero en Berk- se escuchó una voz al fondo de aquella habitación obscura.
-Pero padre ¿Por qué tengo que ir yo?- pregunto aquel joven que veía hacia una sombra al final del cuarto- ¿Por qué tengo que ir a Berk.
-Tienes una misión y debes cumplirla- gritó aquella sombra que volteo la mirada hacia el joven y golpeo la mesa enfrente de él- Y no volverás a esta Isla ni tendrás nada de lo que ahora te pertenece hasta que no lo hayas cumplido ¿Entendiste?
-Si padre
-Ahora lárgate tienes un viaje que hacer- dijo aquella sombra volteando la mirada hacia una de las pinturas detrás suyo.
El chico asintió y se fue hacia la salida, al cerrar la puerta tan solo miró a su compañero quien tomó su espada y se puso firme- empaca tus cosas tenemos un viaje que hacer.
Su mirada era penetrante y tras dicho esto caminó por el estrecho pasillo hasta llegar a una de las habitaciones principales, su compañero lo seguía de cerca, siempre con una mano en el mango de la espada- No se pero algo me dice que este viaje no durará mucho.
-Ooooooooooooooooooooo-oooooooooooooooooo-
Al llegar Patán a la Academia se acercó a sus compañeros que estaban reunidos a un costado de esta y se podía observar a Bocón y a Estoico discutiendo sobre algún asunto al parecer muy importante.
-Hipo ¿Qué sucede?- preguntó Astrid al acercarse al joven vikingo que no dejaba de ver a su padre y al mejor amigo de este.
-No lo sé Astrid, todo esto me parece muy extraño.
-¿Por qué lo dices? La joven mostró un poco de intriga al escuchar aquellas palabras salir de la boca del vikingo.
-No te preocupes- dijo Hipo mirando a Astrid a los ojos tratando de controlar sus emociones- es solo una corazonada.
Bocón y Estoico se acercaron a ellos y al parecer era algo serio pues sus rostros y sus posturas lo decían todo.
-¿Qué pasa papá? ¿Por qué tanto misterio?- preguntó tratando de sacar a todos de la misma duda
-Hijo recibimos una nota de una de las islas de junto- Estoico le mostró la nota a su hijo y este junto a Astrid la leyeron.
-Pero ¿Una bienvenida papá? ¿A quién?- todos se sorprendieron por lo que Hipo dijo pues tendrían un invitado en la isla.
-Un extraño en la isla, esto será interesante- Dijo Brutacio mirando a su gemelo con una gran sonrisa gesto que fue devuelto por ella.
-Hijo quiero que controles a los dragones que no hagan ningún destrozo, confío en ti- dijo Estoico tomando el hombro de su hijo- pero sobre todo quiero que cuides de ellos y sabes a que me refiero.
Los gemelos son muy desastrosos juntos y para cuando Estoico e Hipo voltearon a verlos estos se estaban golpeando.
-No te preocupes papá se a que te refieres y yo me encargaré de ello, vámonos chicos.
Hipo y los demás montaron a sus dragones y se fueron volando hacia la isla Dragón.
El oji-verde tenía una extraña sensación dentro de él, como si intentará decirse algo a sí mismo pero no lograra entenderle , solo sabía que este viajero desconocido venía a cambiarle la vida por completo.
.. .¸¸ ´¯` .¸¸¤ AVANCE¤¸¸. ´¯` ¸¸. ..
-Okey chicos mi padre me pidió dos tarea...
-Si una es cuidar a los dragones, eso es fácil- Brutacio estaba seguro de poder hacerlo o amenos eso creía
-Y dividirnos a los gemelos para que no causen ningún desastre-djo Hipo- Patán se incluirá a esta decisión.
Taránnnnnn que tal se lo mostee a un amigo y al parecer le gusto pues no me ha dicho lo contrario :D y creo que es algo bueno jajaja, esta historia se me ocurrió mientras regresaba de la escuela y estaba en el camión al igual que muchas otras historias pero esas aun no las tengo :D yo decidi escribirlas para Como entrenar a tu dragón porque, además que amo las películas y las series, pues es una forma de esperar por la segunda parte y no desesperarme tanto :D
PD: si tienen alguna sugerencia o queja siempre son bienvenidas :D
PD: tengo ideas para hacerla aun mejor pero aun lo pienso no estoy muy segura de agregarlo pero ya el tiempo dirá.
Pues bueno creo que es algo tarde y soy la única persona desliera y subiendo un historia a esta hora, lo cual es raro, pero bueno espero no tardarme en subir el otro capítulo y en escribir el tercero bueno bonito fin y feliz inicio de vacaciones de semana santa que descansen.
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