ESTA ES UNA ADAPTACION DE "MATRIMONIO POR SORPRESA" DE LYNNE GRAHAM A LOS PERSONAJES DE LA SERIE BLEACH PROPIEDAD DE TITE KUBO...


Ichigo Kurosaki siempre se salía con la suya. Se había hecho un sitio en el mundo de los negocios sin depender de la fortuna familiar y disfrutaba de libertad para vivir como le complacía. No tenía intención de casarse. Acudiendo a Westgrave Manor para hacerle un favor a su padre su fin de semana estaba resultando ser un aburrimiento… hasta que se encontró con Rukia Kuchiki, tan guapa, tan pequeña y delicada, que no pudo resistirse a la tentación. Ichigo estaba deseando seducirla, sin saber que su única noche de pasión con la inocente Rukia podría ser el fin de su vida de playboy.

Prólogo

–No me interesa pasar un fin de semana en el campo –afirmó Ichigo Kurosaki, sin la menor vacilación. Isshin Kurosaki sonrió diplomáticamente, deseando por enésima vez desde la muerte de su primogénito haber dedicado más tiempo y atención a la educación de su hijo pequeño. Después de todo era un hijo del que cualquier padre estaría orgulloso.

Tremendamente apuesto y atlético, Ichigo tenía una buena cabeza para los negocios y, gracias a su talento, había levantado una empresa millonaria incluso sin el apoyo familiar. Desgraciadamente, Ichigo también tenía una cara oscura, un temperamento apasionado y una vena salvaje. Era obstinado como una mula, arrogante y totalmente independiente; un individuo extrovertido en una familia muy conservadora.

Las peleas entre padre e hijo habían sido inevitables porque Ichigo se salía con la suya… siempre. La desaprobación paterna no significaba nada para él pero tras la muerte de Kaien, su hermano mayor, la necesidad de tender puentes había sido ineludible, pensó Isshin con tristeza.

–Los padres de Orihime están muy interesados en que vayas. Y no es culpa suya que tu hermano muriese en el accidente y que su prometida sobreviviera…

Ichigo levantó una imperiosa ceja. – Orihime Inoue tuvo suerte de escapar sin cargos de conducción temeraria…

–Estaba nevando, era de noche y la carretera era peligrosa –le recordó su padre–. Ten un poco de compasión por los errores humanos, hijo. Orihime se quedó desolada por la muerte de Kaien.

No tan desolada como para no flirtear con su hermano pequeño unas semanas después del funeral, pensó Ichigo. Pero se guardó esa información para sí, sabiendo que su padre le diría que había interpretado mal la actitud de Orihime.

Aunque sólo habían pasado seis meses desde la muerte de Kaien, ese trágico evento había cambiado por completo el futuro de Ichigo. Como único heredero del famoso armador Isshin Kurisaki, a partir de la muerte de su hermano era considerado mucho mejor partido que cuando era sólo un inconformista que trabajaba por su cuenta.

–La relación entre nuestras familias volverá a ser la misma si aceptas la invitación –insistió Isshin. Ichigo apretó los dientes. No le gustaba verse obligado a hacer nada. Le gustaba su vida tal y como era y se preguntaba si sus padres tendrían la ridícula idea de casarlo con Orihime para unir las dos navieras. Orihime era una mujer preciosa y llena de talento pero Ichigo, a los veinticinco años, no tenía el menor deseo de casarse. Y su vida privada, que aparecía a menudo en las revistas del corazón, seguía siendo tan interesante y aventurera como siempre.

–Te lo agradecería mucho, hijo –dijo su padre entonces.

Ichigo lo observó, notando las arrugas que el dolor por la muerte de su primogénito había marcado en su rostro. Era un cargo de conciencia, pero no quería tener que llenar el hueco que Kaien había dejado. Habiendo sido el favorito desde que nació, sería imposible ocupar el sitio de su hermano mayor.

Ichigo siempre se había negado a competir con él porque desde muy joven había notado que a sus padres les molestaba que tuviera más éxito. ¿Pero qué importaba un fin de semana si eso los hacía felices?

–Muy bien, de acuerdo. Iré… pero sólo esta vez.

–Gracias. Tu madre se sentirá muy aliviada –dijo su padre–. Seguramente te encontrarás con amigos en Westgrave Manor y, sin la menor duda, también harás contactos que te vendrán bien –siguió Isshin, sabiendo que eso era lo único que podía animar a su hijo.

Ichigo subió al segundo piso de la casa de Atenas para visitar a su madre, Masaki. Pero mientras subía sonó su móvil y en la pantalla vio el nombre de Lina, su amante del momento. Era la tercera llamada desde que se marchó de Londres.

Irritado, apagó el móvil, decidido a cortar con ella a la menor oportunidad. Pero su conciencia no lo dejaba tranquilo.

¿Qué era lo que hacía que las mujeres pasaran de divertidas amantes a mujeres predecibles en busca de un compromiso en el que él había dejado claro desde el principio que no estaba interesado?

Como siempre, su madre se lamentó por la muerte de Kaien como si hubiera ocurrido el día anterior. Ichigo soportó que llorase sobre su pecho y le reprochase sus defectos, en comparación con su perfecto hermano mayor, antes de despedirse para ir al aeropuerto y a la libertad que tanto disfrutaba.

Pasarían unos meses hasta que volviese a Atenas; volver a casa siempre era deprimente para él.


Hola, antes que nada quiero decir que este es mi primer fic de Bleach :3 Soy fan de la serie desde hace tiempo y nunca se me había ocurrido pasarme por fanfiction a ver que me encontraba de ella, pero un dia me puse a buscar y me enamore aun mas de la serie, y me encantaron las adaptaciones que hacen algunos autores, por lo que recordé que había leído un libro que me gusto mucho y lo quise adaptar a los personajes de Bleach y espero que les guste tanto como a mi...