I LOVE U SO MUCH
Caminaba pesadamente por las calles, hastiado de todo y todos, además hacía ya mucho que la gente había dejado de saludarlo, casi era como volver a cuando era infante, solo que ahora tenía veinte años y la cara más seria.
Ya eran demasiados los que día a día lo comparaban con su padre, estaba muerto, asi que lo único que quería era ser Naruto.
La gente había dejado de saludarlo no por pequeñeces, esta vez la razón era de peso, pues cada vez que lo hacía o los ignoraba o contestaba con palabras mal sonantes.
A pesar de todo, la gente comprendía sus razones, pues el no haber conseguido que Sasuke volviera, aun habiendo matado a su hermano, lo enfurecía, de verdad Sasuke los había dejado y no podía hacer nada para evitarlo.
Se paró y miró a su alrededor, los que lo miraban con pena, bajaron la cabeza, los que lo miraban severamente cambiaron su expresión a una un poco más suave.
- Naruto...
Una voz le llamó la atención, miró a su espalda, y pudo ver a su ex sensei, Kakashi, le sonrió levemente y dijo:
- Kakashi... hacía mucho que no nos veíamos.
- E estado en una misión con Yamato-san.
Dijo el albino mirando a su alrededor, todos seguían sus caminos, ellos dos comenzaron a caminar el uno al lado del otro.
- E vuelto ayer, visité a Sakura, como siempre, me dijo que estabas raro... ¿Te pasa algo Naruto?
Naruto negó lánguidamente, casi como si no tuviera ganas, Kakashi suspiró:
- Naruto, engañarás a los demás, pero no a mí... ¿Es por Sasuke? Sabes que ahora es nuestro enemigo, le diste una oportunidad y no la quiso.
Kakashi parecía incluso cabreado, pero Naruto asintió sonriendo levemente, y al fin dice:
- No significa que no quiera cogerlo, Kakashi, pero... me duele verlo asi, siendo mi enemigo cuando empezábamos a llevarnos tan bien. Es doloroso ¿Sabes? Era el único amigo verdadero que tenía.
Naruto se paró, miró al del sharingan, que suspirando le contesta claramente cabreado:
- Por dios Naruto, puede que fuera el mejor pero no el único amigo que tienes.
Naruto sonrió de nuevo, y dice, más bajito:
- Lo sé.
Esas dos lágrimas se le escaparon de forma inconsciente, se las limpió con las mangas del suéter azul marino que llevaba puesto, era parte de su uniforme de jounnin, pero no llevaba el chaleco puesto, no estaba de servicio en ese momento.
- ¿Ibas al cumpleaños de Sakura?
- Si.
- Te acompañaré. Parece querer llover.
Los dos caminaron por las calles, la gente corría por la inminente lluvia, y antes de llegar a la casa de la peli rosa, la lluvia los alcanzó a ellos dos.
El que picó a la puerta fue Kakashi. Sakura abrió, al ver a su ex sensei, rio.
- Pasa.
- Vengo acompañado.
Kakashi pasó a la sala, empapado, y tras el Naruto, la peli rosa lo miraba, feliz de verlo sonreírla.
En la sala estaban, Hinata, Tenten e Ino, luego Kiba, Shino, Neji, Chouji, Sai e incluso Yamato. Naruto suspiró y mirando a la peli rosa dice:
- ¡Omedeto Sakura-chan!
Le costó pero mostró ese entusiasmo de antaño, para decir las palabras correctas. Sakura sonrió, y abrazó al rubio, que sacando una cajita de su bolsillo dice:
- Esto es para ti.
Sakura se separó y miró la cajita, luego dice, tomándola:
- Pensé que se te había olvidad y que Kakashi te había arrastrado hasta aquí.
Naruto negó, la chica tomó la caja, la desenvolvió y la abrió, era una pulsera de color negro y naranja.
- Intenté buscarla rosa, pero no les quedaba, además, era la que más me gustaba.
- ¿Estas de broma? Me encanta, es como tu... cantosa.
Todos rieron, Naruto lo hizo levemente, mientras miraba como la chica se la colocaba en la muñeca derecha. Luego la miraba como si fuera un anillo de compromiso, de lejos.
Naruto dice con voz débil:
- Perdón a todos por comportarme como un imbécil durante tanto tiempo.
Se hizo el silencio, Sakura miró al rubio, este se rió levemente y dijo:
- Disculpas.
Se fue escaleras arriba, Sakura y los demás sabían que se dirigía al tejado. Sakura miró a su ex sensei:
- Kakashi, ¿Qué le pasa?
- Esta sensible...
Dijo sentándose en el borde del sillón, no quería mojarlo. Sakura lo sigió disculpándose también, al llegar a la ventana más cercana del segundo piso, vio que ésta estaba abierta.
Se asomó, aun llovía, pero salió al exterior, de un salto llegó al tejado, su pelo, ahora largo de nuevo, se mojó al instante.
Naruto estaba sentado en el tejado, apoyado sobre el tabique de la chimenea, mirando el horizonte. Sakura se acercó y se arrodilló ante él, este la mira, parecía haber estado llorando.
- ¿Estás bien campeón?
- Si, gracias por preguntarlo.
Dijo el sonriendo, ella le miraba atentamente, poco a poco esa sonrisa se borraba. Mientras se quedaba completamente convertido en una mueca de desdén.
Sakura suspiró abatida por el estado de su amigo.
- Naruto... Sasuke decidió, y su decisión no era estar con nosotros, no podemos hacer nada, decidió sobre su vida, que creo que era lo que él más quería.
Naruto la miró, con ese rostro serio, las gotas de agua escurriéndose por su rostro y confundiéndose con la lluvia:
- No implica que me guste...
Bajó de nuevo el rostro. Sakura se incorporó levemente, y aprovechando que el rubio tenía las piernas flexionadas, levemente abiertas, se arrodillo de nuevo entre ellas.
Naruto le pasó su brazo izquierdo por la cintura, su otro brazo reposaba sobre su rodilla derecha, ella le tomó con ambas manos de la barbilla, obligándole a mirarla.
- Naruto... quédate conmigo... no me dejes como ya lo hizo Sasuke, por que por mucho que estas aquí... te siento tan lejos.
Sakura era fuerte y no pensaba llorar, solo quería volver a recuperar al Naruto de antaño. Este suspiró mientras cerraba los ojos, apoyó la cabeza en la pared tras él, con su otra mano acaricia el mojado rostro de la peli rosa.
- Te vas a resfriar, Sakura-chan.
Sakura le miró, estaba seria porque sabía que si movía un solo musculo de su rostro, las lágrimas saldrían. Naruto separó su espalda de la pared para acercarse a Sakura, entrecerrando los ojos dice:
- Tierra llamando a Sakura... ¿Estás ahí dentro?
Sakura le miró seria, el rubio estaba sonriéndola levemente, se acercó a él levemente, Naruto reculó un poco, pero ahí estaba la pared para impedirle huida alguna.
Y las manos de Sakura tomándole ambas mejillas, obligándolo a mirarla, y los labios de ella acercándosele sin si quiera mostrar intenciones de retirarse.
Y al final, llegaron a su destino, sobre los del rubio, Naruto respiró hondo, tomó con sus manos la nuca de Sakura, para profundizar el roce, mentiroso si se le ocurría decir que la había olvidado...
Nunca dejó de amarla, y ahora verla besarle le colmaba de felicidad. Se separaron por petición del rubio.
- Vamos adentro... vas a resfriarte.
- Naruto... te quiero... ¿Me oyes? Te quiero mucho, no creas que si te pasa algo, yo lo dejaré pasar, porque te quiero...
Naruto miró como a la peli rosa al final se le escapaban las lágrimas, se levantó ayudando a la chica a hacer lo mismo.
- Yo nunca dejé de amarte...
Ella sonrió mientras se abrazaba al rubio, luego ambos bajaron hasta la ventana de nuevo, tras cerrarla, los dos bajaron las escaleras, escuchando abajo las risas de los invitados.
Al llegar abajo, Sakura dice:
- Gomene...
- Etto...- Naruto se rascó la nuca.- se nos hizo la conversación un poco larga.
Miró a la peli rosa que reía pero tiritaba levemente, Naruto le dice:
- ¿Por qué no te das un baño caliente? Te vas a resfriar, vaya tonta por salir asi a la lluvia.
Sakura asintió y mirando hacia todos caminó hasta la puerta del baño, pero entonces dice:
- Pero... los invitados...
Naruto se acercó y empujándola al interior dice, antes de cerrarle la puerta en las narices:
- No te preocupes, estarán aquí cuando salgas...
Apoyó la frente en la puerta sonriendo y mirándolos a todos dice:
- ¿A que si?
La sonrisa de oreja a oreja animó a todos, incluso Chouji encontró su apetito perdido (N/a: Eh, eh, eh, eh, hasta Chouji perdió su apetito por las tonterías de Naruto, mala personaaaaaaaaaa~ 3)