Capitulo 1
"Comenzando nueva vida"
Han pasado minutos y yo sigo sentada en el borde de la cama de la habitación que me asignaron a mi y a mi familia en el Distrito 13. Si, como dije, en el famoso y ahora no tan muerto Distrito 13, el cual por seguridad para sus habitantes, se encuentra bajo tierra. Es una especie de madriguera, pero en tamaño gigante.
Ya ha pasado semana y media desde que desperté de mi largo sueño y sorprendentemente me encontré en una habitación de hospital en este distrito que para la mayoría del país cree que está destruido.
Todavía recuerdo como Gale me dijo que había estado inconsciente por semanas y que mi Peeta estaba en estado de coma. Recuerdo el ir a verlo y encontrarlo ahí dormido, ajeno a todo, ausente pero presente en mi. Lo extraño tanto, quiero ir corriendo y entrar a su habitación para quedarme con el hasta que despierte. No se como hare para que el lo haga, pero estaré dispuesta a todo con tal de volver a ver esos hermosos ojos azules que tanto quiero y que me llenan de tranquilidad y amor.
Ahora que por fin me dieron de alta, puedo estar con mi familia, aunque la mayoría del día mi madre trabaja como enfermera en el hospital del distrito junto con Prim, quien ahora ejerce un cargo de ayudante en asistencia médica. Me alegro mucho que estén bien y a gusto con lo que hacen, por lo menos se distraen y no piensan mucho sobre lo que paso en nuestro antiguo hogar, el Distrito 12.
Al parecer todo estaba medido, el Distrito 12 estaba bajo el ojo del huracán, ya que el Capitolio se encontraba meticuloso y dispuesto a amenazar y a destruir a toda costa. Por mala suerte esta vez le toco vivir esa amenaza a mi querido distrito. Haymitch me conto que el fuego se estaba encendiendo desde el momento en que nos presentaron a Peeta y a mi en el desfile de tributos para los juegos del Quater Quell. La población de la Veta estaba al borde de la desesperación debido al cierre de las minas y de las limitaciones que el nuevo jefe de los agentes de la paz en el distrito le imponía.
- Todo estaba hecho un caos - recuerdo como Haymitch me lo decía en tono triste y con un poco de rabia - familias afectadas por el cierre de los minas, pasando hambre, niños comenzando a enfermar… lo siento Kat - la manera en que me dijo todo eso me dio a entender que el también está muy dolido por la situación. Al igual que yo, el quiere ver una respuesta asertiva que nos lleve a concluir el por qué de todo esto, pero de inmediato me aseguró que lo que viene no será nada fácil.
Sacudo mi cabeza para alejar mis pensamientos y me levanto por fin para cumplir con el día. Aquí en el Distrito 13 son muy organizados, cada persona tiene un horario que cumplir con diversas actividades. Las horas de comer son exactas y a todos nos dan la misma cantidad en porción de comida.
No me gusta la ropa que me asignaron, todos aquí llevamos lo mismo. Me siento como una prisionera, estas personas son extremadamente correctas a horarios y organización se refiere
Decido salir, dentro de pocos minutos me toca mi consulta médica diaria. Como verán, después de estar inconsciente por semanas y por las muchas pesadillas y ataques de histeria que he tenido, me han diagnosticado como una persona mentalmente no apta ¡Es ridículo! No estoy loca, solamente tengo muchas preocupaciones en mente, al igual que tengo recuerdos que dan vueltas en mi cabeza cada vez que cierro mis ojos; todas son imágenes de muerte, odio y desesperación, todo junto, pero eso no significa que este demente. Agh… como estoy empezando a aborrecer este lugar.
- ¿Katniss? - estoy absorta en mis cavilaciones cuando no me doy cuenta que me llaman. La voz la reconozco y trato de muchas formas de esquivarla - Kat espera - sigo caminado y el me toma del hombro para voltearme. Si, es Gale - vas con mucha prisa - a pesar que estuvo a mi lado desde que me sacaron de la arena, todavía no logro sacar de mi mente lo vivido con el antes de ir a mis segundos juegos.
- Si… algo - le respondo tratando de no verlo a la cara, simplemente no deseo hacerlo ahora.
- Kat… eh… ¿podemos hablar un momento? - me pregunta lentamente y cauteloso, como si temiera mi respuesta. Yo la verdad no se de que hablar con el, creo haber dejado las cosas claras. Mi relación con Gale ha dado giros inesperados, nunca llegue a pensar que ahora trataría de evitarlo, siempre pensé que sería incondicional y que estaríamos juntos, como equipo, todo el tiempo de nuestras vidas. Pero me equivoque.
- Ahora no, estoy…
- ¿Ocupada? - lleva su mano a mi barbilla para hacerme levantar la mirada hacia el, pero yo con un rápido movimiento le esquivo - mmm ya entiendo - suspira y se lleva sus manos a los bolsillos de su pantalón - descuida, solo quería hablarte pero… al parecer tendré que esperar - me muerdo mi labio inferior y asiento. Con la mirada todavía hacia el suelo, me volteo y camino, pero luego de dar unos pasos siento como Gale me persigue y me toma fuertemente del brazo para voltearme de nuevo, quedando así frente a el muy cerca para mi mala suerte. Lo miro sorprendida y me quedo estática.
- Suéltame - le digo entredientes pero el parece inmutarse y me ve a los ojos.
- No lo voy hacer hasta que escuches muy bien lo que te voy a decir - su voz demuestra seriedad, me mira directamente y su agarre fuerte. No me agrada.
- Suéltame por favor…
- Katniss ¿hasta cuando vas a dejar de huir? - su pregunta me deja perpleja ¿Qué quiere decir con eso?
- ¿A qué te refie…?
- Sabes muy bien de lo que hablo - mira a los lados y luego comienza a caminar hacia un pequeño corredor. Protesto en seguida.
- ¿Qué haces? ¿A dónde me llevas?
- Sshh calla - y me tapa la boca con su mano libre. Forcejeo más aún, pero es inútil, es mucho más fuerte que yo.
Llegamos al final del pequeño corredor y abre una puerta. Me doy cuenta de inmediato que es un depósito pero de un tamaño en el cual solo caben tres personas, es decir, es pequeño para mi mala suerte, no quiero tenerlo tan cerca de mi.
El cierra la puerta tras de si y me suelta de su agarre lentamente, luego enciende la luz. Está muy cerca de mi, siento su respiración y todavía me tiene tomada de las manos. Nos quedamos viendo por unos segundos y luego retiro mis manos rápidamente de las suyas.
- ¿Por qué hiciste esto? - el se encoje de hombros y me mira con indiferencia.
- Era la única forma para que me escucharas sin que… - se voltea y cierra con seguro la puerta - huyeras…
- ¿Qué pretendes? ¿Estás loco o qué? Déjame salir…
- Kat ¿es que no entiendes? - suspira con frustración y se voltea - todo este tiempo he querido que se arreglaran las cosas… que… lo que paso entre nosotros se remendara - se voltea de nuevo hacia mi y yo solo intento evitar su mirada de nuevo, pero el no lo desea así, ya que lleva su mano a mi mentón y lo levanta suavemente, pero igualmente sigo viendo hacia el suelo - mírame por favor - no quiero hacerlo de verdad, no le quiero seguir haciendo daño. Su contacto me abruma y no quiero crearle más confusión. Si es lo que yo pienso que dirá, solo espero que comprenda que ya tome mi decisión, escogí a Peeta.
- Gale por favor no… - me coloca su dedo índice en mis labios para callarme.
- Solo escucha - subo la mirada y veo que sus ojos grises me reflejan. Estoy nerviosa - no sabes lo mucho que me arrepentí el haberte hecho pasar por mal rato esa vez antes de que te marcharas a los juegos de nuevo… yo - suspira - solamente quería retomar el tiempo perdido, compartir contigo y volver a estar a tu lado - me quedo sin habla, el no puede estar diciendo esto - pero… la desesperación y… el enojo de saber que no pasaría me invadieron y solo… sentí envidia de no ser yo el que estuviera contigo de ahora en adelante - estoy en shock, la sinceridad en sus palabras me dejan sin pensar, todo esto es tan ¿extraño?
- Gale yo… lo siento, pero no creo que podamos…
- Eso es lo que me molesta, el saber que ya no estarás ahí y que ahora ese chico ocupará… agh - cierra sus ojos fuertemente y luego se acerca a mi lentamente hasta que su frente roza con la mía. Antes que esté más cerca, yo me remuevo y logro zafarme.
- Creo que fui muy clara - le digo lentamente y camino hacia la puerta y le quito el seguro - lo siento, pero… no creo que vaya a suceder - le digo sin voltear y salgo de la habitación.
Voy caminando de regreso y me doy cuenta que voy tarde a mi consulta ¡Al diablo con ella! No estoy ahora para tontos comentarios como: todavía sigues en revisión, tomate esto, no te alteres mucho, bla, bla, bla… Estoy harta de ello. Solo quiero despejarme y olvidar lo sucedido con Gale hace unos instantes. El no puede hacerme esto, el sabe que no podre corresponderle igual, ahora estoy con Peeta y el me necesita más que nunca.
Trato de sacarme las palabras de Gale de mi cabeza. Le agradezco mucho lo que ha hecho por mi, el fue quien ayudo a mi madre y a Prim a salir con vida de los bombardeos. Si no fuera por el, ellas estuvieran ahora muertas. Sinceramente aprecio mucho lo que hizo, pero… agh no se, debo concentrarme en otra cosa y ya se que hacer.
Escondida de los médicos del hospital del distrito, llego a la unidad de cuidados intensivos y me coloco frente a la ventanilla de la habitación de Peeta. Me quedo observándolo y deseando que en cualquier momento despierte y me brinde una de sus hermosas sonrisas y me acobije en el. Me permito llorar y desahogarme. Todo esto es muy duro para mi, los cambios que se avecinan no serán fáciles de digerir, pero tengo que tener la certeza de que hayan mejorías.
- Peeta no te dejare, siempre estaré a tu lado pase lo que pase, así tenga que pasar por momentos difíciles, yo permaneceré contigo.
Coloco mi mano sobre el vidrio como he hecho todos estos días y esperando a que tal vez mi presencia pueda servirle como señal y así logre despertar.
- Katniss, necesito que vengas conmigo por favor - escucho la voz de Haymitch detrás de mi y lamento el no poder estar sola aunque sea por unos minutos.
- Lo siento, quiero quedarme - le respondo con vos amarga y ronca por el llanto ¿es que no entiende que quiero estar sola con Peeta?
- Disculpa, pero no creo que sea adecuado ahora decirle que no a la presidenta Coin - me contesta seriamente y yo me sorprendo ¿Qué quiere qué? No estoy de humor para ver a nadie, pero a juzgar por el tono de Haymitch tengo que hacer caso omiso a mis deseos y debo, aunque no quiera, ir con el.
- Siempre hay una primera vez para todo - le contesto tajante. Llevo varias ocasiones rechazando un encuentro con Coin. No me agrada del todo esto.
- Katniss por favor, coopera aunque sea un poco ¿si? - suspiro y me volteo lentamente.
- ¿Estás hablando en serio? Es decir… ¿me estás suplicando? - le pregunto y levanto las cejas con incredulidad.
- No, espera un momento… solo te lo digo para que salgamos de esto y así tu puedas volver a escondidas con tu amado, porque si no lo recuerdas, está prohibido el que entres aquí - como odio esa regla, yo quiero estar aquí y no voy a permitir que me obliguen a seguirla. Pero Haymitch tiene razón, ya son algunas ocasiones en que he rechazado la visita a la presidenta Coin. Si voy hoy ella me dirá lo que me tenga que decir y yo luego me voy y soy libre de venir a ver a Peeta.
Me despido de Peeta dándole un beso a mi mano y colocándolo en el vidrio y me reúno con mala gana a Haymitch.
- No la hagamos esperar - le digo rendida y juntos caminamos hacia la salida.
La vida de Katniss en el Distrito 13 está comenzando, pero al parecer ya no le está gustando del todo. Su descontento es visible, pero sobretodo su preocupación por el estado de Peeta ¿Creen que llegue a despertar pronto?
Otro caso es el de Gale. Ya Katniss le dejó en claro que quiere estar con Peeta, pero como todos sabemos, Gale no se dará por vencido y tal vez pueda llegar a luchar para obtener, aunque sea un poco más de atención de su parte ¿no lo creen así?
Por ahora Katniss debe conformarse con seguir las reglas y de conversar con Coin ¿qué piensan que le querrá decir con tanta insistencia?
Hola a todos de nuevo, aquí les traigo el primer capitulo de esta historia, la cual espero que sea de su agrado y así pueda contar con su apoyo Se les quiere mucho y disfruten! Nos vemos.