Eran las 8 de la mañana cuando un enorme resplandor proveniente de la sala despertó a los Winchester, los 3 hermanos corrieron a ver que pasaba con pistolas en las manos y se sorprendieron al ver al jinete de la muerte sentado en el sofá con Adam en inconsciente en su regazo.
"Hola Deán"
" ¿Muerte? ¿Qué haces aquí? Digo… ¿Adam? ¿Cómo lo trajiste?"
"Demasiadas preguntas Deán, solo confórmate con saber que necesitaran a su hermano si quieren vencer a los leviatanes." Dijo el jinete y segundos después desapareció, Deán se acero a Adam quien estaba dormido en el sofá y le dio una leve sacudida.
"Adam… Adam despierta"
Adam abrió los ojos, miro el panorama confundido y grito al ver a sus 3 hermanos parados alrededor de el.
"DIOS, son ustedes"
"Si Adam, somos nosotros… tu familia" dijo Deán.
"Aléjense de mi, aléjense" grito el chico mientras corría a la puerta de entrada, pero como era de esperarse esta estaba cerrada con llave.
"Adam, cálmate… se que el volver del infierno es difícil pero…"
" ¿El infierno? Te has vuelto loco Sam" pregunto exaltado, Sam lo miro confundido
" ¿Si? ¿Pensamos que estabas en el infierno?, te vimos caer ahí, bueno a Michael"
" ¿Ah si? Pues se equivocaron, el arcángel fue bondadoso conmigo y devolvió mi alma al cielo para poder ocupar mi cuerpo libremente, a si que si me disculpan debo irme" dijo forcejando la puerta, entonces Deán puso su mano en ella para impedir que la abriera.
"No vas a ir a ninguna parte Adam"
"No voy a quedarme con ustedes, en lo que a mi respecta no son nada mas que extraños"
"El tiene razón" susurro Jeffrey y entonces Sam y Deán lo miraron enojados.
"Jeffrey regresa a la cama, nosotros nos ocupamos de esto" ordeno Deán.
"Como quieras, de todas formas no me interesa si el se queda con nosotros o no" respondió Jeffrey mientras se daba la vuelta y regresaba a su cuarto,
"Vamos Adam, necesitamos hablar, no puedes revivir y quererte ir a los 5 minutos"
" ¿Por qué no? Ya he estado muerto por mucho tiempo, quiero recuperar mi vida"
"Si bueno es un buen punto, pero vamos amigo… somos hermanos no hay mejores personas que nosotros en el mundo para ti"
Adam lo pensó por unos segundos realmente el no conocía a nadie, su madre estaba muerta y no tenia a donde ir, sin embargo aun estaba inseguro de quedarse con ellos por lo que Deán se vio obligado a aplicar la regla del hermano mayor, la cual indicaba que a veces era bueno mentir para obligar a los hermanitos a hacer las cosas.
"Esta bien si quieres irte hazlo, pero si vuelven a matarte no vengas a llorarnos cuando seas un espíritu"
"Esta bien, esta bien me quedare con ustedes, por lo menos hasta que me estabilice ¿de acuerdo?" pregunto mientras se sentaba en el sofá, Deán y Sam asintieron con la cabeza por que sabían que el día en el que el chico se estabilizara ya estaría tan familiarizado con ellos que no podría dejarlos.
"Sin embargo Adam, hay un par de reglas que seguir en esta casa"
Dijo Deán y Adam solo asintió con la cabeza.
"Numero uno, te daremos un arma pero debes prometer que solo la usaras en cosa de vida o muerte ¿estamos claros en eso?"
"Si, si lo prometo"
"Numero dos, no se sale solo después de las 11 de la noche"
"Ok"
"Ni sales sin decirnos a donde iras…ha y sobre todo debes obedecernos en todo lo que digamos o tu trasero va a pagar las consecuencias ¿he sido claro?"
"¿Que? Están locos si creen que voy a hacer eso, tengo 20 años puedo cuidarme por mi mismo, no necesito a 2 estúpidos dictadores cuidándome" grito y entonces Deán se acerco peligrosamente a el.
" Adam, si no dejas tus pequeños berrinches en este momento, no te sentarás durante una semana. ¿He sido claro?"
" Yo puedo hacer lo que quiera Deán, que no eres mi Padre, yo no te debo nada ¡"
Deán estaba a punto de perder el control, pues el pensó que tenía toda la formación necesaria para mantener la calma cuando su autoridad fuera cuestionada.
Después de todo, Sam y Jeffrey le habían dado todo un infierno de práctica en ese departamento. Los chicos siempre hacían lo que Deán quería al final del día, pero no después de mucho luchar. Por otro lado, Adam estaba trayendo un nuevo nivel en este juego. No hubo preguntas u otras opciones, simple y llanamente un rotundo No ante las ordenes.
"Amigo, cálmate.", Dijo Sam caminando detrás de Deán y poniendo una mano sobre su hombro. Ya que podía ver a su hermano mayor haciendo estallar una vena en un minuto...
"Adam, debes entender que si te damos ordenes es por que necesitamos asegurarnos de que no te pase nada" Sam explicó pacientemente mirando a Deán, pues sabía que el no iba a dejar que el chico siguiera con esa actitud.
"Vete a la mierda Sam, no tienes derecho a decirme nada" le grito Adam, quien estaba fuera de sí, pues sentía que estaba siendo intimidado por 2 extraños.
"¿Qué fue eso que decías antes sobre darle una bofetada? ¿Qué tal si le lavamos la boca con jabón primero? "Gruñó Sam "Bobby ¿todavía utiliza el mismo jabón que nos ponían cuando éramos niños?"
"Sí, creo si." Deán miró a Adam. "Estoy un poco cansado de toda tus pataletas también."
"Mira Adam..." comenzó Sam, contemplando seriamente la idea de jabón, pero no... Había cosas más importantes que atender en primer lugar.
"No miro nada, no tengo nada que decir perdedores. Me quedare aquí por que no tengo más opción pero eso no significa que seremos los mejores amigo " Cuando Adam había terminado de hablar, camino hacia la puerta de nuevo y fue detenido en seco por Sam que lo agarró por el brazo y tiró de él hacia la sala de estar.
"No vas a ninguna parte Adam. Siéntate y escucha!" grito mientras arrojaba a su hermano en el sofá. Él no estaba jugando más.
"Hay cosas mucho mas peligrosas que los demonios ahora, los Leviatanes ellos son feroces y no dudaran en asesinarte si tiene la oportunidad, ¿Podrías trabajar con nosotros en esto, por favor? No quiero que salgas lastimado. "
"¿Por qué se preocupan tanto por mí? Se que tú eres mi hermano igual que Deán y ese niño Jeffrey pero ni siquiera me conocen, no se como quieren cuidarme "
Sam miró a Deán con exasperación. Deán tuvo piedad de su hermano pequeño y se sentó junto a el.
"Se le llama ser Familia, Tonto" dijo sarcásticamente mientras le pasaba un brazo por loa hombros, Adam se dejo caer en el abrazo.
"Esta bien, eso podría funcionar" susurro el chico
"Sam, tenemos mucho por conversar con Adam. Él tiene que saber todo sobre el negocio de la familia. "dijo Deán un poco más tranquila ahora, él y Sam podría explicarle un poco sobre el legado de los Winchester, pero ellos no lo harían con el estómago vacío, a si que Sam corrió a despertar a Jeff quien no puso muy buena cara al enterarse que otro hermano se uniría al viaje con ellos, sin embargo no dijo nada (Aun) Y así, los 4 Winchester salieron a comer Pizza para conversar un poco.
