Bajo Su Sombra.
Disclaimer: Los personajes pertenecen a Suzanne Collins, creadora de una adicción maravillosa: Los Juegos Del Hambre.
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Por supuesto que él estaba ahí. El siempre estaba ahí. Pensando. Alguna vez lo vio llorar, pero se refregó la cara con gestos bruscos, como si se negara a que los árboles y las hormigas lo notaran y fueran a divulgarlo por todo el Distrito Doce. Pero él nunca la veía a ella. Nunca sentía sus intensas miradas. Ella intentaba controlarse, segura de que uno de esos días, le incendiaría su sencilla camiseta blanca. Pero no, nada había pasado aún. ¿Tan invisible era? No, la invisibilidad no era el problema. El verdadero nombre del conflicto era Katniss Everdeen. Ella era la razón por la que Gale se sentaba ahí todos los días, horas, a gruñirle al aire, a decir una que otra maldición en contra del Capitolio y a jurar por no haberse ofrecido como voluntario. No necesitaba que lo dijera en voz alta para que ella supiera que no consideraba a Peeta Mellark lo suficientemente fuerte como para mantenerse a él mismo dos minutos con vida, y mucho menos capaz de proteger a la chica. Que pensaba que ambos morirían en la Cornucopia, sin que pudiera meter las manos.
-Se que estás ahí, Ione. -Ione… Él conocía su nombre. Por supuesto que sí, llevaban años en el mismo curso… Salió silenciosamente del árbol. —No deberías estar aquí, ya lo sabes. Ni yo, de hecho. No me imagino que podrías necesitar tú del bosque. Se supone que los chicos como tú están muy bien educados y adoran al… Capitolio. –Pareció escupir la palabra—Ustedes no se atreverían jamás a romper sus reglas. –Todo eso era cierto, pero, ¿qué podía decir ella en su defensa? "¿Me preocupo por ti?" "¿Te vigilo y se él momento exacto en el que escapas a este sitio?" Demasiado… desesperado. Él no era el único que podía saltar la valla eléctrica, y ella era libre de hacer lo que quisiera… siempre y cuando su padre no se enterara. –Escucha—prosiguió él—tal vez otro día hablemos de esto, pero por ahora, no tengo ganas de escuchar a nadie. Vuelve a casa.
Ione suspiró, el segundo movimiento desde que él la había descubierto. Quizá tenía razón. No era su lugar. Ella no podría parecerse a Katniss Everdeen ni en un millón de años. Ella no podría ser lo que él quería. Jamás. ¿Odiarla? También era un imposible. ¿Cómo odiar a alguien lo suficientemente valiente como para dar la vida por su hermana? Pasara lo que pasara, Katniss Everdeen ya era una heroína.
-¿Gale? Ella volverá. Es fuerte. Regresará a… ti. -Se giró con una rapidez increíble, con los ojos relampagueando de ira.
-Nunca digas nada que no sientas por querer consolar a alguien más.
Y se giró, ignorándola por completo. Como siempre. Ione no se sintió mortalmente ofendida. Él solo estaba herido, muy herido. Lo entendía. Permaneció en las sombras unos minutos más. ¿Luego? Luego fue tiempo de volver a casa.
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Eh… ¡Hola! Bueno, este es un One Shot que escribí para un concurso de una revista. Sé que es súper cortito, pero esas eran las condiciones; crear un personaje nuevo que interactúe con alguno otro en Los Juegos Del Hambre en una cuartilla y mi hermosa mejor amiga; Diana, y las mejores Betas del universo; Isela y Alexia me apoyaron y sin ellas no lo hubiera hecho.
Ahora… ¡les gustó tanto que quieren continuación! No quieren ver ni a Gale ni a Peeta solitos y abandonados e Ione es un personaje con mucho, mucho potencial :3
Solo se los muestro, para ver qué opinan y si creen que sería bueno seguirlo.
¡Gracias por pasarse por aquí!