Según se sabe, los demonios se clasifican según lo que controlan y las colas que tienen. 2 de los mas conocidos eran Shukaku, el cual controlaba el viento, y era el mas débil de los demonios al tener solo una cola; y luego estaba el Kyuubi, que controlaba el fuego y era uno de los mas poderosos al tener 9 colas(el limite de colas que se pueden tener).
Todos los demonios eran temidos, sobre todo uno en particular, el mas sangriento y frío de todos; este era Seiryuu, un tigre de 8 colas que controlaba el agua, el cual podía llegar a vencer al Kyuubi por la ventaja que tenia sobre el. Nadie sabia donde se había escondido el tigre de agua, no por lo menos hasta que apareció en la aldea oculta de la Niebla, y algo debilitado decidió meterse en el cuerpo de una niña recién nacida ese mismo día.
La niña, hija del mizukage de la aldea, después de llorar por noches enteras por el dolor que conllevaba tener un demonio en su interior, hizo que mizukage supiera de esto, y encerró al demonio (aun con pesar) en el interior de la niña. Sabia que ella aun era algo débil, que no tendría poder suficiente aun para controlar al demonio.
Sabiendo aquello, se lo comunico al Hokage de la aldea oculta de la hoja (Konoha), para así, llegado el momento, no tuviera más que mandarle a su hija con una carta en el caso que le pasase algo. Nadie más sabia eso, nadie mas que el mizukage, su esposa y su hija…
Prologo
Las estrellas iluminaban el cielo oscurecido por la llegada de la noche. La luna estaba de un extraño color rojizo, parecía que sangraba. Nadie más que la familia más importante de la ciudad oculta de la Niebla estaba al tanto de lo que pasaba en ese momento. En la casa solo se escuchaban pasos apresurados y respiraciones agitadas.
En la oscuridad del pasillo, desde una ventana alumbrada por la luz de la luna, solo se veían gotas rojas cayendo al suelo, y unos ojos dorados gatunos entrecerrados, avanzando hacia un cuerpo femenino que retrocedía con el miedo pintado en sus ojos. Alzó la mano, en esta brillando los filos de las garras que luego bajaron con fuerza contra el cuerpo, haciendo que la sangre saltase contra su rostro, manchándolo.
Cuando el sonido del cuerpo inerte cayendo al suelo ensangrentado llego a los oídos de la "bestia", los ojos cambiaron a unos normales de un color azul eléctrico, y las garras habían desaparecido. La luz del sitio, que había desaparecido, vuelve a iluminar todo el lugar; se ve un cuerpo de una mujer, tres cortes de unas garras atraviesan su vientre, matándola al instante y llenándola de su propia sangre.
Una niña de pelo negro azulado, de la cual provienen los ojos azules, vestida con un solo vestido sin mangas, su rostro manchado con sangre. Cuando la chica vio el panorama, sus ojos se contrajeron con miedo y horror, y solo gritó fuertemente, luego perdió la consciencia, cayendo sin sentido al suelo.
