— ¿Tienes frio, My Lady?
— No.
— ¿Ahora?
— No.
— ¿Y ahora?
— No.
— ¿Y ahora tienes frio?
— No.
— ¿Por qué me sigues preguntando si tengo frio? —Le cuestionó con la ceja alzada— Nuestros trajes nos protegen de las bajas temperaturas...— Explicó— ¿Qué? ¿Tú tienes frío? —Interrogó incrédulamente.
— Sí.
Ladybug lo miró fijamente.
— ¿De en serio?
— Si —Contestó de nuevo afirmativamente— ¿Quieres darme un abrazo? —Levantando los dos brazos a su costado.
Ella ya comprendió porque le preguntaba tantas veces lo mismo.
— Hubieras traído algo para abrigarte.
Chat Noir se desilusiono con esa respuesta.
— Eres tan fría, My Lady —Repuso— ¿Quieres un abrazo?
Acercándose hacia ella.
— No quiero —Poniendo su dedo en el puente de su nariz para detenerlo.
— ¿Estas segura? —Cuestionó, dejando de acercarse.
— Sí.
— ¿Muy segura?
— Si —Respondió de nuevo un poco hastiada— ¿Cuantas veces me preguntaras eso?
— Las que necesite para poder abrazarte.
Las mejillas de Ladybug se volvieron rojas como su traje, desvió la mirada en un intento que no lo note y extendió sus brazos a su costado.
— Terminemos con esto... —Empezó— ¡Vamos! ¡Abrázame! —Dijo porque ya sabía lo insistente y perseverante que era el gatito. Y se quería un abrazo, ¿Que más daba? Se lo iba a dar con tal de que deje de molestar.
Chat Noir no se hizo rogar, se unió en un abrazo con su Lady posando sus manos detrás de la espalda de su bichito mientras una boba sonrisa se formaba en su rostro, al sentir el cuerpo de ella pegada al suyo y mucho más al sentir que ella posaba sus manos en su espalda.
¡Oh, como amaba el frío!
Omake
— ¿Me vas a soltar? —Preguntó su Lady un poco incomoda al estar -hace un rato largo- en esa situación con su compañero. El negó con la cabeza.
— Aun hace frio —Repuso— Tengo frio.
— ¡Chat! ¡Ya suéltame! —Pidió intentando apartarlo, pero su agarre era más fuerte— ¡Ya déjame! —Exclamó con las mejillas rojas por lo que provocaba estar así con su compañero, hasta estaba comenzando a tener mucho calor.
— Solo aguántame...
— ¿Cuánto? —Preguntó decidiendo esperar solo un rato más.
— Hasta que termine el invierno...