Es una idea para un posible fic largo, pero por ahora son cuatro shots unidos.

Advertencias. Drama como me gusta. :v Parejas Crack leve OoC en algunos personajes y Spoilers —como en cualquier FF—.

Parejas. LyVia. LaLu. Porque Yolo (?)

Fairy Tail no me pertenece —de lo contrario estos serían Canon—.

1. Reencontrar. Lyvia.

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La maga elemental caminaba a paso lento, terminar la misión antes de lo planeado siempre suponía alegría pero en esa ocasión no lo era.

Ella no deseaba regresar al gremio tan pronto como siempre, no al menos desde que Gray le dijera tan directa y fríamente que dejara de soñar con ellos juntos.

Mucha gente se hubiera rendido luego de 10 años insistiendo en declara su amor —aún cuando 7 de estos fueron congelados se esmero mucho en recuperar el tiempo perdido—.

Nadie lo espero, nunca hubiera estado preparada para ello y agradece que casi todos hubieran estado fuera en misiones, de lo contrario el Devil Slayer de Hielo ahora mismo acompañaría a su padre.

Confiaba en Kinana, Jet y Droy para guardar ese secreto de Gajeel o Erza —cualquiera daba lo mismo, le asesinarían de forma sádica por ello—.

—Juvia.

La de cabello azules giró el rostro algo más blanquecino que de costumbre para encontrarse con Lyon, el Usuario de Hielo le miraba feliz. Tan feliz como siempre que la veía pero al darse cuenta que su semblante era apagado no dudó en formar una expresión de preocupación.

—Lyon-sama —dio un saludo respetuoso mientras el rival número uno de Fullbuster besaba su mano con dulzura.

—Es una agradable sorpresa. Justo te buscaba a ti.

Una pizca de curiosidad llenó su pecho, el Vastia era encantador con ella pero no era lo mismo que el moreno. Se limitó a sonreír falsamente a él.

—¿Qué puede hacer Juvia por usted?

—Justo me embarcare a una misión y necesitaba de un mago de agua. Iba a solicitar la ayuda de Fairy Tail.

—¿En Lamia Scale no hay magos de agua Lyon-sama? —Realmente curiosa de aquel hecho.

Para durante siete años ser el Gremio número 2 de Fiore era un hecho curioso.

—Lastimosamente nuestro único miembro desapareció hace tiempo. ¿Qué dices?

Ofreciendo su mano el de cabello grisáceo estaba dándole una nueva oportunidad a Loxar de ser feliz con un mago de hielo.

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Días más tarde en medio de una típica lucha del gremio donde la mayoría de los magos formaban parte, tres magas se encontraban sentadas en un lugar a salvo de cualquier proyectil gracias a las runas que Levy aprendió de Freed.

Está, la maga celestial y la mujer de la lluvia en total calma e inmersas en sus propios asuntos antes de levantar momentáneamente la vista ante la imagen del moreno siendo estrellado por Erza al pisar su pastel.

Las primeras dos esperaban alguna queja o sollozo de Loxar pero así como subió la vista la bajó para ver de nuevo a su pequeña manualidad, que con amor se formaba.

Por mucha curiosidad ninguna menciono palabra y regreso la vista a sus libros, antes de volver a distraerse por el ruido ahora de sus espaldas. Bloques de hielo con sus compañeros se alzaban en forma de Leones.

Sorprendidos por el ataque no era de Gray sino lo sorpresivo al ver que Vastia de Lamia con maletas a cuestas, Fullbuster iba a atacar pero fue lanzado contra el cemento de una pared por la maga que atravesó medio lugar.

—¡Lyon-sama! —Todo el gremio se sorprendió ante esa manera de actuar de la admiradora número uno de "Hielito", como burdamente le llamaba Dragneel.

El mago al verla hizo sus brazos a un lado escondiendo sus manos mientras recitaba el Ice Maker; los demás magos no creían que fuera a atacarla y ella no intentara siquiera defenderse.

Todos estaban a punto de lanzarle algún ataque cuando dijo:— Flowers.

Y sacando un maravilloso ramillete de rosas de hielo las entregó a la sonrojada maga que feliz las acepto al igual que un abrazo.

Incrédulos se preguntaban unos a otros que sucedió con la obsesión de Juvia hacía el Tsundere.

Separándolos el Slayer de Hierro exigiría por todos una explicación.

—¿Qué mierda pasa acá Juvia?

—Gajeel-kun. ¡Juvia es feliz! ¡Lyon-sama y Juvia están saliendo! —Con un Qué resonando por el gremio sorprendió a todos, incluso a la apostadora y bebedora Alberona que gritaba las apuestas estaban 10 el ganador era el afortunado de Un millón de Jewels.

Como si eso no le importara en lo más mínimo a los nuevos tórtolos que sacaban corazones y suspiros con solo verse, el Rival del hielo lo encaró.

—¡Tú no puedes salir con nadie de otro gremio!

—Me parece que estas muy equivocado Gray —quitando las manos del exhibicionista del cuello de su camisa y escondiendo a la maga en un abrazo—. Sherry sale con el de Blue Pegasus y eso no nos afecta en nada, además vine a unirme a Fairy Tail.

Y un qué con mayor fuerza resonó rompiendo cristales a su paso.

Pero tras las figuras de la pareja se mostraba una turba de gente, alertando a todos de un posible ataque y siendo confirmado con algo parecido a una esfera luminosa estampandose contra el Slayer del Fuego.

—¡Natsu-san! ¡Cuánto me alegro de verte! ¡Natsu-kun disculpa a Sting-kun es muy torpe! ¡Fro piensa lo mismo! ¡Natsu-sama! ¿Se encuentra bien? —Las voces mezcladas de los miembros de Sabertooth fueron de inmediato reconocidas por todos mientras trataban de reanimar al caído.

De un momento a otro el gremio que de por si era ruidoso y desordenado ahora con las visitas sorpresivas, lo era a la décima potencia.

Golpes, ataques, gritos, reclamos, personas que se refugiaban en lo que pudiesen para no salir tan heridos de esa guerra.

Una enorme figura negra interrumpió aquella masacre, golpeando a todos los que pudiera con su puño cerrado y en ese momento temblaron ante el castigo.

—¡Mocosos descerebrados! —Makarov junto a Jura y otros miembros del consejo como escoltas al centro del lugar— ¡Ni un maldito momento y ya están rompiendo todo!

¡Callen y escuchen! —Y todos le prestaron atención al maestro— Por orden del consejo Fairy Tail debe tener a los magos más fuertes de Fiore en sus filas. —los murmullos no cesaron en ningún momento— Han decidido que los 10 magos santos estemos en el consejo como representantes de ustedes, por eso mismo he decidido dejar el puesto a Laxus.

Y ahí fue cuando una lluvia de quejas, insultos, reclamos y más inundaron de nuevo el lugar.

Lo único que pudo hacer de nuevo el maestro fue parar al Slayer de fuego que amenazaba con iniciar una revuelta.

—Maestro —Levy levantó la mano y con ayuda de Panther Lily subió lo más posible a él, cuidando de no mostrar más de lo debido.— ¿Qué pasará con los débiles? ¿Cómo será el examen S?

—¡Sí viejo! Estábamos a punto de hacerlo de nuevo.

Jura fue quien decidió hablar no sin antes hacer elevarse un montículo sobre él.

—Es una medida del consejo todo lo que está pasando. Tanto Sabertooth como Fairy Tail contienen a los magos más fuertes, por tal quieren tenerlos vigilados y juntos. En cuanto a los que desgraciadamente no cumplan con una media que será elegida con los poderes de cada integrante, serán transferidos a otros gremios.

—¡No es justo todos en Fairy Tail somos una familia! ¡Una muy unida!

—¡Acaso fueron una familia los que desertaron del gremio cuando se fue a pique! —En esa ocasión Max soltó sus pensamientos— ¡Ahora tenemos muchos magos desde que ganamos cada torneo pero seguro que ni siquiera se recuerdan sus nombres!

Los sobrevivientes del antiguo Fairy Tail miraron con melancolía el suelo, no estaban en desacuerdo con el mago de Arena pero no iban a hablar.

En cambio a la pareja le importaba menos que una mierda aquellas reglas impuestas, estaban tan felices al reencontrarse luego de tantos días separados.