Kawaii

Los personajes de Idolish7, no me pertenecen.

Este Drabble pertenece al Desafío "Libera tu Musa" del Grupo Evil.

Día 5: Revive un Recuerdo.

Personajes: Iori/Riku


Kawaii

Soltó el aire que aparentemente estaba reteniendo y observó con recelo la puertas frente a él. Por alguna razón estaba nervioso, tenía miedo de enfrentarse a la persona que se encontraba dentras de esa puerta.

«Vamos, no hay nada de que temer».

Se dió ánimos, mientras recordaba que con anticipación él ya había preparado todo lo que debía hacer.

Sí, por más sencilla que era su tarea, él preparó cada detalle para no fallar.

Compró el objeto que mejor le ayudaría, pensó en el escenario perfecto, también planeó las palabras exactas que diría e incluso, ensayó los movimientos corporales que haría; todo con tal de que ni el más mínimo detalle estropeará el momento.

Todo ese minucioso plan lo hizo para estar satisfecho con él mismo; porque él era así, el típico chico analítico, organizado y hasta reservado que planea cada detalle con tal de no fracasar en nada de lo que hace.

En efecto, por eso lo hizo. El hecho que Nanase Riku estuviera triste y el resto del grupo lo quisiera alegrar, no tenía nada que ver.

Podía sonar frívolo, pero a él no le importaban los problemas emocionales que Riku tuviera, pues ya están acostumbrado a los lloriqueos y suspiros que Nanase soltaba cada vez que veía o escuchaba alguna noticia de Trigger, o mejor dicho de —su mellizo— Tenn Kujo.

Si pensaba de ese modo, ¿Por qué estaba allí? ¿por qué también intentaba hacerlo sonreír?

«Obvio. Porque Nanase es el centro y si él cae, todos caemos.»

Se dijo, aunque ni él se lo creyó. Ya que aunque no lo demostrará con acciones, ni palabras a él le importaban sus seis compañeros y manager por igual. Porque eran un grupo y como tal debían de permanecer unido.

Además el caso de Riku era especial, ya que de entre todos lo chicos que conformaban Idolish7, el pelirrojo era el que poseía los gestos, acciones y voz más lindos de todos: y a él desde niño siempre le han gustado las cosas lindas.

También sumido en sus pensamientos estaba que no se percató que la puerta frente a él se abrió, apareciendo por ella el culpable de que en esos momentos estuviera sin saber qué hacer.

—¿Iori? —cuestionó Riku, al ver a el menor de los Izumi de pie frente a la puerta de su habitación.

Él susodicho parpadeó confuso. ¿Qué debía de hacer? Claro, entregar el objeto que había comprado.

—Toma. —Le entregó una pequeña bolsita de papel que traía entre sus manos, mientras un leve sonrojó cubría sus mejillas.

—¿Para mí? —cuestionó, pues resultaba extrano que Iori le estuviese dando algo.

—Para quién más. —Por más que lo intentó, no pudo sonar amable.

—Gracias.

Sin perder más tiempo. Iori dió media vuelta y se alejó de Riku. Para no avergonzarse más, no quiso ver la reacción de Riku al ver el pequeño y lindo objeto que le regaló, sólo se conformaban con saber que él también pudo tener un buen detalle con su amigo y compañero.


Notas...

1. Nunca pensé que terminaría escribiendo de los personajes de un juego/Anime; sin embargo estos chicos tienen situaciones peculiares, entre otras cosas que inspiran.

2. Supongo que para este género, lo más recomendable era el Sogo/Tamaki... pero como voy contra el sistema XD me animé con ellos para variar.