Disclaimer: nada de esto es mío, como todos sabemos esto es de J.K. Rowling, yo solo le pongo imaginación y los posibles personajes que no sean de ella me pertenecen solo a mí… En español entendible, no me demanden.
(Hogwarts después de la guerra)
Fiesta en Hogwarts y todo el mundo mágico, todos celebramos la caida del Señor Tenebroso por Harry, esto era increible, un sueño que logramos hacer realidad, pero todo tiene su después del final feliz, Dumbledore, con la caída de él revivió, nadie sabe por qué pero mejor no preguntar (apareció en medio del Gran Comedor diciendo que su tumba estaba muy dura, que la siguiente la esperaba de algodón) después de él llegó Snape, con la ropa hecha arapos por las mordidas de Nagini y correando sangre, al verlo Poppy se levantó a curarlo y repararle la ropa, Dumbledore dió un discurso muy emotivo y al final nos pidió a todos los que participamos en la Guerra que volvieramos a clases lo más pronto posible, dicho esto se puso a reparar el castillo.
La sala que más trabajo llevó reparar fué la de Menesteres, por que llevaba la colaboración de magos muy poderosos, pero en menos de dos días ya estaba lista, ahora tenía dos entradas, una en el séptimo piso y otra en el tercero, la podían usar más de una persona al mismo tiempo si deseaban salas aparte o podían estar juntos si deseaban la misma sala; pasaron varios días de fiesta y a la vez de luto en el castillo, el día 10 después de la Guerra en la torre de Gryfindor espués de un día de fiesta, todos tomaron mucho sobretodo Ronald que se tomó un par de Whisky de Fuego de más, estaba sola en la sala de los Menesteres y me vino a buscar, deseó una sala donde yo estuviera, entró, me arrinconó a una pared e intentó besarme, le correspondí al principio hasta que sentí el sabor a alcohol, traté de correr pero el seguía intentándolo, grité, muy fuerte, en ese momento llegó Dooby y que Draco Malfoy, ambos me escucharon, gracias a Dios no pasó nada más para arrepentirse, sinó no sé qué hubiera pasado (N/A: siempre quise a Hermione amiga de Malfoy) ellos me sacaron de esa sala batiéndose a duelo con Ron, me llevaron a la Enfermería, Draco habló con el director aunque él no tuvo el corazón de expulsarlo alegando que "la guerra deja traumas en todos, así se manifiesta el trauma del señor Weasley", acepté que él estuviera en el castillo mientras no tuviera que verlo, Draco y Harry estuvieron conmigo todo el tiempo, hasta las navidades que Draco se fue con su madre (a su padre lo besó un dementor) y Harry con su padrino (Snape logró sacarlo del manto negro) y estuve sola esos días, me fijé que Weasley no dejaba de seguirme, me volteé para enfrentarlo.
- Maldita sea Ron, déjame en paz- le dije a mi futuro ex novio.
- Pe pero Hermione, creí que querías hacer el amor conmigo- avergonzado, Ronald trató de explicarme.
- Jamás, jamás Ronald Weasley te me vuelvas a acercar, no te lo voy a perdonar nunca.
- Hermione perdóname, mi intención no fue esta.
- No, solo llegaste borracho e intentaste pasarte conmigo LAR-GA-TE.
- Granger, ¿qué son esos gritos?- Salió muy enojado Severus Snape salió de su despacho- Está castigada de inmediato y usted Weasley, si no puede mantener sus manos alejadas de una mujer e intentar no violarla lo quiero lejos de mí, ah, 20 puntos menos de Gryffindor a cada uno por esta escenita, pase Granger, no tengo toda la vida.
- Si señor- respondimos ambos al mismo tiempo.
Entré todavía muy enojada con Snape, abracé mis brazos como tratando de defenderme de algo que había yo tenido la culpa (los gritos) y el profesor estaba pisándome los talones, me senté en un pupitre en su aula, nunca me había parecido más acogedora que ahora, por que cuando él salió sentí que me volvia el alma al cuerpo, dejaba de ver a Ronald, el pupitre estaba en frente del escritorio del profesor Snape y esperé a que él decidiera sentarse a hablarme.
-Señorita Granger- se volteó muy serio a observarme.
-Si profesor Snape.
-Levántese de ahí, tiene todos estos calderos de mocosos de primero, ¿qué espera?, póngase a trabajar YA.
-Sí señor.
Agradecí ese trabajo que me había impuesto, me dejaba poco espacio a mi activa mente de pensar qué me había tratado de hacer Ron.
-Entonces señorita Granger, cuénteme que fue lo que pasó ahí.
Traté de ignorarlo para no volver a pensar en eso, tallé más fuerte sobre el caldero que estaba limpiando, al parecer algún alumno de primero le había puesto más huevos de dragón de los debidos.
-Señorita Granger, ¿acaso usted es sorda?- me dijo él un poco mosqueado.
-No señor-respondí- escuché perfectamente.
-Entonces, ¿por qué no me responde?
-Señor, ¿comprendería si no quiero hablar?- le pedí a Merlín santo que dijera que sí.
-Está bien, pero usted comprende que el no responder corresponde a una semana más de castigo, es suya la decisión.
-Sí señor, prefiero lo segundo- le agradecí a Dios este pequeño milagro de que el murciélago de las mazmorras, como Harry y Ron decía, no me gritara.
-Granger- me llamó- tenga, esta poción es para dormir sin soñar, a una mujer después de lo que le pasó o intento de eso- dijo un poco seco- es lo más útil que le puedo dar- lo dijo con total indiferencia, tratando de que no se le viera la preocupació, no sé por qué este hombre aunque es un misterio para muchas yo podía distinguir varios sentimientos de él.
-Gracias señor- lo volví a ver como si en frente mío Merlín reviviera, aunque sabía que sentía él estaba muy extraño conmigo para ser él.
Pasó media hora, todo en silencio, solo interrumpido por el sonido de el cepillo para limpiar el caldero y el fuego de la chinenea que él acababa de encender por el inmenso frío del lugar, y ese bendito silencio fue interrumpido por un ruido muy grande, cuando dejó de sonar Snape con cara de pocos amigos volteó a verme.
-Señorita Granger- me llamó Snape muy preocupado.
-¿Si señor?- respondí sacando la cabeza del caldero que estaba limpiando.
-Retírese, regrese mañana después de cenar- me dijo Snape con cara de mucho dolor.
-Señor, ¿se encuentra bien?- me acerqué a verlo, tenía los ojos llenos de preocupación, aunque en esos ojos negros no se podía distinguir mucho una emoción de la otra.
-Sí Granger, estaría mejor si no tuviera que ver su carota todos los días, ahora LARGUESE YA DE MI DESPACHO.
-Sí señor- salí demasiado ofendida como para voltearme a verlo.
Me sorprendí de la actitud de él, al principio me trató demasiado bien para ser él y después de hizo corrida del aula, ¿por qué?, pero lo que me tenía más preocupada era la cara de dolor que tenía él, llegué a la torre, hasta ese momento pude sentir el frío que tenía, el jersey era muy delgado, blanco, el color no ayuda mucho para detener el frío (N/A: yo vivo en el trópico, así que no estoy segura de eso), entré y me detuve a observar el fuego que estaba en la chimenea de la sala común, me senté y pensé.
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-Fin del cap-
Si quieren saber que es lo que le pasa a Snape y él por qué de este fic manden review, ya sea para decirme que está feo y mandarme un crucio, para darme consejos de cómo seguirlo o para decirme algo bueno. Pura vida….
N/A: Cuando trato el tema de una violación o el intento de ella no lo hago superficialmente, yo sé que está sintiendo Hermione en ese momento (odio, rabia, ganas de no verlo ni a él ni a nadie, culpa) en esos pasos quiero llevar la historia... No va a ser triste, por que si algo aprendí es que siempre hay un final feliz para eso =)
