Advertencia: Lucky Star y sus personajes no me pertenecen, sino al insigne Kagami Yoshimizu. Yo solo espero por el manga completo y por una segunda temporada del anime :)
El nacimiento de la bestia
Misao: ¿En serio me perdí de todo esto?- la morena estaba boquiabierta al ver las clases del día anterior.
Ayano: Es una lástima que estuvieses enferma, porque todo esto irá para el examen que viene el próximo martes- explicaba la pelinaranja tratando de calmar a su eterna amiga.
Kagami: ¿Pero cómo es posible que ni siquiera se te haya ocurrido llamar, Kusakabe?- preguntó fastidiada la chica de coletas.
Misao: ¡Vamos, no seas así, Hiiragi!- la colmilluda trata de abrazar a la tsundere, pero ésta fácilmente la esquiva.
Kagami: No quiero tus abrazos, Kusakabe- dijo algo enojada la tsundere que escuchaba sonar el timbre-. Vuelvo luego, y creo que deberías ayudarla- esto se lo dice a la pelinaranja.
Ayano: De todas maneras tengo pensado hacerlo, así que no te preocupes- sonríe la más tranquila de las tres.
Misao: ¡No, Hiiragi!- suplica de forma muy dramática desde el suelo- Necesito de tu ayuda, no me puedes dejar.
Kagami: Pues mira cómo te dejo- responde la pelilila sin voltear a ver a la morena, dejando finalmente el salón.
Misao: ¡Eres mala, Hiiragi!- gritaba desde el suelo la morena.
Ayano: Vamos, que tenemos que comer y estudiar juntas para el examen- propone la pelinaranja con la comida de la colmilluda en la mano-. Tenemos que esforzarnos bastante si queremos coincidir en la universidad después de graduarnos.
Misao: Tienes razón, Ayano- suspiró la morena-. Ayúdame con esta, que no la entiendo para nada- señala una ecuación que estaba entre los apuntes de su amiga.
Ayano: Esta está un poco difícil, pero igual la vamos a estudiar juntas- dice sonriente la pelinaranja.
Misao: Contigo aquí, sin duda lo lograremos- dice en tono dramático mientras recibe su comida.
Salón 3-B
Tsukasa: Hola onee-chan, reservé tu asiento- saluda efusivamente la cuarta hermana.
Miyuki: Bienvenida, Kagami-san- saluda con cortesía la chica de lentes.
Kagami: ¿Y dónde está Konata?- se extrañó la chica de coletas.
Miyuki: Konata-san está en casa- explicó la pelirrosa-, llamó a Kuroi-sensei para decirle que estaba enferma, por lo que hoy no vino.
Kagami: Seguro que esta tarde me pedirá los apuntes por teléfono- dice mientras se prepara para comer.
Tsukasa: En realidad teníamos pensado que podríamos visitarla esta tarde y ayudarla, onee-chan- la pelilila mayor casi tira su comida al oír a su hermana.
Kagami: ¿En serio?
Miyuki: Será divertido pasar un rato por la casa de Konata-san para estudiar y hacer cosas por el estilo- sonríe entusiasmada la chica moe.
Tsukasa: Además, Yu-chan me dijo que podría acompañarnos para ver a Kona-chan- decía la pelilila menor mientras bebía un jugo-. También dijo que vendrían con nosotras unas amigas de ella, me refiero a Minami-chan y Hiyori-chan.
Miyuki: Ellas tienen pensado estudiar juntas esta tarde en casa de Konata-san al igual que nosotras, por lo que no creo que sea una mala idea ir todas juntas- decía tranquilamente la pelirrosa.
Kagami: Supongo que no estaría mal estar allá entonces- suspiró la tercera hermana-, si Konata no se dispone a estudiar, lo cual considero muy probable, al menos tal vez me preste algunos juegos que me había prometido.
Tsukasa: Será divertido- sonríe abiertamente la miko menor.
Residencia Izumi, después de clases
Las seis chicas tuvieron algunas dificultades para llegar, debido a problemas técnicos en el autobús que habían tomado, pero al final lograron llegar a su destino. Tal como la pelirroja les habría indicado, Soujiro no estaba en casa, cosa que aliviaba a Kagami.
Hiyori: Vamos a empezar nuestro estudio- la pelinegra empieza a sacar sus cuadernos.
Miyuki: Vamos, Tsukasa-san y Kagami-san- la pelirrosa sube de primera las escaleras.
Las seis chicas se dividen en dos grupos; uno que va a la habitación de la otaku, y el otro grupo que estudiaría en la habitación de la niña de coletitas.
Yutaka: Más tarde les llevaré chocolate y galletas ¿les parece?- dice al grupo de las amigas de Konata.
Tsukasa: Es una buena idea, Yu-chan- sonríe la miko menor.
Hiyori: Oh, se me olvidaba algo- recuerda la dibujante-, necesito tomar unos medicamentos ahora mismo.
Yutaka: ¿Medicamentos?- se extraña la pelirroja- No me digas que estás enferma, Hiyori-chan.
Hiyori: N-no exactamente- dice algo nerviosa la ojimorada-, es sólo un medicamento prescrito y nada más.
Yutaka: Hay agua por si lo necesitas, entonces- la pelirroja va su habitación, donde ya se había instalado la peliverde.
La pelinegra se dirige a la cocina, donde se sirve un vaso con agua para tomar el mencionado tratamiento, pero cuando revisa su maletín, la chica descubre que no tenía más y entra en pánico.
Hiyori: ¿Qué ha pasado? ¿Y mi tratamiento? Necesito de eso para mi problema psicológico, o de lo contrario me podría ir mal, tal como lo había dicho el doctor aquella vez- se decía a sí misma la pelinegra que buscaba en su maletín al derecho y al revés.
La pelinegra no tenía ni idea de lo que ocurriría si su hora se pasaba y no tomaba sus medicamentos, pero tal vez eso era algo que iba a saber muy pronto.
Habitación de Konata
Konata: Hola, ¿cómo están, chicas?- pregunta una peliazul que estaba tumbada en la cama con una bolsa de hielo en la cabeza.
Kagami: Realmente te ves mal, Konata- dice algo preocupada la tsundere.
Konata: Gracias, hago lo que puedo- dice burlona y después tose.
Kagami: ¡Estoy hablando en serio, tonta!- se enfada la pelilila mayor.
Miyuki: Aquí tengo las clases de hoy, Konata-san- la pelirrosa saca sus cuadernos del maletín.
Konata: Gracias, Miyuki-san- la otaku tose un par de veces-. Realmente sabes cómo complacer a una chica.
Miyuki: Etto... ¿Gracias?- dice nerviosa la pelirrosa ante aquellas palabras tan extrañas.
Kagami: No deberías decir ese tipo de cosas, Konata- regaña la tsundere-. Realmente quisiera que hablaras como un ser normal alguna vez, tonta.
Tsukasa: Vamos onee-chan, no seas tan dura con Kona-chan, que está enfermita- dice la miko menor mientras sacaba sus cuadernos.
Miyuki: A lo mejor Konata-san sólo está delirando, es algo muy común cuando se tiene una fiebre tan alta- dice comprensiva la chica de lentes-. Tenemos que darle todo nuestro apoyo para que se pueda mejorar, Kagami-san.
Kagami: Lo sé, sólo me altera un poco cuando Konata dice esas cosas tan raras- se sonroja la chica de coletas.
Konata: No te preocupes Kagami-sama, que tú siempre serás mi favorita- dice la otaku aparentemente dormida.
Kagami: ¡No te hagas la dormida, Konata!- se enfada la pelilila.
Habitación de Yutaka
Yutaka: Ya está todo para que empecemos a estudiar, Minami-chan- sentencia muy feliz la chica de coletitas.
Minami: Sí, sólo falta esperar a que Hiyori venga- se sienta tranquila la peliverde.
Yutaka: Pero creo que Hiyori-chan se está tardando mucho, ¿no crees, Minami-chan?
Minami: Yo también me pregunto qué es lo que estará haciendo- responde mirando a su amiga.
Por un momento ambas amigas empiezan a mirarse fijamente, y de pronto se sonrojan bastante, pero ninguna de las dos hace intento alguno por cortar el contacto visual.
Yutaka: T-te ves b-bien el día de hoy, Minami-chan- tartamudea la chica de coletitas.
Minami: Etto... tú también te ves bien, Yutaka- dice muy roja la peliverde.
Yutaka: Gracias, tú también te ves bien, Minami-chan.
Minami: Y-ya... lo habías dicho, Yutaka- recordó la chica alta.
Yutaka: Oh...
Detrás de la puerta de la habitación de Yutaka
Hiyori: Sí, sigan así, que así me gusta- susurraba una extraña pelinegra que estaba echando espuma por la boca y dibujaba de forma muy exagerada, casi como si escribiera en una Death Note.
La pelinegra de pronto emitía un aura bastante sospechosa y sus ojos chispeaban mucho más que en su modo dibujante ordinario. Su mano dibujaba a velocidad inaudita cada boceto en la que aparecían escenas de la peliverde y la pelirroja en diversas situaciones pervertidas, incluso había un par de escenas hentai entre las inconscientes víctimas, pero todavía no era suficiente.
Hiyori: "Más, quiero más chicas. Tal vez las senpai me den lo que quiero"
Habitación de Konata
Konata: Debemos derrotar a Madara, que está por reflejar su ojo en la luna...- hablaba dormida la otaku que había tirado la bolsa de hielo.
Tsukasa: ¡Kona-chan!- se quejaba la pelilila menor- Todavía no había leído ese capítulo del manga, me acabas de hacer spoiler- hace un puchero enojada la miko menor.
Miyuki: ¿De qué manga hablas, Tsukasa-san?- pregunta inocentemente la chica de lentes.
Kagami: No preguntes, Miyuki- aconseja la chica de coletas-. Konata está hablando de otra de sus frikadas seguramente.
Tsukasa: Claro que no, onee-chan- replica la gemela menor-. Naruto es visto por medio mundo.
Konata: No, Zetsu negro es el hijo de Kaguya...- la peliazul tira su sábana al suelo con una pierna.
Tsukasa: ¡No más spoiler, Kona-chan!- lloriqueaba la miko menor.
Kagami: Se supone que estamos estudiando, no prestes tanta atención a lo que está balbuceando Konata- dice de mala gana la tsundere.
Konata: Los dos hijos del Rikudou Sennin se llamaban Indra y Ashura...- la pelilila menor empieza a llorar de frustración.
Miyuki: Konata-san es muy dinámica cuando duerme- dice sonriente la pelirrosa.
Kagami: Yo diría que es algo ruidosa- suspira la miko mayor-, francamente no me animaría a dormir aquí hoy.
Konata: Eres mía, sólo mía...
Kagami: ¡No digas esas cosas tan raras!- explotó la pelilila mayor.
Tsukasa: Tranquila onee-chan- trata de apaciguar a su gemela-, pareciera que estuvieras celosa de quien sea que está hablando Kona-chan.
Kagami: ¡E-eso no es verdad!- se defiende muy roja la tsundere- Es solo que me molesta escucharla decir todas esas tonterías sin sentido.
Miyuki: A mí no me molesta en absoluto- dice animada la pelirrosa.
Tsukasa: A mí tampoco me molestaría, si tan solo Kona-chan no hiciera tanto spoiler.
Konata: Obito... has muerto como un héroe...
Tsukasa: ¡No más spoiler, Kona-chan!
Detrás de la puerta de la habitación de Konata
La dibujante estaba descarrilada echando espuma por la boca, dibujando como desgraciada sus bocetos que en algunos casos se veían escenas de orgías entre las cuatro espiadas, y sus ojos estaban a punto de salir de sus cuencas por la atención que prestaba a sus víctimas.
Hiyori: "Cuatro chicas lindas encerradas dentro de una habitación... una de ellas enferma... las demás obligadas a hacerle cosas pervertidas para hacer que se cure. Este doujin estará de leyenda. Y todavía tengo otras ideas para estas cuatro que ahora son mis conejillas de indias, jajajajajajajaja"
Nadie dentro de la casa de Konata tenía idea alguna de lo que estaba ocurriendo, pero en ese preciso instante se había dado el nacimiento de una nueva faceta más maquiavélica y pervertida de Hiyori Tamura, manifestada ahora como una dibujante compulsiva que sólo sabe ver todo cuanto hay enfrente como una escena yuri superecchi o yuri hentai tras otra. En cuanto a Minami y Yutaka, y Miyuki, Tsukasa, Kagami y Konata, muy pronto sentirían el verdadero alcance de ese estrago.
CONTINUARÁ...
He aquí el primer capítulo de esta historia de Lucky Star, la primera de más de un capítulo que publico, y realmente espero darle bastantes más, deséenme suerte por favor :D. Reviews, favoritos y follows serán bien recibidos.
Por cierto, antes de despedirme, mis más sinceras disculpas para todos/as aquellos/as a quienes hice spoiler, espero que no vayan a buscarme para matarme XD.
Hasta otra
