Disclaimer: Los personajes de Inuyasha no me pertenecen, son propiedad de Rumiko Takahashi.
Notas del autor: Regalo para Kiara, gracias por tu infinita paciencia y por todo lo que has hecho por mi. (L)
Canción recomendada: Amor primero- Reik
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Sin luna
"Has llenado de mil emociones mi alma y mi ser. Y eres tú lo que más quiero, soy feliz porqué te encontré"
El ahora pelinegro exhala un suspiro con hastío, odia esas noches del mes donde la luna se esconde y su propia naturaleza híbrida lo abandona. Se odia a si mismo por los sentimientos humanos que lo embargan más fuerte que en ningún otro momento, aunque si es sincero, sabe que esos sentimientos son igual de fuertes con sus otras dos partes.
La razón ni el mismo puede explicársela, de lo único que es consciente es que desde hace varias lunas su corazón humano se regocija al verse libre y expuesto a los sentimientos que en otro momento se reprimen dentro de si.
—Inuyasha.
Ella lo está llamando, como siempre lo ha hecho desde que retiró la flecha que lo aprisionaba en el árbol. Siente como el cuerpo cálido lo rodea desde su espalda, colocando los brazos femeninos en su cuello. La respiración se entrecorta un segundo por la proximidad, no puede evitar sentirse tenso ante el contacto.
No es más que un débil humano y como tal, se encuentra indefenso al no contar con sus armas naturales. Y odia esa sensación, así como muchas otras que empiezan a surgir desde el fondo de su corazón, la más fuerte y que casi puede saborear: anhelo.
Él anhela poder ser al menos la mitad de importante en la vida de esa chica de lo que ella significa en la suya.
—Sabía que te encontraría aquí— ella sigue hablando, ignorado los pensamientos que en ese momento mantienen al humano de ojos grises preso de sus emociones.
—Kagome—susurra su nombre apretando los puños ligeramente, si algo pasa en ese momento, si alguien los ataca no serán más que un bocadillo en las fauces de un depredador.
Aun así, a pesar de que ella sabe cuanta vulnerabilidad corre por sus venas está ahí, acompañándolo.
—No tienes que pasar esto tu solo— su voz es suave al emitir las palabras, recuesta la mejilla en la espalda masculina mientras un suspiro sale de sus labios y una lenta sonrisa va apareciendo en sus facciones, como sabe que él va a replicar continúa—; nadie quiere estar solo. En el fondo, todos queremos a alguien que esté a nuestro lado y yo estoy contigo.
Es ahí cuando el momento se hace perfecto, no hace falta palabras para explicarse lo mucho que significan. El silencio los envuelve pero eso no los molesta, porque no hay nada que decir si sus cuerpos hablan por sí mismos en un lenguaje que sólo un corazón llegará a entender.
Su corazón humano se regocija mientras que su conciencia de demonio en lo mas profundo de su inconsciente sonríe, porque sólo hay una persona capaz de llegar a amarlo en todas sus facetas y es la chica que ahora lo sostiene como la cosa más hermosa y frágil que pudiera existir.
Y es también en ese preciso momento que Inuyasha encuentra paz en esa noche sin luna, porqué la chica que está a su lado no lo abandonara y nunca más estará solo.
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Puedes comentar, no muerdo
M.J.