Algo corta, pero espero y les agrade (:

Sometimes dreams just come true...

Me encontraba en algún parque, había árboles por doquier, un camino y un par de juegos para niños pequeños.

Estaba recargada bajo un árbol, era una linda tarde, tenia en mi mano una manzana y leía cómodamente. El sol estaba bajo, el clima era agradable, los pajarillos volaban de los árboles. Era un escenario perfecto el que estaba disfrutando.

Un golpe en mi cabeza interrumpió mi lectura, baje mi libro y vi a un chico que se acercaba.

-Lo siento, estas bien? – Me pregunto mientras se acercaba.

Encontré el objeto con el que había sido golpeada, una pelota de hule de color rojo.

-Si, no te preocupes. – Respondí, mientras le entregaba la pelota.

-La lance a mi perro, pero el muy tonto salio corriendo al otro lado. – Dijo mientras doblaba sus piernas y se apoyaba en ellas.

-Solo leía, no hay problema. – Conteste regalándole una sonrisa antes de volver a mi lectura.

-Me agrada Stephen King, he leído un par de sus libros y creo que son buenos. – Añadió, mientras bajaba mi libro lentamente y lo volvía a mirar.

Un labrador se acerco corriendo hacia el y se hecho en el piso justo enseguida de el, acto seguido el se sentó y sonrío.

Puse mi libro en mis piernas y estreche mi mano.

-Vanessa.

-Lindo nombre para una linda chica. – Contesto y tomo mi mano.

Abrió su boca y justo cuando iba a decir algo…

-Ya es hora Vanessa! Si no te duchas en este momento, entrare al baño y no saldré. – Dijo Alex encendiendo la luz.

Hice una mueca y me tape la cara.

-Hablo en serio, vamos, hoy te levare yo a la escuela, mama tiene una junta.

Me destape y me levante viendo a Alex cepillando sus dientes mientras estaba recargado en la entrada de mi cuarto.

-Buenos días, cara de plátano. – Dije mientras le aventaba una almohada a la cara y salía de mi habitación, el solo me hizo una mueca y se fue de ahí.

Me duche, me cambie, desayune y después Alex me llevo a la escuela.

Parecía un día lindo. Entre a la escuela y me dirigí a mi casillero, saque un par de libros y camine al salón de clases.

Mientras entraba, choque con alguien que iba de salida.

-Lo siento. – Dije inmediatamente, mirando a la persona con la que me había topado.

Ashley Johnson. Malo. Me odiaba desde que tengo memoria, y ella no me agrada mucho a mí que digamos.

-Oh vaya, si es la pequeña Wilson… - Dijo, sonriendo macabramente. – Fíjate por donde caminas, idiota.

Se burlo, me empujo y después salio del salón con sus compañeras riendo.

-Si claro. – Bufe y entre al salón.

Me senté en una de las bancas y Andy se acerco.

-Solo ignórala.

-Lo se, no es mucho problema Johnson. – Conteste.

-Bien chicos, buenos días! – El profesor de historia hizo presencia y todos se sentaron.

El día transcurrió y fue bueno, un par de miradas de odio de Johnson, pero nada mas.

Alex me recogió y fuimos a comer a McDonalds.

-Que tal tu día, Nessa?

-Lindo… - Conteste. – Aunque, me tope con tu ex, me miro con odio y ya.

-Vaya, aun te molesta?

-Nahh, solo miradas de odio. Creo que hicimos un progreso.

Alex sacudió su cabeza y se rió.

-Bien, la golpeare si te hace algo de nuevo.

-Si claro, Alex al rescate! – Dije riéndome.

El termino riéndose también mientras comíamos un par de hamburguesas.

Alex era mi hermano mayor y el único que tenia, nos llevábamos bien. Me agradaba pasar tiempo con el, ya que mis padres se la pasaban el día trabajando.

-Quieres que pase por ti después de tus clases? – Pregunto mientras conducía..

-No, pienso pasar a la tienda de libros y después veré si salgo con Andy a algún lado.

-Esta bien, hoy tengo partido, así que supongo que nos veremos mas tarde.

-Claro, algún libro que quieras? – Pregunte sarcásticamente. El no leía como yo.

-Si claro, el nuevo comic de Batman estaría bien.

Me reí un poco y después baje del auto al llegar a la escuela de idiomas.

-Bien, te veo después, adiós.

-Adiós Nessa, que te vaya bien.

El se fue y yo entre a mis clases de francés.

Al salir llame a Andy pero no contesto, entonces opte por ir por mi libro y después ir a casa.

Camine a la tienda que estaba a un par de cuadras de la escuela y entre.

-Buenas tardes. – Escuche a la señora de la tienda saludando al entrar.

-Buenas tardes. – Conteste.

Se acerco un poco a mí y me sonrío.

-Oh vaya, si tu eres la chica que viene seguido, que puedo hacer por ti?

-Solo busco algo nuevo que leer. – Conteste.

-Tenemos un nuevo libro, esta por haya. – Señalo mientras me acercaba.

Era algún libro de cuentos, lo que no me convenció mucho. Busque por toda la tienda y al final salí de ahí con un libro reciente de Stephen King.

Por alguna razón me recordó a mi sueño, en el que estaba en el parque leyendo.

Pague y Salí de la tienda. Guarde el libro en mi mochila y camine regreso a casa.

Al caminar pase por un parque, decidí pasar por ahí mientras caminaba. Árboles, bancas, flores, varios caminos era lo que se veía por ahí.

Observe a un par de chicos que corrían con sus perros y al final me fui de ahí.

Regrese a casa, termine lo que tenia que hacer y después me fui a dormir.

Esta vez caminaba mientras leía, podía sentir una brisa calida en mi rostro y escuchaba a los pájaros cantar desde sus árboles.

Pronto de nuevo mi lectura se vio interrumpida, esta vez por mi culpa, ya que había chocado con alguien y había tirado mi libro.

Me agache rápidamente a recoger mi libro, cuando me golpee con algo. Voltee y ahí estaba de nuevo, el chico al que había visto anteriormente con su perro.

-Stephen King, eh? Creo que te vi ayer por aquí.

Me levante y me entrego mi libro.

Lo tome lentamente y asentí.

-Creo que si, viniste con tu perro no?

-Oh, te refieres a Mate? Si, el esta aquí. – Dijo mientras giraba.

El labrador se acerco a mí y lambió un par de veces mi pierna, sonreí y después me agache para acariciarlo un poco. Después me volví a parar.

-No crees que caminar mientras lees es un poco… Peligroso? – Pregunto.

-Yo… Bueno, no vi a nadie así que decidí caminar un poco.

-Ya lo veo. – Contesto, poniendo una correa en su perro. – Y bien, Vanessa, vienes aquí seguido? No te había visto antes, aparte de ayer.

-Yo… - Voltee mi cabeza a un lado, observando el lugar. – Bueno… Eso creo, no lo se.

Conteste y después gire mi cabeza de nuevo a donde estaba el chico.

Al mirar ya no había nadie, me quede parada ahí, girando mi cabeza buscándolo, cuando de nuevo desperté.

Al abrir los ojos, me senté en la cama pensando en mi sueño.

Era raro, generalmente no soñaba la continuación de mis sueños nunca. Sin embargo había vuelto a soñar exactamente lo mismo, aunque de una manera diferente.

Decidí no pensar en ello y alistarme para irme a la escuela.

Toda la semana estuve soñando lo mismo. Me encontraba en el parque leyendo y siempre me encontraba con aquel chico y su Labrador.

Me preguntaba sobre que me gustaba leer, si no hacia otra cosa y justo cuando iba a continuar la conversación, desaparecía o me levantaba.

Nunca llegue a saber su nombre y la verdad me llamo la atención.

Le platique a Andy sobre mis sueños contantes con el chico y ella me dijo que alucinaba algún libro que había leído sobre algún chico y su fiel compañero. Pero que yo recordara, nunca había leído algún libro sobre un chico y un perro. Mucho menos un labrador.