Holiss, llevo tiempo dudosa de si montar esta historia o no. Pero por razones misteriosas de la vida, hoy me animé a montarla. Es el primer longfic Luna que hago, normalmente hago oneshots de esta pareja, pero bueno ¡Espero que les guste!

ONE PIECE NI SUS PERSONAJES ME PERTENECEN, PERO LA HISTORIA SÍ

Sin más que decir ¡A leer!


THE REALLY IMPORTANT

CAP 1

"FRACASO CONVENIENTE"

Me preparé mentalmente para cumplir la misión que me había encomendado Arlong. Tomé aire exageradamente para calmar ese cosquilleo que sentía en el estómago, que siempre aparecía cada vez que iba a comenzar una misión, quizás era excitación o tal vez nerviosismo, a la larga era algo poco importante. Solté el aire que había retenido y empecé a correr tan sigilosa como un gato, hasta que llegué a mi primer obstáculo. Me detuve frente a las altas rejas negras de hierro que protegían la sofisticada mansión, lancé una cuerda que se enroscó en una de las puntas permitiéndome escalarlas, el traje negro que consistía en un unos ajustados pantalones elásticos y una manga larga hacías más sencilla mi labor de camuflaje. La noche era mi mejor aliada

Desde la cima de la reja pude ver por escasos segundos que muchos guardias estaban vigilando todo el perímetro, eran como 4, bajé la reja con suma rapidez y me escabullí por los arbustos y decoraciones extravagantes, evadiendo así a los despistados guardias, el dicho "La vanidad es la perdición del hombre" vino a mi mente como anillo al dedo. El cosquilleo en mi estómago seguía presente, incomodándome. No era la primera vez que robaba, ni que me infiltraba en una mansión de ese tipo, no sabía por qué me sentía tan nerviosa, calmé un poco me mente alejando esos pensamientos y respirando profundo. "Todo saldrá bien" me dije a mi misma

Llegué sigilosa a uno de los ventanales principales, que gracias al cielo estaba abierto, me introduje en él, no hice ni un solo ruido por lo que ninguno de los guardias hizo mella en mi presencia, la primera fase había salido exitosa, ya estaba adentro. No pude evitar reír para mis adentros

Observé mí alrededor, no me sorprendió su interior. La casa era la típica de la gente adinerada, el gran salón que desprendía lujo por todas partes, los grandes cuadros que costaban millones con los que bien se podría abastecer un pueblo entero por meses, los adornos que eran importados de sitios exóticos. Nada fuera de lo común. No me detuve a verlo mucho ya que no podía correr el riesgo que me descubrieran así que me aseguré que no hubiera nadie cerca, ni cámaras que me observaran, no habían pisadas ni movimiento. Todo estaba seguro, confiada empecé a subir por las elegantes escaleras de caracol, por un momento me imaginé lo divertido que sería bajar esas escaleras con un bello vestido y unos tacones de gran longitud, sería como una reina presentándose ante sus admiradores

¿Por qué me estaba imaginando eso en medio de un robo? Me reprendí mentalmente para centrarme nuevamente en mi misión. Por lo que tenía entendido solo vivían 3 personas en esa casa Monkey D. Marrie, la señora de la casa, una mujer de alta sociedad, rica de cuna, elegante y hermosa. Su esposo Monkey D. Dragón, un hombre muy influyente y el dueño de las empresas Monkey. D y por último Monkey D. Luffy, el primer hijo biológico de la pareja según tenía entendido, la familia Monkey D estaba conformada por los morochos Luffy y Layla y un hijo adoptado que era el mayor llamado Ace, sin embargo, Layla estaba estudiando actualmente en Dresrossa y Ace se estaba encargando de toda la empresa familiar en el Nuevo Mundo. Así que el único que estaba con ellos era Luffy, el menor

Nuevamente supervisé que no hubiera nadie a pesar de que Arlong me había dicho que no habría ni un alma en la mansión, tenía que tener mucho cuidado, ser precavida no estaba de más. Para transitarme mejor busqué las entradas de los conductos de aire, normalmente estaban ocultas detrás de los muebles o en el techo. Estaba en el pasillo así que seguramente debía de haber una cerca y ¡Bingo! detrás de una mesita de madera fina con un florero encima se podía vislumbrar. Aparté la mesita y destornillé la rendija para poder retirarla y así meter mi cuerpo adentro, volví a poner la mesita en su lugar, empujándola con las manos solamente y volví a atornillar la rendija. Era mucho más sencillo ir por los conductos de aire, después de todo no estaba segura si no habría una cámara en alguno de los pasillos, era la vía más segura

Me adentré por completo en él y lo recorrí, era bastante estrecho e incómodo, bueno, no podía esperar más, tuve que gatear con cuidado para no hacer mucho ruido, lo hice así hasta llegar a una de las salidas que daba a una habitación bastante lujosa como toda la casa, aunque parecía la de un chico de 16 o 17 años ya que estaba toda pintada de rojo y blanco, tenía varios posters de un cantante llamado "Soul King" había una guitarra de un color rojo brillante en la esquina y una cama sencilla aunque ridículamente grande con un cubrecama negro junto con unas cómodas, con facilidad podrían dormir allí 3 personas o quizás 4. Al frente había un escritorio inmenso con una computadora súper moderna y un gran armario color rojo brillante. Definitivamente desprendía lujo, pensé en continuar ya que mi objetivo era robar todas las joyas, en especial un anillo de oro puro que según tenía entendido iba de generación en generación en la familia y en ese sitio era improbable que lo encontrara lo más seguro es que estuviera en la habitación principal, pero para mí mala suerte la rendija de escape sobre la que estaba empezó a chirriar, eso era una muy mala señal. Intenté moverme rápido, sin embargo ya era tarde, cedió ante mi peso haciendo que cayera de sentón al suelo.

Evité gritar o soltar un chillido, aunque fue muy complicado ya que me había dolido el impacto y mucho. No pude terminar de recuperarme cuando la puerta empezó a abrirse. Pensé enseguida en esconderme bajo la cama pero para más mala suerte mía mi tobillo se había doblado retardándome el paso. Esto solo me pasaba a mi ¡Qué mala suerte! En abrir de ojos un chico de piel morena, cabellos oscuros y mirada divertida me estaba observando. No aparentaba más de 17 años, de seguro era el dueño de la habitación Monkey. D Luffy, solo tenía dos palabras en mi mente "Estoy Jodida"

Ya estaba preparada para que gritara, me metieran presa, se formara un escándalo social y Arlong decidiera acabar conmigo, aunque era culpa suya ¡El muy maldito me dijo que no habría nadie! Los sientes segundos fueron silenciosos y bastante tensos, no obstante, en contra de todo lo que había llegado a imaginar en mi mente el solo dijo…

-Hola Shishishi- como si fuera normal encontrase con una chica que ni conoces tirada en el medio de tu habitación con un esguince en el tobillo.

-Hola-respondí mecánicamente mientras mi mente trabajaba en una excusa decente que me pudiera sacar de esa situación

"Piensa Nami piensa"

-¿Cómo te llamas? - me preguntó acercándose a mi ¡Este chico está chiflado!

-Soy Namizou mucho gusto ¿Tú eres?- no me quedaba de otra que actuar con naturalidad y rogarle a Diosito que por favor ese chico no gritara

-Soy Luffy shishishi ¿Qué haces aquí?

No se me había ocurrido absolutamente nada y juraba que no era una mala mentirosa, al contrario. Solo me quedó como única opción decir lo primero que se me ocurrió

-Bueno lo que pasa es que se me cayó algo en esta habitación y los guardias me dejaron pasar para buscarlo- dije intentando sonar convincente, era la excusa más patética que había dado en toda mi vida, solo un idiota se la creería, solo me tocaba rezar, después de todo fue la única que mi mente logro crear en tan poco tiempo

El chico me miro con una mueca divertida, de seguro se estaba burlando de mi excusa antes de llamar a la policía

-Oh ¿Y qué fue lo que se te perdió?- me preguntó sin burla, sin sarcasmo, sin nada. Totalmente trivial

Me quedé perpleja ante la pregunta no distinguía si estaba probándome para ver hasta dónde podía llegar o simplemente era muy idiota, de todas formas reaccioné rápido y le señale el collar que llevaba en el cuello, el collar que me había regalado mi madre, era una simple cadenita de plata con un dije de una mandarina y un molino entrelazados

-Bueno ya que encontré mi collar es hora de que me vaya ¿No crees?-pregunté nerviosa

Intenté levantarme pero desgraciadamente me acordé tarde de mi tobillo, no pude evitar hacer una mueca, dolía demasiado. Cerré los ojos para hacer más llevadero el dolor

-Oyes ¿Estás bien?- me preguntó ¿Preocupado? definitivamente este chico es demasiado extraño

-Voy a llamar a Chopper para que te cure-anunció, mientras salía de la habitación

Yo me quede allí en el piso, lo primero que pensé fue en cómo escapar, al parecer no tenía intenciones de delatarme, pero aun así no me podía confiar, no podía confiar ni en mi sombra. Recorrí nuevamente toda la habitación con la mirada y no tardé mucho en encontrar la manera. El gran ventanal junto a la cama...

POV LUFFY

Estaba muy aburrido, mis padres habían ido a una reunión de trabajo en no sé dónde, no les preste atención, Zoro estaba entrenando y me botó de su casa stk amargado, Sanji estaba ayudando a su padre con uno de sus restaurantes y Ussop estaba con kaya

-Stk

Odiaba estar solo en esa casa resultaba muy aburrido y tedioso, pero era mejor que ir a las aburridas reuniones de mis padres. Entré a mi habitación, a lo mejor me podría divertir jugando PlayStation un rato mientras escuchaba música de Soul King "oh sí, no se oye mal" pensé sonriendo a más no poder, incluso podría asaltar la cocina más tarde. Una vez entre me encontré con una chica que estaba sentada o pudiera ser que estaba recostada en el medio de mi habitación, se veía agradable tenía un largo cabello naranja, unos ojos con una tonalidad parecida y piel pálida, no sé qué hacía allí, tampoco era muy importante ¿O sí? se veía buena persona, no sabía por qué pero algo me decía que no era mala. Así que ¿Qué importaba como había llegado? ¡Incluso podría divertirme con ella!

Me dijo su nombre Namizou y dijo que se le había perdido algo creo… No le preste mucha atención. La vi cerrar los ojos y hacer una mueca extraña. Vi su tobillo y estaba muy rojo y muy grande, decidí que lo mejor sería llamar a Chopper, él podía curar lo que sea. A lo mejor ella sabía Jugar PlayStation o cualquier otra cosa. Salí de la habitación para buscar mi celular

-Hey Chopper- lo llamé

-Hola Luffy, discúlpame ahorita no te puedo atenderte acaba de llegar un paciente de emergencia a la clínica- me cortó

Me quedé allí un momento ¿Por qué rayos todo el mundo estaba ocupado hoy?

Volví a mi habitación a ver que podía hacer, era un desastre colocando vendas y haciendo todo ese tipo de cosas, pero podía intentarlo ¿Qué tan mal podría salir?

-Oye Namizou...-la llamé pero ya no estaba y la ventana estaba abierta ¿A dónde se habría ido? Me acerqué a la ventana para ver si a lo mejor estaba cerca, pero nada había desaparecido

Solté un suspiro

-¡QUÉ ABURRIMIENTO!

POV NAMI

Todavía no lograba entender cómo había logrado salir ilesa de allí, pero gracias al cielo lo había logrado, sin embargo, no completé la misión, eso me traería problemas. Con mucho esfuerzo salí de la mansión sin ser detectada y me monté en mi moto que estaba oculta a las afueras. Me dolía el tobillo pero logré prenderla y arrancar sin muchas complicaciones

La noche estaba fría y oscura, las nubes cubrían el cielo, impidiéndome ver las estrellas, que fracaso de noche. El viento helado me pegaba en la cara a medida que subía la velocidad. Era tarde por lo que la carretera estaba desolada, no tardé más de 15 minutos en llegar a mi urbanización, una de las más adineradas de la ciudad. Arlong había decidido que fuera así a pesar de que la vigilancia del lugar a veces era un estorbo, después de todo frente al mundo era su querida hija, su única familiar, una niña sucia abandonada que había encontrado en la calle y había provocado un sentimiento de fraternidad en él, por lo que decidió acogerla y darle todo lo que tenía. Una falsa fachada que tenía que mantener para que nadie sospechara de mí y poder colarme entre las malditas familias adineradas, pudo haberse ahorrado la parte de que era de las sucias calles del peor barrio de la ciudad. Con esa fachada solo logro que fuera rechazada por los estúpidos ricos

El viejo hombre de la garita de seguridad me vio con desaprobación e incluso rechazo, estaba acostumbrada a esa mirada, ya me imaginaba que estaba pensando "Una puta niña mimada perdida en sexo y alcohol y quizá en drogas" No le dije ninguna palabra, el abrió las rejas y continúe mi camino ignorándolo por completo. Nadie en esa maldita urbanización me aceptaba, me veían como escoria, solo me toleraban por la influencia de Arlong, odiaba que me juzgarán por esa maldita historia de Arlong, pero solo los ignoraba después de todo no veía mucho a mis vecinos para satisfacción de ellos y mía

Subí a mi apartamento, era lujoso, como todos allí, sin embargo, no tanto como la mansión Monkey D. Tenía una amplia sala con paredes color crema y sofás de cuero color negro, incluso había uno en forma de L, en el medio había una mesita de cristal con algunas revistas de farándula. A la izquierda estaba la cocina toda empotrada y con el espacio necesario para cocinar algo cómodamente. Al fondo estaban las habitaciones en el pasillo, eran dos aunque yo solo ocupaba una. Ingresé a mi habitación cojeando con cansancio, era una habitación monótona, neutra, con paredes color blanco perla, una gran cama, un closet amplio, un gran televisor, un baño personal pequeño pero cómodo, una peinadora y un gran ventanal con vista a la ciudad, parecía más la habitación neutra de un hotel que la de un apartamento que ocupaba una universitaria.

No me había esmerado en personalizarla, después de todo no era mi hogar y que estuviera así de neutra me recordaba que era de Arlong y no mía. Busque mi kit de primeros auxilios y me senté en la cama para poner un poco de hielo en mi tobillo, el contacto me provocó escalofríos y un quejido de dolor. Apliqué una loción desinflamatoria y finalmente lo envolví en vendas con cuidado. Ya solucionado mi problema me di un relajante baño con agua caliente y me puse un camisón para dormir

Me tiré sobre el mullido colchón y las suaves sábanas de algodón, no pude evitar pensar en el castigo que recibiría por no haber completado la misión y en ese extraño chico, que me había permitido irme. Era una buena persona y una muy idiota también o quizás inocente, cosa que yo no era ni podía serlo mientras estuviera bajo las órdenes de Arlong, pero lo que más me impresionó fue su mirada, brillante, sin un rastro de discriminación, pura, completamente autentica. Lástima que el destino pusiera que lo conociera bajo esas circunstancias. Mis párpados empezaron a pesarme y mi cuerpo reclamaba descanso, decidí ceder ante él y dejarme caer en brazos de Morfeo dejándome como último pensamiento a ese chico con una sonrisa de oreja a oreja.


Muchísimas gracias por haber leído hasta aquí, discúlpenme si tuve algún error ortográfico. La verdad es que disfruté mucho haciendo este cap, aunque fue un poco complicado hacer la parte de Luffy, sé que no quedó como el Luffy original, pero creo que no quedó mal. Si hay algo que quieran decir ya sea una linda opinión como una crítica constructiva estaré encantada de verla. Sin más que decir ¡Nos leemos!