Rachel Berry jamás fue una persona a la que le gustara viajar en avión, sin embargo ahora estaba por abordar uno con destino hacia "su pasado" como ella decía, aunque en realidad solo se dirige hacia Lima, Ohio. Rachel era una famosa actriz que vivía en Nueva York desde hacía ya 6 años, era una morena, con hermosos y profundos ojos cafés, de altura promedio, bastante extrovertida y con un carácter de los mil demonios como le decía su mamá, ahora estaba por abordar el vuelo 13 con destino a Lima para una reunión de ex-alumnos de la academia Dawson Academy, a la cual Rachel no quería asistir pero ahora estaba allí buscando su asiento, asiento que encontró junto a un señor bastante robusto y su esposa que parecían ser bastantes amables.
El vuelo paso entre conversaciones que mantuvo con el hombre de nombre John y la mujer de nombre Melissa, conversaciones con temas Tabú pero que de igual manera hicieron el vuelo menos pesado.
Eran las 3:58 pm cuando el vuelo arribo en Lima y ahora Rachel se encontraba esperando a su mamá que la recogería y que al parecer se había retrasado, cuando Shellby la mamá de Rachel llego Rachel corrió a abrazarla, hacía ya 3 meses que no veía a su mamá y la extrañaba mucho, subieron las maletas a el auto y se dirigieron hacia la casa que Rachel había habitado la mayor parte de su niñez y adolescencia, cuando llegaron el papá de Rachel, Hiram Berry la recibió con un abrazo que Rachel acepto y agrego un enorme beso en la mejilla del hombre, el hombre subió las maletas hacia el cuarto que pertenecía a Rachel en su adolescencia y que aún era de ella según su mamá, aunque ella insistía en que lo utilizaran para otra cosa, sus papas de oponían, incluso le dijeron que si era porque aún tenía ese aspecto de adolescente lo podían remodelar y así lo hicieron lo repintaron y amueblaron con cosas nuevas claro sin quitar la esencia de su única hija.
Ahora Rachel entraba a su cuarto para darse cuenta que sus papas habían hecho un gran trabajo al remodelarlo, las paredes habían cambiado de un rosa mexicano por un azul cielo con detalles en color café y si bien parecía otro, en el aun habían cosas que consideraba importantes como sus trofeos de baile y de canto, entre otras cosas, cosas que sin lugar a dudas le daban ese toque único del cual aún era poseedora.
R: -Hogar dulce hogar-
