Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, aunque la historia si.

Lo que está escrito "entre comillas" con los pensamientos de la gente.

Lo que está escrito en cursiva son conversaciones telefónicas o en la lejanía.

Pov Jacob.

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CAPÍTULO 1. Sueños.

Iba caminando por el bosque. Era de noche, pero eso no importaba. Me conocía ese bosque de memória, y reconocí al momento el tramo por el que iba caminando. Lo reconocí porque hacía menos de un mes que había visto allí a dos de las personas en las que más confiaba y que me habían partido el corazón con su traición.

Llegué a un pequeño claro repleto de flores en cuyo centro había un enorme árbol que no había visto nunca. Había una chica bajo el melocotonero, sentada en el suelo. Me acerqué a ella lentamente. En cuanto la chica me vio, se puso en pie y se escondió tras el grueso tronco del árbol. Estaba muy asustada.

- Tranquila. No voy a hacerte daño. - dije.

Esa chica era el ser más hermoso que nunca había visto. Tenía la piel blanca como el mármol. Parecía tan fina y suave que daban ganas de tocarla solo para comprobarlo. Sus ojos castaños eran grandes y profundos. Su cabello broncíneo caía brillante como una cascada hasta su cintura.

- ¿Qué estás mirando?

- Nada.

Y su voz... Era un sonido celestial. Era como un ángel.

- No te acerques a mí.

- No voy a hacerte daño.

- No te creo.

- Te prometo que nunca voy a hacerte daño. - dije, tendiéndole mi mano. - Confía en mí.

Al principio, la chica dudó un poco, pero tras unos segundos, tomó mi mano.

Su piel era muy fría, pero muy suave al tacto.

La oscuridad de la noche comenzó a desaparecer, logrando que pudiera verla mucho mejor. La chica comenzó a ponerse nerviosa.

- Tengo que irme. - dijo, soltándose de mi mano, ocultándose de la luz.

- No te vayas, por favor. - supliqué. Quería pasar más tiempo con ella.

- Lo siento, pero no puedo quedarme.

No sé que me impulsó a hacerlo, pero cogí a la chica de la mano, la acerqué a mí y la besé. Estuvimos como un minuto besándonos, hasta que la chica se apartó bruscamente de mí.

- No! - gritó. Era un grito de dolor que me tocó el alma.

- ¿Qué-qué te pasa?

- Prometiste que no ibas a hacerme daño. - dijo, al tiempo que caía al suelo de rodillas. Estaba sufriendo. Mucho. - No!

Poco a poco, su piel fue tornándose rosa, roja, negra.

- No!

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Primer capítulo de mi nuevo fic. Hace como un año o dos que la tengo medio escrita, pero no la encontraba y, además, quería terminar mis anteriores fics.

Espero que os haya gustado o al menos intrigado lo suficiente como para seguir leyendo.

Opiniones porfi plis!

Kisses.