La luz del sol entró por la ventana de una niña de unos 12 años, ella lentamente abrió sus ojos azules (celestes), y movió su fleco a un lado. Su babosa infierno dormía tranquilamente en el pecho de la niña, esta soltó una risita al ver a si babosa durmiendo. – Vamos Saphira, ya levántate. – a niña acarició la cabecita de su babosa para despertarla. Saphira bostezó y le chilló a su dueña. La niña se cambio de su pijama a su ropa de colegio diario. –tú te quedaras con mamá hasta que yo vuelva del colegio de nuevo. ¿Ok?– la babosa asintió. La niña sonrió. – ¡Karina! ¡Apúrate, ya está el desayuno!
– ¡Ya voy mamá!– Karina rápidamente bajó las escaleras hasta llegar a la cocina. –Señorita Shane… ¿Cuántas veces de he dicho de no levantarte tarde?– la chica suspiró. –Como unas mil veces. – la mamá de Karina la despeinó. – ¡mamá! ¡Ya deja de hacer eso! ¡Me estas despeinando!– Karina y su mamá, quien se llamaba Jazmín, Jazmín de Shane, se rieron.
Se sentaron a la mesa y empezaron a comer, Karina le dio un poco de comida para babosas a Saphira y a las dos babosas de su madre. –mamá. ¿Qué tipo de babosas son las tuyas?
–bueno, la verdad es que no se. Tu padre me los dio cuando tenías 5 años. Siempre se me olvidaba preguntarle.
–ya entendí. – una de las babosas era de color negro con marcas de color azul oscuro. El otro era de color blanco y tenía un ojo con marcas blancas aun más blancas. –bueno, ya me voy mamá! Voy a llegar tarde para el bus!
– ¡espera! Debes dejar a…– demasiado tarde, Karina se había ido al colegio con Saphira en su hombro. La babosa le chilló a su dueña. –ah, ¿qué? Como que se me olvidó dejarteeee… hehehe… muy tarde. Lo siento Saphira, tendrás que estar en mi mochila por todo el día, no hay suficiente tiempo de dejarte con mamá ahora. Mira allí está el bus. ¡Apúrate ya entra allí!– Saphira rápidamente entró a la mochila negra de Karina al ver el bus. –Que va a decir la mamá de Karina al descubrir que fui con ella al colegio…– Saphira sabía que Karina guardaba un tubo para babosas en su mochila, al igual que una mano de comida para babosas. Saphira decidió dormir en la camita que Karina le había hecho.
– ¿ahora qué voy a hacer? Mamá sí que me va a regañar. Las personas de la Superficie no deben saber sobre estas babosas, y si, ya sé que aquí hay babosas pero son diferentes no son lindas como las de Bajoterra. Me pregunto cómo se encuentra Eli… no lo he visto en unos cuantos meses. Porque papá quería que yo me fuera a los quince. Aquí es aburrido mientras que haya abajo la vida es más peligrosa y es una vida llena de aventuras. – Karina estaba en el bus, era una hora de viaje hasta que llegar al colegio. Al fin el bus llego a la casa de su amiga. – ¡hola!
– ¡Hola!
– ¿me prestas tu contenido porfa? Es que perdí el mío…
–si claro ten.
–Gracias Vane.- hoy era su ultimo día de escuela y entre ochos días era su graduación de sexto. –crees que te vas a graduar…
–Pues claro… bueno al menos… yo creo que lo voy a hacer.- ambas amigas se rieron.
Llegaron al colegio y se dirigieron rápidamente a su salón pues le bus siempre llegaba cinco minutos antes que tocaban la campana para la oración. (Bueno es lo que pasa en mi colegio.) Solo faltaba unos dos minutos hasta que tocaran, Majo, el tercer miembro del trío de amigas llegó. – ¡hola!
– ¡hola! Karina, ¿viste el capitulo que subí ayer?
–claro que lo hice y me gustó mucho. –(Es que ella también escribe historias en la vida real.)
De repente tocaron la campana. Todos sacaron las agendas para que la maestra guía las firmaran.
PDV de Saphira…
Estaba jugando video juegos (lol) cundo oí la campana. –Seguramente es para la oración. – trataba de quedarme totalmente cayada pues sino los maestros iban a revisar la mochila. En la mochila de Karina había un reloj, eran las ocho y el colegio terminaba a las tres. Que aburrida esperan tantas horas. Continúe juagando cuando sentí que la mochila se levantaba y rebotaba un montón. Trate de sostenerme pero no pude y por poco caigo de la mochila. – ¡¿porque esta niña no cierra su mochila?!– moví la cabeza molesta y seguí jugando…
No hay PDV…
Al fin la escuela terminó y Karina entró rápidamente al bus, se sentó cerca de la ventana y antes de que Majo llegara, abrió su mochila. Al abrirla… vio una babosa infierno totalmente marida. La chica peli azul le susurró; – ¿estás bien Saphira? Lo siento es que si no corría, iba a llegar tarde a clase. – (Por esa razón, en el colegio, a mí y a mis otras dos amigas nos decían las tres tortugas… lol) Saphira levantó la mirada y asintió, ojos todavía rodando. Karina se rio y rápidamente cerró su mochila. Majo se sentó a la par de ella y hablaron entre sí sobre los exámenes, la graduación, y sobre el chico que a Majo le gustaba. Al final dejaron a majo y las dos amigas se despidieron. La siguiente en bajarse era Karina, el bus paró y la señora abrió la puerta.
Su madre abrió la puerta, brazos cruzados. Karina rió nerviosamente. –hola mamá. Creo que te debo una disculpa. No era mi intención en llevarme a Saphira, lo bueno es que hoy era el último día de clase…– su madre solo levantó una ceja pero no dijo nada. –disculpa aceptaba. Ven a comer y prepararemos tu discurso de graduación. – Karina asintió y dejó su mochila a un lado, sacando a Saphira, el tubo para babosas y la mano de comida de babosa. Karina puso la comida de babosa en un platito para que las tres babosas comieran el almuerzo.
–oye mamá mira, am… como te dijera…
–dilo hija. – Karina le iba a decir sobre Bajoterra pero decidió dejarlo para otro momento. –de verdad apreciaría que me ayudaras en el discurso de graduación, se me iba a hacer difícil pero siempre estas allí para ayudarme. – su madre sonrió. –Para eso están las mamás. –
Una semana después…
En Twitter:
Yo (Karina):
#Sexto ¿quiénes se van a graduar?
Ellos:
#Sexto lamentablemente nosotros…
Yo: lamentablemente todos…
Karina twitió algunas cosas a sus compañeros y se fue dormir, pues el próximo día iba a ser su graduación, Viernes 24 de Octubre. (Es mi graduación real)
Al día siguiente…
– ¡Karina! ¡Levántate! Tu graduación es a las 12 de la mañana (tiempo real) ¿lo recuerdas?– Karina abrió los ojos lentamente y bostezó, Saphira lo miro preocupada, Karina no había practicado nada para su discurso y eso que estaba en ingles. (También es real, pero como soy Guatemalteca-Canadiense yo puedo improvisar al igual que otros mis 2 compañeros.) Saphira le chilló a su dueña. –ya lo sé Saphira, no he practicado nada pero recuerda que soy muy buena en el Inglés. ¿No te recuerdas de mi clase de grammar, writting y Reading? No hay problema. Solo hay uno, todo el público enfrente mía y quizás ¡el chico que me gusta este allí!– Saphira le sonrió pícaramente cuando su dueña admitió que le gustaba alguien. –bien, me descubriste… si, si me gusta alguien. – Karina se cambio, delicadamente doblo su ropa "formal" que le dijeron que tenía que trae, la toga se la darían en el colegio, es lo que ella pensaba no estaba tan segura. Su mamá le dio su desayuno y a la las babosas también le dio su comida. Karina quería que Eli y su padre estuviese aquí pero ninguno de los dos puede venir, Will Shane está desaparecido e Eli está protegiendo a Bajoterra. Karina suspiró y su mamá le puso una mano en su hombro, la chica levantó la mirada. –yo se que quisieras que tu hermano y que tu padre estuviesen en tu graduación, pero, si quieres, lo podemos grabar, de ese modo, lo recordaremos por siempre y tu hermano lo podrá ver cuando uses el Descenso. ¿Está bien? – Karina solo asintió y sonrió tristemente. Ella terminó de comer y se levantó, fue hacia la computadora acompañada de Saphira y Nova, su leopardo de las nieves. De repente oyó que su mamá gritaba y rápidamente detuvo el vaso que se le había caído a su madre. –gracias hija, pero cuantas veces te debo decir que no uses la magia, nadie debe saber eso, recuerda que hoy después de la graduación vamos a ir al bosque para que practiques tu magia.
–si ya se mamá. Lo siente es… instinto.
–bueno, pero gracias. Ese fue al vaso que Eli me hizo en el día de las madres.
–bueno, voy a usar la computadora un rato.
–pero recuerda que salmos de aquí a las 11:00AM – Karina lo gritó su repuesta mientras que regresaba a la laptop…
Ya eran las 10:55 y Karin apagó la computadora. Su mamá encendió el carro y ella entro en ella. Las dos se fueron al centro comercial para comprar todo lo que necesitaban para l pequeña fiesta que iban a hacer después de la graduación…
Ellas regresaron a las 11:40. –bueno, cámbiate y nos vamos al colegio. – al oír eso, Karina subió corriendo las escaleras y se cambió. Al bajar, casi se cae pero de nuevo, uso la magia para no hacerlo. Se subieron al carro, Karina se llevo Saphira pero su mamá la tendría en un lugar en donde la pequeña babosa pudiera ver.
Al llegar al colegio, Karina vio que sus dos amigas ya habían llegado. Platicaron un rato hasta que la directora les dijo que se formaran como ya lo habían ensayado.
Todo empezó re-bien. Y justo como dijo Karina, el chico que le gustaba si estaba allí, era porque es el hermano mayor de una se "amiga". Dieron los diplomas, hicieron su pequeño acto, los discursos en inglés, la ultima en decir su discurso fue Karina. Todo salió como planeado y cada uno de los de sexto firmaron el papel de que ya habían terminado la primaria.
–los voy a extrañar mucho.
–pero lo bueno es que nos vamos a ver el próximo año… ¿verdad?
–todos nosotros seguiremos aquí. Ya lo dijimos y lo confirmamos con nuestros papás.
–Bueno, yo no seguiré en el colegio… – todos voltearon al ver a Karina. –¡¿por qué?!
–es que me voy a mudar muy lejos de aquí.
– ¿y donde iras?
–no lo sé. Mi mamá no me ha dicho.
–bueno, entonces ten cuidado. Te extrañemos mucho.
–gracias chicos. Se los agradezco. Adiós.
– ¡adiós! - Karina regresó con su mamá pero ella tenía sus brazos cruzados sobre su pecho. –vamos, al carro. Señorita Shane… tú y yo necesitamos hablar. – Karina obedeció y subió al carro.
Al llegar a casa, Karina entró a la sala, pues es allí en donde hablaban siempre. –¿les dijiste a tus compañeras que te ibas a mudar?
–am… jeje… quizás dije eso…
–Karina Shane… dime la verdad. – Karina bajó los hombros y suspiró. –bien, les dije que me iba a mudar muy lejos de aquí. Me preguntaron a donde me iba pero les dije que tú no me habías dicho.
– ¿y por qué les dijiste eso? No nos vamos a mudar.
–Creo que llegó el tiempo de decir la verdad…– Karina suspiró de nuevo. –porque tengo planeado ir a Bajoterra pasado mañana. – los ojos de su madre se agrandaron en sorpresa pero después se calmó. –pero tu padre dijo a los quince, al igual que Eli…
–ya lo sé, pero ya me aburrí de la vida acá arriba. Además, allá bajo la vida está llena de aventuras y peligro. Además, quiero volver a ver a mi hermano…
–Pero ya te lo dije a los quinc-
– ¡pero yo no acepté ese trato madre!– la mamá de Karina se sorprendió al oír a su hija hablar así. –sabes, sacaste eso de tu padre. Y cuando el toma una decisión ese el final de la historia.
–y es exactamente lo que yo estoy haciendo. Ya tome mi decisión, usare el Descenso pasado mañana. – su madre se levantó y tristemente fue a la cocina para preparar el almuerzo que van a tener, todos los vecinos, los familiares maternos, unos cuantos amig s de Jazmín.
Karina se fue a su cuarto con Nova y Saphira en su hombro. –creo que le debo una disculpa a mamá, o quise ser tan dura con ella. – Saphira chilló de una manera de consuelo. Nova empezó a ronronear sobando su cabeza contra el rostro de Karina. Ella se rió y empezó a pasar su mano por su pelaje blanco.
De repente se oyó la puerta principal abrirse con un montón de gente entrando por ahí. –oh no. Ya llegaron todos… ¿Qué les voy a decir? ¿No deben saber sobre Saphira, no deben de saber sobre ninguna de las babosas. – las babosas de su madre entraron al cuarto de Karina y le chilló al Saphira, ella se bajó del hombro de su dueña y se escondió junto con las demás. –Bueno, eso ya está controlado. –
Karina bajó las escaleras con Nova a su lado. Todas las personas la saludaban amablemente, ella también los saludó. Después de eso, solo eran abrazos, saludos, regalos, felicitaciones etc.
Todos comieron y después de todos los eventos, eran despedidas, bueno para Karina, pues ya pronto usará el descenso…
– ¿mamá?... lo siento, no quise ser tan dura contigo, pero yo ya tomé mi decisión.
–disculpa aceptaba. Pero yo también te debo una disculpa, yo debí respetar tu decisión.
–gracias mamá– con eso, las dos se abrazaron…
–entonces prepara tu cosas. Usaras el Descenso mañana. – Karina se sorprendió. – ¡¿enserio?!
–enserio.
–Muchas gracias mamá. – se abrazaron de nuevo a la mamá de Karina le besó la frente. Las dos subieron al cuarto de Karina y empezaron a empacar.
Al siguiente día…
Karina se despertó como siempre pero esta vez, se despertó con un gran dolor en su corazón, iba a dejar a su madre, sus amig s, su familia y muchas otras cosas.
Se cambio y puso una capa con capucha en su mochila para ponerla ya en Bajoterra. Se puso el collar que se padre le había dado, tenía la insignia Shane en miniatura con una media luna creciente en ella. Al bajar las escaleras, Saphira sobó su cabecita contra la mejilla de Karina, ella sonrió al gesto. Nova estaba a la par de ella. Karin ano quería dejar a su querida leopardo en la Superficie y Nova no quería separarse de su dueña. Karina comió su último desayuno estilo Superficie; ella le puso ese nombre pues la comida era diferente en la Superficie.
Su mamá encendió el carro y Karina entro con una mochila llena de cosas que iba a necesitar, no era mucho, solo lo suficiente para sobrevivir. Nova entro al carro también junto con las babosas de su madre. – ¿por qué trajiste tus babosas mamá?
–bueno, la verdad, es que ya no son mías.
–no entiendo…
–Karina, yo ahora te doy mis babosas, son tuyas ahora. – una gran sonrisa se formo en el rostro de Karina. Las babosas de su madre se le acercaron y chillaron felizmente. Karina las tomo en sus manos mientras que Saphira solo los miraba desde su hombro. Su madre le dio un cinturón con tres tubos para babosas. –estoy te servirá para guardar a tus babosas, póntelo. – el cinturón, al usarlo cruzaba su pecho. –gracias mamá.
–por nada mija. Solo recuerda, te voy a dejar en el mismo Descenso que usó tu hermano, solamente que la entrada es por otro lugar, es para que no levantemos sospechas.
–bueno. Otra cosa, me llevare a Nova conmigo, ya sabes… para protegerme.
–Claro, solo ten cuidado al bajar. – Karina asintió y acarició de nuevo a Nova, quién ronroneo de felicidad. Llegaron a un túnel, no había nadie, Jazmín presionó un botón que había en el carro y un pasadizo secreto apareció, ella acelero el carro al máximo y rápidamente entró al pasadizo, esta se cerró. –que cool. – Jazmín dejó el carro y las dos salieron de ahí. Nova salió de último. –Bueno así que esto es el adiós. – dijo su madre con lagrimas en los ojos. Karina lloró también pues el llanto era contagioso (lol). Su madre la acompañó adentro y la dejo en un primer piso. –bueno adiós mamá.
–adiós Karina. Otra cosa… snif… dale esto a tu hermano… es sabe que es, se le olvido llevarlo la otra vez.
–claro que se lo daré mamá. Adiós, cuídate.
–adiós. – con eso Karina entró en un cuarto oscuro y vio el Descenso justo en frente de ella. Ella suspiró y se subió en ella. Después recordó la carta que le había hecho su padre, ella lo saco rápidamente de su mochila y lo leyó…
Querida Karina,
Sabes que yo te quiero mucho y que siempre te extraño cuando yo voy a Bajoterra. Si estás leyendo esto, es porque ya te graduaste de sexto y tú hermano ya está en Bajoterra. Lamento no haber estado para tu graduación, espero que me perdones, lo siento mucho.
Ya sé que yo te dije que fueras a Bajoterra a los 15 años, pero veo que tu no querías hacer lo dicho, apuesto que ahorita estas en el Descenso y lleno a él. Yo te conté muchas de las mis aventuras y tu tendrás muchas más y quizás mejores…
Si quieres ir con tu hermano, el refugio en donde él se encuentra esta e dos kilómetros de donde caerás, si no está allí, entonces está afuera o algo, si oyes disparos sabrás que ese es tu hermano. Te quiero mucho.
Con amor,
Tu padre, Will Shane
Karina se secó una lagrima en el recuerdo que su padre estaba desparecido, Nova la vio en le lamio el cachete. Ella sonrió y guardó la carta de nuevo en su mochila. Nova se acerco aun mas a Karina y Saphira se puso en el hombro de Karina. – ¿Están listos?– todos asintió. Karina abrió el seguro del botón, suspiró presiono el botón y cerró los ojos. Nada. Todos abrieron los ojos en confusión, pero en ese instante el Descenso cayó
–¡AAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!
