Bueno como ya todos saben los personajes de Rurouni Kenshin no me pertenecen pero esta historia es sólo mía jiji.

Es de mi pareja favorita K&K

Primer capítulo

Perdida en dos miradas

Era una mañana de primavera como cualquier otra, bueno casi… Kaoru Kamiya abrió los ojos a la hora acostumbrada esperando ver la cara de Yahiko intentando despertarla de un grito, pero lo que vio fue algo totalmente diferente…

Kaoru: Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Saito: te he traído el desayuno.

Kenshin: lo siento Kaoru-dono pero no pude evitar que lo hiciera, insistió tanto…-dijo Kenshin con su típica sonrisita de "yo no fui".

Kaoru:¿pero se puede saber que hacen todos en mi habitación a estas horas¿y por qué Saito me trae el desayuno?- dijo cerrando su yukata en la parte del pecho y poniéndose colorada.

Saito¿qué acaso no puedo ser amable con mi kendoka favorita?- dijo sacando un cigarro por desgracia para Yahiko, que odiaba el humo.

Yahiko: a fumar a la calle!!!

Kenshin: lo que pasa Kaoru-dono es que Saito viene a hacerte una proposición…

Kaoru: Saito yo no puedo estar contigo… eres un hombre casado y además yo amo a… -dijo mirando al lindo pelirrojo que estaba en la puerta y recordando que ella aún no le había dicho sus sentimientos abiertamente.

Yahiko: a ver busu no seas tan creída.

Kaoru: Yahiko!!!!! No me digas busu respeta a tu maestra y fuera todos que me voy a vestir.

Todos salieron de la habitación y se dirigieron al salón a esperar a Kaoru, Saito no había mencionado nada de lo que quería pero por lo que Kenshin podía suponer era algún asunto relacionado con la policía y no lo que Kaoru creía… pero él no permitiría que metieran a su Kaoru en peligro. De repente los pensamientos del samurai fueron interrumpidos por la brisa que entró cuando Kaoru abrió la puerta de la estancia.

Kaoru: y bien… ¿en qué te puedo ayudar Saito?

Saito: veras… tenemos los datos de una organización llamada Kin (oro) que ha estado traficando armas de fuego entre Japón, China y algunos países occidentales, también son excelentes asesinos por lo que nunca dejan pista salvo una pequeña marca en forma de serpiente. Tenemos una pista de quien es su líder (ha sido Cho el que la ha conseguido) , sabemos quién será su próxima víctima y queremos atraparlo en la fiesta que el primer ministro celebrará esta noche para dar la bienvenida a los presidentes de Francia y Noruega.

Yahiko¿y qué tiene que ver la busu en esto?

Saito: bueno… ella es una kendoka y muy buena según tenemos entendido, el líder de la banda siente una gran debilidad hacia las mujeres y he pensado que haciendo que Kaoru se infiltre en la fiesta conseguiremos ahorrarnos algunas víctimas innecesarias.

Kaoru¿cuál es el plan?

Saito¿esa pregunta significa que aceptas?

Kenshin: eso significa que se lo pensará ¿verdad Kaoru?- dijo él esperanzado de que ella se negara, pero conociéndola sabía que no lo haría.

Kaoru iba a contestar cuando se dio cuenta de que Kenshin no había utilizado su habitual –dono sino que le había hablado en un tono mucho más protector y… a su forma de ver… mucho más sexy.

Saito: en fin…el plan es el siguiente: tú entrarás a la fiesta una hora después de que empiece, entrarás sola y llevarás un pequeño bokken dentro del vestido en la parte baja para evitar que se note ( va a utilizar un vestido occidental) el objetivo de estas medidas es que la gente se fije en ti y así podrás llamar la atención de Shido ( así se llama el líder de la organización Kin) y tienes que seducirlo para que te invite a bailar, luego lo sacarás fuera para que así mis hombres y yo podamos actuar. Nosotros estaremos vigilando en las sombras del jardín.

Kenshin: es un plan un poco arriesgado porque si es verdad que Shido es tan bueno como dices en el arte de matar es posible que se de cuenta del engaño… además Kaoru nunca ha hecho una cosa así y quizás no esté preparada.

Kaoru: lo haré- dijo sin pensárselo dos veces, odiaba que Kenshin la infravalorara de esa forma, la hería tanto en su orgullo de kendoka como de mujer ¿por qué aquel pelirrojo podía hacerle tanto daño con unas pocas palabras? Ella sabía la respuesta y era que lo amaba, él era un dulce veneno que poco a poco la consumía.

Yahiko: busu yo confío en ti, nosotros estaremos fuera también ¿verdad Kenshin?

Kenshin: si…

Aquel día transcurrió igual que siempre y cuando Sanosuke vino para cenar y le contaron todo, él opinaba igual que Yahiko, Kenshin era el único que no confiaba en sus capacidades, que detestable (pero tan tierno…). Mañana sería el gran día, Saito vendría a recogerlos a todos y la llevaría a la jefatura de policía donde se encargarían de proporcionarle el vestido y las joyas y de allí partirían a la mansión donde se iba a llevar a cabo la fiesta y la misión.

Por la descripción de Saito, Shido debía de ser un hombre muy apuesto….

Kaoru pensaba esto sin darle mucha importancia mientras se dirigía con sus amigos a la jefatura pero… algo en su interior le decía que Shido no sería un conocido más en su vida (y no sabía cuán en lo cierto estaba…)

Kenshin la miraba preocupado, algo le decía que aquella misión haría que muchas cosas cambiaran en la vida de su hermosa Kaoru y por lo tanto… en la suya.

Ya había pasado un rato y Kaoru se estaba viendo en el espejo con su nuevo vestido, era rosa, con muchas capas de falda y a un lado de la cintura tenía una pequeña flor blanca, llevaba un collar de perlas al igual que sus pequeños zarcillos y una coleta alta rodeada de trenzas con cintas blancas. Tenía un poco de maquillaje (cosa rara en ella pero la habían obligado) y la verdad es que su aspecto era deslumbrante.

Salió de la habitación con las mejillas coloradas, lo que la hacía ver mucho más dulce y salió para dirigirse al carruaje donde estaban todos. Los chicos la miraron y se quedaron boquiabiertos, pero de eso ella no se dio cuenta porque lo único que podía ver ahora era la mirada de su amado pelirrojo que la miraba perplejo y que se había puesto muy rojo cuando ella le sonrió coqueta ( aunque Kaoru se moría de la vergüenza y sus palpitaciones iban a millón el hecho de saber que estaba muy linda le daba seguridad en sí misma )

Kenshin la veía, su Kaoru estaba tan bella... era como una muñeca de porcelana tan fina y delicada y a la vez tan valiosa que él la quería sólo para él. Pero precisamente era el valor de esa chica lo que le impedía confesarle sus sentimientos, ella era demasiado para él. La ayudó a subirse al carruaje y se fueron al baile ( sí en plan cenicienta sólo que más oriental xD ).

Todos estaban ya enposiciones, Kaoru saludó a los guardias y entró al gran salón de banquetes... el tiempo se detuvo por unos instantes para ella cuando vio que todos volteaban a mirarla y que su objetivo, Shido, la miraba directamente a los ojos. El corazón empezó a latirle de nuevo pero la impresión siguió en ella, Shido era un hombre tan bello que parecía un dios y sus ojos la habían dejado hechizada ¿ cómo podía un hombre que no fuera su kenshin causar esa impresión? Dejó de pensar en eso cuando vio como él se acercaba lentamente hacia ella...

Bueno este es el primer fanfic que hago, se me ocurrió mientras me duchaba (curioso sitio para crear) y ya sé qué pondré en el siguiente capítulo además de que los próximos serán más largos, en fin… espero que me dejen mucho reviews y que me hagan críticas (de los errores se aprende) y sugerencias. El primero ha sido un poco flojo pero es más bien una introducción a la historia en sí (como en todos los libros) poco a poco la cosa se pondrá más emocionante…

Un beso a todos y gracias por leer.