Disclaimer: Todos los personajes pertenecen a JK. Rowling
Este Fic participa en el reto "Un día en la madriguera" del foro "Las cuatro casas"
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Sus cabellos castaños se mueven al compás de la música, esa sonrisa angelical se dibuja en su rostro. Y Viktor ha visto muchas sonrisas, pero ninguna como la de ella.
La ha visto bailar con el pelirrojo la mayor parte de la noche, Ron Weasley no parece querer soltarla, como si supiera los profundos deseos que tiene Krum de sacarla a bailar.
Pero un momento antes de que termine la fiesta, uno de los gemelos llama al chico haciendo que deje a Hermione sola. Viktor se levanta de la silla y camina hacia ella. La bruja se encuentra con su mirada, esos ojos brillosos, preciosos se enfocan en él otra vez, y Viktor le sonríe, todavía sorprendido por lo que aquella jovencita puede hacerle sentir.
-¿Podemos bailar? -le pregunta él con el acento demasiado marcado, pero ella, como siempre, comprende, y asiente.
La mano del chico toma la suya y la otra se posa en su cintura, y comienza a guiarla al ritmo lento de aquella dulce canción.
La cercanía hace que las mejillas de la bruja se vuelvan sonrosadas, algo que a Viktor le parece lo más adorable del mundo.
-Te ves muy hermosa esta noche Hermione -la halaga y ella se ríe suavemente.
Se pregunta cómo es que se le ha podido escapar de las manos, con cada carta que le enviaba sentía que se volvían más cercanos, pero ahora que la tiene enfrente se da cuenta de que en realidad, aquel tiempo en el que habían estado tan lejos no había hecho más que separarlos.
-Bill y Fleur se ven tan felices... -comenta Hermione sacándolo de sus pensamientos, Viktor mira hacia la dirección de los novios, que no dejan de abrazarse y sonreírse.
¿Podrían llegar a verse así en un futuro?
El mago la hace dar una elegante vuelta, y vuelve a mirarla con esa intensidad que la deja sin aliento.
-Hermione... -comienza él, dispuesto a decirle sobre sus inquietudes, sobre que no ha podido dejar de pensar en ella desde ese día que se despidieron en Hogwarts, que anhela esas tardes en la Biblioteca, conversando de cualquier cosa, quiere preguntarle porque cada vez sus cartas son más escasas... quiere preguntarle si siente algo por el Weasley, o si es solo amistad... quiere preguntarle si le gustaría conocer Bulgaria... conocer su familia... preguntarle si le gustaría tener algo más que una amistad...
Sintiendo el corazón acelerado, Hermione lo mira, esperando las palabras de Viktor.
-Yo...
-¡Hermione! -exclama Ron interrumpiendo descaradamente la conversación -Mi madre necesita ayuda con la cocina.
-Oh... -exclama la bruja saliendo de aquel anonante clima -, yo... iré...
Hermione se aleja a zancadas, dejándolo solo en la pista de baile. Y Viktor lo siente, lo sabe.
Aquella escurridiza snitch se le ha escapado de las manos, y duda mucho que la pueda volver a atrapar... aunque eso no quiere decir que desde lejos no continuará anhelándola...
