Disclaimer: Cloud Strife y Squall Leonheart/Leon no me pertenecen. Son obra y propiedad de Square Enix & Co.
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Dissidia
Kingdom of Hearts
Envuelto en la oscuridad, una vez más.
Ahogándose,lentamente.
Hundiéndose en las profundidades del abismo.
Sufrimiento.
Impotencia.
No sabía exactamente cuanto tiempo llevaba envuelto en sombras, cuanto tiempo se ahogó en la miseria, cuanto tiempo estuvo atrapado en la Oscuridad.
Dolor.
Tortura.
Quería salir de allí, queríavolver a ver a aquellos que conocía, volver al hogar, cálido, familiar, volver a ver las sonrisas, oír las carcajadas, ver de nuevo aquellos ojos...
Pero estaba allí, frío y solo.
Ni un rayo de luz, ni un semblante de calor, ni una sonrisa, ni un abrazo, ni el cariño de una persona que pudiera proporcionarle todo lo anterior.
Soledad.
Y algo más.
Torturas incesantes,disídia solidificada a su espalda, fibrosa, oscura, siniestra. Plegándose, contrallendo los músculos para pegarla contra su cuerpo, para que aquella maldita ala demoníaca se ocultara, se camuflara en sus ropas, porque aunque estuviera en la oscuridad, aquella cosa era una vergüenza.
Su vergüenza.
Su contrato.
Ya no había marcha atrás, y estaba agradecido, porque no quería volver atrás. No quería volver atrás, ver aquello que una vez fué, aquello que una vez pudo haber sido, y que no es, porque él no puede ni quiere retroceder, porque sería demasiado.
No supo cómo, no supo cuándo.
No supo dónde ni porqué.
Abrió los ojosa la cegadora luz del sol.
El sol.
Y lloró.
Lloró silenciosamente en aquel polvoriento lugar, frío y solitario... pero con una luz que iluminaba el camino, un camino con un final.
El final, quizás, de aquel sufrimiento, de su disídia, de su encarcelamiento entre las sombras.
Pero la dicha -la felicidad-, así como la vida, no es eterna.
El contrato.
Una simple arma, eso era lo que significaba ahora su existencia.
Ni juegos, ni sonrisas, ni abrazos, ni calor.
Soledad.
Combates contra monstruos, contra otros, una y otra vez.
Sin parar.
Sin descanso.
Y entonces le vió.
Algo familiar, algo cálido, algo quele llenaba de felicidad y disidia -su sufrimiento- al mismo tiempo.
Squall.
Y Squall le vió a él.
Y palideció.
Y corrió, sorprendio, desesperado, esperando que no fuera un fantasma, una aparición, una manifestación de sus recuerdos en forma física, angelical.
Nueve años.
Nueve jodidos años.
Nueve interminables años.
Y Cloud ya no era el joven fuerte y enérgico, decidido,que una vez conoció,espíritu consumido y drenado de sus fuerzas por quien sabe qué atrocidades.
Y Squall ya no era el joven afeminado y rudo que una vez conoció, fortalecido ahora, endurecido por el dolor de la pérdida y la resignación.
Ya no erauna 'Tormenta', ahora era un 'León'.
Y las 'nubes' están fuera de su alcance, no le pertenecen, como en tiempos pasados.
Pero el León persiguió a la nube, día y noche, porque no quería que estuviera sola en los cielos, fría, por siempre flotando en el vacío sin compañía ni calor, esperando a desaparecer, a disolverse en la nada, como si nunca hubiera existido.
Y la alcanzó.
Y Cloud nunca pudo agradecérselo lo suficiente.
León.
Cloud.
Un león que persigue una nube y logra darle alcance.
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Muchas gracias por leer y comentar.
HikaruWinter