El lado oscuro de la luna

5´-UUUGGACAAGUCCAGCGAUC-3´

Era de mañana o quizás era de tarde. El sol bañaba la arena con sus tenues rayos naranjas, mientras su reflejo se despedazaba en el cristalino mar, eso lo recordaba bien.

También a un hombre alto, no recordaba si era blanco, moreno o negro, ni el color o el estilo de su ropa, solo que era alto y que estaba de parado a la orilla del mar, posaba su mirada nerviosa de un punto a otro, sus manos temblaban a pesar de que se aferraban a sus brazos, como si así se ocultara de algo. Luego la mirada desesperada de aquel hombre se cruzó con la suya, lo vio unos segundos y le sonrió gentilmente, tal vez el solo hecho de verle le había tranquilizado.

Después tenía un arma en la mano y al parecer le apuntaba a la cara, conservado esa sonrisa amable y los ojos llenos de esperanza. Apareció luego una mujer, el hombre alto dio unos pasos hacia atrás al verla acercarse y unos segundos después cayó en la arena.

La mujer le sonreía sádicamente- No te le acerques- era la voz de uno de sus padres; pero no sabía de cual, hacia tiempo que había olvidado el tono de sus voces- ¡Aléjate de él!- sabía que debía de correr; pero no podía hacerlo, solo miraba el enorme cuerpo del hombre tendido en la arena, inerte…muerto, no era más un hombre- ¡Hijo!- era algo muerto -¡Ven!- y con él una parte suya había muerto, algo que no podía describir con palabras ni con nada, era solo un sentimiento.

Unos brazos le tomaron y le alzaron, sentía el calor de uno de su madre, lo estrechaba contra su pecho tratando de protegerlo, una mano le cubría lo ojos mas el logro librarse de ese obstáculo que le impedía ver aquella escena, la mujer se llevo dos dedos a la sien, al parecer le saludaba

-Te veré de nuevo- le dijo- en el lado oscuro de la luna- y esa mano le cegó de nuevo, solo escucho una serie de disparos y después de eso no recordaba nada más.

---------------------------------

1. Valores Familiares

Hacia días que tenía un raro presentimiento…alguien la venia siguiendo y observando con todo detalle, cada paso, cada movimiento. Por momentos pensaba estar paranoica; pero hizo a un lado tal pensamiento. No estaba loca, en realidad alguien la venía siguiendo, lo confirmo una mañana mientras desencapsulaba su auto en la acera de la corporación, un sujeto blanco, alto, delgado y aspecto desgarbado la miraba desde el otro extremo de la calle y le miraba con toda su atención; no era la primera vez que un hombre le veía de tal manera; pero había algo extraño en este, parecía que no la miraba por placer, si no por obligación, seguramente se trataba del mismo sujeto que meses atrás había hecho arrestar por estar acosándola con tan solo seguirla y mirarla.

-Hey…tú- le llamó Bra- Si, tú- y él camino hasta la esquina, Bra le siguió, tenía que saber si era el mismo, si ese era el caso tenía que darle su merecido, nadie podía hacer algo de esa índole a Bra Brief; pero al doblar la esquina no vio a nadie, mas que una calle sin trafico y dos o tres personas que desencapsulaban sus autos.

-Bah- no tenía porque darle importancia y regreso a su auto, se le hacia tarde para la escuela.

Eran más de la tres, la heredera de la corporación Capsula salía de almorzar con sus amigas del más lujoso restaurante de la ciudad, un lugar donde no cualquiera podía pasar y los precios estaban por las nubes.

-Bra- le llamó una delgada chica de cabellos negros con una tonta sonrisa dibujada en su rostro- ya viste a ese tipo, no te quita los ojos de encima

-¿Quién?- pregunto con curiosidad mientras tomaba la capsula que contenía su auto.

-Te lo diré; pero míralo disimuladamente…no vayas a ser tan obvia y…

-Si, como quieras; pero dímelo ya- le interrumpió irritada- déjate de tonterías

-Es el sujeto que esta justo detrás de ti, esta solo, puedes aprovechar y…- Bra se llevó el dedo índice a los labios, la chica callo inmediatamente, bajó la mirada, se sentía avergonzada.

- veamos que tal esta- y volteo sutilmente- olvide unas llaves en la mesa, ya regreso- que mejor manera para verlo en todo detalle, las chicas asintieron sin decir palabra, le esperaron a la expectativa de lo que fuera a pasar.

Camino con naturalidad de regreso al restaurante y paso cerca de aquel sujeto por quien su amiga estuviera tan entusiasmada…no, no podía ser ¿él otra vez? Caminó hasta la mesa, hizo como si buscara algo en ella que bien sabia que nunca iba a encontrar

-No…ese pervertido era más joven, este… ¿Será él?- y fingió encontrar algo que guardo dentro de su bolsa- talvez ese imbécil se disfrazo para que yo no me diera cuenta… ¡si! Pensó que no lo notaría; pero no contó con que podía reconocerlo como fuera…

-¿Le puedo ayudar?- pregunto una rubia mesera que le siguió en el momento en que había regresado sin que Bra lo hubiese notado, se sonrojo sin poder evitarlo, había hecho el ridículo ¿Quién hablaba sola en una mesa vacía?

-Si- contesto sin decir más y se salio de ahí rápidamente.

Aquel individuo le comenzaba a atemorizar ¿y si se trataba de un enemigo como esos contra los que su padre solía combatir? Descarto esa posibilidad de inmediato, un enemigo de esos tendría un ki sobresaliente y para esos momentos, su padre, su hermano y los demás estarían ahí ¿Quién era entonces ese sujeto? La respuesta era simple, ese no era más que un maniático que se había obsesionado con ella y que el arresto anterior no le había hecho aprender la lección. Pasó cerca de él, sin ponerle atención, le miro de soslayo por unos segundos… ¿era él? No…, Si, si era él, lucia algo mayor, de más o menos 30 años; pero sin duda era el mismo de la mañana.

-No vale la pena- dictamino mientras se acercaba a sus amigas- se ve que es un completo idiota

-Si, tienes razón- dijo una, aquella que siempre le daba la razón en todo

-Es mejor irnos ya, hay clase a las 4:30 y no podemos llegar tarde- dijo la otra. Mientras que Bra tuvo esa sensación, le observaban fijamente; pero no iba a darle importancia a un enfermo que no la merecía.

Eran las seis en punto cuando Bra por fin salio de la escuela, se sentía tan exhausta, su maestra no se callaba, su monótona voz le hizo cabecear cerca de 5 veces o más victima de un aburrimiento mortal, su voz era un poderoso sedante que ni un saiyajin podía superar

-si quisieran ganarle a un saiyajin- le dijo una vez a Goten- pondrían a ese mujer a hablar y caerían de inmediato.

Se despabilaba frotándose los ojos y poniendo la música a todo volumen, cuando tuvo esa sensación, le estaban mirando y ya no pensaba soportarlo. Le bajo el volumen a la música hasta el punto de que era inaudible y se bajo del auto

-Se que me estas viendo maldito pervertido…así que da la cara de una buena vez cobarde- repentinamente algo le sujeto el brazo, volteo y ahí estaba el sujeto del restaurante- quítame tus asquerosas manos de encima. No sabes con quien te has metido…si así lo quiero puedo acabar contigo, no creas que soy una niñita común- y él la miro detenidamente, sus labios se movían, pero ninguna palabra salía de ellos, o al menos ninguna comprensible

-Se equivocaron…-su rostro mostraba un terrible desconcierto, Bra apartó su brazo con un rápido movimiento- otra vez- agrego, se cruzó de brazos y clavo la mirada en el piso- no debería verte a…

-no deberías verme nunca, idiota- le lanzó un certero golpe a la cara, mas él no se inmuto, su mirada seguía clavada en el piso

-Me he acostumbrado ya- sin duda ese hombre estaba loco ¿Qué clase de persona no reaccionaba a un golpe en la cara? Sobretodo a uno tan doloroso como ese, un poco más de fuerza y estaba segura que le podría tirar los dientes

-Escúchame bien- y lo tomo del cuello de la camisa- si vuelves a acercarte a mí, si tan solo te paras a 100 metros haré que acaben contigo

-¿Puedes soltarme?...-Bra no lo hizo, esbozo una sonrisa desafiante y le jaló aun más, atrayendo a ese hombre hacia si, sus ojos azules llenos de cólera, se encontraron con los fríos ojos azules de aquel hombre

-¿Me entendiste?

-No te vere más

-Mas te vale- le jaló aun más del cuello de la camisa y con fuerza lo aventó hacia un camioneta estacionada ahí, rompiendo los vidrios al momento en el que el alto cuerpo del hombre hizo contacto con el vehiculo- No quiero volver a verte, imbécil- azotó la puerta de su auto, saliendo de ahí a toda velocidad, solo quería llegar a casa y buscar ahí la manera de olvidar ese mal rato.

-Tú me seguirás viendo- Se levanto con mucho trabajo, el golpe lo había aturdido, el dolor era excesivo; pero nada se comparaba con…- Se equivocaron, siempre se equivocan- rompió su camisa y arranco un pedazo de tela de la manga izquierda para frenar la hemorragia de su hombro derecho tratando de no tocar el vidrio que se le había incrustado ahí- siempre se equivocan; pero ya no pienso seguir con su juego

"No se como demonios logra convencerme, no se como siempre termina haciendo su santa voluntad, no debí traerla aquí, no debí hacerlo"

-¿En que piensas?- "No me gusta esta situación"- ¡Hey! Goten ¿Qué piensas?- alzó la voz tratando de ser escuchada sobre la estridente música, sin saber que era ella misma la causa de su distracción- ¡Goten!- insistió

-Eh… ¿Qué pasa?

-Nada, olvídalo- se sentó a su lado y se cruzo de brazos molesta por la desatención- quería bailar; pero tu estas en otra parte

-Ya debo irme, en 6 horas tengo que trabajar

-¿Irnos?- se levanto repentinamente, era demasiado temprano para irse y por supuesto que no lo iba a permitir- no quiero irme

-Bien, quédate- bebió el ultimo trago de ron y asentó el vaso a la mesa- yo me voy- le miro incrédula ¿Qué clase de hombre dejaba a una mujer como ella sola?

-¿Eres idiota o que? Tú me trajiste y tu deber es acompañarme

-Si mal no recuerdo, fuiste tú la que insistió en venir, de otra manera no te hubiera traído…Escúchame, tengo que dormir, me voy ya, si vienes conmigo bien y si no pues no me voy a quedar a convencerte, llama a tu hermano o a tu padre- le dijo a gritos en parte para hacerse escuchar aun más fuerte que la música, en parte por el enojo que traía con esa joven que le desconcertaba en todo momento

-¿Para que? ¿Le digo que tú me trajiste aquí? Aunque somos amigos, la idea no le va a agradar y lo sabes- Goten palideció, la idea de lidiar con Vegeta no le convencía, podría resultar muerto en el proceso, además pensaba que Trunks no lo aprobaría nunca, lo sabía muy bien cuando le dijo en broma que le gustaba Bra y aquel rió a carcajadas diciéndole que eso era imposible y si en realidad lo estaba pensando en serio, no estaba dispuesto a permitirlo y su padre mucho menos.

-Ya basta- le dijo secamente, detestaba que lo chantajearan- vamos te llevare a tu casa; pero debemos irnos de una vez- y agrego- por favor

-…esta bien….ya que…-solo de esa manera podía hacerle caso, cuando él reconocía su superioridad.

Goten desencapsulaba el auto, Bra lo miraba a unos metros de él con todo detalle, la tenue luz de la luna llena le hacia verlo derrochando masculinidad, tenia una rara sensación, un calor que recorría todo su cuerpo y se intensificaba más y más, solo Goten producía esa sensación con tal intensidad.

Se subía al auto cuando volvió a sentirlo

-Bra… ¿Qué sucede?- alguien la estaba mirando. Se bajo de inmediato, vio rápidamente la calle, la fila de gente aguardando a entrar al antro, las luces de neon, los autos pasando- Bra- No estaba dispuesta a soportarlo más.

Un hombre estaba cerca de la fila, escondiéndose tras una palmera de cerca de 5 metros, era alto, cabello negro, ojos azules, tez blanca, bestia un pantalón de mezclilla, una playera azul con un halcón amarillo estampado y una chamarra gris.

-Infeliz

-… ¡Bra! ¿A dónde vas?- Era él…diferente; pero era obvio que era el mismo

-No hables- dijo mientras se paraba tras él- no intentes correr; puedo alcanzarte- ¿entiendes?

-Si- contesto con timidez

-Esto se esta convirtiendo en un problema que debemos hablar- Goten se encontraba justo detrás de Bra, al pendiente de lo que ella dijera. Le llamaba la atención que una chica como Bra cruzara palabra con un tipo como aquel de apariencia desarreglada y algo trastornada; se le veía extraño y eso era más que evidente; pero… ¿lo había visto antes?

-¿Quién es ese sujeto?- pregunto el saiyajin con seriedad, Bra, de inmediato sujeto al extraño de la muñeca, evitando de esa manera que se escapara. El hombre de la chamarra gris miraba al piso, evitando a toda costa mirarlos a los ojos, algo ocultaba, era obvio

-Este sujeto no deja de seguirme, hace 6 meses que lo atrapo la policía siguiéndome a cada lugar a donde iba – Goten súbitamente se lleno de ira, quería tomar a ese hombre y arrojarlo por el suelo con tal fuerza que lo agrietara, destruirlo a golpes; pero Bra le detuvo con una mirada gentil, le pedía que la dejara actuar a su manera- me imagino que acaba de salirse de la cárcel…hoy me siguió al lugar donde fui a comer con mis amigas y hasta me siguió a la escuela, ahí hablamos y descubrí que la fuerza física no sirve con él- apretó su muñeca cuidando de no romper sus huesos- ¿no es así, McKee?- pero, aunque era doloroso, evitó gritar, no quería llamar la atención

-Yo no hable con usted- dijo aquel hombre

-¿Qué has dicho?

-Que no hable con usted- Bra le apretó la muñeca aun más, ya no le interesaba si le rompía los huesos

-La policía sabrá como tratarte, maldito enfermo mental…estoy segura de eso

"nunca hables con la policía sobre la misión, si lo haces, te llevaran sin dudarlo al lugar donde no te escucharan, te perderás tu mismo, morirás ahí, no podremos salvarte"

-No, no…Videl, no es verdad…dime que estas mintiendo- le suplico el saiyajin entre sollozos- ¿Cómo? ¿Por qué?...Él estaba bien, no puede ser… ¡Videl!- Dejo caer el celular, no le importaba más, nada de lo que su cuñada dijera repararía lo que había pasado

-¿Qué pasa?...Goten- le abrazó, la situación lo requería, pasaba algo grave, demasiado fuerte como para ser soportado por solo uno. Son lloraba amargamente aferrado a ella, sentía las lagrimas frías hacer en su pecho, un llanto que no se preocupaba en ocultar, ella era él único consuelo que tenía en esa pequeña delegación de policía

-Gohan- respondió haciendo a un lado sus lagrimas- Gohan ha muerto, ha muerto- comprendió entonces que ella era el único pilar que lo sostenía, el estaba completamente deshecho- Videl…Videl me dijo que fue repentino, cayo muerto o algo así, afuera del hospital…quiero ir- como no estar con el dolor consumiéndolo por dentro- pero ni siquiera puedo conducir o volar, siento que no puedo hacer nada- como no sentir dolor por el hermano que fue como un padre por 7 años, su modelo a seguir, su consejero, el maestro que lo enseño a volar y controlar su ki

-Mi madre vendrá pronto, ella nos llevara con Videl y tu mamá- le acaricio el rostro, lloraba también contagiada por el dolor de Goten, uniéndose a su pena, diciéndole que estaría ahí para él sin importar nada.

-Nos vemos de nuevo…Trevor McKee- el detective, era un hombre alto, complexión gruesa, ojos cafés, cabello oscuro, la piel morena y en su cara, en la mejilla derecha, podía verse una vieja cicatriz, como si una navaja o algo similar le hubiera cortado hasta el labio, un poblado bigote la ocultaba parcialmente dándole un aspecto aun mas tosco a su rostro- ¿No saludas?- se sentó a la mesa de madera sencilla, aporreando el grueso expediente, el sonido estruendoso incomodo al joven- Dime McKee…¿Cómo haces para verte joven?- McKee le miro extrañado, sin comprender la relevancia de sus palabras, al instante recordó que no debía mirarlo a los ojos, podría ser demasiado revelador- Ya no es a Bulma Brief a quien sigues…ahora te enfocas a Bra…ahora toda la familia ¿eres de esos que creen en los valores familiares? …es linda Bra, a pesar de ser tan chica tiene algo que deseas con solo verla; pero no creo que me comprendas- saco un cigarro de la cajetilla, miró fijamente al chico ¿Cómo demonios le había hecho? Se veía más joven que las demás veces que abarcaban varios años, creería que no era el mismo de no ser porque sus huellas dactilares coincidían en un 100 por ciento con el del McKee que recordaba, era posible que se hubiese hecho cirugía plástica, casi cualquiera podía acceder a ese procedimiento en esa época

-cirugía ¿No?

-¿Qué?-

-Vaya- y encendió el cigarrillo con el ultimo fósforo de una cajita con una fotografía de una montañas- no te comió la lengua el ratón como pensé- azotaba la cajita suavemente en la mesa esperando una respuesta que de antemano sabía que no habría

-Dime algo McKee ¿Por qué sigues a Bra? Es solo para el expediente

-Pensé que era Bulma Brief

-¿Cómo? Ja, ja, ja has de estar ciego, hay mucha diferencia de edad entre Bulma y Bra

-Solo pensé que era ella. Respondió con la mirada dirigida al piso, solo viendo las manchas de café y sangre que ahí estaban. Le pareció escuchar que el detective se levantaba, alzo la vista, el detective desconectaba la vieja cámara que los estaba filmando, se inclino a dejar su cigarro en el piso sucio.

-Sabes- le dijo mientras se acercaba a la mesa- te recuerdo muy bien; pero parece que tú no me recuerdas en lo absoluto- el joven le miro fijamente y con preocupación, al pendiente de sus movimientos, algo le decía que ese sujeto tenía un rencor contra él alimentado desde hacia muchísimos años- talvez te refresque la memoria- se sobo los nudillos como si les preparara para algo especial- Hace 17 años, a las afueras de la corporación Capsula fui a verificar el llamado de una persona quien había dicho que se te veía merodeando y acosando a Bulma Brief, te vi hablando con ella, fui a arrestarte y te opusiste ¿recuerdas como? El detective percutió en su cabeza el temporal derecho dejando salir un sonido metálico- ¿lo escuchaste? Tú lo hiciste, me golpeaste tan fuerte que me hiciste ese hueso pedazos ¿lo recuerdas ahora?

-No, señor…no lo recuerdo- balbuceo confundido

-No lo recuerdas…. ¡No lo recuerdas, maldito!- toda su piel se torno roja, sus ojos se sobresaltaron de su cara, las venas de su cuello se hincharon; tomó la caja de fósforos y se la arrojo con violencia a McKee-Hoy tras 17 años, me vengare finalmente- tiró la mesa con un solo movimiento, alzó al joven por el cuello de la playera y lo aporreo contra el suelo manchado de sangre y café -¿Cómo es posible?- furioso le pateo en las costillas una y otra vez hasta el cansancio, McKee, mientras se replegaba sobre si mismo, le pareció escuchar el crujir de sus costillas rotas, el terrible dolor que lo invadía le confirmaba que aquellos huesos se habían fracturado- idiota, te dije que me vengaría ¿recuerdas tu estúpida cajita de fósforos?- y la tiro de nuevo a su cara- "Solo queda uno" me dijiste "para que prendas tu cigarrito"- tomo el cigarro que había dejado en el suelo y regreso con el hombre que estaba lleno de sangre, moretones y miedo

-Esto es para ti, Trevor McKee- le alzó la playera sin importar los aullidos del chico al rozar sus costillas rotas- para que nunca olvides a Isaac Smith- y le apago el cigarro en el pecho, el joven apretó los dientes tratando de soportar el dolor, a tal grado que sentía que los dientes se le romperían en cualquier momento.

-Detective Smith- le llamó con desprecio- quiero verlo, mi hija me dijo que estaba aquí

-¿Quién?- pregunto mientras revisaba varios expedientes en su escritorio sin tan siquiera verla a la cara, no quitaba los ojos del arrugado y viejo expediente, apoyaba medio cuerpo sobre ese escritorio lleno de basura y comida chatarra…como detestaba, siempre lo había hecho.

-Usted sabe de quien hablo…de Trevor McKee, quiero verlo- alzó la mirada, sus ladinos se ojos se clavaron en la mujer

-Señora Brief, McKee no esta en condiciones de ver a nadie

-¿Qué le hizo Smith?...Recuerdo sus palabras, hace 17 años…dijo que se iba a vengar y conociéndolo ya lo ha hecho ¿O no?

-No es de su incumbencia, señora- y regreso su atención a los expedientes sin importarle el desprecio y la desaprobación de la señora Brief

-Puedo mandar a hacer una investigación y que le quiten la placa, se muy bien que no es la primera vez que incurre en violencia policíaca- cerró de un golpe el expediente y se reclino sobre su vieja silla.

-¿Le entro el remordimiento y quiere verlo?

-No le debo explicaciones, lléveme con él de inmediato

-…como quiera

Su celda era gris, los barrotes negros, un olor a humedad minaba todo el lugar haciendo difícil de respirar el vital aire. Se acostó boca arriba en el desarreglado catre, en el cual cientos de personas habían dormido antes, trataba de no moverse, sus costillas rotas le molestaban incluso al respirar, un agudo dolor se disparaba de inmediato y tenía que morderse la mano para soportarlo.

Perdía el tiempo, debería de estar afuera buscando los planos, fue para lo que lo mandaron en primer lugar, no para quedarse en una fría y sucia celda, adolorido y con los huesos rotos.

-¡McKee!- se estremeció al escuchar la grave voz de Smith, resolvió no hacer ningún movimiento y quedarse callado –te buscan McKee… ¡levántate haragán!- con dificultad y, lo que era peor todavía, con dolor se puso de pie, uno de sus ojos estaba hinchado, no podía ver bien; pero distinguía una figura femenina tras el detective- No puedo abrir la reja, señora Brief- dijo Smith con desden- así que conversaran a distancia- los estrepitosos pasos parecían alejarse; él se quedo de pie sin hacer nada más que respirar

-Se ha ido, Trevor…acércate- era una voz femenina que le deba paz, le recordaba a alguien ¿a su madre?- Smith te hizo esto ¿no es así?- miraba detalladamente el rostro del chico, consternada examinaba el ojo inflamado y lleno de sangre, la respiración dificultosa y la crepitación de los huesos rotos, era sin duda un salvaje, movería todas sus influencias para que lo echaran

-Se porque estas aquí y de una vez te digo que no te daré lo que buscas- vio mejor a la mujer de sedosos cabellos verdes y ojos azules, esa era Bulma Brief con un traje azul marino y blusa blanca, no podía equivocarse

-¿Por qué?

-¿Por qué? …no voy a permitir que eso pase ¿entiendes? Cuando los veas diles que puedo seguir mis investigaciones y llegar a una solución…tienes que decirles, aunque no te hagan caso, insísteles

-no puedo cambiar lo que vine hacer, ellos hicieron hincapié en eso

-Lo se, Trevor, yo lo se; pero diles, no perdemos nada, si tan solo supieras quien es el ejecutor B…dime algo, se que no fuiste tú- el joven la miro fijamente, tal como le habían dicho era una mujer elegante y carismática, toda una dama- Gohan murió anoche ¿tú tuviste algo que ver?

-No…usted sabe mucho, debería saber que yo no hago eso, no es lo que me mandaron a hacer, eso es del ejecutor C

-¿Quién es?

-…No conoce al ejecutor C

-En todo este tiempo…solo te he conocido a ti

-Usted sabe- y se acerco a los barrotes- Gohan es el primero, buscaran a los demás y acabaran con ellos también, solo es cuestión de tiempo y no puede evitarlo, su familia debe desaparecer y los Son también…

-Eso no pasara- contesto con severidad- porque nunca te daré los planos

El funeral del Son Gohan acaeció en un día lluvioso y gris, pocas veces se había visto llover así, como si la naturaleza se hubiese puesto de luto y decidiera acompañarlos en su dolor.

Solo quería saber… ¿saber que? El como murió, no entendía como un hombre sano, que en toda su vida jamás se había enfermado, moría de repente.

Se daba cientos de razones; pero ninguna la consolaba, ninguna llenaba el vació de su corazón, su padre había muerto, nunca había tenido un dolor tan grande, tan pesado, un dolor que la llevaba al borde de la desesperación y la locura. Pan Son únicamente quería respuestas, el como y porque, su mente pensaba en ello una y otra vez sin descanso,

Sentada a la izquierda de la sala de velación, no perdía de vista a su padre yaciendo en el fino ataúd, digno de un hombre como lo fue él, tenía el rostro pálido, placido y tranquilo, debió ser una muerte muy rápida e indolora para que su rostro descolorido luciera así.

Se preguntaba si en esos últimos minutos pensó en ella, si intuía que iba a morir, si lo supo todo en ese momento, nunca en la vida le habían surgido tantas preguntas.

Escuchaba los sollozos interminables y amargos, veía la mirada perdida de su tío, callado y atrapado en su mente como si no quisiera salir de ahí jamás, y podía sentir el corazón desecho de su madre. Todo lo demás pasaba a segundo plano, fuera de su familia y su padre, nadie más importaba.

Era tanto su ensimismamiento en la pena y el dolor que no se percató que entre tanta gente habían dos personas que nunca había visto, uno de los dos era una mujer y el otro un hombre que observaba, siempre observaba…aunque esta vez era observado

-Sabes lo que quiero- le dijo a Bulma al oído

-Ya te lo he dicho, McKee- contesto con tranquilidad- no te dará nada- el joven se aparto de ella de inmediato, no tenía caso insistir, esta mujer ya se había obstinado en no darle los… ¿Qué podía usar para disuadirla? Las ideas no le llegaban a la cabeza

-Siento lo que hice con el bebé, aquella vez, no se si ya se lo he dicho antes; pero no iba a lastimarlo…a menos que no tuviera otra opción…

-¡Cállate! ¡Aunque hayan pasado casi treinta años no olvido lo que nos hiciste pasar!- recobro la calma, no podía superar lo que el joven, en su desesperación había hecho, a pesar de los años que todo lo curan, esto era lo único que no podía entender, ni mucho menos perdonar y quizás jamás lo haría, aun recordaba su desesperación, su frustración y el llanto exasperado del pequeño Trunks como si fuera ayer- vete, tú no tienes nada que hacer aquí

-…por favor, ahora ya investigó- suplicó McKee al borde de las lagrimas- debe saber que yo necesito esa información

-No- contesto rotundamente y no pensaba seguir discutiendo, sin más se dio la media vuelta dejando a aquel hombre en una despiadada desolación.

Salio de ahí porque, tal como Bulma le había dicho, no tenía sentido quedarse, si ella ya se había decidido a no darle ni la información ni lo planos que tanto necesitaba, insistir era totalmente inútil.

Se quedo afuera de la funeraria, varias personas estaban ahí, todas ellas con un rostro de consternación, no podían creer que Son estuviera muerto, todo fue tan abrupto, tan inesperado, que parecía parte de una broma o al menos eso querían creer.

Deberían acostumbrarse, Gohan era el primer eslabón de una cadena de muertes, todos ellos debían morir si querían preservar el futuro

Tenía que irse, no había más que hacer, doblo por una esquina hacia un callejón que daba a una avenida principal para perderse entre la multitud

-¿Crees que me he olvidado de ti?- un brazo lo había acorralado contra la pared con tal fuerza que comenzaba a ahogarlo-Te estuve viendo hablando con Bulma ahí adentro ¿Qué quieres ahora?- abrió los ojos no distinguía la figura que tenía enfrente, entrecerró los ojos, aun así no era fácil…distinguía un cabello extraño, rasgos duros, no muy alto, vestido con traje negro y camisa blanca

-Vegeta…-alcanzó a susurrar-…déjeme

-Hace años que te veo merodeando cerca de nosotros, siempre apareces cuando algo malo va a pasar-y apretó con más fuerza su brazo contra su garganta, el aire comenzaba a acabarse, sudaba profusamente y sentía que su corazón iba a estallar-¿Quién eres? ¿Qué quieres?

-no puedo hablar de eso- respondió con dificultad, invadido por el pánico mas que por la falta de aire

-no me interesa… ¡Vas a comenzar a hablar ahora!

-No puedo-insistió- es imposible hablar de eso con usted o con cualquiera- Vegeta perdió el control, lo tomo con ambas manos y le azoto contra la pared, haciendo caer parte de los ladrillos

-Tú trataste de matar a Trunks cuando apenas era un bebé y ahora vienes siguiendo a Bra

-Estoy desesperado…

-¡ ¿Qué quieres!... ¡dilo de una buena vez!

-No puedo hablar de eso con usted, si quiere saber algo, pregúntele a Bulma Brief

-… ¿Qué estas diciendo?

-…Ella sabe…sabe todo, yo no puedo hablar; pero ella si, ella puede decirle que pasa

-No…no puede ser- era difícil de creer que su mujer le hubiera ocultado algo importante. Hacia varios años que ninguno se tenía secretos, él se lo había confesado todos y ella había hecho lo mismo; este hombre tenía que estar mintiendo no tenía otra explicación-mientes- le esgrimo convencido de ello.

-No miento- Vegeta le soltó, sus años como un experimentado guerrero al servicio de Freezer le habían dejado cierta habilidad, sabia cuando le mentían y cuando le querían tender una trampa y este no era el caso

-¡Papá!- escucho Bra llamarle repetidamente-papá- y volteo al escuchar la voz de su hija y en ese instante el ki de aquel sujeto había desaparecido, como si hubiera muerto-¡Papá!...aquí estas- no había una explicación coherente para eso, no se pudo haber escapado a ningún lado sin que él se hubiera dado cuenta-Ven, mamá esta preguntando por ti

-…Desde entonces he visto a papá muy extraño, no se…estoy segura que él y mamá tienen problemas muy serios

-Bra- le dijo Trunks con seriedad mientras revisaba los detalles de la construcción de una nueva fabrica en la sección XI de la capital del sur- ellos siempre pelean, así es como son

-no, esto es algo diferente- le esgrimo la joven de ojos azules- es algo grave…lo presiento- El presidente de la corporación se extraño ante sus palabras, su hermana menor podía tener razón, era una joven suspicaz a quien difícilmente se le podía engañar

-¿Por qué dices algo así?

-confía en mi, nuestros papás no están bien… ¿tú no te has dado cuenta?

-En realidad no he tenido tiempo de ver como van en su relación- su realidad también incluía algo que no había dicho, que temía que sus padres llegaran a separarse, a pesar de ser mayor, su mundo se vendría abajo. Si, no tenía porque ocultarlo, tenía el mismo miedo que tendría un chiquillo de saber que sus padres podrían llegar a distanciarse- de cualquier manera, eso es asunto suyo, ellos deberán resolverlo, no podemos inmiscuirnos en eso

-¿Vas a dejarlos así?- pregunto desanimada ante una respuesta tan simple, ella esperaba que su hermano mayor dijera que harían todo lo posible por que todo estuviera bien de nuevo, moverían cielo, mar y tierra si era necesario; pero no fue lo que escucho

-Para nosotros son nuestros padres, no podemos ver al hombre que mamá ve, ni a la mujer que ve papá, no los conocemos así, eso es asunto suyo, solo ellos pueden resolverlo- Bra se cruzó de brazos, le molestaba la apatía de su hermano, era obvio que tenían que hacer algo; pero en parte…en parte tenía razón.

El agudo repiqueteo del teléfono saco a Bra de sus pensamientos- Espera- le pidió Trunks mientras contestaba- Brief…si…-algo andaba mal, no tenia de lo que estaba mellando en la relación de sus padres- Es probable que dentro de una semana si no es que antes- su mente quedo en blanco, tamborileaba los dedos en el escritorio esperando a que su hermano terminara esa llamada que se la hacia eterna-¿Recibiste esos documentos o…-sus inquietos dedos tocaron una superficie lisa, vio una carpeta blanca con el logo de la corporación como cualquiera de las que su hermano tenía en la oficina, sin tener nada más que hacer, se dispuso a ver su contenido

"Trevor McKee-117483924765-29

Denunciado por primera vez en el año 769 por Bulma Brief, en Ciudad del Oeste…

…McKee presuntamente apuntó un revolver calibre 38 al menor Trunks Brief de 2 años de edad

…Identificado como Trevor McKee por huellas dactilares del pulgar"

Era un informe policiaco del sujeto que le había estado acosando… ¿Cómo llego a manos de Trunks? Decidió seguir leyendo, necesitaba saber la razón por la cual aquel sujeto le estaba siguiendo

"Primer arresto registrado en el 3 de marzo del 769 por allanamiento de morada…toma de rehén...

…Escapa de prisión el 9 de marzo del mismo año… capturado el 2 de mayo del 771"

Y leyó someramente varias paginas más que describían varios arrestos y escapes de prisión, quería saber si Trunks había logrado averiguar algo más . No tenía más remedio que esperar que su hermano mayor terminara su llamada.

Aun sostenía la carpeta en sus manos, mientras Trunks continuaba hablando por el teléfono y por un instante le pareció ver en sus ojos un halo de temor al percatarse que tenía la carpeta, temor que se convirtió en ira en cuestión de segundos.

Desde el momento en que vio ese expediente supo que su contenido no era ordinario; pero ese miedo en los ojos de Trunks le hizo comprender que no había algo ahí que nunca le diría, algo importante o quizá increíble.

Busco rápidamente, leyendo las palabras a toda velocidad, debía haber algo.

Unos segundos después de colgar el teléfono, Trunks escucho caer los documentos de aquella carpeta, Bra estaba absorta, lo que acababa de leer no podía ser cierto, posiblemente lo leyó mal; pero no fue así, todo estaba impecablemente bien escrito.

La joven se cruzó de brazos, como si así se defendiera de esas palabras que le habían hecho tanto daño.

"Lo ha leído" pensó Trunks "Lo sabe ya"

-¿Qué significa eso?- pregunto en un murmullo aun incrédula de aquellas palabras de las cuales estaba dispuesta a creer en su falsedad si le revelaban que tenían esa condición; Trunks no respondía, quizá no quería hacerlo-¿Qué significa?- subió el tono de voz por si acaso no le había escuchado

-Dime que es lo que viste- ordenó para asegurarse de que hablaban de lo mismo

-¿De que más podría hablar?- pregunto exaltada- tú lo sabes bien y exijo una explicación

-No puedo explicarte nada- Bra aporreo el puño contra el escritorio con tal fuerza que llego a hundir la madera- no puedo decirte nada, porque yo no se nada tampoco, más que lo que he leído. Se lo que sientes Bra- le dijo con compresión- yo también me impacte al leer eso: "Prueba de maternidad: compatible con DNA de Bulma Brief, 16 de julio 771"…yo solo se que ese sujeto dijo, cuando lo arrestaron en ese año, que su madre es Bulma Brief por eso hicieron esa prueba y salio positiva- ¿era acaso esa la razón por la que sus padres tenían problemas? ¿Era esa la razón por la cual la acosaba? Pero la pregunta principal era si eso era cierto y haría lo que fuera necesario por descubrir la verdad.