Canciones En Las Noches De Verano
by hannah-hm
Ohayo a todos/as!! Este es mi primer fic de Tokio Hotel que le prometí a un par de personas que haría... No em mateis por poner cosas que no deba xP!! Y, bueno, a continuación pondré algunos datos sobre el fic:
Nombre: Canciones En Las Noches De Verano
Autora: hannah-hm, osease, yo nOn
Género: Pues General/Humor, ya que de romance va a haber mas bien poco.
Dedicatoria: Pues este fic está dedicado a mi queridísima amiga Natalia, que adora a Tom xDDDD, y a las 2 Albas, para su disfrute n.n
Advertencias: Pues... que digo?? O.o Ah! Que si no te gusta Tokio Hotel, ni que ellos sean hetero (perdonadme algunos por decir esto) ni que sea yo quien escriba este fic, no lo leas n.n
Notas de la Autora: Bueno, no tengo mucho que decir, salvo que este fic se me ocurrió un día nadando en la piscina xD, y que a pesar de que ciertas personas me supliquen que no escriba nada, lo siento, aquí está.
Y nada más que añadir, salvo que... Aquí está el primer capítulo, que lo disfruteis!!!
Capítulo 1¡Viaje!
-No puedo creerlo...Simplemente no puedo creerlo...
Ahí estaba. La carta sobre la mesa, y una chica de unos 18 años de pelo castaño y ojos azules frente a ella. Cogió el sobre, lo volvió a abrir una vez maya y leyó por millonésima vez la carta.
-¡Dios, que increibleeeee...!- gritó la chica, dando saltos por toda la habitación.
-Ana, por dios¿Me puedes decir qué te pasa?- dijo una anciana, que acababa de entrar por la puerta.
-¡Abuela, abuela!- gritó la susodicha Ana, corriendo hacia su abuela y abrazándola.- ¡No puedo creerlo, es increíble!
-¿El qué es increíble?- dijo la anciana, intentando quitarse a la chica de encima.
-Lee y lo descubrirás...- dijo Ana misteriosamente, mientras le pasaba la carta a su abuela.
Querida Ana:
¡Enhorabuena! Has ganado el concurso "Pasa un Verano con Tokio Hotel", que cerró sus bases el pasado día 30. Lo primero que te diremos es que¡ve haciendo las maletas, que te vas de viaje! Te adjuntamos los billetes de avión y todo lo necesario para ello. Como ya sabrás, el fantástico premio es pasar un verano de ensueño en Niza, Francia con nada más y nada menos que ¡Tokio Hotel! Y como sorpresa extra te decimos que puedes llevarte a un amigo, amiga o familiar contigo. Saldréis el próximo día 1 de Julio, a las 8 de la mañana en el avión que sale desde Barajas hasta Niza.
¡Que tengas buen viaje!
Y justo debajo, una firma incomprensible.
-¡Ay, Dios mio, niña!- exclamó la abuela, abrazando a su nieta.
-¡Eso mismo digo yo, abuela!- dijo Ana entre risas.
-Bueno, tendremos que hacer las maletas, hay mucho que preparar.- sugirió la abuela. Por cierto¿ya sabes a quien llevar?
-RIIINGGGG, RIINNGGGG!!!! (N/A: que onomatopeya mas buena ¬¬)
-¡Ya va, ya va!- exclamaba una chica también de 18 años, con los ojso castaños y el pelo castaño casi negro. Parecía que tenía la espalda algo quemada.- ¡Qué tonteriía, Alba, ni que te fuera a escuchar el que está detrás de la línea! – la chica cogió el teléfono- ¿Diga?
-Kairi-sama, adivina quien soy...- dijo una voz cantarina desde el auricular.
-Hannah-chan, ya te tengo dicho que no me llames así...- la susodicha Alba cerró los ojos, entre mosqueada y divertida.- Somos amigas, no tienes que llamarme de sama...
-Sí, sí, lo que tu digas...- dijo indiferente la voz del teléfono, lo que mosqueó a Alba.- Pero...¿A qué no sabes lo que me ha pasado?
-¿El qué?- pregunto extasiada Alba.- ¿Tiene algo que ver con el chocolate?
-No... UU
-Jo...
-Lo dicho, te daré una pista: tiene que ver con Tokio Hotel...
-No me digas que...- exclamó Alba, y una exclamación de asentimiento se oyó desde el auricular. Alba gritó tan fuerte que su padre se asomó para ver qué le pasaba.- ¡Has ganado el concurso "Pasa un Verano con Tokio Hotel¡Jopetas, Ana, que potra! Ojalá yo también pudiera ir...
-Bueno...- susurró Ana desde el otro lado del auricular. Apenas podía contener la emoción y la risa al pensar en la reacción de su amiga.- Lo cierto es que esa era una parte de la sorpresa... Resulta que puedo llevar a alguien... ¿y a que no adivinas quien es ese alguien?
De repente, se hizo el silencio... Ana pensó que tal vez su amiga no se lo creía, pero al pasar los minutos se empezó a preocupar...
-¿Y si el ha dado un infarto por la sorpresa?¡Que mal rollo!- pensó.- ¡Alba, Alba¿Estás ahí?
Se oyó tal grito desde el auricular que Ana tuvo que apartarse del teléfono porque casi la deja sorda. En cambio, Alba daba saltos contentísima en su casa. ¡No podía creerlo¡Su amiga Ana había ganado un viaje con Tokio Hotel, y entre todas sus amigas las había elegido a ella! Cuando cogió el auricular, no pudo evitar que se le quebrara la voz al hablar.
-¡Ana, es fantástico¡Te quiero muchísimo, amigocha! Pero no vayas a pensar mal... ¿eh?
Sonó una carcajada al otro lado del auricular.
-Claro que no, amiga, es qué...- Ana se interrumpió al escuchar un sollozo por la otra línea.- Alba¿estás llorando?
-¡No, que va1- exclamó Alba, limpiándose un par de lágrimas.- Es que tengo Mocovitis, o algo así, que me hace sollozar e hipar, e incluso sudar por los ojos. ¿Puedes creerlo?
Ana se rió de nuevo. Hacía tiempo que no lo hacía, y había empezado a sentirse muy bien.
-Bueno¿pues qué hacemos hablando¡Corre a hacer la maleta!- exclamó.
-¡Claro, ahora mismo, señora!- y colgó.
Alba corrió a su habitación, sacó su vieja maleta del armario y empezó a meter ropa precipitadamente en ella.
-Vamos a ver... camisetas, pantalones, este vestido negro, las braguitas de las Princesas Disney... ¿Braguitas de las Princesas Disney¡Alba, leñe, que vamos con Tokio Hotel, no Disneyland París...! Aunque mirándolo de otra forma...
Un par de golpes en la puerta interrumpieron su conversación.
-Alba¿puedes descansar un momento y decirme qué ha pasado?
Alba dejó de hablar y sonrió a su padre, que se había sentado en la cama.
Ana abrazó fuertemente a su abuela antes de montar en el avión que la llevaría a Madrid.
-Escríbeme¿vale?- dijo su abuela, con lágrimas en los ojos.
-¡Abuela, que sólo son dos meses, no me voy a la guerra ni nada!- exclamó Ana, lo que provocó que su abuela soltara una carcajada.- Me tengo que ir, porque si no, la pobre Alba se quedará sin billetes.
-Sí claro, cariño- contestó la anciana.- ¡Y duerme bien en el avión eh!
-¡Pero si sólo son un par de horas!
Ana montó en el avión. Era la primera vez que lo hacía, y andaba despistada. Tanto, que casi se sienta en el asiento del copiloto, pero una azafata la salvó y le indico su asiento.
-Por fin las cosas empiezan a ir bien...- pensó mientras veía sobrevolar Málaga en esa preciosa noche estrellada. Y al poco rato, se quedó dormida.
-¿Qué por poco te sientas en el asiento del copiloto?- gritó Alba, lo que hizo que Ana asintiera y se ruborizara.- ¡Habría que verte a ti pilotando, muajajaja!
-Ya vale, Alba...- susurró Ana, mirando sin parar a su alrededor.- Lo que tenemos que hacer es buscar el avión y luego ya...
-¿Ustedes son las ganadoras del concurso "Pasa un Verano con Tokio Hotel"?- dijo una azafata muy guapa vestida de azul.
-Sí.- dijeron las dos al unísono.
-¿Podríais acompañarme, por favor?- dijo la azafata, dándose la vuelta.
-¿Y por qué tendríamos que hacerlo?- exclamó Ana, desconfiada, cruzándose de brazos.
-Porque soy una enviada especial de Francia.- dijo, enseñándoles una placa en la que, efectivamente, era una especie de acompañante.
-Aaah...- exclamaron las dos.
-Pues andando.- dijo la azafata con una sonrisa.- Por cierto, mi nombre es Alissa.
Alissa era alta, rubia y con los ojos azul claro. Llevaba tanto perfume que detrás de sí iba dejando una estela rosada que Alba y Ana seguían casi hipnotizadas.
-Odio estas colonias.- dijo Alba, lo que provocó que Ana volviera a reír.
Estuvieron varios minutos siguiendo a Alissa, que no paraba de ir de un mostrador a otro, registrando los pasaportes, comprobando los billetes y hablando con algún otro empleado
-Bueno.- dijo Alissa, devolviéndoles los pasaportes.- Creo que sólo nos queda recoger las maletas, y ya podremos montar en el avión.
-Ah¿pero tú vienes?- preguntó Alba,, quien había empezado a arrepentirse de su decisión.
-Pues claro.- contestó Alissa.- Soy vuestra acompañante.
Alba y Ana se pusieron a hacer circulitos en el suelo, mientras un aura oscura las rodeaba. La gente las miraba asombrada.
-Veenga, vamos.- dijo Alissa, cogiéndolas del brazo y arrastrándolas hasta la cinta de las maletas.
Estuvieron más de veinte minutos buscando las maletas, pero no aparecían.
-¿Dónde se habrán metido las maletas?- dijo Alissa, algo mosqueada.
-Yo que tenía dentro todos los posters, revistas y demás para que me los firmaran...- dijo Alba, llorando de una manera un tanto cómica.
-¡Eh!- gritó Ana, señalando a una vagabunda que tenía dos maletas parecidas a las de ellas dos.
-¡Mi maleta!- exclamó Alba, al reconocer el llavero de Bill en el mango.
La vagabunda echó a correr y Ana tras ella. La mujer empujaba a toda la gente que se cruzaba a su paso, y en esto tropezó. Ana corrió hacia ella y se tiró encima, inmovilizándola. Entonces, llegaron algunos guardas y cogieron a la mujer, cuyo pelo resbaló y se pudo apreciar que estaba calva cual bola de billar. Se dio la vuelta y miró a Ana.
-Dios mío...- susurró la chica.
Un hombre, pintado hasta las cejas con maquillaje, sonreía a Ana.
-¡Bienvenida a Madrid!- gritó, mientras la policía se lo llevaba maniatado.
-Uff, que susto.- dijo Ana, y miró como Alba le estaba haciendo fotos al tipo de la calva.- No me dirás que...
-¡Exacto!- exclamó.- ¡Te he hecho fotos en tu espectacular persecución¡Ahora podemos irnos!
Cogieron las maletas y se dirigieron a las pistas, mientras la gente miraba asombrada a Ana, que intentaba esconder la cabeza en la camiseta.
-Aaah, que gusto.- dijo Alba, dejándose caer en su asiento junto a la ventanilla.
Ana no dejaba de mirar a Alissa, que desde que habían entrado en el avión no había parado de hablar con otra azafata. Entonces, la otra azafata se volvió hacia la puerta del avión y ayudó a entrar a dos chicas de unos 16 años, que se dirigían hacia ellas dos.
Cuando las chicas estuvieron lo suficientemente cerca, Ana pudo reconocer fácilmente sus caras. Abrió mucho los ojos, y se los frotó varias veces para cerciorarse de que su visión era real.
-No puede ser...
Continuará...
¡Y aquí se termina! Siento que sea tan corto, pero es tarde y el primer capítulo tenía que acabar aquí. Espero que os haya gustado.
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Nos leemos!!ATTE: hannah-hm