Bueno esta es mi primera historia, así que no sean tan duros . . Acepto criticas constructivas,opiniones, regalos, etc xD

Bueno esta historia salió de mi cabeza un día en clase y quise hacerla realidad de alguna forma, bueno, esto hasta ahora comienza, sin más les dejo el primer capítulo.

Advertencia: La historia es yuri (ChicaxChica)

Quizás haya lemon, pero más adelante.

Es una historia NanoFate.

Esta ambientada en la actualidad así que nada de poderes y eso como se ve en la serie.

La personalidad original de los personajes puede varias para una mejor adaptación de la historia.

Disclaimer: Mahou Shoujo Lyrical Nanoha No me pertenece, solo se ha usado sus personajes con el fin de crear una historia alterna de invención propia. No se busca lucrar de ninguna forma con esta historia.

Aquello que está en cursiva son la conversaciones.

* Pensamientos.*

" Sarcasmos o indirectas de los personajes."

Disfruten :3


Capítulo 1. Una noche

Soy Nanoha Tamakachi, pronto cumpliré mi mayoría de edad, mi padre es Shiro Tamakachi, un empresario exitoso, dueño de una de las empresas más cotizada del mundo. He viajado por todo el mundo, tanto que a duras penas recuerdo cada lugar, mis amistades suelen ser bastantes cortas, debido a que me mudo con bastante frecuencia, mas eso no me ha impedido hacer dos grandes amistades. Hayate Yagami, mi amiga de infancia, le digo "mapache" de cariño, suele ser bastante extrovertida, divertida, alegre y una persona que siempre te sacara una sonrisa en los momentos más difíciles, alguien en la cual se puede confiar, luego esta Yuuno Scrya, un chico bastante simpático, le digo "hurón", ya que cuando éramos pequeños su madre lo vistió como un hurón para una fiesta, la verdad se veía adorable pero muy chistoso, Hayate le puso ese sobrenombre y suele molestarlo bastante desde ese día.

En estos momentos me encuentro en Canadá, estudiaba en una pequeña escuela privada, solo llevo dos meses acá pero dentro de tres días tendré que irme a Italia a terminar mis estudios, y se preguntaran el por qué me mudo tantas veces, la respuesta es simple, mi padre, él tiene que viajar a muchos lugares y como no desea dejarme sola me lleva con él, aunque nunca lo veo, si compartimos una cena cada 6 meses es un milagro, desde que murió mi madre, el cambio, ya no es el mismo padre amoroso que recuerdo de mi niñez, la muerte de su amada le dio bastante duro, y desde entonces juro protegerme, aunque todavía no sé de qué, pero bueno, prosiguiendo, dentro de tres días me iré a Italia, no lo he visitado antes, pero por primera vez estoy emocionada de ir a algún lugar ya que Hayate y Yuuno se encuentran allí terminando la preparatoria, a pesar de que mi italiano es muy básico, espero adaptarme allá, y durar más de tres meses.

Tres días después.

Estoy nerviosa, no es por el avión, ya he viajado en muchos, es por mi padre, desde hace mucho no lo veo pero me entere que viajara conmigo. Lo veo a lo lejos, se acerca con su elegante traje y hablando por el celular, me mira y me indica con la cabeza de que debo subir al avión, obedezco sin más, una vez ya dentro me acomodo, espero un poco y luego de unos minutos entra mi padre, se sienta al frente mio.

-Nanoha, iniciaras clases apenas lleguemos, ya todo está listo si necesitas algo, solo dile a Shario.

Estaba nerviosa, su tono era frió como de costumbre pero aun a pesar de los años no lograba sentirme bien con el alrededor.

-Mmmm… ¿Padre?

-¿Si?

-Pronto será mi cumpleaños y… y bueno….

-Habla ya Nanoha.

-Bueno quería saber si quizás pue-

En esos instantes el móvil de el volvió a sonar, sin pensarlo contesto, me sentí frustrada, solo quería comentarle si podría pedir un día libre para mi cumpleaños, a pesar de su tono frió, lo quería, y quería volver a sentir ese amor de padre que sentía de niña, suspire en forma de derrota y mire hacia la ventana.

-Cuanto desearía poder volar a través de esas nubes de algodón jejeje (Susurro)

Llegamos a Italia, en todo el viaje mi padre no se despegó de su teléfono móvil, es curioso como dicen que nunca debes usar tecnología en los aviones, pero es falso, ya que siempre veo a mi padre hablando por el móvil durante los viajes y nunca ha pasado nada, creo que siempre ha sido una conspiración de los pilotos.

Cuando baje nos dirigimos a una limosina, que nos llevaría a casa, bueno a mí, ya que mi padre se subió a otro carro, supongo que tendría una reunión, no lo sé.

Cuando llegamos Shario estaba en la puerta esperándome, me baje y la abrace, porque a pesar de ser una emplea más de mi padre, ha sido la única compañía que he tenido en años.

-Shariiiiiii

-Wow, no pensé que me extrañaras tanto, solo fueron tres días separadas.

-Tres días fueron mucho tiempo Shari.

-Jejeje, bueno pero ya estamos de nuevo reunidas, que te parece sin entramos, ordenamos las maletas y quizás vayamos a un restaurante "italiano" que vi aquí cerca, dicen que la pasta es exquisita.

-Odio la pasta.

-Pues, estamos en Italia así que dudo que encontremos otra cosa.

-Mph… (Mohin)

-Vamos no seas amargada.

-Esta bien, pero quiero pizza, no pasta.

-Nunca dejaras la comida chatarra ¿Cierto?

-No jiji (Sonrisa amplia)

-Vamos a ordenar todo adentro chu chu.

-Pero no quiero ordenar (Mohin)

-Entonces no hay pizza.

-¿Dónde queda mi habitación que he de ordenar?

-Nunca cambias ¿Cierto?

Después de eso entramos y ordenamos mi habitación, bueno un poco, ya que no quería hacer nada así que simplemente metí la ropa en el closet como cayera, ya luego la ordenare bien. Después de eso no fuimos a una pizzería que quedaba cerca, Italia en completamente distinto a otros países, y sobre todo en el lugar que me encontraba, la linda ciudad de Venecia, nunca me imaginé que una ciudad podría vivir en medio del agua.

Cuando llegamos a la pizzería para mi sorpresa Hayate y Yuuno estaban sentados dentro del local, me emocione y entre corriendo, los abrace, ellos me correspondieron el abrazo.

-Los extrañe tanto chicos, ni se imaginan (sollozos)

-Tranquila chica que ya estamos aquí, y nada ni nadie "Lo digo por tu padre" podrá separarnos, es más para celebrar hoy nuestra reunión yo invitare la pizzas

-¿Qué? ¿Hayate invitando algo? Toca aprovechar hoy Nanoha.

-Callate hurón, dame tu billetera.

-Espera ¿Qué?

-Ahora por ese comentario tú pagaras todo, a ver saca tu billetera y dame todo tu dinero.

-No, no te daré nada.

-Que me lo des.

-Que no.

-Que sí, o publico tus fotos vestido de cone-

-Ok, ok toma la billetera mapache del demonio.

Me reí como nunca antes, era como volver a los viejos tiempos, donde no había preocupaciones y donde los tres reíamos sin descansar. Me entere de muchas cosas, por ejemplo que Hayate quería unirse a las fuerzas especiales de policía cuando saliéramos de la preparatoria y que Yuuno quería estudiar medicina, aunque eso sí lo sospeche, ese fue un hurón de laboratorio. Yo les conté muy breve mente sobre mi estadía en varios países, pues no era mucho que contar debido al poco tiempo que pasaba en cada lugar y debido a que si no la pasaba en la escuela la pasaba en la casa así que siempre era lo mismo.

Después de terminar de charlar nos fuimos a mi casa, pues quería que la conocieran, bueno mansión, era bastante grande a decir verdad, me ayudaron con un equipaje y luego se fueron, para mi sorpresa ambos vivían a dos cuadras de mi casa, lo cual me alegro bastante, así podíamos competir todo el tiempo que estuvimos separados.

Una vez que llegue a mi casa, me recosté en mi habitación, me despedí de Shari y me fui a dormir, a pesar del cansancio que poseía, el cambio de horario me afecto y no pude dormir así que decidí salir al balcón de mi casa, y vi a alguien correr a toda velocidad por la calle.

Se me hizo extraño, llevaba una chaqueta grande de color negro y la capucha de la misma tapaba su rostro, me di cuenta que dos personas más corrían detrás de aquella persona, diciendo cosas en italiano que no entendía, pero por su tono, no estaban muy alegres.

Apenas aquella persona de chaqueta negra por enfrente del balcón elevo su mirada y me quede perdida de ella, aunque solo fueron 3 segundos, sus ojos color rojo me cautivaron, nunca había visto ese color de ojos en alguien, por primera vez en mi vida quise realmente conocer a alguien, y quería conocer a esa persona de ojos rojos que en medio de la noche me cautivaron.

Después de un rato vi a alejarse a esos tres individuos, pero yo no salía de mi shock hasta que una suave brisa fría me hizo entrar en razón.

-¿Qué es este sentimiento?