Notas del autor: Hola a todos nuevamente, ahora les presento otro fic mío de esta pareja de Naruto que aunque sea un poco extraña a mi me encanta, Sasori&Sakura. Espero que les sea de su agrado, les aclaro que los personajes de Naruto no me pertenecen, también quiero decirles que la historia no es nada parecida al otro fic que estoy haciendo porque no se basa en akatsukis, ni en la serie.
Las letras que están en cursiva y entre comillas son los pensamientos de los personajes, y lo que esta entre ( ) son aclaraciones mías.
Bueno ahora si los dejo leer el fic, y espero sus comentarios.
Por un viaje me enamoré de ti
Capítulo 1
El día transcurrió con tranquilidad, tanto que ya estaba un poco cansada, había hecho todos los quehaceres de la casa, así sin más me puse a ver el programa de chismes a la tarde.
Mi amiga Hynata vino a la noche y me acompañó a un boliche cerca de casa, ambas nos habíamos cambiado y puesto ropas un poco ajustadas a nuestro cuerpo, igualmente íbamos con su novio, Naruto, el me caía muy bien, era muy risueño y popular, aunque era de tener muchos amigos, tanto a mi como a Hynata lo llevábamos muy bien la situación.
Cuando llegamos el lugar estaba poblado de adolescentes de nuestra edad. Hynata y yo teníamos 16 años, mientras que su novio tenía unos 18 años.
Nos quedamos hasta la madrugada, como todo sitio bailable, cerró a eso de las 5.30 de la mañana, de allí nos fuimos a casa de mi amiga, desayunamos algo sencillo, aunque al ver la cara de hambre que tenía me ofreció unas tostadas con mermelada y una chocolatada.
A pesar de ser ya una adolescente no podía negarme a una rica chocolatada, era imprescindible en mi rutina diaria, cuando me levantaba.
Por suerte los padres de Hynata ya se habían ido a trabajar, así que pudimos charlar un rato sobre adonde salimos hace unos momentos atrás.
El tiempo pasaba lentamente mientras yo observaba como mi amiga se recostaba sobre el pecho de su novio y dormían abrazados en el sillón, a veces sentía mucha envidia porque el chico que a mi me gustaba era simplemente imposible para mí.
Siempre tuve la esperanza de conquistarlo algún día pero, resultaba un cuento repetido, mi primo Deidara me lo dijo muchas veces.
Me había enamorado del amigo de mi primo, su nombre era Sasori, desde chica cuando Deidara me venía a visitar yo lo esperaba muy contenta, es que casi nunca teníamos la oportunidad de estar juntos, ya que sus padres viajaban constantemente y el por supuesto estudiaba.
Lo conocí un día cuando mis padres me ofrecieron que pasara las vacaciones en casa de Deidara, fue ahí cuando comenzó todo para mí, me lo presentó, y yo no supe que decir, me había sonrojado tan solo mirarlo.
En aquel momento yo tenía 13 años, y el tan solo 18 años, pero dentro de poco tendría 19, me sabía por completo sus gustos, como toda niña enamorada de un joven mucho más grande para mí.
No supe cuando el me había dejado de mirar y ya se había marchado con mi primo, yo quedé como una tonta, por no haberle saludado, es que me había dejado sorprendida, jamás había conocido a un chico tan apuesto como el.
Sabía que tal ves el no sentiría lo mismo, ya que era mucho más grande en edad que yo, pero no importaba, al principio no supe como actuar frente a el, pero luego me fui adaptando a sus cotidianas visitas, hasta llegué a agradarle.
Me había puesto tan contenta cuando el uno de esos días se acercó a mí y puso uno de sus manos sobre mi cabeza, acariciándome suavemente, la diferencia de altura era mucha ya que para que yo pudiera verlo tenía que levantar mi rostro, podía sentirme tan protegida en aquel instante, pero no duró por mucho, ya que mi adorable primo nos interrumpió.
Nos pidió una explicación, ya que el cuidaba mucho de mí, y si su amigo quería algo de mí tendría que ser por arriba de su cadáver, pero a mí me agradaba sentirlo cerca como ahora, su colonia era tan embriagante que simplemente cerré mis ojos y puse mi cabeza en su pecho, el no me apartó, pero supe que era porque estaba triste porque había perdido a uno de mis amigos en un accidente, lo había pasado mal, pero el me habló un rato, antes de que viniera mi primo y lo estropeara todo por supuesto.
Me contuvo, entre sus brazos y me había dicho que pasara lo que pasara, tenía que superarlo de a poco, y que me comprendía ya que el pasó por algo similar.
Jamás pude olvidar ese momento, en que el acariciaba mi cabeza, mientras yo lo abrazaba con mis pequeños brazos, al no ver que quisiera apartarse de mí, sonreí mientras le dije un simple gracias, pero que para mí significaba mucho.
Luego tuvimos que apartarnos ya que Deidara vino hasta mí sujetándome del brazo y alejándome de Sasori, mi sonrisa cambió a una de completa tristeza, junto a el podía ir aceptando lo que me pasaba, pero sin el… me sentía confundida, solo me dispuse a soltarme del agarre de mi primo, lo miré con bronca por separarme del pelirrojo y subí rápidamente las escaleras, maldiciendo en el trayecto.
Deidara estaba sorprendido, tan mal estaba por el accidente de su amigo, o era el que la haya interrumpido con su amigo, comenzó a sospechar sobre ese hecho, y luego vio como su amigo se marchaba, pero antes de que sucediera eso, le dijo que vaya el arriba y hablara con ella.
Sasori puso cara de confundido, ya que si era su prima porque no iba el, pero al ver la insistencia de el, solo le asintió la cabeza, se dirigió a las escaleras y de allí al cuarto de la pelirosa.
Toc Toc
-¡No quiero verte Deidara, así que déjame en paz!
-Yo no soy tu primo, Sakura- dijo el joven pelirrojo detrás de la puerta.
Ella palideció en ese momento, ya que le había gritado a el, como iba a disculparse ahora, de seguro se marcharía, pero su corazón latió más rápido cuando el volvió a tocar la puerta, sin pensarlo la pelirosa abrió la puerta, dejando que el pasara.
-Discúlpame, por favor Sasori… y-yo no sa-bía que e-eras t-tú.
-Esta bien, te perdono, pero será mejor que hables con Deidara…
-No me lo nombres, no quiero verlo.
-¿Y eso a que se debe?
-Es que el… "me ha separado de ti, no puedo decirle eso… pero es lo que siento"
-Sí te escucho- dijo el pelirrojo poniendo una mano sobre mi hombro.
-"Se hace muy difícil con el tan cerca de mí" "inhala, exhala…" No me hagas bajar, por favor- dije a la vez que lo abrazaba.
-Siento interrumpir- dijo un chico de cabello dorado abriendo la puerta.
-Deidara.
-Primo.
-Yo mejor me marcho, así pueden aclarar su malentendido… nos vemos Saku- dijo el pelirrojo.
La pelirosa miró sorprendida al joven de cabellos rojos cuando le dio un beso en la frente a manera de despedida, la verdad ella se sentía bien de aquella forma, no pudo evitar sonrojarse un poco, por la cercanía del chico.
Luego pasó por al lado de Deidara y se despidió con un choque de manos, algo común en los hombres.
Cuando estuvieron solos, el rubio se había dado cuenta que su pequeña primita se sentía atraída por su amigo Sasori, era algo fácil de deducir, primero debido al sonrojo que tuvo al momento de que el la besó y luego supuso que su repentino enojo fue porque el la había separado del pelirrojo cuando estaban abrazados hace unos minutos en la sala de abajo.
-Cuanto tiempo más ibas a ocultármelo Sakura.
-¿De que hablas?
-Más bien de quien estoy hablando, no te hagas Saku… hablo de Sasori, de quien más va a ser.
Dicho estas últimas palabras de su primo, ella se sonrojó tanto, que le dio la espalda al rubio para que no lo notara, aunque fue en vano, porque era verdad, lo quería, a pesar de que fuese su primo, seguro la entendería.
-Sí, lo quiero mucho Dei- dijo la pelirosa mientras lo abrazaba llorando.
-Pude darme cuenta por como lo veías, antes de que se marchara- dijo el rubio correspondiendo el abrazo de la chica.
-Igual, es algo imposible.
-Oye… no te deprimas tanto por eso, además como es mi amigo lo conozco mejor que nadie, y sabes no creo que le seas indiferente.
-¿Por qué lo dices Dei?
-Porque lo se y punto, no preguntes tanto, ahora enfócate en lo que piensas hacer.
Fue así como ella y su primo charlaron un rato, luego pasaron los días en que ella estuvo de vacaciones allí y había intentado acercarse al pelirrojo, pero no había funcionado nada de sus ideas.
Deidara le dijo luego de un tiempo que dejara de ilusionarse, el la había apoyado antes, pero el pelirrojo no estaba interesado en ella, más que en una amiga tal vez, estas palabras fueron fuertes para ella, fue antes de que volviera a su casa, de allí no volvió a verlo, aunque siguió pensando en el.
Se le habían acercado unos cuantos chicos en su colegio, pero ella no quería salir con ellos, solo con el amigo de su primo saldría.
Sabía que era un sueño que ocurriera eso, pero no podía evitarlo, su primer amor fue a la edad de 13 años, tal vez algún día, cuando vuelva a verlo, las cosas cambiarían, habría que esperar.
Al siguiente día, ella fue la primera en despertar, vio a su alrededor que su amiga aún dormía y que su novio comenzó a despertar.
La pelirosa fue a la ducha y se quedó allí un buen rato, pensando en su pequeña ilusión, en su amor imposible, ayer pensó en el nuevamente, se había prometido no pensar más en el, pero cuando los recuerdos venían a su mente se le hacía imposible olvidarlo.
Al ser su primer amor, y encima de todo no correspondido, hizo que se hundiera un la tina de baño con la espuma que había, luego de un tiempo de relajarse, se cambió su ropa por una simple, ya que la anterior era más para ir a un boliche, descendió las escaleras y vio a una Hynata muy sonriente.
La casa de su amiga era bastante amplia, así que era de esperarse que tuvieran dos baños, las dos ya estaban cambiadas y se acercaron a saludarse.
-Buenos días Saku
-Buenos días Hynata
Luego también saludaron al joven rubio que estaba preparando el almuerzo a las chicas en la cocina.
La comida estuvo muy rica, luego de eso hubo un llamado, que las asustó ya que no esperaban el llamado de nadie, Hynata se dirigió a la sala y atendió.
-Saku, son tus padres, quieren hablar contigo- dijo mientras se acercaba a la cocina.
-Esta bien, ahora vengo.
En la charla que tuvo la pelirosa con sus padres le habían dicho que ellos se mudarían adonde vivía su primo, ya que sabían lo mucho que ella lo quería, además le dijeron que era por trabajo y que a ella le encantaría, porque allá haría la misma carrera que Deidara. El ya estaba en la universidad, ya que poseía unos 22 años, al igual que su amigo Sasori.
Al principio no quería hacerlo, porque estaba con sus amigos, ella tiene toda una vida en esta ciudad y mudarse a otra, tal vez era para siempre ya no volvería a verlos, hizo que se sintiera mal, pero luego lo pensó y lo habló con su amiga le explicó todos los detalles, y se puso un poco triste, porque la iba a extrañar mucho, se abrazaron y fueron a la casa de la pelirosa para preparar la valija, ya que saldrían dentro de una semana.
Ya había pasado la semana correspondiente y sus padres la esperaban, ella fue con Hynata al aeropuerto para despedirse, junto con Naruto.
-Descuida Saku, nosotros te iremos a ver en las vacaciones- decía el rubio.
-Sí, más les vale venir a verme- dijo la pelirosa entre llantos a los dos chicos.
-Ya verás que la pasarás bien allá, además ahora es probable que ya haya madurado un poco ¿no crees?- dijo su amiga.
-Hynata no se que hablas.
-Sí, ahora resulta que tienes amnesia…
-No siento nada por el, ya lo olvidé, ahora Hynata deja de nombrarlo.
-Bien como digas Saku, pero eso ni tu te lo crees, bueno en fin te veo en las vacaciones, pero eso si, te conectas y me cuentas todo sobre ese chico.
-No hay caso contigo.
-Oye, no me digas que lo olvidaste porque ahora te veo sonrojada y no creo que sea por el calor.
-Todo esta bien Sakura- dijeron los padres de la misma, al verla acalorada.
-Sí, estoy bien.
-Bueno, Saku te vamos a extrañar, pero acuérdate que te iremos a ver- dijo el joven rubio.
-Sí, por supuesto chicos, yo también los voy a extrañar.
Luego les dio un abrazo a ambos y se fue con sus padres al avión.
Mientras estaba arriba del avión, eligió el lado de la ventana, ya que era su lugar favorito desde pequeña, intentó conciliar el sueño pero no podía hacerlo, luego pensó en el, una vez más, hace mucho que no lo veía desde que tenía 13 años, ahora ya estaría más crecido, maduro y seguro más apuesto de lo que ya era antes.
Con solo pensar en ese chico sus mejillas se tornaron rosadas, a pesar de a ver pasado seis años aún parecía sentir algo por el. Pero en aquel momento sacudió su cabeza y dejó a un lado ese pensamiento, el jamás se fijaría en ella, aunque ahora ya era una adolescente, tal vez después de todo esperar no fue tan malo como ella creía.
¿La historia estuvo interesante como para que la siga?
Si es así, me lo hacen saber por medio de sus reviews, saludos.
Candygirl-chan.
