~~*~~ Una nueva compañera ~~*~~
Era un día común y corriente en la vida de Len, eran las 7 de la mañana, ya estaba listo para ir a la escuela, se encontraba viendo cómo algunos de sus vecinos más pequeños ya estaban saliendo de sus casas y se dirigían a sus respectivas escuelas.
Len es uno de los mejores de la su clase, es un gran deportista, haciendo que su escuela gane muchos campeonatos por su participación en Fútbol, Básquetbol, entre otros.
Es muy popular entre las chicas, pues es bastante bien parecido, Aún así el joven Len Tao no tiene ningún amigo, es muy antipático con quien intente acercársele, Su hermana mayor, Jun, va dos años antes que él en la misma escuela cursando el último año de preparatoria, parece ser la única persona en el mundo que sabe como es realmente, pues éste joven no se atreve a abrir su corazón a personas ajenas.
-Es hora de irnos Len!! – se oye la voz de Jun en el primer piso.
-Ya voy!! – dice Len mientras se levanta y comienza a arreglar sus cosas.
Ambos hermanos salen juntos, Len sigue los pasos de su hermana silenciosamente, ya es de costumbre que esos cortos paseos a la escuela sean muy callados, a menos que una de las amigas de Jun los acompañe, pero por lo general no hay intercambio de palabras.
Al doblar una esquina un pequeño niño peliazul y unos gemelos corren tras una pelota, Los gemelos toman la pelota, comienzan a jugar entre ellos y por accidente cae cerca de los pies de Len.
Los tres pequeños, que se les calcula unos 5 años se intimidan. Los gemelos comienzan a empujar al peliazul para que le pidiera la pelota al joven.
Len no se hace problema en tomar el juguete y acercarse al pequeño.
-Horo-Horo!! – se oye una voz – Horo-Horo!! – repite.
-Horo, es tu hermana, uno de los castaños se corre, seguido por el otro.
El pequeño peliazul se esconde tras las piernas de Len , Su hermana lo mira algo divertida.
-No le digas que estoy aquí! – dice el pequeño sujetando el pantalón de Len.
-Pero que haces? – critica Len, aún con la pelota en la mano – sal de ahí!
Una hermosa joven peliazul se acerca al muchacho – Ahí estas!! – dice al descubrir al pequeño.
-Ho!!! No!!! Me descubrió!!!- el peliazul trata de escapar
-Ven a aca!!! – comienza a perseguirlo alrededor de Len.
Jun comienza a reír, notó como el rostro de su hermano enrojeció levemente al ver a la chica.
La peliazul toma a su pequeño hermano por la parte del cuello – Lamento las molestias, por favor disculpen. – dice dirigiéndose a los jóvenes con una leve reverencia.
Len se queda mirándola unos momentos, mientras la muchacha voltea.
-Oye! – dice Len, ruborizándose un poco más.
La joven peliazul voltea, ve que el chico de ojos dorados tiene la mano estirada, con la intención de pasarle la pelota.
El pequeño peliazul se libera de su hermana y se dirige hacia su pelota – Muchas gracias – le sonríe volviendo al lado de su hermana.
La chica mira a Len detenidamente, ve que sus uniformes son similares. – Tu vas en la misma escuela que yo!! – dice dirigiéndose hacia el joven.
-Así es! – dice la joven Jun, tratando de que la imagen de chico autista no se notara ante la chica.
-Les molesta si me esperan un momento? – pide la joven – soy nueva en ésta ciudad, por lo que no me ubico muy bien.
-De acuerdo – dice Jun sonriendo.
El pequeño peliazul mira a Len, le sorprende que alguien de la edad de su hermana sea tan serio.
La joven se dirige a su casa para buscar sus cosas.
-Y tu no hablas o te comió la lengua el gato? – pregunta el pequeño mirando curiosamente a Len.
Jun ríe mientras su hermano mira sin expresión alguna al pequeño.
Luego el pequeñin le sonríe tiernamente – mi hermana es muy linda, verdad? – pregunta.
Len se sonroja levemente, gira la cabeza hacia el frente y comienza a caminar – espérala tú si quieres, yo ya me voy... - dice a su hermana sin girar el rostro.
-Esta bien – dice su hermana tristemente, no entiende la razón por la que su hermano es tan frío.
La joven peliazul sale con su morral en la espaldas y algunos cuadernos entre sus brazos. Se detiene al ver cómo el joven continua su paso – Lo siento... me demoré mucho? – cuestiona.
Len continúa su paso, sin prestar atención a la pregunta.
-No!!! Para nada – se interpone Jun – vamos... – dice con una sonrisa. La cual la joven le contesta.
-Horo! ve a tomar tu desayuno! – ordena la peliazul al notar que su hermanito no había entrado.
-A ese chico le gustas!!! – dice el pequeño mientras corre al interior de su casa.
La joven se sonroja, Len también pero no cambia la expresión de su rostro, voltea su cara para mirar fríamente al muchachito pero el pequeño ya había entrado a su casa.
-Lo siento.... es muy travieso... – Dice la joven muy avergonzada.
Len la mira, luego mira hacia el frente y continúa su paso – ya vamonos... llegaremos tarde... – dice mientras camina sin voltear a la chica.
En el camino, Jun y la joven van al mismo paso, mientras que Len va unos cuantos pasos delante de ellas.
-Es tu primer día en la escuela? – cuestiona la mayor de los Tao.
-Así es – sonríe la muchacha – llegamos hace cerca de una semana a la ciudad.
-Ya veo... y has hecho amistades? – continua Jun.
-No... para nada... mi hermanito ya tiene unos gemelos de amigos, no entiendo como lo hace.- dice llevando una mano a su cabeza.
-A todo esto – dice Jun – Cual es tu nombre? No nos hemos presentado.
-Es cierto, mi nombre es Pilika y mi hermanito se llama Horo-Horo- se presenta la joven.
-Yo soy Jun, mucho gusto y él es mi hermano, su nombre es Len – Apunta en dirección al joven.
Pilika sonríe – El gusto es mío, gracias por su ayuda – dice gentilmente.
-Aquí es la escuela – le apunta Jun – creo que debes ir donde el director a decirle que ya has llegado.
-Claro.... – dice la peliazul, algo confundida, la escuela es realmente grande.
-Len te guiará – dice Jun sonriendo.
Len voltea la cabeza mirando a la joven peliazul de reojo.
-Tengo que hablar con un maestro, por lo que llevo algo de prisa. – dice mientras se aleja de los más jóvenes.
Len suspira – bueno... no me queda otra.
Pilika lo mira tímidamente mientras ve cómo el chico comienza a caminar.
-Sígueme, te llevaré donde el director – dice sin voltear.
Pilika sonríe, comienza a caminar al lado de Len, parece entender la frialdad del joven por lo que lo sigue en silencio.
En el camino, varios de los compañeros de Len se extraña que sea acompañado por una chica tan linda. Las chicas, por su parte la miran con una expresión de celos.
La joven peliazul se extraña por esas miradas, tanto de chicos, como de chicas.
-No les hagas caso... – dice Len al notar en nerviosismo de la muchacha.
Len detiene sus pasos y se detiene al frente de una oficina – aquí es – dice fríamente sin voltear a mirar a la chica.
-Gracias – Pilika golpea la puerta mientras Len continua su paso.
El joven voltea la vista mirando de reojo a la chica, nota el nerviosismo que tiene, aprieta sus cuadernos contra su pecho mientras zapatea ligeramente con su pie izquierdo.
La puerta se abre y el director hace entrar a la joven a su oficina.
El director le da una cordial bienvenida, comienza a decirle sus horarios y demás. Le explica bastante rápido donde queda su nuevo salón, por lo que Pilika queda bastante confundida.
Al salir de la oficina, el director le indica de nuevo por donde debe seguir, pero nuevamente la pobre joven queda muy confundida mientras mira como el director se va rápidamente a una reunión de profesores. Quedando realmente perdida en esa gran escuela.
Comienza a caminar por un solitario pasillo, ya habían tocado la campaza para la entrada a clases, por lo que no había nadie por esos alrededores.
Al doblar por un pasillo choca con alguien, como estaba nerviosa no alcanza a reaccionar, siente cómo una mano pasa por su cintura y la empuja suavemente hacia delante evitando que la chica cayera al suelo.
La joven mira para ver de quien se trata, al ver los hermosos ojos de la chica tan cerca, la figura la suela volviendo a su postura seria.
-Creí que tenias clases – dice la joven algo sorprendida.
-Esta escuela es muy grande – dice secamente – te dejaré en tu salón y luego iré al mío – el joven no voltea a ver a la chica.
La chica le sonríe – Muchas gracias.
Len no voltea a recibir la mirada, siente un cálido tacto en su rostro, queda realmente sorprendido, expresión que , esta vez, su rostro no pudo disimular.
-Me tocó en la D-25 -continua la peliazul.
-No vuelvas a hacer eso – dice con su mirada fría mientras sujeta su mejilla, levemente sonrojado.
-Lo... lo siento... – dice nerviosa.
-Es mi salón.... – continúa el chico, tratando de evadir el tema – sígueme.
Al llegar al salón todos los alumnos están conversando animadamente mientras el profesor ve unos papeles, cuando Len y Pilika aparecen en la puerta todos voltean a mirar.
El profesor se levanta y se dirige a los recién llegados – Tú debes ser la alumna nueva – Pilika afirma con la cabeza.
Len se dirige sin expresión alguna a su puesto, cerca de la ventana. El joven se sienta alejado y sólo, al parecer no permite que nadie se le acerque.
El profesor llama la atención a los alumnos que habían seguido con calladas miradas el paso de Len hasta su puesto. – Muy bien jóvenes , ella es la alumna nueva que les mencioné. Su nombre es Pilika, espero que la reciban muy bien.
-Mucho gusto – Pilika hace una tímida reverencia.
Los alumnos miran atentamente a la nueva integrante de su salón, algunos chico se secretean, probablemente comentando sobre la belleza de la peliazul.
Len sólo mira a través de la ventana sin prestar atención, nadie se explica como demonios saca tan buenas calificaciones si casi toda la clase pasa mirando a través de los vidrios.
-Bien, donde te puedes sentar.... mmmm.... – el profesor mira por el salón – el único libre esta junto a Tao....- Len voltea mirando a la peliazul – Te molestaría...?
Pilika sonríe – Claro que no – dice dulcemente mientras mira al profesor.
Los chicos del salón se derriten ante tan dulce expresión, menos Tao, que vuelve a mirar a través de la ventana mientras Pilika se sienta a su lado.
~~~~~~~~~~~~FIC SIN TERMINAR~~~~~~~~~~
Es mi segundo Fic, nuevamente de ésta parejita que me encanta.
Espero les guste =) y esperen la continuación.
BESOS!!!
Era un día común y corriente en la vida de Len, eran las 7 de la mañana, ya estaba listo para ir a la escuela, se encontraba viendo cómo algunos de sus vecinos más pequeños ya estaban saliendo de sus casas y se dirigían a sus respectivas escuelas.
Len es uno de los mejores de la su clase, es un gran deportista, haciendo que su escuela gane muchos campeonatos por su participación en Fútbol, Básquetbol, entre otros.
Es muy popular entre las chicas, pues es bastante bien parecido, Aún así el joven Len Tao no tiene ningún amigo, es muy antipático con quien intente acercársele, Su hermana mayor, Jun, va dos años antes que él en la misma escuela cursando el último año de preparatoria, parece ser la única persona en el mundo que sabe como es realmente, pues éste joven no se atreve a abrir su corazón a personas ajenas.
-Es hora de irnos Len!! – se oye la voz de Jun en el primer piso.
-Ya voy!! – dice Len mientras se levanta y comienza a arreglar sus cosas.
Ambos hermanos salen juntos, Len sigue los pasos de su hermana silenciosamente, ya es de costumbre que esos cortos paseos a la escuela sean muy callados, a menos que una de las amigas de Jun los acompañe, pero por lo general no hay intercambio de palabras.
Al doblar una esquina un pequeño niño peliazul y unos gemelos corren tras una pelota, Los gemelos toman la pelota, comienzan a jugar entre ellos y por accidente cae cerca de los pies de Len.
Los tres pequeños, que se les calcula unos 5 años se intimidan. Los gemelos comienzan a empujar al peliazul para que le pidiera la pelota al joven.
Len no se hace problema en tomar el juguete y acercarse al pequeño.
-Horo-Horo!! – se oye una voz – Horo-Horo!! – repite.
-Horo, es tu hermana, uno de los castaños se corre, seguido por el otro.
El pequeño peliazul se esconde tras las piernas de Len , Su hermana lo mira algo divertida.
-No le digas que estoy aquí! – dice el pequeño sujetando el pantalón de Len.
-Pero que haces? – critica Len, aún con la pelota en la mano – sal de ahí!
Una hermosa joven peliazul se acerca al muchacho – Ahí estas!! – dice al descubrir al pequeño.
-Ho!!! No!!! Me descubrió!!!- el peliazul trata de escapar
-Ven a aca!!! – comienza a perseguirlo alrededor de Len.
Jun comienza a reír, notó como el rostro de su hermano enrojeció levemente al ver a la chica.
La peliazul toma a su pequeño hermano por la parte del cuello – Lamento las molestias, por favor disculpen. – dice dirigiéndose a los jóvenes con una leve reverencia.
Len se queda mirándola unos momentos, mientras la muchacha voltea.
-Oye! – dice Len, ruborizándose un poco más.
La joven peliazul voltea, ve que el chico de ojos dorados tiene la mano estirada, con la intención de pasarle la pelota.
El pequeño peliazul se libera de su hermana y se dirige hacia su pelota – Muchas gracias – le sonríe volviendo al lado de su hermana.
La chica mira a Len detenidamente, ve que sus uniformes son similares. – Tu vas en la misma escuela que yo!! – dice dirigiéndose hacia el joven.
-Así es! – dice la joven Jun, tratando de que la imagen de chico autista no se notara ante la chica.
-Les molesta si me esperan un momento? – pide la joven – soy nueva en ésta ciudad, por lo que no me ubico muy bien.
-De acuerdo – dice Jun sonriendo.
El pequeño peliazul mira a Len, le sorprende que alguien de la edad de su hermana sea tan serio.
La joven se dirige a su casa para buscar sus cosas.
-Y tu no hablas o te comió la lengua el gato? – pregunta el pequeño mirando curiosamente a Len.
Jun ríe mientras su hermano mira sin expresión alguna al pequeño.
Luego el pequeñin le sonríe tiernamente – mi hermana es muy linda, verdad? – pregunta.
Len se sonroja levemente, gira la cabeza hacia el frente y comienza a caminar – espérala tú si quieres, yo ya me voy... - dice a su hermana sin girar el rostro.
-Esta bien – dice su hermana tristemente, no entiende la razón por la que su hermano es tan frío.
La joven peliazul sale con su morral en la espaldas y algunos cuadernos entre sus brazos. Se detiene al ver cómo el joven continua su paso – Lo siento... me demoré mucho? – cuestiona.
Len continúa su paso, sin prestar atención a la pregunta.
-No!!! Para nada – se interpone Jun – vamos... – dice con una sonrisa. La cual la joven le contesta.
-Horo! ve a tomar tu desayuno! – ordena la peliazul al notar que su hermanito no había entrado.
-A ese chico le gustas!!! – dice el pequeño mientras corre al interior de su casa.
La joven se sonroja, Len también pero no cambia la expresión de su rostro, voltea su cara para mirar fríamente al muchachito pero el pequeño ya había entrado a su casa.
-Lo siento.... es muy travieso... – Dice la joven muy avergonzada.
Len la mira, luego mira hacia el frente y continúa su paso – ya vamonos... llegaremos tarde... – dice mientras camina sin voltear a la chica.
En el camino, Jun y la joven van al mismo paso, mientras que Len va unos cuantos pasos delante de ellas.
-Es tu primer día en la escuela? – cuestiona la mayor de los Tao.
-Así es – sonríe la muchacha – llegamos hace cerca de una semana a la ciudad.
-Ya veo... y has hecho amistades? – continua Jun.
-No... para nada... mi hermanito ya tiene unos gemelos de amigos, no entiendo como lo hace.- dice llevando una mano a su cabeza.
-A todo esto – dice Jun – Cual es tu nombre? No nos hemos presentado.
-Es cierto, mi nombre es Pilika y mi hermanito se llama Horo-Horo- se presenta la joven.
-Yo soy Jun, mucho gusto y él es mi hermano, su nombre es Len – Apunta en dirección al joven.
Pilika sonríe – El gusto es mío, gracias por su ayuda – dice gentilmente.
-Aquí es la escuela – le apunta Jun – creo que debes ir donde el director a decirle que ya has llegado.
-Claro.... – dice la peliazul, algo confundida, la escuela es realmente grande.
-Len te guiará – dice Jun sonriendo.
Len voltea la cabeza mirando a la joven peliazul de reojo.
-Tengo que hablar con un maestro, por lo que llevo algo de prisa. – dice mientras se aleja de los más jóvenes.
Len suspira – bueno... no me queda otra.
Pilika lo mira tímidamente mientras ve cómo el chico comienza a caminar.
-Sígueme, te llevaré donde el director – dice sin voltear.
Pilika sonríe, comienza a caminar al lado de Len, parece entender la frialdad del joven por lo que lo sigue en silencio.
En el camino, varios de los compañeros de Len se extraña que sea acompañado por una chica tan linda. Las chicas, por su parte la miran con una expresión de celos.
La joven peliazul se extraña por esas miradas, tanto de chicos, como de chicas.
-No les hagas caso... – dice Len al notar en nerviosismo de la muchacha.
Len detiene sus pasos y se detiene al frente de una oficina – aquí es – dice fríamente sin voltear a mirar a la chica.
-Gracias – Pilika golpea la puerta mientras Len continua su paso.
El joven voltea la vista mirando de reojo a la chica, nota el nerviosismo que tiene, aprieta sus cuadernos contra su pecho mientras zapatea ligeramente con su pie izquierdo.
La puerta se abre y el director hace entrar a la joven a su oficina.
El director le da una cordial bienvenida, comienza a decirle sus horarios y demás. Le explica bastante rápido donde queda su nuevo salón, por lo que Pilika queda bastante confundida.
Al salir de la oficina, el director le indica de nuevo por donde debe seguir, pero nuevamente la pobre joven queda muy confundida mientras mira como el director se va rápidamente a una reunión de profesores. Quedando realmente perdida en esa gran escuela.
Comienza a caminar por un solitario pasillo, ya habían tocado la campaza para la entrada a clases, por lo que no había nadie por esos alrededores.
Al doblar por un pasillo choca con alguien, como estaba nerviosa no alcanza a reaccionar, siente cómo una mano pasa por su cintura y la empuja suavemente hacia delante evitando que la chica cayera al suelo.
La joven mira para ver de quien se trata, al ver los hermosos ojos de la chica tan cerca, la figura la suela volviendo a su postura seria.
-Creí que tenias clases – dice la joven algo sorprendida.
-Esta escuela es muy grande – dice secamente – te dejaré en tu salón y luego iré al mío – el joven no voltea a ver a la chica.
La chica le sonríe – Muchas gracias.
Len no voltea a recibir la mirada, siente un cálido tacto en su rostro, queda realmente sorprendido, expresión que , esta vez, su rostro no pudo disimular.
-Me tocó en la D-25 -continua la peliazul.
-No vuelvas a hacer eso – dice con su mirada fría mientras sujeta su mejilla, levemente sonrojado.
-Lo... lo siento... – dice nerviosa.
-Es mi salón.... – continúa el chico, tratando de evadir el tema – sígueme.
Al llegar al salón todos los alumnos están conversando animadamente mientras el profesor ve unos papeles, cuando Len y Pilika aparecen en la puerta todos voltean a mirar.
El profesor se levanta y se dirige a los recién llegados – Tú debes ser la alumna nueva – Pilika afirma con la cabeza.
Len se dirige sin expresión alguna a su puesto, cerca de la ventana. El joven se sienta alejado y sólo, al parecer no permite que nadie se le acerque.
El profesor llama la atención a los alumnos que habían seguido con calladas miradas el paso de Len hasta su puesto. – Muy bien jóvenes , ella es la alumna nueva que les mencioné. Su nombre es Pilika, espero que la reciban muy bien.
-Mucho gusto – Pilika hace una tímida reverencia.
Los alumnos miran atentamente a la nueva integrante de su salón, algunos chico se secretean, probablemente comentando sobre la belleza de la peliazul.
Len sólo mira a través de la ventana sin prestar atención, nadie se explica como demonios saca tan buenas calificaciones si casi toda la clase pasa mirando a través de los vidrios.
-Bien, donde te puedes sentar.... mmmm.... – el profesor mira por el salón – el único libre esta junto a Tao....- Len voltea mirando a la peliazul – Te molestaría...?
Pilika sonríe – Claro que no – dice dulcemente mientras mira al profesor.
Los chicos del salón se derriten ante tan dulce expresión, menos Tao, que vuelve a mirar a través de la ventana mientras Pilika se sienta a su lado.
~~~~~~~~~~~~FIC SIN TERMINAR~~~~~~~~~~
Es mi segundo Fic, nuevamente de ésta parejita que me encanta.
Espero les guste =) y esperen la continuación.
BESOS!!!