Disclaimer: Los personajes que aquí aparecen forman parte de Avatar: La Leyenda de Korra o Avatar: La leyenda de Aang. Todos son propiedad de Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko Este fic participa en el reto "Una estación inspiradora" del foro ¡El Cometa de Sozin!
Mi tan amado verano
Pov. Korra
Odio el Verano…calor insoportable, creo que se debe a que talvez sea que este acostumbrada el frio del polo, pero esto era una exageración tenía que literalmente cambiar mis ropas de pelaje de la tribu agua por unas más ligeras que me regalo Pema, apiadándose de mi me entrego unas ropas parecidas a las de los maestros aire pero de colores azul marino y claro.
Muy a pesar de cambiar mi vestimenta para andar más ligera y fresca, otro problema surgió… y era que tal vez le falto un poco más de tela a la ropa ya que estaba algo descubierta y atraía más miradas de las que desearía y escapaba a una de las cosas de la isla del aire donde nadie me viera para poder estar a solas con mis pensamientos.
Y es que más que nada, no había dejado de pensar en Asami…su dulce y sensual Asami, desde que regresaremos de las vacaciones en el mundo espiritual no podía dejar de pensar en ella y la fuerte necesidad de tenerla cerca pero al parecer el universo esta en mi contra y se empeñaba en torturarme con pensamientos indecorosos y peor aún este maldito calor que no ayudaba en nada, hacia más insoportable el hecho de no poder controlarme…la razón, sencilla… esa mujer me matara de un infarto o peor aún me convertirá en un animal salvaje y deseoso de poseerla. Ella Vive aquí en la isla por ende la veo casi todos los días pero después de las vacaciones y el comienzo del odioso verano, ella empezó también a llevar ropa más "fresca" como ella decía, pero por Ravaa, creo que lo hace a propósito, se pasea descaradamente por las mañanas con pantalones, muy pero muy cortos y blusas de tirantes, mostrando muy bien sus torneadas y excitantes piernas, también por Vatuu, su tan exquisito cuello que no era posible que me concentrara en otra cosa que en ella, pero como dije, el universo esta en mi contra pues la ponen tan cerca de mí y a la vez tan lejos que me duele, el imaginar perder Asami por no poder controlar mis deseos carnales es algo que no me puedo permitir, pero sí que me lo estaba haciendo muy difícil.
Una noche donde hacia demasiado calor, Salí a dar un paseo en la costa de la isla para calmar mi desesperación y el calor que me inundaban, pero algo que me sorprendió fue encontrarme a Asami con tan solo una ligera prenda cubriendo su cuerpo, mirando hacia el portal, parecía perdida en sus pensamientos asi que era mi momento de huir cobardemente de ahí, más una rama en el camino me delato y ella poso sus hermosos ojos en mí, no tuve más remedio enfrentarla y esperar que la noche terminara pronto.
-Korra… ¿no puedes dormir? –si imaginaras que eres tú la me roba el sueño y este calor y mis malos pensamientos.
-no, es este calor, no estoy acostumbrada y por otras cosas.
Me invito a sentarme a su lado, dudando en si sería correcto o no pero con solo ver sus ojos es como si mi cuerpo por si solo reaccionara. Me acerque a ella y nos sentamos en la playa contemplando la ciudad y el portar que la iluminaba.
-¿por qué me evitas? –No supe que responder, un nudo en la garganta me lo impedía –he hecho algo malo, te incomode en algún momento, me duele que me estés evitando y quiero saber a razón si fue mi culpa o… - la interrumpí porque ya no podía con la culpa.
-no Asami, no has sido tú, en todo caso yo debería disculparme no he sido yo en estos últimos días y la verdad no quería lastimarte de esta manera, es solo que…
-entonces ¿qué es lo que nos pasa? –ella me abrazo con fuerza, sentía sus lágrimas en mi hombro que me desarmo tan fácilmente, ya no habría vuelta atrás para lo que estaba a punto de hacer.
Tenia escondido mi rostro en su cuello y lo bese lentamente, esperando algún tipo de rechazo o un golpe talvez pero no, entonces seguí mi camino, besando su cuello, mandíbula su oreja, tome en mis manos sus mejillas, las bese y bebí cada rastro de sus lágrimas y apoye mi frente con la suya, tan solo esperando que dijera algo.
-¿esto era lo que me ocultabas?
-sí, pero hay más cosas y entendería si ahora ya no deseas estar conmigo…-fui interrumpida por un beso, algo arrebatador y tosco que fue tornándose suave y pausado, sentía que el corazón me estallaría, mi piel se puso muy sensible y el calor que me trasmitía empezó a ser estragos a mi auto-control. Cuando el beso termino, nuestras respiraciones estaban agitadas, y cualquier rose era tan placentero.
-¿que eran las otras cosas?
Me puse tensa en ese momento y creo que Asami lo noto porque rio un poco para levantarse, tome su mano y la abrace.
-¿te gustaría quedarte aquí conmigo?
-sí, me encantaría.
-sabes con este calor, un baño en el mar no estaría mal… así podrías decirme que otras cosas son por las cuales te da más calor.
La contemple caminar un poco delante de mí desprendiéndose de su camisón, dejándome ver su tan hermosos cuerpo adentrándose poco a poco en el mar, ahora más que nunca sé que amo como nunca el verano, por arme dado esta oportunidad y otras más de contemplar de esta forma a mi Asami.
Notas de la poderosa autora:
Lo demás lo deje a su imaginación… espero sus comentarios
