Prima Nox

By Sam-chan

Un par de ojos se abren en la oscuridad.  No puede recordar el por que, pero ya esta despierta.  Y a decir verdad no importa mucho, últimamente las horas de descanso cada vez son más raras.

Con una mano, temblorosa por el continuo cansancio que la ha albergado estos últimos meses, limpia su frente aún húmeda por un sudor frío al que se ha acostumbrado ya.  Todavía con el peso del sueño arrebatado, retira la sábana que cubre su cuerpo, y se sienta en su cama.

El frío pega de lleno en su espalda, también empapada de sudor.   Deslizándose cansadamente, coloca sus piernas del lado derecho de la cama y abandona el poco calor de su cama, colocando ambos pies desnudos sobre el piso y levantándose. Nuevamente el aire frío de la noche golpea ahora su cuerpo completo y los vestigios de sueño desaparecen por completo.

Toma una sudadera de color oscuro del suelo y se la pone.   Con ojos cansados, escudriña su habitación y suspira.  Puede ver en una esquina su baúl, aún con cosas dentro.  A la derecha, junto a la puerta, un escritorio hasta el tope de libros.  Junto a su cama un montón de ropa, de donde sacó la playera. Y regados por todo el piso de la habitación tinteros, plumas, pergaminos usados, zapatos y cosas que no puede descifrar aún a tan altas horas de la noche.  Nunca había sucedido algo así, se jactaba de tener todo en orden, todo perfecto. Pero últimamente las cosas no han ido muy bien.

Con cuidado se dirige a la puerta, mira sobre su hombro derecho y por instinto estira su mano para tomar un libro.   Cuando sus dedos acarician la dura cubierta de cuero se detiene.   Esta noche no, no ahora. Regresando su mano, toma la perilla y abre la puerta.

Sale al pasillo levemente iluminado por los rayos de la Luna y puede escuchar el murmullo de la noche, acompañado por el leve respirar de sus padres en la habitación continua.  En silencio eleva una oración. El pequeño ronquido que se escapa de la habitación contigua la hace recordar. Su padre. Su madre. Sin ellos, y sin sus amigos, quien sabe donde estaría hoy. Todo el desvelo, todo el estudio, todo el amor, por ellos.  Sin ellos, lo más probable es que hubiera quebrado ante la presión.

Dejando la puerta de su habitación ligeramente abierta, se encamina al fondo del pasillo donde se encuentran las escaleras.  Las baja calladamente, sin prisa, dejando que el frío de la noche la envuelva y la haga olvidar por unos instantes.  A pesar de ser Julio, puede ver su aliento congelado elevarse al aire.

Pasa por una pequeña sala de estar, iluminada también por la luz de la noche, mezcla de los rayos plateados de la luna y la fría luz blancuzca de los faros de la calle.  Abrazándose para resguardarse del frío, llega al fondo de la habitación y pasa por una puerta ya abierta hacia la cocina.  Toma un vaso de un estante junto al fregadero y saca un cartón de leche del refrigerador.  Llena el vaso y lo coloca dentro del microondas.

Ya con el vaso de leche caliente se regresa a la pequeña sala y se sienta en uno de los sillones menos iluminado.  Con ambas piernas recogidas y colocadas bajo de ella, resguardadas del intenso frío, toma un poco del líquido caliente.  El calor choca con el frío de su garganta, avanzando a su estómago y repartiéndose por todo su cuerpo.

Y pensar que se sentía cansada en su segundo año.   No había comparación.  No solo estaba cansada físicamente, también estaba exhausta mentalmente, y todo su ser temblaba del frío que se había instalado en su alma, y del miedo que albergaba su corazón.  En esos momentos daba lo que pidieran por tan solo regresar unos momentos a esos tres años atrás; todo parece tan distante ya.

Con una rapidez impresionante, un pequeño bulto anaranjado saltó de entre la oscuridad y se instaló en su regazo. Por poco suelta el vaso de leche caliente. ¡Crookshanks!.    "¡Por Dios, pequeño! No vuelvas a hacer eso que espantas a mamá".  Un ronroneo contestaron sus palabras y con una calma infinita el gato se instaló sobre su ama, emitiendo de vez en cuando lo que parecía un murmullo.

¿Cómo supiste que necesitaba compañía?.   Acariciando el suave pelo de su mascota, dejó que sus pensamientos volaran otra ves.  "A sido bastante duro últimamente, ¿eh Crookshanks?".  No buscaba una respuesta, era obvio.  El calor que le brindaba el gato a su cuerpo demasiado frío, la suavidad de su pelo entre sus dedos, el calor de la leche en todo su sistema, todo le comenzó provocar una cierta paz.  Su dulce gato siempre estaba ahí para consolarla, para escucharla, ¿porqué no lo haría ahora que lo necesitaba con desesperación?.

"Estoy tan cansada" Dijo la muchacha casi como un murmuro, no quería interrumpir la paz encontrada con su voz, no cuando eran tan pocas las veces que podía respirar tan tranquila y lentamente.  El gato tan solo se dedicó a hundirse mas entre las caricias de su ama. "Últimamente tan solo duermo tres horas al día, y he leído mas estas últimas dos vacaciones de verano que en toda mi vida... no que me queje, he aprendido cosas que jamás hubiera creído que existieran... pero aún así, la angustia me esta afectando poco a poco..."

Dejando a un lado el vaso ya vacío, la muchacha se hundió mas en el sillón y siguió acariciando dulcemente la suave melena de su gato.  "Estoy tan preocupada... no puedo evitarlo... todo esto me tiene con los nervios de punta, yo no soy una persona de acción, yo no soy Harry, o Ron... Yo necesito tener todo sobre la mesa, analizarlo, saber a lo que me enfrento... Dios, estoy tan preocupada..." "Yo estoy acá, lejos de ellos, ¿Cómo no preocuparme?... Sí, me envían lechuzas seguido, pero eso no me quita la preocupación..." ¿Quién iba a decirlo?, Hermione Granger, preocupada por algo que no sea sus materias. Una riza sarcástica salió de sus labios.

Pero era verdad, ese par de niños, muchachos, latosos, ¡hombres! habían crecido en su mente y en su corazón, sus primeros amigos verdaderos... Se preocupaban por ella, la hacían reír, la acompañaban, ¿Qué mas puede una pedir? Claro, tenían sus defectos, y unos muy feos, como nunca hacer sus deberes a tiempo, arriesgarse a cada oportunidad que tuvieran y ¡descaradamente arrastrarla a ella en sus locuras!, nunca fijarse en lo obvio, nunca pensar en lo que dicen antes de hablar, ser tan densos que dan ganas de golpearlos con el estandarte de Slytherin para que entraran en razón...

Y a pesar de todo, de los constantes regaños, de los comentarios sarcásticos, de las decenas de puntos perdidos... Tan solo bastaba el ver en sus ojos la lucha, el deseo de no dejarse vencer por nada ni por nadie.  El defenderla a capa y espada ante todo, ya sea insultos, peligros, la vida en sí.  Descubrir que siempre estaban al pendiente de si necesitaba algo.  La absurda cantidad de lechuzas que llegaban todos los días preguntándole cómo estaba y qué había hecho, a pesar de que YA sabían perfectamente qué hacia todos los días (buscar hechizos y pociones que los ayudaran... y preocuparse... y pedirles de todo corazón que se cuidaran... y que oh por favor no se metan en problemas... y que estudiaran... y que no se olvidaran de seguirle mandando mensajes porque sino se volvería loca...)

Con sus ojos ya cerrados y una sonrisa en el rostro, la chica seguía acariciando más lentamente al pelo del gato encrespado.   "Tan sólo el recordar lo de hace un mes...". Ambos chicos de pie frente a ella. Uno con el cabello negro siempre desarreglado, con el semblante de un niño frágil, delgado, estatura promedio, pero que con tan solo mirar el fuego que ardía tras sus ojos verde esmeralda, su mirada saltando de un lado a otro, atento a todos y cada uno de los movimientos que ocurrían a su alrededor, reflejos de un buscador innato, te hacia pensar dos veces el adjetivo frágil. Y otro, mucho más alto que el primero, de cabellos rojo fuego, brazos toscos y fuertes debido al crudo entrenamiento de un guardián.  Semblante de un enojo perpetuo, pero cuyos ojos, posados en la chica de enfrente, azules como el cielo en un día claro, sorprendían con un calor y amabilidad, dignos de un pequeño cachorrito.  Sus muchachos. Le habían dado un sermón, obviamente memorizado y discutido con anterioridad para que ella no pudiera reprocharles, la habían llenado de consejos, le habían advertido que si no dormía la harían beber un litro de agua con Asfódelo y Ajenjo ¿Realmente se dieron cuenta de mi insomnio?... Obvio, si han estado sobre mí desde que terminó el cuarto año. Y la sorprendieron cuando ambos la tomaron entre sus brazos, pudo sentir todo su cariño y su preocupación por ella; sus oídos se llenaron de palabras de cariño (burdas y muy poco sensibles, pero cariño a final de cuenta) y de consejos y de nuevo con que se cuidara y durmiera mas.

"Se preocupan... porque soy mitad muggle mitad maga... están tan asustados como yo..." La voz de la chica cada vez se escuchaba más débil.  El calor que ahora inundaba su cuerpo, los bellos recuerdos de sonrisas y palabras y sentimientos mezclados, el débil resplandor de la Luna... su gato acomodado suavemente en su regazo... El suave pelo entre sus dedos ya tibios... el ronroneo como si fuera un arrullo... el calor que tanto le hacía falta... y el corazón en calma y lleno de felicidad hicieron que la muchacha se hundiera en un profundo sueño, completamente ajena a todo a su alrededor... y a las sombras que ahora se dibujaban lentamente en las persianas de la ventana a su derecha.

Fin Cap 1

Ohhhh Soy MALA jijiji...

¡Mi primer fic de capítulos! I'm so happy jiji… Aunque me costó horrores... soy malísima para las descripciones _-_ y no quería hacerlo tedioso y repetitivo, pero al parecer ya quedó ^^U... Tengo pensado hacer el fic de tan solo tres o cuatro capítulos (O_O oh God, espero terminarlos jeje)... Pero advierto, va a estar MUY triste (o al menos, eso tengo planeado.. pobre 'Mione, si que le tengo reservadas cosas feas) y también advierto, soy una cursi incorregible, así que si les gusta Ron y Hermione quédense ^___^ a mi me fascina la pareja, por eso va a haber muuuuucho amor, y consuelo, y abrazos, y besos (bueno, si ellos quieren claro ;) ) Me faltan mis dedicaciones :D... pero eso vendrá después jijiji.

Quiero aclarar que los personajes NO son míos, no me pertenecen (al contrario, Draco tiene mi corazón :_: ) [¡Je! XD] que más quisiera yo... Todos son tan adorables, y me encantan... *_* Draco, Sirius, Lupin, Oliver, Charlie, Bill, Gred y Forge, Roncito, Harry, Dean, Seamus… etc… etc…  No me vayan a demandar, no tengo nada de dinero, es mas ¡me quieren quitar a mi bebe! (o sea, el Internet) por exceso de pago (ya sabrán como ando :_:). Pero si tienen comentarios o dudas, aclaraciones, quieren filosofar, fotos de Kenneth Brannagah que les sobre, dinero, lo que sea que tenga a mi adorado Ryoga-chan impreso mándenme un correo a saby_chan@hotmail.com... Me encanta recibir mensajes ^_^. ¡Los veré en el prox. Capítulo! Ja ne Minna.

Pd. Gracias a Kali-chan por el título Prima Nox -Primera noche... Es tan solo cambiar de idioma, pero suena padre... aparte gracias también por el título del todo el fic Kyrie Eleison - Señor, ten piedad Oh si, esa frase SERÁ usada ^__^