Esta es mi primera vez escribiendo un fic en español, en si es la traducción del Fic High Heels & Tight Jean, también hecho por mí, pero quería intentar ver que tal salía en español, y no les mentiré pero me gusta más en español que en inglés y la verdad estoy emocionada, será algo nuevo y espero grandioso, la historia se irá desarrollando conforme a los reviews y follows que tenga, así que si tienen alguna propuesta o comentario acerca de déjenlo en los comentarios o mándenme un MD. Espero la historia sea de su agrado y empecemos este grandioso viaje!

Ninguno de los personajes de OUAT me pertenece

_SQ_

Tacones Altos y Jeans Ajustados

Era como una noche más en el bar, podías ver a varias personas, bailando riendo, besándose, a veces hasta toqueteándose de más para un lugar público, la única diferencia de hoy es que es mi último Sábado libre de escuela y obligaciones, y no quería despedirme de las vacaciones sin un rato apasionado.

-Hey Michael! Otra cerveza porfa!- le grite al bar-man quien es casi mi hermano mayor nos conocemos desde que tengo memoria prácticamente.

-Muéstrame tu identificación y te dejare seguir pidiendo cervezas todo lo que quieras- escuche decir a Michael mientras yo miraba a todas las bellezas a mi alrededor, mi mano fue directa a mi bolsillo trasero donde guardaba la identificación con la que conseguía entrar a casi todos los lugares para mayores de edad – Y ni siquiera lo intente con la falsa Emma, ¿que no se supone que deberías estar en casa?- como dije, es prácticamente mi hermano mayor, le rodé los ojos y negué con la cabeza.

-Y aquí estaba yo pensando que había dejado a mi madre en casa – Michael sonrió ante mi comentario y negó con la cabeza – ¡Venga Mike! Una más y me voy a casa – Michael solo me observo sin creerse una palabra – Ok ok, una cerveza y una chica y me voy a casa, prometo no demorar – Michael negó una vez más sin hacer ningún comentario y me entrego otra cerveza, le sonreí de oreja a oreja y seguí observando a las chicas a mi alrededor.

Pasaron 30 minutos más y seguía sin encontrar a alguien de mi interés, hasta que una hermosa morena de tal vez unos veintitantos se acercó a la parte de la barra en la que yo me encontraba y se sentó en el banco a lado mío, la mire por unos segundos, vestía muy elegante, probablemente no era de esta parte de la ciudad, estaba usando un vestido rojo con un muy buen escote y que le ajustaba en todos los lugares correctos, llevaba unos tacones negros muy altos que prácticamente gritaban "Fuck Me" pero de una forma muy discreta y sexy, la mire por unos segundos más, hasta que la escuche habar.

-Me das una copa de vino, por favor – wow y yo pensando que no existían los ángeles, tenía una voz tan sensual y un poco ronca pero tan puf, solo quería escucharla hablar más, vi que Michael asintió y le regalo una sonrisa profesional y le indico que en un momento la atendía, necesitaba acercarme a ella y seguir escuchándola hablar un poco más, aclare mi garganta para llamar su atención, Oh Dios ya podía sentir el sudor en mis manos.

- Hey – ¿en serio? de todo lo que se decir y salgo con un Hey, Fuck debe pensar que soy una tonta.

- Hey – fue la única respuesta que conseguí de ella y un poco cortante para mí gusto.

-¿Estás sola? – primero debía asegurarme que estaba disponible, aunque para ser honesta, en este caso no me importaba mucho y no sé porque; le di una de mis mejores sonrisas encantadoras pero sin parecer creída; a lo cual por fin conseguí que me mirara pero para mi sorpresa solo conseguí que me rodara los ojos y me hiciera una mueca de disgusto – Eh solo estoy tratando de ser amigable – le sonreí mientras Michael ponía frente a ella una copa de vino.

-Sí, estoy sola, y no, no quiero compañía – me contesto en una voz casi inaudible entre todo el ruido del bar.

- Bueno parece que si la necesitas…- le sonreí ahora un poco más dulce y menos casanova, mientras que ella solo volteaba a verme y no se creía lo que escuchaba – Venga, solo aguántame un rato – la hermosa morena a mi lado rodo los ojos una vez más y tomo un sorbo de su copa de vino, no pensaba retirarme de su lado hasta verla sonreír.

-¿Qué tengo que hacer para que me dejes sola? – abrí los ojos como platos ante su tono de voz más fuerte y autoritario pero no porque me intimidara, más bien por asombro, ya que solo la había escuchado hablar en monosílabas y en voz baja, pensé en su pregunta y sonreí de oreja a oreja cuando tuve la idea perfecta, bailar, ¿quién no se divierte cuando baila?, y si la hermosa morena no lo hacía…yo le demostraría lo divertido que es y la haría sonreír.

-¿Qué te parece bailar? – le sonreí y sentí su mirada penetrante en mi alma, me miro tan intensamente, supongo tratando de descubrir mis intenciones, tardo unos segundos y en esos segundos me dedique a mirar ojos color chocolate tratando de degustarlo, imaginando que hermosos se verían al resplandecer con una sonrisa de ella.

- Bien, solo un rato – sonreí y tome su mano, desde luego sentí esas pequeñas mariposas en el estómago, y esa pequeña chispa de electricidad al momento de tocarla, nos dirigí hacia la pista de baile, y empezamos a movernos al ritmo de la música, al principio estábamos muy separadas, pero eso me daba a mí una grandiosa vista, bailábamos juntas pero al mismo tiempo con nadie; no pude quitarle la vista de encima, hubo un momento en el que cerró sus ojos, parecía que se olvidaba de todo a su alrededor, era tan hipnótico, me acerque a ella y la tome por la cintura sin perder el ritmo de la música y el que ella emitía y para mi sorpresa se dejó llevar en mis brazos y se acercó ella todavía un poco más, poso sus brazos sobre mi cuello y no pude evitar recorrer todo su cuerpo con mi mirada, pude sentir varias veces el rose de nuestros cuerpos y eso también me encendía full, recorrí su cuerpo un millón de veces en tan solo unos cuantos minutos de baile, hasta que regrese a su cara y ahí la vi, examinándome, iba a decir algo pero decidí mejor solo dar una sonrisa apenada por haber sido descubierta recorriendo y casi saboreando su cuerpo con la mirada, y en ese momento, algo cambio en su mirada…deseo; se abalanzo sobre mí y sobre mis labios, al principio me tomo por sorpresa, pero esos labios carnosos y esquicitos me regresaron al momento y no tarde en devolverle el beso, al principio fue un beso húmedo, necesitado, profundo, sus brazos que seguían en mi cuello los aferro más y me acerco más a ella, yo rodee su cintura con mis brazos y mordí un poco su labio inferior sonriendo un poco, y después sentí su lengua trazando mi labio superior, eso me volvió loca, así que solté su labio inferior y volví a besarla pero ahora dando entrada a su lengua en mi boca, seguimos así hasta que de verdad sentimos la necesidad de respirar, ya un poco agitadas solo alcance a sonreírle y por fin una hermosa curva se deslizo en sus labios formando la más bella sonrisa que haya visto en toda mi vida, sonreí aún más grande y me acerque a su oreja rozando nuestras mejillas.

- Soy Emma – sentí como su sonrisa se hizo más grande y no quería perdérmela, así que empecé a regresar mi cara frente a la suya, cuando sentí que ella también acerco su boca a mi oreja.

- Soy Regina –

Deslice mi cara para quedar frente a ella y acerque nuestros labios casi rosándolos, la mire a los ojos – Encantada de conocerte – y la volví a besar ya un poco más lento y ella me devolvió el beso, sonriendo en medio de este, después solo sentí como trazo mi labio inferior con su lengua y terminamos el beso, necesitaba sentir más de ella, en este momento, podía sentir mi entrepierna ya húmeda, y tome la decisión rápida, los baños de staff, eran limpios y los mejores baños de todos los bares a los que había ido, tenían hasta su pequeña salita de estar; así que le volví a sonreír pero ahora con una más atrevida tome su mano en la mía y ahí estaba otra vez esa pequeña casi intangible chispa eléctrica; me estaba empezando a gustar esto; -Sígueme – nos guie atreves de la multitud de gente hasta los baños de staff, abrí la puerta la deje entrar y en cuanto estuvimos adentro la atrape contra la puerta y la bese, trace sus labios primero con mi lengua; saboreándolos y sintiéndolos; hasta que me dejo entrar a su boca, nuestras lenguas bailaban prácticamente, era algo tan natural, para nada forzado, como si nos hubiéramos besado cientos de beses antes. Deje de besarla por un momento y empecé a bajar besos desde su mandíbula hacia su cuello, mis manos pasaros de su cintura a sus pechos, masajeándolos un poco sobre su vestido, pude escuchar un suave gemido cuando mis besos llegaron a su escote, sonreí contra su piel y abrí su vestido por detrás y lo baje a su cintura, ahora veía bra de encaje color negro que llevaba debajo, sentí como sus manos se enredaban en mi melena y podía escuchar varios suspiros cada vez que besaba sobre sus pechos, iba a desabrochar su bra cuando unos fuertes golpes sonaron en la puerta.

-Emma! David está aquí! Necesitar salir ahora! – mis ojos se abrieron como platos pero ahora si por horror ante las palabras de Michael, que demonios estaba haciendo papá aquí a estas horas, aparte se supondría que llegaría aquí hasta el lunes.

- Shit! Demonios, lo siento, me tengo que ir – le dije a Regina, sin darle tiempo de recuperarse por lo que había estado pasando y solo le plante un último beso en los labios, antes de que abriera la puerta y saliera prácticamente corriendo del local.

Caundo llegue a casa, escale por la ventana para entrar a mi dormitorio, en cuanto estuve dentro lo primero que tuve que hacer fue mandarles mensaje a mis mejores amigas.

-"¡LA MEJOR NOCHE DE MI VIDA! 2 palabras…hermosa morena" – Presione el botón de enviar, y empecé a recordar a la morena…Regina y su forma de bailar tan hipnótica, su forma de besar tan sensual, me perdí en el glorioso recuerdo de su cuerpo contra el mío en el baño del staff, cuando la vibración de mi teléfono me trajo de vuelta al mundo real, vio la pantalla y rodo los ojos sonriendo cuando vio el nombre de Ruby en ella.

- Otra?! Que perra! No te lo puedo creer! – escuche gritar a mi mejor amiga al otro lado del teléfono, y a Belle tratando de callar a Ruby. – Ruby, vas a despertar a mis padres – soltó una pequeña risita que venía conteniendo desde que contesto la llamada.

- Lo único que les diré por teléfono es que… ESTA ha sido la mejor noche de mi vida – escucho a Ruby chillar agudo y a Belle riendo.

- Y probablemente la última, jovencita, porque estas castigada – Estaba tan sumergida en mis pensamientos sobre Regina que nunca escuche cuando papá entro al cuarto.

- ¡Uy! Atrapada – escuche decir a Ruby del otro lado del teléfono y colgué sonriéndole a mi padre tímidamente, el solamente negó con la cabeza.

- Dame el celular, a dormir, y no más salidas por todo un mes – suspire y asentí con la cabeza, sabía que el castigo no importaba porque a final de cuentas, valió mucho la pena, no me arrepentí de nada, no cuando tenía ese gran y asombroso recuerdo de la más hermosa mujer en todo el planeta…Regina.

_SQ_

Y bien? Que les parece? Lo sigo? Lo dejo?...ustedes díganme