Bueno, que les puedo decir? este fic surgio de la alegria de leer el manga y ver que tema y shika quedaron en el mismo equipo... Y no pude evitar sacar toda clase de conjeturas acerca de la señora sermoneada que le estaba dando temari a Shikamaru. Y bueno, ¿no puede volar un poco la imaginacion? El fic está ubicado la noche después de la división de los equipos de shinobis -no tome en cuanta si el ataque del equipo de Emboscada (liderado por Kankuro) era lanzado el mismo día de esa división, o si los demas tenian conocimiento de que ya los ataques habían empezado (ante las dudas, consulten el manga 515-516-517- jugué un poco con la realidad del manga, solo para justificar la conversación... Sin mas...


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Le daba vueltas la cabeza. NO podía creer, que esto estuviera sucediendo realmente… Como shinobi, sabía que existía la posibilidad de vivir una guerra, pero nunca calló en cuenta de que… él tuviera que vivir una. NO era su primera guerra, la invasión de Suna y el Sonido Durante los Exámenes Chunnin había sido cruda y sangrienta… Pero no se compararía jamás con la que estaba por vivir en cuestión de días, horas, tal vez segundos….

Él recordaba su papel durante sus exámenes Chunnin. Después de avergonzarse a sí mismo al finalizar su examen, el junto con Naruto y Sakura habían salido en persecución de sus ahora aliados de la arena. Recordaba las olas de adrenalina que le invadieron ese día, nunca pensó que su vagancia pudiera dar paso a un sentimiento semejante, esa especie de hambre de luchar. No lo dudo dos veces al decirle a sus compañeros que se adelantaran, que el retendría a sus perseguidores. No olvidaría jamás como se sintió cuando, siendo tan joven, logró detenerles, siendo el apenas un genin.

En verdad se sintió poderoso.

Sin embargo, tampoco olvidaba el terror que lo invadió a verse tan débil como para no poder mantener su jutsu, ver como poco a poco sus atacantes se liberaban y como se sintió ver la ola de la muerte pasar muy cerca de él. En esa oportunidad, había sido su sensei, Asuma, quien le había salvado –de milagro decía él, ya que las posibilidades de que le encontraran eran casi nulas-. Se sonrió al recordar a Asuma.

Estaba caminando alejándose de los territorios pertenecientes a la base principal y los campamentos. Había demasiada gente en ese lugar y necesitaba despejarse un poco. No hacía mucho, Gaara lo acaba de designar como su asistente en comando de la División de Ataque 4. Gaara era el comandante general de todo el ejército, por lo que le encomendaba de misión ser prácticamente el general de la división 4. Eso le ponía nervioso. Pese a que la gente a su alrededor le considerara un buen líder, el detestaba liderar equipos. Su primera misión como líder casi acaba con todos los que estaban a su cargo, muertos. Y estos eran sus mejores amigos. Desde entonces, supo que la responsabilidad de que alguien muriera por culpa suya era algo que él simplemente no podía soportar.

Hubiera agradecido no ser él el escogido, pero no había vuelta marcha atrás. Por lo visto, el Kazekage confiaba mucho en él como para ponerle la responsabilidad de tantas vidas en sus manos. Estando Temari en su equipo, le sorprendía que no se lo hubiera asignado a ella…

Se detuvo un momento. ¿Confiaría Gaara más en el que en su propia hermana? Le parecía extraño, algo no le encajaba. Temari era por su cuenta una excelente estratega, y tenía una naturalidad para liderar sorprendente. Su temple y su carácter la hacían un hueso duro de roer, y tenía una capacidad sorprendente para hacer que los demás le obedecieran. Ella era más indicada para el trabajo… Y de todas maneras, ella estaba bajo la subordinación de Shikamaru, lo cual era solo un peso más encima, por ella se preocupaba el doble…

Sacudió violentamente su cabeza. Se encontró a sí mismo divagando entre sus pensamientos. De nueva cuenta, había llegado a ese extraño sentimiento que venía intrigándole desde hacía un tiempo. NO sabía explicarse… Solo sabía que le distraía de todo, por eso prefería evitar darle mucha importancia…

-¿Divagas de nuevo?-preguntó una voz bastante conocida.

Shikamaru volvió en sí, su pensamiento se estaba desviando de nuevo, y no se había dado cuenta siquiera de donde estaba. Estaba en la cima de una colina, a unos dos kilómetros del campamento. Miró hacia su costado, y pudo verla, a Temari sentada en el suelo con el abanico a su lado.

Sintió algo extraño que le iba de los pies a la cabeza. Trató de apaciguarse, pero se sentía inquieto. Algo en su interior le decía que debía sentarse, y así lo hizo.

Temari no le dirigió la mirada, tenía sus ojos clavados en el cielo justo enfrente de ella, serio y calmado.

Shikamaru la miró y se sintió intrigado por esa expresión, ¿qué estaría pasando por la mente de esa kunoichi?

-Podría decirse- se resolvió a contestar él, después de un tiempo en silencio.

-Espero que reflexiones lo que te dije en la mañana- contestó Temari, seria- te recuerdo que Gaara tiene demasiadas responsabilidades como encargarse de la División 4 también, así que aunque tengas un simple título de asistente, eres prácticamente el general de nuestra división. De ti dependerá el éxito de muchos, incluyéndome.

-No tienes por qué decírmelo, mendokusai- suspiró Shikamaru- sé lo que el papel de líder implica.

-Espero que recuerdes-insistió ella- en que esta vez no es una misión de lo que hablamos. Es una guerra. NO son 5 o seis personas a tu cargo, es todo un escuadrón. No hablamos de completar una misión, sino del destino del mundo ninja y todo lo que conocemos.

-Gracias Temari, de veras que con eso aminoras la carga que siento en los hombros…

-No estoy queriendo atormentarte- repuso ella, bajando un poco el tono que tenía- solo quiero que te despejes. Te noto distraído y eso no sirve, tienes que estar enfocado al cien por ciento si queremos tener alguna probabilidad.

-Las tenemos-dijo Shikamaru.

-Lo sé…

-¿Entonces?

-Nada olvídalo.

Shikamaru notó como el semblante de ella cambió un poco. Era más nostálgico. Se quedó callado mirándola. Se veía bajo la luz de la luna tan… tan…

Pasaron unos minutos, antes de que alguien rompiera el silencio.

-No te felicité-suspiró Temari.

-¿Disculpa?

-Felicidades por ser electo asistente de Gaara-dijo ella, que por fin volvió a verlo, con una de sus sonrisas enormes.

-Hum, gracias-dijo él- aunque sigue sin cerrarme, si Kankuro tiene su propio escuadrón, ¿por qué tú no tienes el tuyo? El escuadrón 4 podría estar bajo tus órdenes…

-Le dije a Gaara que no encontraría mejor persona para el puesto que tú- dijo ella, desviando la mirada- tienes muchas cualidades de líder que tal vez tú no notes, Shikamaru. Y Se que harás lo mejor para devolvernos a todos con vida…

-Pero…

-No me hagas quedar mal –ella hizo como que no escuchó- mira que estoy poniendo toda mi confianza en ti de que traerás a todo el escuadrón vivo incluyéndote a ti y a mí. Doy por aludido que tienes más probabilidades de lograrlo que yo.

Dicho esto se puso de pie, recogió su abanico y dio unos pasos en dirección opuesta al Nara, quien la veía estupefacto. ¿Confiaba ella tanto en él? Volvía la sensación extraña…

Temari se detuvo un momento. Giró para quedar de frente a él una vez más.

-Hay algo que tal vez deba decirte…

-¿Qué será?-lo interrumpió él, ansioso.

-Todavía no –sonrió ella- después de la guerra. Vive y tráenos vivos, y te diré.

-Pero no hay nada seguro…

-No mates la emoción del momento –lo retó ella divertida- tómalo con un "incentivo". Ya sabes la condición. Regresaré al campamento. Buenas noches.

Shikamaru se quedó embobado viendo la figura de su amiga caminando. La curiosidad lo invadía de nuevo, mezclado con ese sentimiento raro… Parece ser, que tendría que esforzarse, si quería conocer ese secreto de Temari…


No se si fue obvio el nombre del fic. EN ingles, a un cuadrito del manga se le dice "frame" y a una escena de una sola accion en un solo tiempo se le dice cuadro en español, Frame en ingles X3

Les gusto? no les gusto? fume algo muy verde y estubo muy volado? dejen su review y hagamenlo saber