¡Hola a todos! Otra vez me he puesto a escribir en español, pero esta vez traigo algo diferente. Empezando porque es un universo alterno y es angst, no estaba segura de publicarlo, pero ya qué, aquí está. Espero que lo encuentren algo interesante al menos.

Cuando regresó, lo único que encontró fueron ruinas. ¿Cómo había pasado? Había dejado atrás todo lo que más preciaba con la esperanza de volver a verlo cuando la guerra acabase. Él era el que podía morir cualquier día, el que arriesgaba su vida persiguiendo un ideal, tratando casi en vano de terminar con la masacre que su hermano había iniciado. ¿Cómo era posible que hubiese sobrevivido y más bien fuera ese santuario el que hubiese caído? No lo comprendía.

Caminó entre los escombros de la propiedad por impulso. No lo deseaba, no quería ver el terrible estado del lugar, pero tampoco podía detenerse. Se imaginaba cada rincón como él lo había dejado y se le encogía el corazón. Cuando llegó a su mente otra visión, la de las personas que debían de estar ahí, tuvo que cerrar los ojos para evitar las lágrimas. Ellos estaban bien, tenían que estarlo. Se comunicaría con la casa principal y estarían todos ahí, tranquilos y ajenos a lo ocurrido en ese lugar. Respiró profundo y se convenció de la idea.

Abrió los ojos nuevamente, la destrucción era la misma. No había más que hacer en ese lugar. Se volteó hacia sus compañeros de viaje, incapaz aún de formar una sonrisa, pero con la suficiente firmeza para mantener una apariencia de control. Estaba por disculparse por demorar tanto cuando su pie chocó con algo. No había forma de esconder el terror que sintió cuando desvió la vista y reconoció con qué.

Sus piernas le flaquearon, apenas pudo arrodillarse a recoger el objeto sin caer de bruces en el suelo. Sintió algo estancarse en su garganta cuando finalmente tocó el rosario. Repentinamente la ilusión se fracturó. No habían escapado a tiempo. Ella jamás hubiera dejado atrás algo tan preciado, no a menos que hubiese estado desesperada.

Nuevamente sintió lágrimas en sus ojos, pero ya no tuvo la energía para esconderlas. Si ella… Si algo le había pasado a ella… Apretó con fuerza el rosario, imitando lo que sentía en su pecho. No podía pensar así, no podía completar esos pensamientos. No tenía el valor de enfrentarlos. Tal vez ya no tuviese la ilusión de que todo había salido bien, pero no había muestra de que hubiese pasado lo peor, no ahí al menos, todavía no debía desesperar.

Tragó a la fuerza la bola de terror que se había atorado en su garganta. ¿Qué le diría ella si no lo hiciera? Lo mandaría a volar. Sí, casi la podía imaginar parada frente a él con el ceño fruncido y los brazos cruzados. Si estuviera ahí lo acusaría de estúpido. Ella confiaba en él, tanto como para dejar que se fuera, ¿acaso no podía hacer lo mismo por ella? ¿Creer en que la volvería a ver? Tenía que.

Se paró, tenía que irse. El primer destino sería la casa principal. Con suerte, cualquier cosa que hubiera pasado, el grupo entero habría llegado ahí. Si no era así, ya vería por dónde empezaba a buscar, pero daría con ella. Cualquiera fuera su estado, tenía que encontrarla.

Reinició su camino hacia sus amigos. No les ocultó sus lágrimas, pero tampoco su determinación. Su corazón estaba decidido, el contarles lo que pensaba hacer sería solo una cortesía.

Bueno, ahí mi primer intento de escribir angst para un fic, espero que no haya salido tan mal. Estoy considerando continuar la historia a pedido de una amiga, pero no estoy tan segura, ya se verá qué pasa. Igual, si tienen un comentario, por favor, háganmelo saber, escuchar de mis lectores es lo que me inspira a continuar escribiendo. Gracias por leer hasta acá. Nos vemos en el próximo fic.