N/A: Anoche fueron los Goya y hoy son los BAFTA así que se me me ocurrió la idea de juntar dos de mis debilidades: Mentes Criminales y el cine. Con un poquito de humor por supuesto. Espero que os guste.
DISCLAIMER: Los personajes de Mentes Criminales no son míos, pertenecen a CBS.
Capítulo 1: Una terrorífica sesión de cine
El cine era una de esas pequeñas cosas que hacían que Hotch se olvidara de todo lo malo que veía día tras día. Lo que más disfrutaba era una buena comedia, sobre todo si eran las comedias clásicas americanas: Chaplin, Frank Capra, los hermanos Marx, Ernst Lubitsch y especialmente Billy Wilder, eran pequeñas debilidades que siempre le sacaban una sonrisa. Lo cierto es que desde la muerte de Haley había perdido la costumbre de ver una buena película de vez en cuando, al menos una que no fuera de dibujos animados. Esa era otra faceta que todo el mundo desconocía de él: le encantaba el cine de animación, siempre y cuando Jack estuviese con él. Le encantaba disfrutar con su hijo viendo Los Increíbles, amaba oírle repetir una y otra vez los diálogos de Buscando a Nemo, e incluso cantaba con él las canciones de Tarzán. Nunca olvidaría la vez que se empeñó en tener como mascota un dragón al ver Cómo entrenar a tu dragón.
Recordó la vez que Gideon trajo una película de Chaplin. Ese era uno de los pocos buenos recuerdos que guardaba de la sala de juntas: todo el equipo disfrutando de una película. Al ver el DVD que le habían regalado esa mañana con el periódico, le pareció buena idea que se tomaran un par de horas de respiro, al fin y al cabo, esa semana había sido dura y habían estado hasta arriba de papeleo. Salió de su despacho y encontró a su equipo listo para ir a comprar un almuerzo rápido.
-Chicos. –Les llamó para captar su atención. -¿Qué os parece si nos tomamos un descanso y vemos una película durante la comida? –Morgan y Prentiss se miraron extrañados.
-¿Cuál es el truco? –Se atrevió a preguntar Morgan con desconfianza.
-No hay truco. La última vez que vimos una película fue con Gideon y creo que sería una buena idea para que todos nos despejáramos un par de horas. –Emily sonrió.
-A mí me parece una gran idea.
-Podríamos pedir unas pizzas y así comemos mientras vemos la película. –Sugirió Reid.
-Buena idea genio. –Estuvo de acuerdo Morgan. -Pero por lo que más queráis, que la barbacoa no lleve maíz. Odio la pizza con maíz...
Mientras sus compañeros avisaban a JJ y García, Hotch hizo lo propio con Dave, que le miró como si fuera un bicho de otro planeta pero aceptó la idea.
-Y dime jefe ¿Qué película vamos a ver? –Preguntó García sentándose junto a Morgan en la sala de juntas. Hotch sacó el DVD y se lo enseñó.
-¿El Exorcista? –Cuestionó Morgan.
-El montaje del director. –Añadió él.
-¿Qué pasa, machote? ¿No te dará miedo…? –Se burló JJ.
-Para nada. Yo no creo en demonios ni esas chorradas. –Admitió con suficiencia.
-Yo no he visto El Exorcista. –Confesó Reid.
-Por qué será que no me sorprende… -Comentó Dave compartiendo una mirada cómplice con JJ.
Hotch se acercó y puso el DVD. No es que el género de terror fuera su favorito pero al menos sabía que a sus compañeros les resultaba entretenida y era una buena película. Además tenía el presentimiento de que a Morgan no le agradaba. En una ocasión, Prentiss y Reid le gastaron a Derek una broma, poniendo en su ordenador la imagen de la niña de El Exorcista con un grito que se escuchó por toda la oficina. Morgan se llevó tal susto que se cayó de la silla.
Las pizzas no tardaron en llegar y con ellas en la mesa la película comenzó. Un plano de la casa, luego el de la escultura de una virgen y los créditos iniciales con la inquietante música.
-Me gusta Max von Sydow. –Comentó Prentiss de repente.
-Tienes unos gustos muy raros… -Se burló Morgan.
-¿Qué pasa? Es un buen actor. –Se defendió la morena. –No me puedo creer que nunca le hayan dado el Oscar…
-Oh mira, ahí está el pequeño angelito… -Dijo García al ver como Ellen Burstyn arropaba a Reagan.
-No por mucho tiempo… -Rió Rossi cogiendo una porción de la cuatro quesos.
-Spencer Reid, te presento al padre Karras. –Dijo JJ al ver al padre discutiendo con otro cura.
-El Padre Karras me recuerda a Rossi. –Confesó Prentiss.
-¿A mí? ¿Por qué? –Ella se encogió de hombros.
-Supongo que por lo dramático.
-¡Yo no soy dramático!
-Sí lo eres. –Estuvo de acuerdo Hotch.
-Oh sí, haced la ouija, seguro que eso ayuda. –Comentó Morgan al ver la escena.
La película transcurría con algún comentario jocoso por parte de Morgan. A Hotch le daba la impresión de que hacía bromas para descargar su propia tensión. Al llegar a la parte en la que le hacen pruebas a Carrie notó que su compañero dio un respingo al ver el plano del demonio. Prenstiss también se percató y sonrió divertida, pero guardó silencio.
-Es muy probable que tenga un problema neurológico. –Todos miraron a Reid aguantando la risa. Era un genio pero a veces se perdía en temas que tuvieran que ver con la cultura popular.
"Me ha dicho que mantuviera los dedos alejados de su maldito c…"
Rossi alzó las cejas.
-A eso lo llamo yo tener carácter.
-Puede que se haya visto sometida a abusos en el pasado… -Intervino Reid. JJ soltó una pequeña risita.
"Yo creo que la mejor explicación es la más sencilla"
-Demonio… -Cantó García.
Poco después vino la secuencia de la fiesta en casa de Reagan. La niña se despertó y orinó encima de la alfombra.
-Atento a esto Morgan. –Avisó Prentiss.
-Está bien, ya he comido suficiente. –Dijo el moreno tirando su porción de pizza encima de los demás restos.
La primera escena en la que se veía a Reagan poseída no tardó en llegar y Hotch pudo comprobar que Morgan parecía inquieto.
"¡La cerda es mía!"
-Oh… Me encanta cuando le cambian la voz. –García parecía entusiasmada.
-Esos espasmos son imposibles... –Decía Reid.
-Nunca imaginé que una cama pudiera dar esos saltos.
-Prentiss, eso es porque nunca has pasado una noche en la mía. –Dijo Morgan guiñándole un ojo.
-Genial… Un demonio en la película y un fantasma en esta habitación. –Se burló devolviéndole la jugada y haciendo que los demás rieran.
En realidad a Hotch le resultaba bastante divertido oír los comentarios de sus compañeros, especialmente los de Reid, que al no haber visto la película no tenía ni idea de que iba a pasar y lo analizaba todo con lógica. Pero lo que más gracia le hacía eran las caras de Morgan, que había dicho haberla visto pero sus reacciones le hacían pensar que había mentido para hacerse el duro. Las caras de todos durante la escena del crucifijo hicieron que se tapara la boca disimuladamente para ocultar su diversión. Morgan incluso cerró los ojos cuando se le giró la cabeza 180 grados.
Por fin el padre Karras se presentó en la habitación de Reagan. Mientras los demás comentaban la película, Morgan permanecía en silencio y algo agazapado en su silla. Al vomitarle al padre Demian, Morgan dio un respingo.
-Muy rico… -Comentó Rossi con una mueca de asco.
-Mira Dave, habla latín como tú…
-Yo no hablo latín, hablo italiano…
-¿Y eso que es? ¿arameo? –Definitivamente, Morgan no había visto la película.
La escena del exorcismo con el padre Merrin llegó y oyó las risas de JJ y García al ver como la niña soltaba palabrotas.
-No sé por qué pero me encanta cuando le llama "degenerado" al cura… -Rió García.
Esta vez Hotch se fijó en Prentiss y pensó que tal vez no hubiera sido tan buena idea escoger esa película debido al caso de la muerte de su amigo Matthew Benton. ¿Cómo no lo había pensado antes? Ahora su compañera parecía seria y una máscara de frialdad cubría su rostro. Al notar que la observaba, Emily le miró y le sonrió asintiendo con la cabeza, como si hubiera adivinado lo que pasaba por la cabeza.
-Eso es imposible… -Decía Reid al ver como la niña levitaba. Dave bufó.
-¡Vamos, chico! ¡Es una película!
La película llegó a su fin.
-¿Qué te ha parecido Spence?
-Bueno, supongo que si se la considera de ciencia ficción está bien…
-Yo casi me duermo. –Declaró Morgan.
-¿Sí? Yo creía que ibas a llorar de miedo. –Se burló Dave mientras recogía las cajas de pizza. -¿Sabes, Aaron? No es una mala idea que de vez en cuando hagamos una sesión de cine, pero la próxima vez deja que elija otro la película.
-No veo ningún inconveniente en ello. –Admitió con una sonrisa.
Hotch vio como salían todos comentando algo acerca del film. Prentiss se quedó rezagada.
-Ey. –Ella le miró. -¿Estás bien?
-Sí.
-Creo que tal vez mi elección no fue muy apropiada... –Ella sonrió.
-¿Bromeas? ¿Has visto las caras de Morgan? –Él asintió divertido. –No te preocupes Hotch, es solo una película. –Dijo para luego salir de la sala. Cuando estaba fuera se dio la vuelta y se asomó por el marco. –Además, tengo una amiga que tiene la máscara de Reagan y me da que va a estar encantada de prestármela para una broma. –Dijo guiñándole un ojo.
Y así fue como Hotch empezó una tradición en el equipo y como descubrió que a Morgan le aterrorizaba El Exorcista. Las ojeras y la cara de cansancio que trajo al día siguiente su valiente subordinado lo atestiguaban. Aunque tuvo que mediar debido a las bromas que el resto del equipo le hizo al moreno durante los días posteriores al visionado: que Reid apareciera detrás de él en el baño con la máscara de Reagan tuvo su gracia, pero las bromas se empezaron a descontrolar cuando le pusieron la música de la película en el despacho y cuando empezó a recibir llamadas con la conocida voz de una niña endemoniada.
Eso sí, las caras y reacciones de Morgan le habían sacado más carcajadas que todas las películas de Billy Wilder juntas.
N/A: ¿Qué os ha parecido? Y en el próximo capítulo... ¿Qué película le ataca los nervios a JJ? Se admiten apuestas y Reviews.
¡Saludos!
