Disclaimer: Los personajes NO me pertenecen, son de Stephenie Meyer (aunque se puede soñar e//e)

De que se trata el Fic: Son pequeños Drabbles, todos son continuación del anterior, por lo tanto es un fic con pequeños capitulos

Pairing: Quil&Claire


.:PIJAMADA:.

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Era un día soleado, perfecto para ir a dar una vuelta por la playa. Así que allí se encontraba Quil parado frente a la ya muy conocida puerta de esa casa. Dio un par de golpes a la puerta con los nudillos y espero paciente.

Al cabo de un minuto la puerta se abrió permitiendo ver a una joven señora de cabello largo y lacio de un color rubio cenizo - Hola Quil, es bueno verte por aquí - lo saludo sonriéndole de manera cariñosa.

- Bueno días Señora Young, ¿Esta Claire? - sonrió entusiasmado cumpliendo con su rutina .

La señora ahogo una risita y lo miro fijamente - No se encuentra, salio a jugar a la playa con sus amigas -

- ¿En la playa?, ¿Sola con unas niñas de su edad? - soltó horrorizado, la risa de la mujer resonó por todo el lugar.

- Si quieres, puedes ir a buscarla, están por aquí cerca -

- ¿Puedo llevarla a la Push? - la miro recobrando la calma y la compostura

- Claro y que se quede en casa de Emily, ahora mismo la llamare para informarle - musito la mujer mirándolo con dulzura.

- Gracias - se despidió corriendo hacia la playa, tenia que verla, necesitaba saber que estaba bien tal y como la dejo ayer por la noche

No tardo mucho en llegar al lugar en donde rompen las olas, escucho las risitas de las pequeñas, y de entre todas esas niñas encontró a la que buscaba - ¡Claire! - la llamo caminando hasta ella.

- ¡Quil! - grito ella abrazándole la pierna - Mi mami me dejo venir a jugar con mis amigas - dijo con alegría señalando a las demás.

El licántropo las miro a cada una de ellas, en total eran tres, no se explicaba como sus madres las dejaban jugar solas, si tan solo tenían 10 años; por su parte las pequeñas lo miraban como si fuera algo raro - Eh, que bien - musito al fin revolviéndole el cabello a Claire

- Mira, te presentare a mis amigas - lo jalo del brazo arrastrándolo hasta las niñas - Ella se llama Susan - señalo a un niña rubia de piel cobriza

- La de en medio es Samantha - continuo ahora presentándole a una pequeña bronceada de pelo negro - Y ella es Catherine - la ultima niña tenia un aspecto parecido a la primera, solo que su piel era mas clara

- Mucho gusto niñas - les sonrió el muchacho alzando la mano.

- Él es Quil - anuncio Claire sintiéndose orgullosa al ver como sus amigas abrían la boca en forma de o al ver a su grande amigo.

- ¿Quieres ir a la Push? - indago el licántropo dirigiéndose a la niña de ojos jades

- ¡SI! - chillo brincando, siendo atrapada por el chico - Adiós, nos vemos luego - se despidió de sus amigas dejándolas mas sorprendidas

Una vez en la playa de la Push, Quil y Claire jugaron un rato en la arena, luego en el mar y terminaron construyendo mas castillos viendo el atardecer - Hola hermano -

- ¡Embry! - sonrió el pelinegro mirando a su amigo recién llegado

- ¿Jugando a la niñera? - sonrió con sorna

Quil como adolescente responsable que era le saco la lengua dándole la espalda, provocando la risa del recién llegado - Hola Claire - se arrodillo hasta la altura de la pequeña.

- Hola Embry - canturreo la pequeña - Mira, Quil y yo estamos haciendo mi castillo de arena y ¿Sabes algo? - la niña se le acerco al oído - Yo seré la princesa -

- ¿Oh si? - sonrió Embry - Que bien, ¿y Quil será tu esclavo? -

Claire lo miro con los ojos abiertos como si le hubiera dado una idea - ¡Si!, Tu serás mi esclavo Quil -

- Ya lo soy pequeña - susurro el licántropo siendo escuchado solo por su amigo que soltó otra carcajada.

- Eso es lo bueno de que yo todavía no estoy imprimado - suspiro Embry sentándose en la arena.

No pudo permanecer tranquilo ya que Quil se le lanzo encima tapándole la boca con la mano - ¿Eres idiota o te haces? - gruño el pelinegro a su amigo.

- ¿Qué es imprimado? - musito Claire pensando en las posibles respuestas.

Embry miro avergonzado a su pelinegro amigo, había olvidado lo perspicaz que puede llegar a ser esa niña de diez años - Eh, no, no es nada importante pequeña - le sonrió con nerviosismo el licántropo.

- Bueno, creo que mejor me voy, me esperan en casa - sonrió Embry levantándose.

Quil lo fulmino con la mirada y le susurro algo como "me las pagaras" - ¿Por qué Embry no esta imprimado?, ¿Esa palabra existe, ¿Si busco en el diccionario..? -

- No, es solo una expresión, ¿No tienes frió?, ya esta refrescando será mejor que te deje con Emily - la interrumpió atropelladamente el pelinegro tomándola en brazos .

- Si, aunque tu estas calientito - sonrió la pequeña escondiendo su carita en el pecho del chico.

Al llegar a la casa de Emily, la niña se dio un baño y se dispusieron a cenar - Gracias por la cena Emily - sonrió Quil dándole una mordida a su carne.

- No hay de que, ya sabes que esta es su casa, me alegra que te quedes hoy Claire, hace mucho que no venias -

- Si a mi también me gusta estar aquí - sonrió la pequeña

- ¿Te quedaras a dormir Quil? - indago Emily pasando una mano por su oscura cabellera

- No creo que a Sam le agrade mucho la idea - le guiño un ojo sonriéndole pícaramente

- Idiota - gruño la chica levantándose

El pelinegro soltó una carcajada - Claro, si tienes hospicio para este pobre chico -

- Traeré una manta -

Claire contemplo al muchacho durante largos minutos, terminando su cena - Quil.. -

- ¿Si? -

- ¿Puedo dormir contigo? - le pido con aquel tono de voz tan inocente y dulce que solo ella tenia, desarmando al licántropo

- Si Emily no tienen ninguna objeción, claro -

- ¿Objeción a que? -

- ¿Puedo dormir con Quil tía Emily? - le pido de nuevo mirándola con ojos enormes y suplicantes

- No me pongas esa cara, no funcionara pequeña - le advirtió

- Por favor - le suplico haciendo un tierno puchero

Emily soltó un suspiro - Bueno, no creo que tenga algo de malo, esta bien -

- Si - dio un grito de alegría dando saltitos por toda la cocina .

- A dormir pues - sentencio Emily pero fue interrumpida por dos golpes a la puerta, su expresión cambio de repente, dejando ver una linda sonrisa en su marcada cara - Entra esta abierto -

- Hola, siento llegar tarde, me entretuve con un asunto - se disculpo el chico.

- Sam - lo saludaron Quil y Claire al mismo tiempo, esta ultima corrió a abrazarle - Tío Sam, hoy me quedare a dormir aquí con Quil -

- ¿Oh si?, que bien, me alegro - la beso en la mejilla mientras le dedicaba una mirada calida al licántropo

- Ya esta la cena amor - se acerco Emily presionando sus labios con los del muchacho.

- Que bien, me muero de hambre - le correspondió para después sentarse y devorar todo a su paso.

- Aquí están las mantas, acomódense como gusten - musito la pelinegra sonriéndoles con dulzura - Que pasen buenas noches -

- Tu también - el licántropo le sonrió de una manera picara que hizo cambiar el cobrizo color de Emily a un rojo intenso "idiota" farfullo de nuevo antes de irse a su habitación

Una vez solos, Quil tendió las mantas en los sillones formando una cama improvisada - Bien Claire, a dormir -

- No, cuéntame un cuento - le pido trepándose a su abdomen.

- No, a dormir - le repito acostándola en su pecho.

- Uno por favor - insistía mientras el pelinegro la tapaba - Por favor Quil - le ronroneo.

¿Cómo podía negarse a sus suplicas - Esta bien, ¿Cuál quieres oír? - suspiro derrotado.

- Caperucita roja - chillo emocionada acurrucándose al cuerpo caliente del licántropo

- Había una vez una pequeña niña, a quien la llamaban "caperucita roja" por una caperuza roja que siempre llevaba puesta - comenzó a contarle en susurros mientras despeinaba el pelo de la niña. Continuo con la historia mirando de vez en cuando por el rabillo del ojo las reacciones de la pequeña

- Y al final, el leñador mato al lobo y salvo a la abuelita, así caperucita y la ancianita vivieron felices para siempre - concluyo soltando un suspiro tratando de no moverse mucho para no despertar a la niña

- ¿Por qué mato al lobo? - se sorprendió al escucharla, no esperara que estuviera aun despierta, la miro a los ojos, ella se notaba curiosa.

- Por que se quería comer a la abuelita - le sonrió con ternura.

- ¿Los lobos comen personas? - su tono subió a un grito de sorpresa.

Quil se rió un poco por la expresión exagerada de la pequeña - No - le dijo al fin después de reír - Comen carne, pero no humanos, tal vez un venado o algo así -

- Sabes, yo creo que los lobos son tan lindos como perritos, por eso me gustan mucho y me gustaría tener uno - Claire dio un gran bostezo para volverse a acomodar y tratar de dormir.

El licántropo la miro como se dormía entre asombrado, feliz, desconcertado , satisfecho y divertido, todas esas emociones juntas eran extrañas, se quedo pensando en lo ultimo que le dijo la niña antes de quedarse también dormido con una larga sonrisa.

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Quiero un lobo..


Notas finales: una idea que se me ocurrio mirando la televisión, e//e ¿Quién dijo que la mercadotecnia no servia de algo?, por ahora, no se nota la relacion del titulo con la historia pero mas adelantito se aclarar eso.

.-* Gracias por leer C: *-.

CofRRcof (?)

By: Mina-¢han / uaµ)-au!w