14. Licor:
Era una de esas noches, donde se habían dado el lujo de ir a comerse la ciudad.
En el bar de turno.
Los muchachos habían tomado, y cada cual se encontraba en sus circunstancias, haciendo lo que estar en ese estado les dictaba.
Así es como encontramos a un Jiroh totalmente "alegre" danzando por ahí con todo aquel que le diera la oportunidad.
Claro que estaba bajo la mirada de Bunta, en aquel entonces el chico con el que tanto tiempo anhela salir, besar y amar.
Una vez que lo consiguió, con el correr del tiempo, comenzó a notar que no todo era como el imagino. Aun así no iba a darse el lujo de perderlo, pero el ya sabia, que la situación (por su parte) no daba para más.
Mientras tanto, había alguien que no le quitaba la vista a Jiroh. Y alguien lo saco de sus pensamientos, era Bunta.
-Escúchame Atobe te diré esto una sola vez…
-Viniendo de ti no creo que sea un asunto que le concierna demasiado a Ore-sama
-Puedes hacer lo que quieras con Jiroh. Ya no, ya no lo quiero como novio… Me harías un gran favor si haces que Jiroh finalmente se de cuenta de que eres tú al que ama.
-Estas enamorado de alguien mas y quieres que yo provoque que Jiroh de cierta manera te traicione, así seria mas fácil terminar con la relación. ¿O me equivoco?
-...Como siempre eres demasiado inteligente… pero aun así, lo que dije acerca de los sentimientos de Jiroh hacia ti son verdad, susurra tus nombres todas las noches, habla de ti constantemente. Seria lo mejor si le demostraras tú mismo a Jiroh que es lo que realmente le pasa.
-Vete de este bar, Ore-sama debe actuar.
Bunta se retiro. Atobe termino su Bloody Mary, para luego dar a lugar a un Séptimo Regimiento. Por mas que se tratase de Atobe, rey de la seducción, tenia algo de miedo, y con el impulso del alcohol lograría su objetivo.
Esta era una de las situaciones que Oshitari le había descrito para que pudiera confesarse.
Recordaba todo de aquella charla, sabia que hacer.
Se acerco a la pista de baile, y tomo a Jiroh por las muñecas. Lo alejo de la gente y contra la pared le dice.
-Esto, es para que finalmente puedas disfrutar del verdadero amor, y la verdadera pasión que un enamorado puede brindarle a otro. No te resistas, porque se que es lo que verdaderamente sientes.
Jiroh se quedo mudo ante esas palabras, se dejo llevar, por el alcohol que tenia dentro, por sus verdaderos sentimientos, y por Atobe.
