¡Buenas! Este es mi primer fic, empezaré con un capitulo y si veo que gusta, seguiré trabajando sobre él.

Esta historia trata sobre la importancia de las cosas que a simple vista no somos capaces de ver pero que podrían ser de gran utilidad para todos. Realmente esta historia está ambientada en el anime. Sería una continuación que me la he llegado a imaginar muchas veces combinada con otros aspectos que creo que en la serie tienen algún tipo de significado, aunque puede que no tenga nada que ver:3

¡Espero que os guste mucho!

PD: Los personajes que utilizaré en mi saga no son de mi invención, pertenecen al asombroso Hiro Mashima.

Capitulo 1

"Solo quería deciros que estaré bien vaya donde vaya y que no me busquéis."
-Nada. Esta tampoco me convence.- se decía a sí misma la joven chica que planea su huida.

Lleva más de diez cartas de despedida tiradas a la basura. Ninguna logra convencerle del todo. "Me buscarían" pensaba para sus adentros la pequeña heredera. Ella quería huir de su hogar, lograr su sueño sin importarle nada ni nadie. Su sueño de lograr unirse a otra familia. Su deseado Fairy Tail.

*Flashback*

Hace ya unos años que su hermana mayor, Michelle, abandonó la mansión Heartfilia para cumplir su sueño de ayudar a la gente que necesitara ayuda. Solo las diferenciaba una cosa. A la pequeña Lucy le enseñó su madre a utilizar la magia estelar, deseando que algún día su pequeña lograra hacerse tan fuerte como ella, mientras que la hermana mayor de susodicha debía aprender de su padre, Jude.

Michelle se fue de casa una noche de Enero. Esa noche no había ni una sola estrella en el cielo, pues solo llovía. Lucy miraba como su hermana corría por el gran patio. Solo fue capaz de llorar y mirarla, desde entonces juró que iría a Fairy Tail y se haría una gran maga celestial y así su hermana estaría orgullosa de ella. Siempre se culpó a sí misma de que partiera.

-Mamá, ¿volverá pronto?

-No lo sé pequeña.

Con las palabras que su madre acababa de pronunciar, Lucy empezó a derramar pequeñas gotas que caían de sus ojos. Layla la miró con un poco de tristeza por verla llorar, así que empezó a cantar la canción de su película favorita, también la de su hermana.

-"Dulce voz, ven a mi
Haz que el alma recuerde."

La pequeña escuchando la voz celestial de su madre no pudo aguantar las ganas y las dos siguieron cantando, solo que saltándose esa estrofa ya que la pequeña Heartfilia no se la sabía.

-"Quién me abraza con amor
veo prados alrededor,
esa gente tan feliz,
son sombras para mí." –Cantaron madre e hija al unisón.

*Fin del flashback*

Espero que os haya gustado y estaré esperando comentarios y recomendaciones para seguir:)!