Aclaracion: Los los diálogos y personajes de Candy Candy pertenecen a Mizuki e Igarashi respectivamente. Historia de mi autoria y sin fines de lucro.
¡Hola gente bonita! Bienvenidos a mi primer "¿Que hubiera pasado si...?" básicamente con este relato quiero contar lo que pudo pasar en el capitulo 97 del anime. Originalmente estaba dividido en dos partes pero decidí juntarlos como uno solo de ultimo momento. Susana no tiene ningún tipo de participación.
El viaje de Chicago a Nueva York parecía una eternidad para Candy, la joven estaba tan ilusionada que contaba los minutos y segundos faltantes para ver a Terry e incluso terminó pensando en voz alta que iba a decirle cuando lo viera. Como no había ningún rastro del castaño, la enfermera lo buscó por toda la estación y terminó saludando a un sujeto nada agraciado que tenia la misma espalda que su Romeo británico sin contar con el hecho de que un hombre misterioso tomó su mano para llevarla a un lugar mas despejado en la estación.
-No has cambiado nada, Candy - La rubia se llevó la sorpresa de su vida al descubrir que el hombre misterioso era Terry, el chico que tanto estuvo esperando.
Hola mi amor que tal
Que lindo es volver a verte
Hola mi dulce amor
Que hermoso es volver a verte
Ambos estaban tan felices de volver a verse que solo se veían las caras, hasta que fue el propio Terry quien decidió vencer toda inseguridad dándole un fuerte abrazo a su pecosa.
He contado los minutos que ausente estuve de ti
He contado los segundos pero al fin estoy aqui
Después de ese momento emotivo, los chicos se fueron a un restaurante, allí ordenaron un café y jugo de naranja respectivamente, así mismo platicaron de sus viejas aventuras estudiantiles, de sus respectivas carreras, y claro, de cuanto habían crecido...
-Estas más varonil y creo que estás más alto.-sostuvo Candy.
-Puede ser, en cambio tu...
-Yo que? -preguntó la rubia jugando con la cañita de su vaso.
-Bueno...tu no... - una pequeña gota de jugo fue a parar cerca de los ojos del castaño - Vamos Candy- fue regañada, es que a estas alturas de la vida, Terry esperaba que su novia actuara conforme a su edad.
-Lo siento, no fue mi intención.- se disculpó y de inmediato le entregó una servilleta.
-Ya lo dije, no has cambiado nada -expresó con tranquilidad secándose- No te imagino como una futura enfermera
-Futura no, diplomada -corrigió haciendo muecas dando inicio a una ronda de felicitaciones y agradecimientos.
-¡Es verdad, ya eres enfermera! ¡Felicitaciones pecosa!
-Gracias Terry . Yo también quería felicitarte por hacer el personaje de Romeo
-Gracias Candy.
Un silencio incomodo hizo acto de presencia en medio de su conversación, hasta que..
-Deseaba mucho verte - admitió Candy rompiendo el hielo.
Hola mi amor que tal
Me muero por estrecharte
-Yo también, soñaba contigo, con volverte a ver y no separarnos más -confesó Terry a corazón abierto dando inicio a otra platica larga y tendida
Hola mi dulce amor
Que deseos de tenerte
-Terry ¿por que llegaste tarde a buscarme? saludé a ese hombre por equivocación.-cuestionó la señorita pecas recordando ese momento tan embarazoso.
-Me di cuenta Candy, y me sorprendí, creí que estabas mal de la vista.-declaró el actor entre risas.
-Tenia tu misma espalda -continuó la rubia- no esperaba que vinieras vestido así. -efectivamente, la rubia no esperaba ese recibimiento tan inusual y es que con Terry Grandchester uno nunca está seguro de lo que pasará. Terry le explicó a Candy que debía usar un disfraz para que nadie lo reconozca pues su imagen estaba por toda la cuidad, obviamente la pecosa estaba tan feliz al saber que su novio era famoso pero había algo que no le cuadraba...
-Es que no es muy romántico -dijo ella con sinceridad -En realidad yo esperaba un reencuentro más romántico. -Ninguno de los dos contaron con el hecho de que los otros clientes estaban escuchando toda la charla del inicio hasta el final.
-Es verdad, no es nada romántico. -al igual que la ojiverde, Terry también estaba incomodo. -Te llevaré a tu hotel -propuso el chico poniéndose de pie, ella hizo lo mismo y como la curiosidad mató al gato, Candy no pudo evitar expresar el deseo de ir al departamento de Terry para ver como vivía, una proposición que el obviamente no esperaba. Como todo un caballero, el chico Grandchester llevó el equipaje de su amada hasta la cajuela de su coche, una vez adentro, preguntó por sus queridos ex compañeros de colegio.
-Dime Candy ¿Están todos bien el elegante, la tímida y la gordita?
-Archie, Annie y Patty. - lo corrigio, no le gustaba nada que le pusiera sobre nombres a las personas -Tienes que llamarlos por sus nombres. -añadió, cualquiera que no los conociera, pensaría que ambos son hermanos o algo parecido.
-Esta bien señorita pecosa. -dijo divertido.
-¡Terry! -lo regañó con cara de fastidio e inmediatamente el actor comenzó la marcha hacia su departamento, por su parte la rubia se sentía como una niña a la cual le daban un juguete nuevo al ver todas las cosas lindas que había en Nueva York.
Necesitaba tus besos
Me hacia falta tu amor
Me hacia falta tu aliento
Para volver a vivir*
El departamento de Terry estaba en el segundo piso de un edificio ubicado lo suficientemente cerca del teatro de la compañía Straford, donde se ganaba el pan de cada día. El guapo actor abrió la puerta invitando a Candy a pasar, la rubia no pudo evitar sorprenderse pues imaginaba que todo estaría hecho un desastre pero el actor le explicó...
-La señora viene a limpiar tres veces por semana. -Para ese momento, Candy ya estaba en el interior del departamento, que por cierto tenia lo necesario para subsistir además de una estupenda iluminación.
-En casa, Albert hace la limpieza. -eso fue algo que dijo sin pensar pues se suponía que debía cuidar de el.
-Candy! -esta vez el regaño fue para ella - Como permites eso.
-Es que...-intentó defenderse pero ya era demasiado tarde, Terry la había descubierto -trato de hacerlo, pero Albert me gana de mano es muy rápido para todo de veras.-se moría de la vergüenza.
-No te justifiques Candy -dijo Terry sirviendo el té para cada uno, mientras tanto su rubia novia observaba detenidamente el afiche de Romeo y Julieta, se alegró mucho al descubrir que Karen seria la protagonista pues de haber sido otra actriz...probablemente estallaría de celos.
-Creo que cambiaré el nombre de Karen Klais por el de Candice White. -aquella ocurrencia también era una pequeña pero clara señal de que la pecas marcaba su territorio.
-¿Como?-preguntó sin entender.
-Puedo ser Julieta aunque sea en el afiche, no? -repitió Candy provocando que Terry se riera de solo imaginar a una Julieta pecosa y trepa arboles, la ojiverde se ofendió y se lanzó encima suyo provocando que el té se cayera junto con ellos.
En tu pecho quema un sueño
que deseas conocer
la experiencia de entregarte
a alguien por primera vez
La situación era bastante comprometedora pues Candy cayó sobre las fuertes piernas de Terry, literalmente estaban uno encima del otro y sin poder evitarlo sus labios se unieron a la par que sus corazones latían en simultaneo. El beso fue tierno y lento al principio, poco a poco fue haciéndose largo e intenso...
al fundirse nuestros cuerpos
volaremos hacia el sol
mariposa no le temas
a la llama del amor
-Es un milagro que mi cara esté en buenas condiciones. -Comentó Terry sin salir de su asombro ¡Candy le había correspondido! ciertamente esperaba una bofetada.
-Si lo dices por el beso en Escocia pues debo admitir que me gustó -Y como no iba a gustarle si en aquel momento ya lo amaba solo que la inocencia pudo más.
-Así que te gustó, eh? ¡Lo sabia! -Se besaron de nuevo pero al poco tiempo se detuvieron pues debían limpiar el desastre que causaron. Mientras hacían las actividades domésticas se entretenían jugando con el agua e instantáneamente la nieve hizo su aparición cubriéndolo todo a su paso. Al anochecer, después de una divertida pelea de almohadas, los jóvenes pasaron la noche juntos..
-Si la tía abuela me viera a solas contigo, me regañaría. -aseguró Candy, aunque debía reconocer que estar en brazos de Terry era la gloria.
-¡Pecosa, quien te entiende! -refunfuñó -Dijiste que querías un reencuentro romántico. "mujeres" -pensó para si mismo.
-Si, pero no estamos casados
-Eso se puede solucionar, mi amor -la rubia lo miró sin entender -Pecosa, te envié un pasaje solo de ida porque quiero que te quedes conmigo.
-Claro que acepto, eso ni lo preguntes -dijo besándolo. -Te amo Terry.
-Yo te amo más, Candy. -Con esta afirmación, los jóvenes le hicieron honor a su titulo de rebeldes dando rienda a su amor, total no era la primera vez que estaban solos en cuatro paredes.
atrévete, crucemos el jordán
que la tierra prometida nos espera
abrázame, no te entretengas más
que la vida es solo un soplo
y el amor se va*
*Estrofas de "Atrévete" canción de José Luis Rodriguez "el puma" y "Dulce ausencia" famoso huayno ayacuchano interpretado por Yolanda Pinares.
Aprovecho este medio para expresar mi apoyo a los países afectados por los desastres naturales, que Dios les de muchisima fuerza y los bendiga siempre. Por otro lado, tengo pensado publicar otro Terryfic mucho más largo que "La más bella herejía" (dicho sea de paso tendrá un one shot, secuela y precuela más adelante) aunque en realidad es una idea de Terryfic que he tenido en mente desde inicios de este año. En fin, si te gustó la historia deja un comentario en la cajita de reviews, te lo agradecería muchí quiero, cuidense y nos leemos pronto.
