Y he regresado pom Pom pom!!!!! Jejeje después de mi larga ausencia por aquí traigo un fic nuevo, éste es MUY diferente a los demás, y no por que tenga otra pareja, no, si no por que el rating es más alto, es que el texto es bastante explicito, no tanto como para llegar a clasificación R pero si es explicito, espero que les guste y. bueno, esto surgió por insistencia de una amiga y la verdad me costó mucho trabajo escribirlo así que espero que les guste y que me dejen muchos reviews. Este fic se lo dedico a Ady (y no, ella no fue quien insistió en que lo escribiera), se lo dedico por ser la seguidora más ferviente de mi fic "My last wish" y por estrenarse como moderadora del grupo HH Paraíso, para ti amiga.

El sol desaparecía como cualquier otro día, pero para mí no era un día cualquiera, después de conversar contigo por medio de lechuzas durante tanto tiempo al fin voy a reunirme contigo de nuevo, tengo un poco de miedo por que a través de los años he cambiado, no se si mi apariencia actual sea muy diferente a la que tenía la última vez que nos vimos pero si se que no importa si tu hayas cambiado físicamente por que sé que el corazón está intacto y me alegra decir que sigue teniendo un lugar para mí, además el sólo hecho de saber que podré ver tu rostro de nuevo hace que no me importe nada.

El tren llegó sin ningún problema, al salir a la plataforma comencé a dar vueltas un poco desesperada buscando el cabello rebelde que siempre te ha caracterizado, de repente vi a lo lejos algo que siempre produjo tantas sensaciones en mí, vi tus ojos verdes, todavía recuerdo que al acercarme a ti no podía dejar de ver esos hermosos ojos color jade que me hacían sentir desde un nerviosismo intenso hasta una hermosa calma; de inmediato supe que eras tu, corrí desesperadamente hacia ti, que ya me habías identificado, y me aferré a tus brazos como si en ello se me fuera la vida, al soltarte (varios minutos después) pude apreciar tu rostro, pasé mi mano por tu mejilla con ternura y mirándote a los ojos

-¡al fin! - dije en un tono casi inaudible, era lo único que pasaba por mi mente, al fin estaba a tu lado, de nuevo, tu sonreíste sinceramente como si pensaras lo mismo, después de pasar por mi equipaje me acompañaste al hotel en el que me hospedaría, un hotel muggle por cierto, después de tanto tiempo fuera del mundo mágico ya estaba acostumbrada a ellos, estabas un poco molesto por que me negué rotundamente a quedarme en tu casa pero sinceramente no quería causar molestias; al subir a mi habitación llegaba la hora de despedirnos, aventé el equipaje por ahí y te rodeé con mis brazos recargándome en tu pecho, podía escuchar el tranquilo palpitar de tu corazón, subí la vista y miré tus ojos fijamente, después vi tus labios, lucían tan tersos y apetecibles que no lo dude ni un instante y te besé, te sorprendiste un poco pero respondiste a mi beso casi de inmediato, mis manos recorrían toda tu espalda y subían lentamente a tu cuello, me separé de tus labios y tu mirada no mostraba más sorpresa sino deseo y ternura, me acerqué de nuevo pero ésta vez fui directamente a tu cuello, te di pequeños y cortos besos por todo el cuello, de pronto te di una pequeña mordida, sentí como te estremeciste un poco al sentirla, ahora tú comenzaste a jugar con tus manos sobre mi espalda, bajabas lentamente y tratando de recorrer todo mi cuerpo, yo seguía besando tu cuello desenfrenadamente y fui bajando hacia tu pecho, tu camisa entreabierta salió volando de un solo tirón, estabas tan concentrado que apenas si lo notaste, comencé a bajar el cierre de tu pantalón y al hacerlo te iba jalando hacia la cama, tu me seguías con el mismo deseo, al estar cerca de la cama te aventé con fuerza y ternura combinadas, caí sobre ti y el pantalón al fin cedió yendo a dar al piso, me miraste por un instante y comenzaste a desabotonar mi blusa rápidamente, seguiste con mis jeans que salieron volando con mi ayuda, pasaste tu mano por mi cintura y de un momento a otro ya estabas sobre mí, sin poder evitarlo contemplé tu cuerpo, sólo una palabra pasó por mi mente: Perfección, así eres para mí, perfecto en todos los sentidos.

Me besaste de repente, creo que me quedé en shock por unos instantes pues tu cuerpo merece toda mi atención, tu beso fue tan exquisito que de inmediato recordé lo que estábamos haciendo, segundos después de que comenzaras a besarme de nuevo, sentí dentro de mi boca tu lengua, sentía como si quisieras recorrer cada rincón y sin poder contenerme traté de imitarte, nuestras lenguas estaban en un delicioso jugueteo que no terminaba, mis manos paseaban lentamente por tu espalda pero con un poco de indecisión, tu lo notaste y decidiste darme un pequeño empujón, comenzaste a besarme el mentón, bajaste lentamente a mi cuello dando pequeñas mordidas en el camino, definitivamente sentía estar en otro mundo, al ver mi reacción continuaste bajando más y más, llegaste a mis senos que todavía estaban cubiertos, con tus manos recorrías mi espalda buscando el punto en el que mi sostén cediera, al fin lo lograste y comenzaste a besarme con locura, yo sólo podía cerrar los ojos tratando de grabar todas esas sensaciones nuevas en mi mente, bajaste aún más y con tus ágiles manos hiciste que quedara totalmente desnuda; esto ya había sido suficiente para recobrar la confianza que por un momento me abandonó levemente, abrí los ojos y te jalé hacia mi, te besé con toda la pasión que mi cuerpo podía contener, mis manos exploraron absolutamente todo tu cuerpo, en el primer intento tus bóxer's quedaron en el suelo junto a nuestras demás prendas de vestir; lentamente comencé a abrir mis piernas, tu sabías exactamente como moverte para que el pequeño intervalo de tiempo en el que todo pasaba fuera sumamente placentero, después de unos instantes tenía mis piernas alrededor de ti, pero en ese momento te detuviste, como si algo te hubiera asustado decidiste parar y trataste de levantarte; ya había tomado una decisión y no podía parar ahora así que antes de que pudieras bajar de la cama te tomé de la mano y halé fuertemente hasta que quedaste tendido y yo encima de ti, te besé lo más apasionadamente que pude pero tu tenías que decir algo, sentada sobre tu pelvis deje que hablaras, lo único que salió de tu boca fue la palabra Preservativo. entendí a la perfección pero, decidí besarte de nuevo bajando más y más, haciéndote cosquillas por todo el cuerpo, cerrabas los ojos sintiendo mis dedos recorrer tu pecho, me acerqué a tu rostro y te besé detrás de la oreja para poder decirte sólo una cosa: te necesito, abriste los ojos y nos miramos fijamente, como si nos pudiéramos leer la mente entendiste que no podía parar por la falta de condón, no podía y no quería; con gran convicción cambiamos de nuevo de lugar, separaste mis piernas suavemente y comenzaste a entrar en mí, la primera vez que lo hiciste sentí una sensación dolorosa por todo mi cuerpo, tal vez lo haya mostrado demasiado por que te detuviste un momento pero inmediatamente pasé una mano por tu espalda y te jalé hacia mí, entendiste mi intención y seguiste entrando en mí con un vaivén cadencioso, el placer que esto me provocaba era la máxima sensación que alguna vez haya sentido, era como una explosión de todo lo maravilloso de éste mundo en un solo lugar, era algo tan intenso que tuve que aferrar una mano en la cabecera de la cama y la otra en tu espalda, dejé escapar un gemido que desde minutos antes trataba de reprimir, escuchaba tu respiración entrecortada y pequeños gemidos de placer, entonces fue que realmente disfrute, después de un tiempo de esto acompañado por caricias y besos desenfrenados saliste de mí, por más que quisiera detenerte mi cuerpo tenía que descansar al menos unos minutos, me diste un beso corto pero sumamente dulce y te recostaste a mi lado como para recuperar energías, me acerqué a ti y recosté mi cabeza en tu pecho, el ritmo de tu corazón que bajaba de un palpitar rápido a uno tranquilo me arrulló y sin que te dieras cuenta ya estaba dormida; me arropaste y decidiste acompañarme.

Poco después desperté y te vi dormido, en la más profunda tranquilidad con una sonrisa en el rostro, sin moverte me levanté y fui al baño, todavía tenía en todo el cuerpo tu sudor, en realidad no me molestaba pero tenía que tomar un baño; abrí la regadera y el agua caliente comenzó a salir y a caer por mi rostro, cerré mis ojos para pensar sólo en ti cuando algo me despertó, sin previo aviso ya estabas en la regadera conmigo, la pasión que por minutos había quedado en tiempo pasado regresó de inmediato, me apresaste contra la pared, los azulejos estaban fríos pero a comparación del calor que tu provocas en mí hasta el vapor del agua es frío; tus manos recorrían mi cuerpo, un camino que ahora ya era conocido para ti, nos fuimos deslizando por la pared hasta quedar en el suelo mientras nos besábamos, agradecí que el cuarto fuera grande, ésta vez era mi turno así que quedé sobre ti, casi al instante comenzamos el juego que ya sabíamos, subiendo y bajando sentí que el mundo daba vueltas, tu gemías fuertemente lo que me dio fuerzas para seguir, el agua caía por nuestros cuerpos haciendo que todo fuera más fácil y después de momentos de placer extremo bajé de ti, alcancé a cerrar el agua y te envolví en una toalla al salir del baño; nos recostamos de nuevo en la cama entre las sabanas.

- Gracias - dije con una enorme sonrisa, tu me miraste y preguntaste el por que

- Por darle de nuevo un sentido a mi vida - sonreíste ampliamente y me acomodé de nuevo en tu pecho, esta noche había sido especial, lo más importante de todo es que aún no terminaba, pasara lo que pasara esa noche viviría en tu mente y estaba tatuada en la mía para siempre.

¿Que tal me salió? como saben es mi primer fic de este tipo y dude un poco en subirlo, quiero que me digan si hice bien en publicarlo o si debí de guardar mis palabrillas en mi CPU donde sólo yo pudiera leerlas jejeje, sea como sea espero que me dejen muchos reviews para saber si debo continuarlo o dejarlo así.

ATT:
((^o^)) ARIZ ((^o^))