Aclaración: Vocaloid no me pertenece. Lo personajes son propiedad de Crypton Future Media. Este fic fue hecho con propósitos de entretención y sin ánimos de lucro

"¿Qué es este sentimiento en mi pecho? Se siente como si algo se me hubiera perdido ¿No puedo volver a encontrarlo acaso? ¿Dónde está? Siento algo quebrarse dentro de mi mientras una voz me llama por mi nombre ¿Quién es? ¿A quién pertenece? Es una voz muy suave y dulce ¿será así la voz de un ángel?"

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–Hijo, creo que ya es tiempo de que sepas algo–. La señora algo mayor se sentó con delicadeza en un asiento que estaba frente a un joven de 21 años, rubio y con grandes ojos azules que miraba atentamente cada uno de sus movimientos –Tú tuviste o… tienes... no lo sé muy bien, una hermana mayor, una gemela.

"¿Qué es lo que dijo, una… una gemela? No puede ser, entonces eso que sentí… esa sensación y esa voz ¿Era ella? ¿Acaso ella quiere comunicarse conmigo? ¿Pero por qué? ¿Por qué ahora y no antes?" Allen ya no la escuchaba, era difícil de creer algo así. ¿Una hermana gemela y después de 21 años se entera de su existencia? Definitivamente debía ser una broma, una de muy mal gusto.

–Allen, querido ¿Estás bien? Di… di algo, por favor–. La mujer, que ya se había levantado de su asiento, alertada por el no reaccionar de su hijo, comenzó a acercarse y se colocó frente a él– Nunca supe cómo decírtelo, perdón por ocultarlo todo este tiempo pero, era doloroso hablar de tu hermana, nunca supe qué pasó con ella, ni porqué se la llevaron, yo…

-Espera, ¿quieres decir que se la han llevado? ¿Quiénes? ¿Cuándo? No lo entiendo- decía Allen lo más calmado y pausado que podía –explícate bien por favor.

La mujer al ver ya más calmado a su hijo, volvió a su asiento y lanzó un suspiro mientras cruzaba sus manos sobre su regazo.

–Ocurrió cuando ustedes tenían aproximadamente unos… 5 meses de vida. Una mañana llegaron unos hombres, tu padre estaba de viaje en esos momentos así que no pude hacer nada por defenderla. Yo… tan sólo recuerdo algunas cosas, como que uno de ellos llevaba una armadura pero no un estandarte o algo que dijera su procedencia y el otro llevaba una túnica, como de sacerdote, él alejó a tu hermana de tu lado y tú no parabas de llorar al no sentirla ya cerca. Pero hay una cosa que nunca he podido olvidar, un nombre.

– ¿Un nombre? ¿Era de alguno de esos hombres? – Allen ya no podía quedarse quieto en su asiento, estaba demasiado nervioso e impaciente, ya lo había decidido, desde el momento en que supo de la existencia de su hermana. Él no descansaría hasta lograr encontrarla o saber qué pasó con ella.

–No, de eso estoy segura. El nombre era… Elluka D'Lucifenia. Investigué un poco, naturalmente y como dice su nombre, es una noble de la ciudad deLucifenia. Yo sé que piensas hacer así que no te detendré pero te pido algo… no, te exijo algo, cuando la encuentres dime que ha pasado con ella.

El muchacho sólo se limitó a asentir, no sabía si podría cumplir esa condición, aun menos si volvería él con vida. No sabía a qué se enfrentaba pero algo le daba fuerzas. –Hay una última cosa que quiero saber. Dime su nombre.

–Rillianne, Rillianne Abaddonia, era igual a ti ¿sabes? Realmente eran como dos gotas de agua. Me pregunto si a estas alturas seguirían pareciéndose– ese recuerdo de una pequeña niña idéntica a él, le tocó el corazón.

–Rin…– limitó a decir mientras unas lágrimas surcaban su rostro. Estaba llorando, llorando por su hermana perdida de la cual, ni siquiera sabía de su existencia hace 10 minutos atrás.

A la mañana siguiente, el joven Abaddonia comenzó su viaje. Se despidió de su madre con un fuerte abrazo y sin llevar nada más que su mochila con algunos suministros básicos, partió. ¿Hacia dónde ir? Al Este, a la ciudad de Lucifenia, donde existía la única persona que podría saber algo relacionado con el secuestro de su querida hermana. Iría a ver a Elluka.

Mientras tanto, una muchacha despertaba por el sonido de una gota de agua al chocar contra el suelo. La noche no había sido recuperadora pero no importaba, tenía que cumplir con su tarea a toda costa. Se levantó y comenzó a caminar por la oscura gruta que se extendía frente a ella. Un poco después que su figura se hubiera perdido en la penumbra, se escuchó un rugido ensordecedor seguido de unos dulces cantos, que eran acompañados por el sonido de las gotas de agua al caer.

Hola! Bueno, subido el prólogo :3 Espero que les guste la historia y se enganchen jiji trataré de subir todos los miércoles un capítulo, ya veremos si me atrevo a subir 2 por semana. Por ahora quiero dar gracias a Katherine y a Patricia que me incitaron a subir esta historia 3 las amo chicas.

Las veo en el otro capítulo!