Disclaimer: Fairy Tail pertenece a Hiro Mashima. Este OS es dedicado a Florecita1008JG por el intercambio: ¿¡Feliz San Valentín, mí amor!? Del foro 413 days!

Advertencias: OoC en exceso, no es mi culpa, no puedo mantener nada IC(?)-Pero creo aqui,queda justificado, digo,creo yo.- Intentó de Suspense/Horror/Hurt Confort -que sigo liandome con este genero-. Universo Alterno. No me hago responsable de la pérdida de su tiempo por esta abominación.

Palabras: 3,535 -sin notas, ni nada de nada, sólo el texto "interesante las

las palabras en cursiva/inclinadas(?) son recuerdos.

Y las palabras entre ("") comillas, son pensamientos o voces, pa' hacerlo bien angst, como yo(?)

Notas de la atractiva autora al final(?)

Para Florecita1008JG

Capítulo 1: El resurgir de las llamas

Sangre.

Risa.

Muerte.

Soledad.

Miedo.

Fuego.

—Oka-sama— una pequeña de 10 años lloraba. —Oto-sama, Nee-sama— de pronto una figura apareció, y escucho, por ¿Primera vez? esa tetrica risa. Esa maldita risa que la atormentaria de por vida

Ella gritó.

Ella despertó.

Una pesadilla. No, claro que no. Un recuerdo, uno muy amargo.

Se sentó en la cama, tomó una toallita que siempre dejaba en su mesa de noche, para ocasiones como esta.
Seco su sudor y tomó la botella de agua y las pastillas para dormir, que tenía en su cajón, para noches como esta.

—Juvia ¿Estás bien?— una pelirroja se sentó en la cama continúa.

—Siento mucho el haberla despertado Erza-san, Juvia tuvo una— la nombrada miró las manos de su amiga, la peli-azul jugaba con ellas, temblorosa —Una pesadilla, pero Juvia ya tomó sus pastillas, así que ya puede volver a dormir— trató de sonreír, pero la pelirroja la conocía, sabía que su amiga no estaba bien.

—Yo también tuve una pesadilla Juvia, crees que— agarró su almohada y se levantó camino el metro y medio que separaba sus camas y dijo —¿Puedo dormir contigo? Es que, tengo miedo—

Se sorprendió al escuchar a su amiga. Erza sabía que estaba logrando su objetivo de distraer a su amiga. Juvia le hizo un espacio en la cama y Erza se acostó, se quedaron en silencio mirando el techo.

—¿Con que soñó Erza-san?— preguntó la peli-azul con curiosidad.

—¿Eh?— se puso nerviosa e improvisó lo primero que se le ocurrió —Soñé con que un pastel de fresas quería comerme— Juvia sonrió maternalmente.

—El pastel debió de temerle a Erza-san— bromeó mientras cerraba los ojos, las pastillas habían hecho su efecto.

Erza sólo pudo observarla, y recordar cuando eran unas niñas y jugaban en el patio de su casa, en ese entonces, Juvia no hablaba de manera un tanto peculiar, y era una niña muy alegre, pero tuvo que mudarse y perdieron contacto por cuatro años, al reencontrarse, dos años después de la muerte de la familia Loxar, pudo notar a su amiga, más tímida, y con la manía de hablar en tercera persona, y solía apartarse de las personas. Aún recordaba que tuvo que gritarle y empujarla para convencerla que no tenía que apartarse. Ese día comieron mucho helado de fresa y lloraron como nunca. Y, entre sollozos le había confesado que había visto a un hombre en medio del fuego.

[...]

Juvia despertó, notó que su amiga aún seguía durmiendo, vio el reloj, 5:30 am, suspiró cansada, vivían en los dormitorios del colegio, no tenía porque despertarse tan temprano puesto que sus clases empezaban hasta las 7:30 am.

—Juvia hubiera preferido dormir— se quejó mientras tomaba su uniforme e iba a ducharse de una vez.

Al sentir el agua en su cuerpo recordó su pesadilla. Siempre soñaba con la silueta de un hombre. Y con una risa. Pero, los peritos habían determinado que había sido una fuga de gas.

—Pero Juvia estaba bañada en sangre—

"Bañada en sangre, pero solo en tus sueños" Escucho una voz. Cerró los ojos. Las voces dentro de su cabeza volvían. Recordaba que después del incendio el estado la habia mandado a tomar terapia psicológica, donde la convencieron que nunca estuvo con sangre, que no hubo ningún hombre en la escena del crimen. Sólo un simple incendio. —Pero ¿Cómo me salve?—

"Porque fue tu culpa"

—No es cierto, y-yo debí haber estado jugando en el jardin—

"Hubieras pedido ayuda"

Cerró la llave del agua y se secó, esas voces habían vuelto sólo para atormentarla más.

"Todo lo que amas perece"
"Atraes la mala suerte"

Juvia se vistió y se sentó en su cama, empezó a dar golpecitos con el pie, tratando de alejar esos pensamientos. Esas voces, que le susurran que es su culpa, que elladebió morir, que ella los traicionó al seguir viviendo.

"Muere" escucho, el zapateo se detuvo. "Bañate en sangre, y ve con ellos" una sonrisa se dibujó en su rostro. Si, esa era la mejor idea, vestirse de sangre, y esfumarce.

—¿Qué hora es Juvia?— preguntó una somnolienta pelirroja que se estiraba acostada.

La peliazul parpadeo, volviendo en si. La voz se calló. —Las 6:00 am Erza-san— contestó normalmente. Aunque su compañera pudo notar su rostro confuso.

—Ya veo, me daré una ducha rápida, y bajamos juntas a comer algo ¿Te parece bien la idea?— dijo mientras se ponía de pie y caminaba rumbo al baño. Juvia sólo asintió en silencio.

6:10 am, tocaron la puerta.

Juvia se levantó, y grande fue su sorpresa al ver a Gray Fullbuster ahí. Aunque eran poco cercanos, a ella le gustaba mucho, pero tenía miedo en relacionarse con los demás. Sino fuera por Erza, ella no tendría ningun amigo, se hubiera cerrado con los demás, y definitivamente, no hubiera conocido a Gray.

Se conocieron en los primeros días de Instituto, el no había reparado en ella. Al contrario, Juvia se había paralizado al verlo.

—¿Juvia? Tierra llamando a Juvia ¿Aterrizas?— preguntó burlona la pelirroja

—¿Eh? Disculpe a Juvia, Erza-san— miró al suelo, avergonzada. Ella no podía atreverse a perderse entre sueños con alguien.

—¿Veías a Gray?- ante la mirada confundida, aclaró —El chico peli-negro que se está quitando la camisa- sus mejillas se tiñeron de rojo al comprobar lo dicho.

—Gray-sama es atractivo— murmuró apenada, Erza rió. Si, era atractivo. Quizás era lo que su amiga necesitaba. Un amor. Y sólo tal vez así se abriría con más gente.

—Lo conocí al mudarme, ¿Te lo presentó?— insinuó con tono pícaro.

—Erza-san sabe lo que Juvia opina. Juvia sólo trae mala suerte y perdición a las personas— ante la mirada de reproche de su amiga se entristecio, por más que le dijeran que estaba equivocada, nada le haría cambiar de opinión.

La pelirroja se encogió de hombros, cansada, llevaba años intentando hacer reaccionar a la peli-azul, años en vano.

—Vamos— la tomó de la mano y se acercaron al muchacho —Tengo ganas de saludar—Juvia enrojecio —Gray, de nuevo juntos-

El moreno sonrió a su amiga, pero puso una expresión sería al ver a su acompañante. —Si, y eso me alegra ¿Tú amiga?—

—Mi nombre es Juvia, Gray-sama— el nombrado abrió los ojos al escuchar es sufijo empleado después de su nombre. Erza ahogó una carcajada.

—Juvia ¿Puedo pasar?— su voz la devolvió a la realidad.

—¡Claro Gray-sama!— enrojecio de nuevo y se apartó de la puerta, invitandolo a pasar —Erza-san se está duchando, ¿Gray-sama quiere que le avise que se encuentra aquí?— preguntó inocentemente

"Claro que si quiere. ¿Quien quisiera estar con una traidora asesina?"
"Nadie, porque nadie te quiere"

Gray observó como Juvia ladeaba su cabeza ligeramente, en repetivas ocasiones, como si fuera un tic. —¿Te encuentras bien?— Juvia se enderezo y parpadeo mientras asintia. —Y no, la espero contigo— el le sonrió, cosa que le sorprendía porque casi nunca lo hacía.

"Y menos a ti, porque nadie te quiere"

—Esta bien Gray-sama— dijo ignorando la voz en su cabeza, ambos se sentaron en la misma cama.

El silencio reino.

Ese momento de silencio le sirvió a Gray para recordar, su primer acercamiento real con la chica.

Juvia no podía creer donde estaba. Una fiesta, y encima estaba bebiendo.
Gray veía de reojo a la chica,mientras bailaba con una albina.

—Gray— escucho que lo llamaron —Necesito que cuides de Juvia por mi— el la miró incrédulo -Me reconcilie con Jellal— la cara de Erza le hizo competencia a su cabello. —¿Podrías?—

El chasqueo la lengua molesto.—Como quieres que cuide a una tipa rara que se aleja de las personas— ante esas palabras, la pelirroja lo jaló de la mano.

—Te diré algo Gray, y quiero que mantengas tu boca cerrada— el trago saliva, su amiga solía darle, algo, de miedo.—Y agradece que ande ebria y que este feliz porque ya estoy de nuevo con Jellal, porque sino te mataría, aquí mismo.— cosa que nadie dudaría.—Juvia es la única sobreviviente de su familia,sus padres y hermana murieron en un raro incendio, ella jura haber visto a un hombre— el sólo la escuchaba, ella lo miraba a los ojos, el busco con su mirada a Juvia. —Esta mal, siente que es de mala suerte, que lastimara a quien este cerca de ella ¡De puro milagro no nos aparta a su primo y a mi!— exclamó molesta. —No la juzgues, al fin y al cabo su historia es...— no pudo terminar de hablar porque fue interrumpida.

—Jodidamente similar— murmuró el.

—Si—

—Erza, vete tranquila, yo...— suspiró. —Yo la vigilare, y trataré de ayudarla—

Erza sólo le sonrió, y se fue sabiendo, que la dejaba en buenas manos. Al quedarse sólo se puso en pensar en sus padres. Ellos también habían muerto,en un asalto, frente a sus ojos, sino fuera porque su tía Ur,le dio mucho amor,paciencia y otras cosas que se avergonzaba al recordar, el también estaría mal.

Ese día se prometió cuidar a la chica, aunque también tuvo que ver, los hechos ocurridos después.

—Juvia baja de ahi— estaba sorprendido, no podía creer que la chica tímida fuera esa que ahora bailaba provocativamente sobre la mesa. La misma que meneaba sus caderas al ritmo de One more time*

—¡Déjame bailar, Gray!— gritó mientras se empezaba a desabrocharse los botones de la blusa. El se sorprendió ¿Le había llamado solamente Gray? Estaba estupefacto. ¿Qué le había pasado a la muchacha tierna que siempre se ruborizaba al verlo? Sin pensarlo más, la cargo, pasó su cuerpo por encima de su hombro y se la llevo de la maldita fiesta.

Juvia no paraba de darle golpecitos en la espalda, cosa, que ya lo venía hartando.
Hasta que por fin llegaron a su habitación. La acostó en la cama, y cuando se iba, la escuchó. —Gray-sama, bese a Juvia porfavor— sus palabras lo descolocaron un poco, se acercó lentamente, hasta quedar frente a sus labios, fruncido el ceño. Por eso se comportaba distinta. Estaba borracha.

Besó su frente y por primera vez, le sonrió de verdad. —Así no Juvia— negó con la cabeza al ver los mohines que le hacía. —Quiero que lo recuerdes— beso su frente y se marchó.

Esa noche, soñó con ella.

—¡Gray!— exclamó Erza sorprendida al verlo sentado junto a Juvia. En un completo silencio. —¿Qué haces aquí?—

—Vine por ustedes, el pelo de chicle se fue con Lucy y no quiero comer solo— se excusó.

Partieron juntos a desayunar.

[...]

Se levantó de su cama, decidido, este fin de semana su plan se llevaría al cabo. Por fin ella, sería suya.

[...]

Un escalofrío lo recorrió. Tuvo un mal presentimiento, y por alguna extraña razón, pensó en Juvia.

[...]

El fin de semana había llegado al fin, por ser días festivos, muchos alumnos habían salido con sus familias. Los pocos que se habían quedado fueron trasladados al edificio antiguo. Para así tenerlos a todos juntos. Erza había salido, pero Juvia se alegraba de que su primo Gajeel hubiera decidido quedarse.

Un profesor entró a la sala del dormitorio.

— Muy bien, como muchos sabrán, este fue el primer dormitorio del Instituto, tiene sólo 7 habitaciones, 3 para las mujeres, 3 para los chicos, y la séptima, para mi— dijo muy sonriente. Todos asintieron. —Esta es la sala común, y por aquel pasillo— señaló un pasillo oscuro. —Esta la mini-cafetería, no se pagó el servicio, al ser tan pocos estudiantes, pero hay comida, espero que sepan cocinar— se burló. —Diré sus nombres por parejas, y así dormiran, por flojera mía, sólo diré los nombres, ustedes peleen por la habitación.— tras un pausa continuó. —Minerva y Ultear— las nombradas sonrieron por quedar juntas. —Las hermanitas Aguria— Yukino festejó mientras la mayor rodaba los ojos.—Juvia y Levy— Juvia reconoció a la chica pequeña como el interés amoroso de su primo, recordando sus palabras "Tiene una sonrisa hermosa, y pelo azul que hechiza, pero se encierra mucho en lo que hace, así que no creo que me halla notado, de lo que se pierde. -Gray y Gajeel. Erik y Loke. Rusty y Zancrow.— dicho eso se marchó.

—Juvia, enana ¿Dónde dormiran?— preguntó un peli-negro con piercings.

Las chicas observaron como Minerva y Ultear entraron en una habitación, y como Sorano arrastraba a su hermana a la habitación contigua. —Creo que en la última Gajeel— dijo resignada Levy. Juvia observaba en silencio.

—Perfecto— murmuró.

Todos los alumnos fueron a desempacar, no traían mucho equipaje, ya que sólo seria un fin de semana, Levy se encontraba observando el edificio, o más bien mansión donde se quedarían.

—Interesante lugar ¿Verdad enana?— preguntó Gajeel mientras aparecía comiendo una manzana.

—El Instituto De Fiore en un principio fue un internado de élite. Estamos en el primer dormitorio. La arquitectura, la decoración, todo, es antiguo— dijo mientras observaba las cabezas disecadas que estaban en la pared.

Todos de pronto se reunieron en la sala, cuando la energía eléctrica empezó a fallar.

—Tal vez deberíamos hablarle al profesor— opinó Yukino.

—O tal vez deberíamos ir nosotros— sugirio Zancrow.

—O, tal vez, deberíamos hacer algo en vez de hablar— dijo harto Gajeel.

—Nunca había visto a ese profesor— murmuró Sorano. Minerva volteó a verla.

La televisión se encendió, todos voltearon a verla, un vídeo empezó. En el, podía verse un hombre usando una máscara, y con una especie de cuervo en el hombro.

—Bienvenidos a mi obra, jóvenes. Se que se preguntan quien soy, pero la verdadera pregunta es ¿Qué harían para vivir? He dado la tercera llamada, ya el telón se ha levantado. Mi obra ha empezado. ¿Les interesa saber de que trata? Sencillo. De muerte. Quiero que se maten entre que se bañen en sangre. Ahora están encerrados en este pequeño edificio, no pueden salir, al menos, que maten a los demás. Ensucien sus manos. ¡Tiñan de rojo el paisaje! Pero, no quiero ser tan malvado, se que hay presas muy fáciles entre ustedes, hay tres chicas, que seguro morirían primero. Así, que escuchen bien. Encierren a Juvia Loxar en el baño, ustedes entren a la cocina, y cuando salgan, les prometo que la puerta estará abierta. De lo contrario, espero ver sus expresiones al morir. Tic tac, el tiempo avanza. Tienen diez minutos para tomar su decisión. Tic tac, dije que volveria- la televisión se apagó. Todos se vieron entre ellos. Juvia apretó su ropa, y bajo la mirada, un recuerdo la invadió...

—Serás mía pequeña, recuerdalo, tic tac, volveré por ti— recordó haber oído en medio del fuego.

—Nunca fue un sueño— murmuró temblorosa.

"Claro que no, y ahora por tu culpa, todos morirán, empezando por tu amada Gray-sama"

—El tipo esta loco, debe ser una broma de mal gusto— Rusty reía, no creyendo ni una sola palabra.

—¿Juvia te encuentras bien?— preguntó Levy, ya que la nombrada sólo veía el suelo, en el acto, todos dirigieron su mirada a ella.

—El volvió por Juvia. Lo dijo, el va a matar a Juvia— dijo entre sollozos. —Juvia no quiere que por su culpa más gente sea dañada ¡Juvia no quiere que mueran!—

—No te preocupes linda— dijo un pelinaranja mientras ajustaba sus lentes —Sólo es una broma de mal gusto, anda, vamos a comer para que te relajes ¡Los invito a comer fuera, chicos!— se dirigió a la puerta, seguido por todos los chicos, la abrió, y lo siguiente paso muy rápido, sólo un sonido se escucho, seguido por gritos.

Un balazo. Pero ¿De dónde? Un cadáver, y el piso de madera, teñido de sangre.

Se quedaron paralizados. Asustados. Inmóviles como cobardes. Ultear y Minerva fueron las primeras en acercarse -al cuerpo inerte- viendo así, el tiro perfecto, en el corazón, rápido y conciso. Muerte segura. Ni siquiera se agacharon junto el cadáver, no habia nada que ver.

—La puerta debe estar ligada a un arma por afuera- Minerva señalo lo obvio mientras se sentaba en un sofá. Tranquila. Sin miedo.

—Osea que no es una simple broma— Ultear miro a Juvia mientras hablaba. Pensando. Analizando.

Levy le tomó la mano a Gajeel asustada, temía por todos. El miraba a su prima. Gray se acercó a Juvia, tratando de darle apoyo. Yukino empezó a llorar, Sorano disimuladamente tomó un cuchillo -que extrañamente- estaba por la chimenea y se acercó a su hermana. Ignorando que Erik la observaba, y que sonreía. Rusty y Zancrow intercambiaron una mirada, arrastraron el cuerpo sin vida de Loke hasta el baño, encerrandolo ahí, y viendo a Juvia.

—Entra ahí— pidió Rusty con falsa amabilidad. Zancrow la tomó de la muñeca, intentando arrastrarla hasta el lugar, un golpe en la cara por parte de Gray lo detuvo. Un sonoro -crash- se escucho. Le había roto la nariz, Juvia corrió a los brazos de su primo.

—¿Pero que diablos Gray? ¡Loke murió por su culpa! No pienso morir por una rara— escupió molesto, mientras la sangre le escurria.

—Loke murió por idiota, nos dijeron que no podíamos salir, míralo, como si... el hubiera sido nuestro conejillo de indias — todos voltearon a ver a Minerva, lo decia tan calmada, tan natural, que algunos no batallaron en imaginarla con un cuchillo, matandolos a todos, tranquilamente, y sin perder la clase en ningún momento.

—Aunque hay que agradecerle al mujeriego— comentó Ultear —Ahora sabemos que puede haber más trampas, no sólo es el psicópata que va tras Juvia, ni nosotros, también podemos morir por otras cosas—

—Han pasado los diez minutos— Sorano acariciaba la melena de su hermana que seguía llorando.

Como si hubiera escuchado, la televisión se prendió, mostrando nuevamente a la persona con la máscara y el cuervo. Una risa macabra se escucho. Juvia se estremeció al reconocerla un —Es el...— escapó de sus labios. Gray le agarró la mano en un acto inconciente. El sujeto empezó a hablar.

—Tic tac. El tiempo ha acabado. Tic tac, una vida me he llevado. Mis queridos jóvenes, esto no es un juego, no me es divertido ser yo quien los mate, así que por favor, no repitan la estupidez de ese gatito que se creía león. Si quieren suicidarse, tomen un cuchillo, así podré apreciar sus rostros mientras su último suspiro se les escapaba, junto al pavor de pensar si les dolerá... todas las puertas, ventanas y cualquier escape que se les ocurra, esta conectado a armas, explosivos y demas cosas que no dire porque se pierde el misterio de mi obra. Todo detonara si intentan escapar. Recuerden que no hay nadie mas aqui. Estan a mi merced. Creo que aún no deciden, así que les dare hora y media. Noventa minutos. Matense, o entregenla. Vivan, o mueran. Ustedes lo deciden. Tic tac, el piso rojo está. Tic tac, tu vida se te escapará.—

La televisión volvió a apagarse. Gray quería acercarse y revisarla, pero no quería soltar a Juvia, le daba la impresión que si soltaba su mano se derrumbaria. Y tenía miedo, de no poder alcanzarla.
Erik pareció haber leído su pensamiento, ya que se dirigió a ella. —No es un vídeo — susurró —¡Mierda! ¡No es un vídeo!— gritó esta vez. Todos lo miraron sorprendidos, hasta Yukino había dejado de llorar, y Ultear y Minerva habían dejado de hablar - lo que sea- que habían estado conversando.

—Sino es un vídeo el maldito debe estar cerca— Dicho esto, Zancrow se metió a la cocina, regresando con unas tijeras para cortar carne, y un cuchillo enorme. —Rusty— el aludido sólo asintió. —Debe ser el bastardo del profesor— ambos se dirigieron al cuarto del mayor, dispuestos a matarlo.

—Pongamosle fin a la obra— abrieron la puerta y se sorprendieron con la vista. Sangre. Y en la pared escrito estaba —Sino se matan entre ustedes, los cazare yo, vamos a teñir los cielos de rojo, tic tac, el tiempo avanza.— leyó. Los demás llegaron y observaron, la cama estaba revuelta, había vidrios por todo el piso, y algo que parecía ser la oreja estaba al pie de la ventana. Sangre por todos lados, y un pie que se mostraba debajo de la cama.

—Vamos a entregarla— dijo decidida Ultear ante la mirada incrédula de su primo. —¿Qué? Busco el bien mayor—

—Pienso lo mismo, si tanto te interesa, pueden rescatarla después— apoyo Minerva.

Gray se enfureció, no permitiría que la entregarán —Sobre mi cadáver—
le dijo a su prima. Y lanzandole una mirada retadora a los otros -hombres- que se encontraban ahí. No dudaba que ellos fueran los primeros en atacar.

—Ge-hee, y sobre el mio— Gajeel cubrió a Juvia. Dispuesto a matar a quien fuera necesario. Se bañaria en sangre, si con eso lograba sacarlas vivas de ahí.

—Pues los mataré para sobrevivir— Zancrow le entregó el cuchillo a Rusty y abrió la tijeras.

[...]

La lucha por sobrevivir estaba empezando, ignorando que, en un lugar, alguien los observaba.

—Eso, mis niños, descubran el placer de matar, así mi querida Juvia se culpara, y será más frágil, y más frágil, de acorralar— se levantó de su silla, quitando la atención de uno -de tantos- monitores. —Tantos años planeando esto, tantos años, esperando que estuvieras lista, pronto, pronto te mostraré mi amor, y serás mía, mía como debiste de ser en medio de las llamas—

N/A Flor, me lo dejaste muy difícil. Confieso, que tu petición desde antes de saber que me tocaría hizo que me doliera la cabeza. Aunque Lira me dijo que me había tocado una con muchos detalles, imaginé que era el tuyo.

Tu petición fue:Lugar: Una escuela/preparatoria. Género: Horror/Hurt/Comfort. Trama: Seria sobre un asesino serial que en el pasado mató a la familia Lockser pero Juvia sobrevivió (alguna razón para ello) y esta a medida que va creciendo tiene traumas psicológicos sobre que lo que pasó es su culpa y que debe alejar a la gente para que no terminen igual por lo que es muy cerrada. En la secundaria se reencuentra con una amiga de la infancia (preferible que sea Erza pero puede ser otra) que la ayuda a superar eso y aquí entra Gray. Este la ayuda para que poco a poco se recuperé y ahí inserten momentos románticos, pero el asesino vuelve por la última víctima (o sea, regresa para matar a Juvia) y encierra a los alumnos en la escuela para un juego mental, deberán ocultarse para no ser capturados o sino morirán (antes de cada muerte habra tortura) que sea una escuela pequeña ya que solo habra siete escondites para que se vean obligados a matarse entre si o algo parecido a los juegos del hambre pero si alguien entrega a Juvia oficialmente el juego termina. Será algo como una casa del horror donde la única forma de salir es traicionarse, todos contra uno por lo cual Gray tendrá que proteger a Juvia (se puede incluir otros personajes para armar un grupo) al final la captura el asesino y dejó a su criterio el rescate. (Sí desean pueden matar al asesino, me agrada la idea y no tengo problema en ello)

Muy largo T.T he sufrido horrores. Pero me he esforzado mucho. No quería publicar hasta tenerlo terminado, pero tampoco quería que la lectura se te hiciera larga, así que lo dividi. Omiti tu petición especial, porque eso será para el siguiente capítulo. Creo, que como todas, no es mi género, yo estoy casada con el sensual angst(?) ¡Pero puse mucho esfuerzo! Y atormente gente con mis lloriqueos... el 28 tendrás el final, palabra de niña exploradora borracha! Espero que se acerque aunque sea un poco a lo que querías, e igual, que lo que sigue sea de tu agrado.

¡Feliz San Valentín -muy- atrasado!

Un saludo y un beso a todos por leer, en especial a mi musa personal, que stalkeara esto, a mi proveedor de polvo de hada, que me dio ideas, a mi hermano separado al nacer, por darme ánimos. Y a mi hermanita por levantarme la moral en el Whattsapp, ah! Y a la jefa, porque me amenazó con la chancla sino lo acababa(?)

Gracias a todos, y espero que te guste Florecita :3