Un comienzo magico
Capítulo 1: Magos perdidos
Era otro día normal en la gran ciudad de Magnolia, capital de Fiore. Se podría decir lo mismo en el gremio de magos Fairy Tail, pero…
¡BOOM!
Estalla una mesa, un mago pelirosado y otro pelinegro semidesnudo estaban cara a cara.
-¡A ver exhibicionista de hielo, ¿Qué fue lo que dijiste?!-grita el mago pelirosado.
-¡Dije que eres un retardado, cerebro de pollo frito!-le contesta el pelinegro.
-¡Pelea!-animó un gato azulado que tenía alas. Los dos mencionados anteriormente se agarraron a las piñas.
-¡Pelear es de HOMBRES, SI!-gritó exaltado un hombre robusto de pelo blanco alborotado. De repente fue impactado con una silla, provocando que el sujeto saliera volando.
-¡CÁLLATE ELFMAN!-gritan a dúo los dos magos que iniciaron la contienda.
Una mesa vuela e impacta contra el mago pelirosado, mandándolo a volar.
-¡SALAMANDRAAAAA!-grita un tipo de pelo negro largo y varios piercings en el rostro-¡VAMOS A PELEAR, HOY TE GANARÉ!-grita exaltado.
El mago pelirosado hizo volar los escombros con furia, y se lanzó hacia el otro mago pelinegro. A partir de aquí todo era un caos: volaban sillas, mesas, botellas, zapatos, un corpiño de quiensabedonde, una peluca, etc etc etc.
De un momento a otro, sin que nadie se diera cuenta, por el umbral de la puerta cruzó una figura femenina joven, de cabello largo y de color rojo, tenía puesta una armadura, falda y botas largas hasta poco más debajo de las rodillas. La muchacha esbozó una mueca de disgusto mezclada con furia.
-¡¿QUE DEMONIOS ESTÁ PASANDO!?-ruge la chica. Todo el gremio se queda estático. Ella pasa a través de todos, con la vista fija en dos magos.
-E-E-Erza, q-que s-sorp-presa verte *glup* a-aquí… ¿q-que ta-tal la… misión?-preguntan los dos magos que iniciaron la pelea, con mucho miedo en sus voces.
-Natsu… Gray…-dijo Erza tranquilamente, pero con notable ira en su voz, luego los agarra de la oreja a ambos-¿Qué fue lo que les dije antes de irme?-pregunta Erza.
-¡Auch! Que no peleáramos más…-dijo Natsu, el dragonslayer de fuego, con miedo.
-… sino nos castigarías con "eso"-dijo Gray, el alquimista de hielo, con miedo.
-Así es, parece que son buenos para recordar, más no para contenerse de iniciar una estúpida pelea-dice Erza para luego soltar a ambos magos-Muy bien, por hoy no aplicaré "ese" castigo, sin embargo…-y Erza regaló dos lindos puñetazos que mandaron bajo tierra a Natsu y Gray-Que les quede claro, NO-MÁS-PELEA-ordena la pelirroja.
-Aye, señora…-respondieron los aludidos con los ojos dándole vueltas.
-Bueno… en que estaba? Ah sí, hola Lucy, todo bien?-pregunta Erza a la rubia.
-Eeemmm… si, por supuesto, todo en orden!-contesta Lucy con una gotita en la nuca-"Erza sí que da miedo!"-piensa la rubia.
Erza se dirige a Makarov, quién estaba sentado en la barra bebiendo un poco.
-Buenos días, maestro-saluda Erza.
-Buenas, Erza. ¿Qué tal en la misión?-pregunta el anciano.
-Bien. Aquellos ogros que amenazaban el pueblo de Rodsdale ya no serán problema-contesta la pelirroja.
-Gracias por tu intervención en el gremio-agradece Makarov.
-De nada-responde Erza.
La paz que trajo Erza al gremio no duró mucho ya que fue interrumpida nuevamente… pero esta vez por un fuerte sismo que se hizo presente en toda Magnolia.
-¿¡Que demonios…?!-grita Gray tambaleándose hacia todos lados.
-¡WAHAAAA!-grita Natsu, quién salió volando.
-¡U-UN TERREMOTO!-grita Lucy.
-¡AYE!-gritó Happy, quién se salvó gracias a sus alas.
El piso se agrietó, las ventanas del gremio estallaron en pedazos, pero afuera también al caos se apoderó de las calles. La gente corría de un lado a otro tratando de encontrar algún lugar seguro donde refugiarse.
Aparte del terremoto, el cielo, que estaba despejado, comenzó a tener tinte de "la tormenta del siglo" por las grandes nubes negras que llenaban el firmamento. Por si no fuera poco, relámpagos comenzaron a caer como locos en varias partes de la ciudad. El viento también hizo acto de presencia, un viento tempestuoso que claramente podía arrastrar una casa entera, pero no pasó nada.
Después de unos minutos, el caos fue reemplazado por silencio. El viento se detuvo, los relámpagos cesaron y el día volvió a ser hermoso… claro sin contar los enormes destrozos en la ciudad.
Varios edificios estaban hechos bolsa, mientras que otros casi no tenían rasguño alguno, las calles estaban destrozadas. En el gremio se vivía lo mismo, sin contar también el hecho de que el gremio estaba nuevamente destrozado. El techo se vino abajo, el piso estaba hecho trizas, también las ventanas, y otras cosas más.
-¿ESTÁN TODOS BIEN?-grita Erza, sacándose de encima una pila de escombros sin mucho esfuerzo.
Varios magos comenzaron a salir de entre los escombros, entre ellos Gray, quién había hecho un escudo de hielo, no solo protegiéndose a él mismo sino también a la maga de agua Juvia (N/A: Estos dos se gggguuuusssstaaaan XD).
-Yo estoy bien, ¿y tú, Juvia?-pregunta el alquimista de hielo a la maga peliagua.
-S-Si, Juvia está muy bien…-contesta la aludida con gran sonrojo.
Todos estaban saliendo, algunos escondidos bajo la barra, la cual extrañamente resistió todo. Al segundo aparece el maestro, un poco lastimado.
-¡Maestro, está herido!-exclama Erza.
-Erza, no te preocupes por este viejo, mejor ve a ver si todos están bien, ¿puedes?-le pide Makarov.
-Por supuesto-responde la pelirroja. Después de unos minutos de chequeo, se presenta una Erza bastante alarmada.
-¡Maestro, Natsu, Lucy y Happy desaparecieron! No los encuentro por ningún lado en el gremio-exclama Erza.
-Oh no, y aparte de ellos hay alguien más desaparecido o herido?-pregunta el maestro.
-No, todos afortunadamente están bien. Sólo Lucy, Natsu y Happy están desaparecidos-responde la pelirroja.
-Entonces vé con un grupo a buscarlo por los alrededores de la ciudad, de paso vean si hay heridos-ordena Makarov.
-Como usted diga, maestro-responde Erza.
Así Erza formó un grupo con Gray, Juvia, Gajeel, Elfman, Jet y Alzack para la búsqueda de los magos perdidos.
Continuará…
