¿Quién podría amarme lo suficiente para estar dispuesto a perder su preciosa vida? Si alguien se ofreciera como sacrificio por mi amor, entonces podría liberarme de esta piedra y volver a vivir… Vivir… Si yo fuese a reencarnar en alguien más y vivir con la persona que me trajera de vuelta, será cuando llore en mi soledad… Al buscar mi "amante fantasma" lloraría… Aun si mi sangre se pudre y se añeja como el vino, ¿de qué podrá servir? Ello no traerá de vuelta al que tanto cuidó de mí, desde lo profundo de la oscuridad…
-Maboroshi no Koibito no Naku Koro Ni-
Arco I: "La Doncella de la Luna Plateada"
Capítulo I: "La Carta de la Bruja y la Doncella Misteriosa"
^10 de Abril de 1986, 10:30 am ~ Isla Rokken^
*Pov Battler*
Esta es la Isla Rokken, la familia Ushiromiya es dueña de toda la isla, eso se debe a que la familia Ushiromiya es muy rica.
Un chico de 18 años de cabello rojizo, ojos azules y piel blanca, que vestía un traje blanco, con una camisa roja y una corbata negra salta desde el bote hasta el puente del puerto, se estiró alegremente y gritó con entusiasmo.
-¡Llegamos! ¡Llegamos! Los humanos deben estar en tierra. -
Yo soy Ushiromiya Battler, mi primo, Ushiromiya George, es fabuloso y mi dulce prima Ushiromiya María es muy linda. Esta es la madre de María, Ushiromiya Rosa-obaasan y estos Ushiromiya Hideyoshi-ojiisan y Eva-obaasan.
-Battler-kun, relájate. –
-¿Uh? –
Y ellos son mis padres Kyrie-san y Rudolf.
-¡Hola! ¡Ha pasado mucho tiempo! – Una rubia de cabello rizado hizo aparición.
¡Ahí está! Ella es mi prima Ushiromiya Jessica, no nos hemos visto en seis años. Ella no parece tener 18 años ¿verdad?
-¡Déjame tocarte los pechos! – Battler se acercó a Jessica con una cara de lo más pervertida mientras la saliva se le escurría de la boca.
La rubia, ofendida, golpeó al pelirrojo. - ¡Ni siquiera en tus sueños, maldito! –
-Asumo que todos ustedes deben de estar cansados. – Kumasawa Chiyo, la empleada más vieja del lugar, recibió a los recién llegados.
-¡Se ve más joven que la última vez! –
Kumasawa rio. - ¿Quieres tocarme los pechos? –
-No, no se preocupe. –
-¿Eh? No he visto ninguna gaviota el día de hoy. – George miraba confundido al cielo.
-¿Gaviotas? – Todos miraron al cielo percatándose de ello.
-Quizás se deba a los tifones. – Jessica miraba de igual manera al cielo. – He oído que ha habido tormentas muy fuertes. –
-Uu~ ¡Allí no! –
-¿Uh? ¿Perdiste algo María? –
-¡Allí no, allí no! – María apuntó a una roca.
-¡Ah! ¿Te refieres al brillo sobre la roca? Quedó así porque la golpeó un rayo. –
-¡Eh! Tienes una buena memoria, María. –
^En alguna parte de Isla Rokken…^
-¿Ya es hora? –
-Así es. –
-¿Estas segura de que pasará? –
-Sí, te lo aseguro. –
-¿Cumplirás tu promesa si lo hago? –
-¡Por supuesto! No podría romperte una promesa. –
-¿De verdad? –
-Te quiero demasiado para romper mi promesa, pequeña Luna. –
-¡Entonces iré! Te prometo que no te defraudaré, Okaasan. –
-Esa es mi linda Luna, ahora ve y ensénales tu resplandor. –
-¡Sí! –
La joven de 16 años salió corriendo de la enorme mansión mientras levantaba su largo vestido para evitar que este se le ensuciara…
^Mansión Ushiromiya, Isla Rokken ~ Unas horas después^
-¿Un paraguas? – Eva miró a Rosa, quien estaba sentada a su lado. - ¿A qué te refieres? –
-Como ya se los dije… Parece que alguien le prestó un paraguas blanco a María en el Jardín de las Rosas. –
-No fue ninguno de nosotros. – Rudolf miró a Rosa. – Cuando saliste, nos cambiamos de sala. – Sucesivamente, dirigió su mirada a Ushiromiya Krauss, el heredero, quien se encontraba sentado a su lado. – Ya ahí, tuvimos una conversación bastante agradable. –
-Quizás fue alguno de los empleados. –
-Genji-san me dijo que no fue él. –
-Y nosotros estábamos en la cocina, preparando la comida. – Toshiro Gohda, el cocinero, se dirigió a Rosa.
-Sí. – Shannon sonrió y miró a Rosa.
-Tampoco fui yo. – El Dr. Nanjo habló. – Me encontraba con Kinzo-san y jugábamos ajedrez hasta hace poco. –
-¿Entonces quién le dio el paraguas a María? – Battler hizo la pregunta esta vez.
-Fue-… - María quiso hablar, pero Kanon entró al comedor y miró a todos los presentes.
-Disculpen mi interferencia. –
-Kanon-kun, ¿qué sucede? – Shannon miró preocupada a su hermano menor. - ¿Estás bien? –
-Sí, es solo que… El Señor me ha pedido que anunciara a nuestra acompañante. –
-¿Nuestra acompañante? – Eva le miró con disgusto. - ¿A qué te refieres? –
-Pase por favor, señorita. – Kanon extendió su mano hacía la joven parada del otro lado de la puerta del comedor.
Una joven rubia de cabello largo y sujetado en una coleta de ojos azul verdoso, que lucía un vestido antiguo de color negro y azul con adornos plateados y aparentaba tener 16 años tomó la mano de Kanon y entró a la sala, siendo admirada por todos los presentes (principalmente Battler, quien admiraba sus pechos grandes).
-Permítanme presentarles a la señorita Beaumont Victorique, ultima descendiente de la poderosa y rica familia Beaumont. –
-¿Qué es esto? – Ushiromiya Natsuhi se indignó. - ¿Quién es esta joven? –
-El joven Kanon-san ya me ha presentado, yo soy Beaumont Victorique, mi padre Beaumont Marchello era muy buen amigo de Ushiromiya-sama, debido a esa razón el Sr. Me ha invitado a permanecer en esta mansión durante su poco tiempo de vida restante. –
-¡Esto es inaceptable! – Eva se levantó de su asiento. - ¡Saquen a esta chiquilla insolente de aquí! –
-Lo siento Eva-sama, pero son ordenes de Kinzo-sama el que la joven sea tratada como un miembro de la familia, además de que esta joven está aquí como futura prometida de alguno de sus dos nietos: George-sama o Battler-sama. –
-¿Prometida? –
-Así es. Dependiendo de la relación que formen con Victorique-sama, Kinzo-sama decidirá quién será el futuro esposo de la señorita. –
-Padre nunca nos mencionó algo como esto… -
-Tome asiento Victorique-sama. –
-Muchas gracias Kanon-san. – Victorique se acercó al oído de Kanon y le susurró con una voz de lo más dulce… - A mediodía… En el Jardín de las Rosas… -
-¿Eh? –
Kanon se sonrojó y volteó a ver a Victorique, quien se había dirigido al asiento vacío frente a la silla de Ushiromiya Kinzo, dando a entender a los presentes que ella era más importante que ellos. Todos continuaron la cena en silencio mientras Kinzo estaba ausente encerrado en su estudio.
-Entonces. – Rosa miró a Victorique. - ¿Usted le prestó un paraguas blanco a María en el Jardín? –
-¿Un paraguas? – Victorique puso un poco de carne en su boca y luego miró a Rosa nuevamente. – No he traído conmigo ningún paraguas, desde que llegué Kanon-san estuvo conmigo todo el tiempo y me cubrió con su paraguas. –
-Fue Beatrice. – María habló y todo la miraron.
-¡María! – Rosa la miró, pues María tenía una sonrisa en su rostro.
-¿Beatrice? ¡Ah! ¿Te refieres a Beatrice la Bruja Dorada? – Victorique sonrió y miró a María.
-¡Sí! ¿Victorique-oneechan cree en Beatrice? –
-Sí, yo creo que Beatrice existe, María. –
-Uu~ ¡Victorique-oneechan cree en Beatrice! –
-Ya entiendo, fue la bruja del bosque Beatrice, ¿no les parece encantador? –
^Unos momentos después…^
-Si tampoco ha sido Victorique-san, entonces ¿quién le prestó ese paraguas a María? -
-George-oniichan, ¿la cena ya terminó? –
-Sí, creo que sí. –
María sonrió, tomó su bolso del suelo y sacó una carta, todos se quedaron impresionados al ver el tipo de carta que era.
-¡María-chan! – Natsuhi habló primero. - ¡¿Qué es eso?! –
-Uu~. –
-Es un sobre como el que tiene Kinzo-san… - El Dr. Terumasa Nanjo miró atentamente aquel sobre.
-¿Cómo conseguiste eso? – Rosa miró a su hija desconcertadamente.
-Uu~ Beatrice se lo dio a María, le dijo a María que la leyera a todos cuando la cena terminara. – María abrió el sobre y sacó la carta. – La bruja eligió a María como su me… me… ¡Mensajera! –
Hideyoshi tomó el sobre y le mostró el sello al Dr. Nanjo.
-No hay duda alguna, esta cera se selló con el anillo de Kinzo-san. –
-¡María la leerá! Uu~. – María puso una cara aterradora y sonrió maléficamente. – "Miembros de la familia Ushiromiya, bienvenidos a la Isla Rokken, he servido a Kinzo-sama y a esta familia como alquimista muchos años, mi nombre es Beatrice." –
-¡Eso es absurdo! – Hideyoshi no podía creerlo.
-¡Silencio! – Eva lo interrumpió.
-"Este servicio siempre se ha cumplido, de acuerdo con nuestro contrato, sin embargo, Kinzo-sama ha anunciado que nuestro contrato termina hoy. Por consiguiente… Les solicito que, por favor, acepten mi renuncia como alquimista de la familia". –
-¡Estas estupideces no valen la pena! – Krauss miró a los demás.
-"Y a estas alturas, debo explicar cierta parte del contrato a todos los presentes: Yo, Beatrice, presté a Kinzo-sama una gran cantidad de oro bajo ciertas condiciones: la primera es que todo el oro debe ser devuelto al momento de terminar el contrato, otra condición es que yo recibiré todo lo que posee la familia Ushiromiya como interés". –
-¡Totalmente descabellado! –
-"Pero Kinzo-sama agregó una cláusula especial para darles la oportunidad de retener si riqueza y honor. Solo en el cumplimiento de esta cláusula pierdo mi derecho a exigir el oro y el interés. CLAUSULA ESPECIAL: Si cualquiera de ustedes llegara a descubrir el oro oculto, nombrado en este contrato, Beatrice debe abandonar todos sus derechos, antes mencionados". –
-¿Qué significa? –
-"Dicho de otra forma, si cualquiera de ustedes cumple con esta cláusula especial devolveré todo, incluso lo que ya me ha sido dado, además, yo tomé posesión del anillo de la familia Ushiromiya que simboliza que la herencia de la familia Ushiromiya se ha transferido a otra persona, confirmen esto por ustedes mismos observando la marca de cera, por favor". –
-¿Nuestro padre regaló su anillo? – Krauss se mostró molesto. - ¡Inconcebible! –
-¡¿Estás seguro de que nadie más vigila los recursos de nuestro padre?! –
-¡Eso es imposible! ¡Yo manejo todos los recursos de nuestro padre! –
-¡No! – Rosa miró a los demás. - ¡Quizá se trata de recursos que no manejas tú, Krauss-Oniisan! -
-¡Cierto, el oro escondido de Beatrice! –
-"El escondite del oro se despliega en el epitafio bajo el retrato, todos tienen derecho a descubrirlo". –
-Significa que… ¿Podría no ser alguien incluso de la familia? –
-No puede ser cierto. –
-"Si logran descubrir el escondite del oro, lo devolveré todo. Así que, esta noche, pongan a prueba su ingenio junto a Kinzo-sama, por favor. Rezaré esta noche para que ustedes se muestren intelectuales y elegantes. Atentamente la Bruja Dorada, Beatrice." –
-¡Imposible! – Krauss se levantó de golpe. - ¡Tonterías! –
^Habitación de Battler, Mansión Ushiromiya, Isla Rokken ~ Unos momentos después^
-¿Quién es? –
-Soy yo. –
-¡Ah! Victorique, entra. –
Victorique entró y cerró la puerta detrás de ella, después de eso se dirigió hacía Battler, quien se encontraba mirando por la ventana del lugar.
-¿Sucede algo, Victorique? –
-Nada en especial, solo quería saludarte Battler-sama. –
-No es necesario el "sama" ¿sabes? Después de todo tenemos que tratarnos como si fuéramos prometidos. –
-Tienes razón Battler-kun, es solo que este tratado de Padre con Kinzo-sama es algo cruel… -
-¿A qué te refieres? –
-Me obligarán a casarme con alguno de ustedes dos, pero yo no puedo elegir con quién casarme… A cualquiera que sea el elegido, se le privará de casarse con la persona que realmente ama, igual que a mí. –
-¿Uh? –
-Quizás tú aún no hayas conocido a una mujer de la cual enamorarte… Pero George-kun tiene a alguien que ama, estoy segura de ello, y si él resulta el elegido no podrá casarse con esa persona. –
-Ya veo… -
-Además… Yo también ya amo a alguien… -
-¿Enserio? –
-Sí… Pero es un amor prohibido, solamente es un "amante fantasma". –
-¿Amante fantasma? –
-Sí… Mi amante fantasma… Pero ese amor es imposible, ya que el amante fantasma no existe, porque es solo una ilusión… -
-No entiendo… -
-Supongo… Perdona que te hable de estas cosas sin sentido, con tu permiso, me retiro… -
-Victorique… –
-Buenas noches Battler-kun… - Victorique besó en la mejilla a Battler y se retiró de la habitación…
-Buenas noches, Victorique. –
*POV Victorique*
Sí, eso es imposible… Porque mi amante fantasma no existe, es solo una ilusión… Por eso jamás podré ser feliz…
…Continuará…
