Hola a todos aqui traigo otras de mis historias, esta vez es un Narusaku, los unicos personajes que utilizo aqui son ellos, el resto son originales, espero que lo disfruten he puesto muchas ganas, por favor digame lo que opinan a ver si sigo publicando capitulos.
Capitulo 1: Mis tormentos.
De repente todo se volvió claro y vi un panorama: una sala con pocos mobiliarios se encontraban frentes mis ojos pero aun así era difícil de diferenciar, había una mesa y justo al lado de ella un sofá gris y desgastado, yo miraba la escena desde arriba como si estuviera en el techo, como si fuera la lámpara. Ahí debajo de mi se encontraba un hombre, era robusto y su pelo era negro como la noche, usaba un pantalón de jeans y una camisa manga corta color negro, lo único que no podía ver era su rostro, era como si lo tuviera deformado, no se distinguía absolutamente nada de él.
No estaba solo…frente a él escondida en una parte de aquel sillón gris se encontraba una chica, bueno me parecía que tenia algo así como 16 años, su pelo era rubio y liso le llegaba hasta la cintura, estaba con una bata de dormir blanca con flores, a ella si le podía ver la cara, tenia ojos color miel, sus rastros eran finos, excepto por sus labios que eran un poco gruesos. Pero algo mas se podía distinguir en ella, estaba asustada, no mejor dicho estaba temblando, de repente me fije que aquel hombre que se acercaba a donde aquella muchacha, lentamente, paso por paso, y la chica cada vez se arre costaba mas de la pared que era oscura de un color azul, como para tratar de escapar de aquel horrible hombre, de repente la pobre chica e indefensa se tropezó con la pared, ya no podía huir, el hombre se paro enfrente de ella y lo que vi fue realmente horrible, un grito paso por mis oídos mientras que aquel hombre le rompía el brazo a la chica con un simple movimiento, mi corazón se ajito y de repente todo se volvió borroso, todo era oscuridad, pero los sonidos de aquella chica gritando no desaparecían aun y muchos menos el sonido de los huesos quebrándose y él hombre riéndose cruelmente.
Desperté agitada, estaba asustada y sudando sin parar, las sabanas de mi cama estaban desaliñadas y estaba totalmente desarropada, me tranquilice cuando vi que estaba en mi cuarto, mi cama y mi peinadora con un espejo a la derecha y mi computadora con un pequeño escritorio, todo estaba bien, me dije a mi misma, todo había pasado, pero aun no entendía como había podido haber soñado algo así, no lo entendía.
Vi el reloj que se encontraba en mi mesa de noche, del lado derecho de mi cama, eran las 6:00 am ya unos rayos del sol salían por la ventana, era hora de ir al liceo.
Mi nombre es Sakura, es de origen japonés, si definitivamente es un poco raro, mi abuelo es de halla, supuestamente significa flor de cerezo, no se porque me lo pusieron pero bueno, suena bien o eso supongo, tenia 17 años y estaba en el ultimo año de la preparatoria, no me consideraba linda aunque mis amigos decían que lo era y muchos menos popular, solo me gustaba leer en mis tiempos libres y por eso no era tan sociable, mi cabello es algo enrulado, solo en las puntas de color rosa palido, mis ojos son verdes y soy blanca, yo diría que algo pálida, mis labios son un poco pequeños y no puedo decir que tenga buen cuerpo.
Me pare y me mire en el espejo de la peinadora, hay estaba yo una chica normal o eso suponía, estaba algo despelucada y mi bata de dormir me llegaba hasta las rodillas, fui al baño que se encontraba en el pasillo justo en las esquina y después de eso venia la sala y el comedor, me quite mi ropa y abrí la regadera, enseguida me metí debajo de ella, el agua recorría todo mi cuerpo y se sentía bien por un momento me olvide de aquel sueño y de todo lo que tenía que hacer ese día, dure media hora en el baño, luego salí y me puse una toalla color rosa oscuro para taparme, salí y me dirigí de nuevo a mi habitación, me coloque mi uniforme, era una camisa color beche y un pantalón azul marino, lo común, me desenrede el cabello suavemente enfrente del espejo y me lo recogí en una cola de caballo aunque aun así estaba mojada, pero no importaba ya me lo arreglaría mejor porque ahora no había tiempo, eran ya las 6:45 y yo entraba a las 7:00am a clases, así que agarre mi bolso negro y me lo guinde de lado y salí corriendo ya que mi liceo quedaba a dos cuadras de mi edificio.
Corría por la avenida, los carros pasaban rápido, parecía que no era la única que iba tarde para su trabajo o instituto de estudio, el viento iba contra mi y mi cabello se movía con el, lo tenía largo me llagaba a la cintura, era lo único que me gustaba de mi cuerpo, de repente sentí que me tropezaba con algo o alguien, la verdad estaba mirando la tienda de libros que se encontraba al otro lado de la calle así que por eso me distraje, sentí que me caí al piso pero antes de que eso sucediera alguien me agarro entre sus brazos evitando mi caída, tenia los ojos cerrados por el susto y cuando los abrí, hay estaba un chico unos 20cm mas alto que yo, cabello rubio, ojos azules, cuerpo formado y con mi mismo uniforme ¿Lo conocía? Si por supuesto era Naruto vivía en el edificio de al lado, era mi mejor amigo, me deshice del agarre y me sacudí un poco la camisa, le sonreí y el hizo lo mismo.
Lo siento Sakura-chan-dijo él con una voz profunda y seductora que solo él podía tener, no me gusta por supuesto, solo me parecía atractivo, pero nunca podría verlos con ojos que no fueran los que ven a mi mejor amigo-me distraje no veía por donde iba-agrego para terminar su disculpa.
Yo me arregle mi bolso y le hice señal de poca importancia- hola Naruto-kun!-le sonreí- tranquilo yo también estaba distraída por eso no te vi- de repente note que el iba del lado contrario a donde el liceo y me extraño- y… ¿A dónde vas? ¿Acaso no vas a clases?-le pregunte con tono confundido.
El miro hacia atrás y se rasco la cabeza en forma misteriosa-Eehh… bueno lo que pasa es que se me olvido traer mi maletín de dibujo y por eso me devuelvo-sonrió tímidamente y se despidió con la mano-adiós nos vemos en el colegio-me dijo y salió corriendo, a mi solo me dio tiempo de hacerle señal con la mano de despedida pero creo que ni se percato de eso, mire mi reloj y eran las 6:55 am ¡rayos! Pensé y continúe mi camino.
Llegue justo al colegio cuando las filas de los alumnos comenzaban a subir, corrí por todo el patio hasta llegar al final de este donde se encontraba la estructura del colegio hecha de ladrillos, subí las escaleras con las fila de 5ªC ya que subíamos por orden, y yo estaba en la sección "B", llegue al piso dos donde se encontraba mi salón a la derecha de las escaleras y entre en él, vi globos en forma de corazones, tarjetas pasándose de una mano a otra, caras sorprendidas y otras alegres, de repente me di cuenta de la fecha que era, 14 de febrero, suspire no podía decir que me encantaba ese día ni tampoco que lo odiaba, solo me incomodaba y me parecía un pretexto para hacer fiesta o salir con sus parejas, pero claro yo no tenía, en realidad nunca la había tenido así que ese día nunca había sido llamativo para mí, me dirigí a mi pupitre pasando entre la gente, nadie se percato y así me sentí mejor no me gustaba llamar la atención, me senté y al lado estaba mi mejor amiga callada mirando hacia la ventana, se llamaba René, en su forma de ser se me le parecía a mi pero claro a ella si le gustaba ser mas sociable que yo, pero me imagine que este día estaría así ya que el amor de su vida la había abandonado, a veces sus historia me ponían en duda, no creía en el amor o eso pensaba por eso no resultaba conmigo.
Le toque el hombro ya que estaba de espaldas a mi- hola René ¿Como estas?- le sonreí con sinceridad y ella hizo lo mismo aunque se notaba un poco de tristeza en sus ojos color verde, si ella era menos blanca que yo pero su cabello era de color miel y tenia los ojos verdes oscuros, todos estaban detrás de ella pero ella casi nunca le importaba ya que aun no superaba lo de su novio pasado- ¿Qué tal este fin de semana?- pregunte rápidamente para desviar la conversación si es que había.
Ella me miro- Mmm supongo que bien, nada especial- saco un cuaderno color amarillo con espirales y lo coloco encima de su pupitre- ¿y a ti?-me pregunto, yo tarde en responder.
Mmm solo fui a la playa con mi madre- luego saque mi cuaderno de química ya que era lo que nos tocaba, era azul con una muñeca muy simpática-pero nada especial, solo fuimos por un rato y luego nos vinimos a casa estaba algo aburrido-dije, luego abrí mi cuaderno y saque mis lápices, vivía solo con mi madre, mi padre había muerto hace dos años aunque ellos estaban ya divorciados, quizás por eso no me afecto tanto o quizás porque nunca lo veía, mis pensamientos fueron interrumpidos cuando la profesora de química entro por la puerta, me enderece y me prepare para la clase.
Ya las primeras horas de clase habían terminado, René y yo estábamos sentadas bajo un árbol en la esquina del patio, ella no había hablado ni me voltio a ver, solo me acompaño en silencio y yo supe que era mejor así, por lo tanto empecé a leer un libro, sin percatarme de que alguien se aproximaba a mí, estaba adentro de la historia la protagonista estaba apunto de descubrir algo importante para la evolución de la historia, pero algo se interpuso ante mi vista, era una caja en forma de corazón llenas de bombones, abrí los ojos de par en par, estaba sorprendida y levante la mirada para ver quien me había interrumpido y era- ¿Naruto?-lo mire con cara de extrañada, el reía tímidamente mientras que la otra mano tenía un ramo de rosa, René nos miraba y se sorprendió, luego decidió irse y desapareció de un momento a otro.
Feliz día de la amistad y el amor…-me dijo mientras sonreía tímidamente-esto era lo que se me había olvidado, lamento no haberte acompañado al colegio- deje el libro abierto en la pagina que estaba leyendo, y con manos temblorosas agarre de sus manos la caja de bombón y las flores, las coloque en mis piernas- espero que te gusten-dijo mirando hacia otro lado.
Yo no pude evitar sonreír-gracias, lamento no haberte comprado nada, lo siento-dije mirando también hacia otro lado.
Me miro extrañado- tranquila Sakura-chan, ya me lo distes, tu siempre me apoyas y estas conmigo, eso es suficiente- me sonrió y yo deje las cosas al lado y lo abrase, el se puso tenso pero después me correspondió el abrazo.
Me separe de él un poco y lo mire-¿Qué tal si vamos hoy a comer a la cafetería cerca del cole y comemos algo?- sonreí y el asistió, de repente sonó el timbre que indicaba el final del recreo-¿vamos?-el volvió asistir, me ayudo con mi libro mientras que los dos íbamos hacia el salón.
Salíamos del colegio René, Naruto y yo, todos estábamos sonriendo ese día se había terminando, yo llevaba el ramo de flores en mi mano izquierda y la caja de bombones en el bolso, aun no lo creía, pero me había alegrado el día, así que salía sonriente y nos dirigimos a la cafetería después que René se fue con su madre ya que no nos quiso acompañar.
De repente me llego a la mente el sueño que había tenido anoche, así que decidí contárselo a Naruto, el me miro extraño y me dijo que debía analizarlo y escribir cada uno de los sueños que tenia, ya que ese no había sido el primero.
Mmm ¿Crees que eso pueda suceder?-le pregunte a mi amigo, el solo se en congio de hombros- creo que deberíamos encontrar algo que compruebe eso- dije y el sonrió.
Espero que no Sakura-chan, sería horrible que esos asesinatos que describan sean verdad- cruzamos la calle para entras a la cafetería- pero dudo que eso pueda ocurrir ya que no hay estudios que comprueben eso de la clarividencia-yo asentí, tampoco creía en eso, pero mis sueños eran tan reales y al mismo tiempo tan perturbadores.
Entramos a la cafetería y comimos una pasta a la Boloña, hablamos sobre los que nos gustaba, con él siempre la pasaba bien, teníamos muchas cosas en común, y de verdad que lo quería.
Seguimos hablando por mas de dos horas, aparte de la pasta nos comimos un helado gigante los dos y a la hora de pagar la cuenta la pagamos entre los dos igualmente, me pidió que fuera a su casa para ver una película y yo con gusto acepte ya que al día siguiente, el martes para ser exacto, no teníamos clases.
Caminamos sin decirnos nada, ya habíamos agotado los temas de que hablar en la cafetería así que el silencio abrumaban las calles de la ciudad y empezamos a caminar mas rápido, de repente llegamos al edificio de Naruto y nos encaminamos a él, subimos por el ascensor hasta el piso 8 y entramos a su casa.
Las paredes estaban decoradas con un tapis de delfines, la madre de Naruto era aficionada con la playa y todo lo que tenía que ver con agua, tanto que el apartamento parecía que estuviera en pleno día de verano con el sol brillando y el olor del mar salado, sonreí para mis adentros, la verdad es que la decoración se veía realmente bien.
Esta lindo-dije y el sonrió-¿Que películas vamos a ver?- agregue porque no tenia la menor idea de que tenía planeado mi amigo.
Siéntate aquí- me señalo un mueble con soportes de maderas y este estaba enfrente de un televisor- es una sorpresa, ya verás- yo me senté y el se dirigió a su habitación, mire a mi alrededor y al otro lado del sofá había un periódico, lo cogí y vi que era de hoy, vi que en la primera plana decía: Asesino en serie suelto, cuidado aun no se descubre su identidad. Me llamo la curiosidad y cuando vi había una fotografía, un gemido ahogado de sorpresa salió de mi garganta, ahí estaba la chica que había visto en mi sueño y decía que había sido desmembrada hasta la muerte, las visiones del sueño de anoche vinieron a mi mente, de repente todo se volvió borroso y solté el periódico que callo en el piso arrugándose, lo último que escuche fue la voz de Naruto gritando mi nombre y yo cayendo de forma lateral en el mueble.
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